2. LA AGRICULTURA
La agricultura (del latín agri «campo» y cultūra «cultivo, crianza»)es
el conjunto de técnicas y conocimientos para cultivar la tierra y la
parte del sector primario que se dedica a ello. En ella se engloban
los diferentes trabajos de tratamiento del suelo y los cultivos de
vegetales. Comprende todo un conjunto de acciones humanas que
transforma el medio ambiente natural, con el fin de hacerlo más
apto para el crecimiento de las siembras.
Las actividades relacionadas son las que integran el llamado sector
agrícola. Todas las actividades económicas que abarca dicho sector
tienen su fundamento en la explotación de los recursos que la tierra
origina, favorecida por la acción del hombre: alimentos vegetales
como cereales, frutas, hortalizas, pastos cultivados y forrajes; fibras
utilizadas por la industria textil; cultivos energéticos y tubérculos;
etc.
3. LA GANADERÍA
Producción ganadera en Ecuador
Las regiones de la Costa y Amazonía producen
principalmente ganado de carne, mientras que el ganado
lechero se encuentra, sobre todo, en la Sierra. En la Costa, el
ganado pastorea la tierra no apta para la agricultura, como
las planicies fluviales estacionalmente inundadas o las
partes semiáridas del sur. La lechería se lleva a cabo en la
Sierra, en los valles fértiles, en particular entre Riobamba y la
frontera con Colombia.
El ganado de carne es relativamente nuevo en la Amazonía.
Existen grandes áreas aptas para el pastoreo. La industria de
la carne sufrió, en esta región, un serio retroceso en 1987
cuando un terremoto dañó las rutas usadas para transportar
la carne.
4. PRODUCTOS LACTEOS
El grupo de los lácteos (también productos lácteos o derivados
lácteos) incluye alimentos como la leche y sus derivados
procesados (generalmente fermentados). Las plantas industriales
que producen estos alimentos pertenecen a la industria láctea y
se caracterizan por la manipulación de un producto altamente
perecedero, como la leche, que debe vigilarse y analizarse
correctamente durante todos los pasos de la cadena de frío hasta
su llegada al consumidor.1
La leche empleada mayoritariamente en la elaboración de los
lácteos procede de la vaca (en concreto de la raza Holstein),2
aunque también puede consumirse leche procedente de otros
mamíferos tales como la cabra o la oveja y, en algunos países, la
búfala, la camella, la yak, la yegua, y otros animales. En la
actualidad la mayor parte de los alimentos funcionales se
elaboran a partir de productos lácteos.3 El consumo de productos
lácteos ha experimentado, desde la década de 1950, un
considerable crecimiento en la demanda mundial que ha llevado a
la industria a superar retos tecnológicos importantes.