Tomás de Zumalacárregui fue un militar español que llegó a ser general carlista durante la Primera Guerra Carlista. Nació en Guipúzcoa en 1788 y participó en la Guerra de Independencia contra los franceses y las guerras carlistas del siglo XIX en defensa del absolutismo de Fernando VII. Tras la muerte de Fernando VII en 1833, Zumalacárregui huyó de Pamplona y se unió a los rebeldes carlistas, siendo elegido jefe de los mismos y organizando con eficacia el ej
2. Tomás de Zumalacárregui y de Ímaz
nació en Guipúzcoa, 29 de diciembre de
1788 Duque de la Victoria y Conde de
Zumalacárregui. Conocido como Tío
Tomás, fue un militar español que llegó a
ser general carlista durante la Primera
Guerra Carlista.
3. Era de familia perteneciente a la clase
media-alta, era el penúltimo de los once
hijos del matrimonio formado por
Francisco Antonio Zumalacárregui
Múgica y Ana María Imaz Altolaguirre.
Curiosamente uno de sus hermanos
mayores, Miguel Antonio, fue uno de los
políticos liberales más destacados del
siglo XIX y que sufrió represión por los
absolutistas.
4. Al comienzo de la Guerra de la
Independencia, en 1808, se alistó en
Zaragoza, donde participó en el primer sitio
de la ciudad. También tomó parte en la
batalla de Tudela y en el segundo Sitio de
Zaragoza. Durante el segundo Sitio
participó en una fallida salida de tropas que
trataban de romper el cerco de la ciudad
siendo hecho prisionero por los franceses.
Consiguió escapar de estos rompiendo sus
ligaduras y huyó a su localidad natal.
5. Zumalacárregui se echó al monte y se unió a la
partida de Gaspar de Jáuregui, un guerrillero
guipuzcoano que luchaba por su cuenta contra los
franceses en el País Vasco y Navarra. Al igual que
Zumalacárregui era un hombre de empuje y con
cierto nivel de instrucción, Jáuregui le convirtió
enseguida en su secretario personal. Durante los
primeros años de la guerra Zumalacárregui tomó
parte en numerosos combates y escaramuzas, que
le valieron el grado de subteniente dentro de la
guerrilla.
6. Zumalacárregui permaneció el resto de la
guerra como oficial en este Primer
Batallón de Guipúzcoa, primero con el
grado de teniente y a partir de 1812
como capitán. Tomó parte en buena
parte de las acciones de guerra que
tuvieron lugar en Guipúzcoa y el norte
de Navarra durante esos años.
7. Terminada la guerra, Zumalacárregui permaneció
en el ejército, siendo nombrado capitán archivero.
No simpatizaba con los principios liberales que en
aquella época se extendían por España,
comenzando a significarse como monárquico
absolutista. Cuando en 1820 se repuso la
Constitución de 1812, aún era capitán. Fue
denunciado al nuevo Gobierno por oficiales
liberales, que solicitaron su expulsión del ejército y
fue apartado del servicio activo. En 1822
ascendió a teniente coronel.
8. Tras la restauración de Fernando VII en el trono de España y la
vuelta al absolutismo en 1823, formó parte de una comisión
militar para la represión de delitos políticos, alcanzando el grado
de coronel en 1829. En 1832 fue nombrado gobernador militar
del Ferrol. Por entonces, Zumalacárregui era ya reconocido como
integrante del partido absolutista que pretendía favorecer las
opciones sucesorias del hermano del rey, Carlos María Isidro de
Borbón.
La abolición de la Ley Sálica y la proclamación de la hija de
Fernando VII, Isabel, como heredera del trono le enfrentó con
las autoridades navales del Ferrol, que eran partidarias de la
causa constitucional. Como consecuencia, Zumalacárregui fue
acusado de desafecto y destinado a Pamplona.
9. Al morir Fernando VII en 1833, residía sin
mando y bajo vigilancia en Pamplona, de donde
consiguió huir y unirse a los carlistas sublevados..
El 14 de noviembre de 1833 los rebeldes eligieron
a Zumalacárregui como jefe. Inmediatamente
comenzó a organizar desde la nada en muy poco
tiempo un eficaz contingente del ejército rebelde
llamado pronto carlista.
Se resistió a todos los intentos de atraerle hacia el
bando de Isabel II, tanto por parte de su propio
hermano Miguel como de su antiguo jefe, el
general Quesada.