1. Hace tiempo, en un cercano lugar, el Sol y la Luna se
conocieron, ellos se querían mucho a pesar de su corta
edad, pensaban en algún día casarse y formar una
familia, sin pensar que por ser tan jóvenes no estaban
preparados para eso.
2. Unos meses después crearon una hermosa Estrella la
cual llegó a alegrar sus corazones y dar luz a sus vidas.
Todos estaban muy contentos con la llegada de la
pequeña Estrella, sus papas la adoraban y no dejaban
de admirarla.
Sin embargo, la Luna y el Sol tuvieron que separarse,
pues el Sol pertenece al día y la Luna a la noche, la
pequeña Estrella se quedó con su mamá. El Sol nunca
volvió a ver a Estrella pues mientras él dormía, ella
apenas iba a despertar.
La pequeña Estrella estaba rodeada del cariño de sus
abuelos y tíos que eran el universo de su mamá.
3. En una ocasión, Estrella salió de paseo por el Cielo con
su mamá y se encontró a su amiga Lucero que iba con
su Universo caminando.
4. El Universo de Lucero era distinto al de Estrella ya que
se formaba de su mamá la Nube, su papá el Cometa y
ella. La pequeña Estrella al ver el universo de su amiga,
le dijo a su mamá que ella se sentía diferente a los
demás, pues su universo era pequeño. La Luna le
explicó que existen diferentes tipos de Universos, el de
ellas no era único, ya que en el Cielo había muchos
universos parecidos al de ellas. Sin importar que
fueran pequeños o grandes, de cada uno dependía ser
felices.
5. Estrella comenzó a platicar:
-La mamá de Lucero se dedica al hogar: cocina, limpia
la casa, le ayuda con sus tareas. Así como tu lo haces
conmigo; su papá sale a trabajar todos los días para que
así no les falte nada; "Así como tú lo haces!!!!
6. En ese momento la pequeña Estrella se quedó
pensando y con una sonrisa le dijo a la Luna:
-Ahora entiendo mami, es cierto!!! El universo de
Lucero y el mío no son diferentes, pues hacemos lo
mismo y además yo estoy feliz con mi Universo así de
pequeño.
La Luna y la pequeña Estrella se dieron un gran abrazo
y siguieron caminando muy contentas por el Cielo.
La pequeña Estrella nunca más volvió a sentirse
diferente a los demás, pues comprendió que lo
importante del universo, no es ser grande o pequeño, si
no que esté lleno de amor y felicidad.