2. EL MALTRATO A LA
MUJER
La violencia contra la mujer es un término
aglutinante de todos los tipos de violencia
ejercida contra este grupo de personas,
siendo a menudo «consecuencia de la
discriminación que sufre tanto en leyes
como en la práctica, y la persistencia de
desigualdades por razones de género»,
aunque no toda la violencia contra la mujer
puede identificarse solamente por su
condición de mujer, por lo que es habitual
que exista cierta confusión al respecto.
Esta violencia presenta numerosas facetas
que van desde la discriminación y el
menosprecio hasta la agresión física, sexual
o psicológica y el asesinato, manifestándose
en diversos ámbitos de la vida social y
política, entre los que se encuentran la
propia familia, la escuela, la Iglesia, el
Estado, entre otras.
3. Factores de Riesgo
Una variedad de factores a nivel individual, de relaciones, de
comunidad y de la sociedad (incluyendo lo niveles
institucionales/estatales) se intersecan para aumentar el riesgo de que
mujeres y niñas sufran violencia. Estos factores, representados en el
modelo ecológico son:
•Atestiguar o experimentar abuso desde la infancia (lo que está a
asociado a que en el futuro los niños sean perpetradores de violencia
mientras las niñas experimenten violencia contra ellas);
•Abuso de sustancias (incluyendo alcohol), asociado a una mayor
incidencia de la violencia;
•Pertenencia de las mujeres a grupos marginados o excluidos.
•Limitadas oportunidades económicas (factor agravante para la existencia
hombres desempleados o subempleados, asociado con la perpetuación de
la violencia; y es un factor de riesgo para mujeres y niñas, de abuso
doméstico, matrimonios forzados, matrimonios precoces, la explotación
sexual y trata.
•La presencia de disparidades económicas, educativas y laborales entre
hombres y mujeres al interior de una relación íntima; etc.
4. Factores de Protección
Por otro lado, entre los factores de protección que pueden
reducir el riesgo de que mujeres y niñas sufran violencia
figuran:
• Educación secundaria completa para niñas (y niños);
• Retardar la edad de matrimonios hasta los 18 años;
• Autonomía económica de las mujeres y acceso a
entrenamiento de sus capacidades, crédito y empleo;
• Normas sociales que promuevan la equidad de género
• Servicios que articulen respuestas con calidad (servicios
judiciales, servicios de seguridad/protección, servicios
sociales y servicios médicos) con dotación de personal con
conocimientos, capacitación y entrenamiento adecuado.
• Disponibilidad de espacios seguros o refugios; y
• Acceso a grupos de ayuda
5. EL MALTRATO A LA MUJER
EN LATINOAMÉRICA
• Entre el 17 y el 53 por ciento de
las mujeres latinoamericanas
podrían ser víctimas de violencia
física o sexual de parte de sus
parejas, según una encuesta
realizada por la Organización
Panamericana de la Salud (OPS)
en doce países de la región.
• El informe de la OPS sobre
“Violencia contra la mujer en
América Latina y el Caribe“,
precisa que “en siete países, más
de una de cada cuatro mujeres
dijo haber sufrido violencia” de
género de parte de sus parejas.
EN PERÚ
• En un proyecto que fue aprobado por
el Congreso se ha confirmado que en
Perú se castigara el maltrato a la
mujer, discapacitados y menores de
edad con 15 años de prisión, así lo
confirmo Juan Carlos Eguren,
presidente de la Comisión de Justicia.
En esta ley que aún tiene que ser
promulgada por el presidente,
también se señala que los fiscales y
policías deben de atender y resolver
las denuncias y problemas de
agresión en un plazo máximo de 72
horas, de no ser así, podrás ser
arrestados y condenados por omisión
de sus funciones.
6. CONCLUSIÓN
La violencia está presente en la mayoría de los
momentos de nuestra vida manifestándose de
distintas formas de manera explícita e implícita por
los medios de comunicación influyendo
destacadamente a la sociedad, y dentro de ella el
núcleo familiar. La mujer víctima de violencia pasa
por momentos que le dejan secuelas, las de mayor
importancia y que mucho no se deja ver, es la
secuela psicológica que a medida que avanza estos
actos agresivos, comienza con una disminución a
cero del autoestima y se cree menos que el hombre,
por varios motivos tienen miedo a separarse como
ser motivos monetarios, el temor a llevar una
familia sola, o de que le haga peor daño a ella y sus
hijos. Esta aflicción no deja ver que la mejor forma
de corregir esta situación es denunciando al
golpeador, y aunque hoy en día la violencia es más
presente entre los pares, está más difundida la
elección de denunciar estos casos y hay más apoyo
moral y psicológico por parte de la comunidad y de
lo gubernamental, crean millones de campañas
alrededor del mundo, y las hacen tratar- a las
víctimas- más rápida y minuciosamente a lo que
este acto es menos traumático que lo que era
anteriormente.