la forma de los objetos expresión gráfica preescolar
La pedagogía idealista de johann pestalozzi
1. LA PEDAGOGÍA IDEALISTA DE JOHANN PESTALOZZI
Dra. Adriana Fernández Reiris
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LISTA
3. Con su inquebrantable fe ilustrada en la reforma social a través de la educación y
una extensa vida en la que no se cansó de iniciar y, ante las frustraciones, volver a
empezar la implementación de propuestas educativas populares, el filántropo suizo
Johann Heinrich Pestalozzi (1746-1827), se convirtió en un indudable referente para los
diversos intentos de democratizar la educación. Más allá de su juvenil militancia política,
sus propuestas de reformas jurídicas contra el maltrato a los niños y de reforma agraria y
sus abundantes realizaciones literarias han sido las fundaciones de institutos educativos
donde atendía a huérfanos y pobres y la labor de irradiación de sus discípulos los jalones
que contribuyeron a su fama.
En su ideario pedagógico sobresalía la admiración por la teoría de Rousseau que
intentó llevar a la práctica con su sello pues no compartía la exaltación individualista del
estado salvaje de la humanidad que profesaba el ginebrino y quiso reunir la libertad de la
naturaleza con el estado social de la autoridad del deber en un estado moral que
contuviese, a la vez, la espontaneidad y el orden, lo individual y lo social, el deseo natural
y la ley civilizadora. Por eso, aunque en la relación educativa recomendaba obtener la
autoridad a través de los cuidados y el amor, esto no iba en desmedro de la firmeza y la
guía activa del maestro. Probablemente, la más genuina innovación de Pestalozzi radica
en haber sido quien dirigió la mirada pedagógica hacia una educación integral pues con
su lema cabeza, corazón y mano, sintetizaba la triple dimensión de la formación
4. intelectual, afectiva y práctica. Entendía a la educación como el desenvolvimiento
armonioso de las energías del pensamiento, del sentimiento y de la acción. En sus
escuelas contra el verbalismo y el aislamiento extendido en la época, además del
aprendizaje de la lectura y escritura, se promovía especialmente el contacto con la
naturaleza y el mundo del trabajo. Además del inmenso valor formativo del aprendizaje
de oficios, le servían para la autosustentabilidad de sus institutos dedicados a educar sin
distinción de clases sociales ni de género, de este modo, los niños se financiaban su
educación con su propia labor.
Pestalozzi destacó la importancia de la educación familiar temprana, en especial,
el rol de la mujer al punto de que muchos de sus escritos están destinados a instruir a las
madres pero también reclamó claramente la necesidad de la obligatoriedad de la
educación pública y gratuita en una época en que muchas familias pobres veían en la
escuela una dilación para que sus hijos pudieran prepararse para un oficio y aportar al
sustento familiar. Desarrolló y reformuló a lo largo de sus experiencias directas con los
niños el método de la intuición a la que entendía como la percepción directa y
experimental de los objetos exteriores al hombre a través de los sentidos externos y de la
propia conciencia. El individuo al captar la “forma” del objeto, distingue también
aproximadamente “sus partes y su número” y asocia la experiencia nueva a un sonido
articulado o “nombre”, de modo que, forma, número y nombre son los elementos de la
intuición. Así en la enseñanza se presentaban objetos simples y concretos hasta llegar a
los más complejos. Se encaraba la observación atenta para medir, dibujar, escribir,
distinguir cada objeto y sus dimensiones y proporciones (forma)para luego reconocer a
cada objeto como unidad separada del resto de objetos con los que aparece
asociado (número) y, finalmente, familiarizarlo con los nombres(nombre).
El dominio de la lectura era de gran importancia pues contribuía al desarrollo
armónico y gradual del intelecto. A pesar de que la enseñanza de la geografía era
descriptiva y apelaba a la memorización de ciudades, accidentes naturales, etc.,
organizaba salidas al aire libre para indagar en el ambiente físico y adquirir nociones a
través de, por ejemplo, la observación de las fases de la luna. Otorgaba un lugar
destacado a la aritmética que comenzaba con operaciones mentales realizadas con cosas
reales, como contar guisantes para luego desarrollar el cálculo mental, el cálculo escrito,
el cálculo algebraico mental y el álgebra propiamente dicha. El estudio de la geometría
5. comenzaba con la metrología o arte de medir líneas y cuadrados sin exigir teoremas o
demostraciones. Valoraba el dibujo como medio para adquirir habilidad para reproducir y
para ejercitarse en la escritura. Además, lo consideraba un lenguaje universal que debía
enseñarse en cuatro partes sucesivas: dibujo elemental, perspectiva, dibujo matemático y
dibujo de la cabeza y del cuerpo humano. La enseñanza musical se componía de tres
partes: el ritmo, la melodía o calidad de los sonidos y el grado de intensidad de donde
resulta la armonía. La gimnasia elemental partía de ejercicios de articulación tendientes a
prepararse para realizar ejercitaciones más complejas.
El método de Pestalozzi tuvo una amplia y extensa difusión en Europa y
América. Destacados pedagogos como Fröebel y Herbart estudiaron sus obras y
es considerado un admirado predecesor de los Movimientos de la Escuela Nueva
y Escuela Activa que se desarrollaron en la primera mitad del siglo XX.
Entre sus escritos podemos citar las siguientes frases relacionadas con la función
social de la educación:
“Lo que se propone la educación elemental es, por la totalidad y
coincidencia de todos sus medios, elevar el corazón, la mente y la mano a
lo más excelso y noble de que es capaz nuestra naturaleza”. (2001:101)
“Nuestro ensayo de una educación elemental para la industria no es otra
cosa que una aplicación de los principios generales de la educación
humana a las necesidades de las clases trabajadoras. No es nada más que
el intento de asegurar el fin de una dignificación humana dando al pueblo
una educación que le permita ganarse el pan, y esto con la misma fuerza
con que el espíritu de la educación elemental asegura ese mismo fin en el
aspecto moral e intelectual”. (2001:163)
“El dualismo que hay en el hombre es la disputa de la carne contra el
espíritu y la disputa de nuestra naturaleza simple y espontánea contra una
sociedad que nos culturaliza y refrena la satisfacción de nuestros impulsos
espontáneos mediante nuestra necesidad de culturalizarnos”. (2001:197)
“Las dificultades de la educación suelen surgir de la preponderancia de las
pretensiones egoístas y sensitivas de nuestra naturaleza animal sobre las
de los fundamentos morales y espirituales de nuestra humanidad”.
(2001:198)
“El hombre no consigue dignificarse realmente por su educación
intelectual si ésta no se funda en una cumplida educación de su corazón”.
(2001:201)
“Estoy convencido de que los bienes humanos para nuestra época sólo
pueden ser conseguidos por medio de un grande y firme progreso del
sistema educativo”.
“La justicia pública no puede tener otra base sólida que la de una buena
educación cívica”.
“La educación nacional del pueblo para el orden, la moderación y la
justicia en los asuntos domésticos debe siempre derivar de los principios
básicos de la educación general de las personas para la sabiduría y la
virtud”.(2001:204)
6. “En la clase media está la fuerza; en la clase media debe buscarse lo que
requiere capacidad y lo que tiene capacidad, y es posible que, a través de
las instituciones educativas en las que se formen como educadores y
educadoras niños salidos de esta clase social y que se distinguen por sus
capacidades de inteligencia y de corazón, pueda ejercerse una acción que
repercuta de un modo benéfico y elevador sobre esta propia clase social y
que, a través de los medios educativos creados por dichas instituciones,
pueda remediarse la temible situación de dicha clase social, que en tantos
Estados se halla hundida hasta el colmo”.
“El pobre ha de aprender a ayudarse a sí mismo; de otro modo ni nadie
podrá ayudarlo ni nadie lo ayudará. Unas limosnas que no elevan su
corazón no le sirven de nada”. (2001:205)
“La educación del hombre vulgar para la piadosa sabiduría de una vida
familiar pura y doméstica es el único medio para la eliminación de los
delitos del pueblo”. (2001:207)
“El ciudadano oprimido no es, en su abyección, causa del deterioro
nacional; está sufriendo, en su miseria moral y doméstica, de una
corrupción que actúa de arriba abajo, y cuyas fuentes hay que buscar en la
descomposición interna de nuestra Constitución”. (2001:211)
“La falta de formación en la vida familiar no puede ser reemplazada por
una formación científica, en ningún aspecto del ‘savoir-faire’, ni de las
ciencias humanas.
La sabiduría familiar es para la formación del hombre como el tronco de un
árbol, en el cual deben injertarse todas las ramas del saber humano, de las
ciencias y de las profesiones; allí donde el tronco carezca de savia, se
sacarán los injertos (…)
Toda la vida terrena del hombre es una fase de su educación en la cual,
según la voluntad del Creador, sus facultades deben ser desarrolladas con
miras a su eternidad”(Citado en De Hovre;1950:273)
-De Hovre, Francisco Grandes maestros de la pedagogía contemporánea.
Marcos Sastre. Buenos Aires.1950.
-Pestalozzi, Johann Heinrich La velada de un solitario y otros escritos. Herder.
Barcelona. 2001.
8. [i] Pestalozzi destacó la importancia de la educación familiar temprana, en especial, el rol
de la mujer al punto de que muchos de sus escritos están destinados a instruir a las madres pero
también reclamó claramente la necesidad de la obligatoriedad de la educación pública y gratuita en
una época en que muchas familias pobres veían en la escuela una dilación para que sus hijos
pudieran prepararse para un oficio y aportar al sustento familiar. Desarrolló y reformuló a lo largo
de sus experiencias directas con los niños el método de la intuición a la que entendía como la
percepción directa y experimental de los objetos exteriores al hombre a través de los sentidos
externos y de la propia conciencia. El individuo al captar la “forma” del objeto, distingue también
aproximadamente “sus partes y su número” y asocia la experiencia nueva a un sonido articulado o
“nombre”, de modo que, forma, número y nombre son los elementos de la intuición. Así en la
enseñanza se presentaban objetos simples y concretos hasta llegar a los más complejos. Se
encaraba la observación atenta para medir, dibujar, escribir, distinguir cada objeto y sus
dimensiones y proporciones (forma) para luego reconocer a cada objeto como unidad separada
del resto de objetos con los que aparece asociado (número) y, finalmente, familiarizarlo con los
nombres (nombre).
El dominio de la lectura era de gran importancia pues contribuía al desarrollo armónico y
gradual del intelecto. A pesar de que la enseñanza de la geografía era descriptiva y apelaba a la
memorización de ciudades, accidentes naturales, etc., organizaba salidas al aire libre para indagar
en el ambiente físico y adquirir nociones a través de, por ejemplo, la observación de las fases de la
luna. Otorgaba un lugar destacado a la aritmética que comenzaba con operaciones mentales
realizadas con cosas reales, como contar guisantes para luego desarrollar el cálculo mental, el
cálculo escrito, el cálculo algebraico mental y el álgebra propiamente dicha. El estudio de la
9. geometría comenzaba con la metrología o arte de medir líneas y cuadrados sin exigir teoremas o
demostraciones. Valoraba el dibujo como medio para adquirir habilidad para reproducir y para
ejercitarse en la escritura. Además, lo consideraba un lenguaje universal que debía enseñarse en
cuatro partes sucesivas: dibujo elemental, perspectiva, dibujo matemático y dibujo de la cabeza y
del cuerpo humanos. La enseñanza musical se componía de tres partes: el ritmo, la melodía o
calidad de los sonidos y el grado de intensidad de donde resulta la armonía. La gimnasia elemental
partía de ejercicios de articulación tendientes a prepararse para realizar ejercitaciones más
complejas.
El método de Pestalozzi tuvo una amplia y extensa difusión en Europa y
América. Destacados pedagogos como Froebel y Herbart estudiaron sus obras y es
considerado un admirado predecesor de los Movimientos de la Escuela Nueva y Escuela
Activa que se desarrollaron en la primera mitad del siglo XX.