1. En el principio – Blas de Otero
Ariadna Parladé
y
Gerard Robert
2. Biografía
-Bilbao, 1916 – Madrid, 1979.
-Se sentía reprimido en el colegio.
-Cuando tenía 13 años su hermano falleció.
-A sus 16 años, falleció su padre.
3. -Llegó a realizar terapias debido a sus continuas depresiones.
-Se exilió a París y se unió al Partido Comunista.
-Educado en los jesuitas. Estudió derecho en Valladolid y
Filosofía y letras en Madrid.
-Sus primeras obras presentan su inquietud religiosa, y más
tarde se decanta por elaborar obras de contenido metafísico y
termina dotándolas de un carácter crítico-social.
4. En el principio
Si he perdido la vida, el tiempo, todo
lo que tiré, como un anillo, al agua,
si he perdido la voz en la maleza,
me queda la palabra.
Si he sufrido la sed, el hambre, todo
lo que era mío y resultó ser nada,
si he segado las sombras en silencio,
me queda la palabra.
Si abrí los labios para ver el rostro
puro y terrible de mi patria,
si abrí los labios hasta desgarrármelos,
me queda la palabra.
5. Análisis
En el principio se publicó en un
contexto donde reinaba el
Existencialismo , un movimiento
literario que surgió en la
segunda mitad del siglo XX.
6. -El poema pertenece a Pido la paz y la Palabra, un
libro publicado el 1955, etapa en la que Blas de
Otero se empezó a centrar en una temática social,
utilizando este libro como inicio de la etapa.
7. -Temática: Blas de Otero expresaba su disconformidad con la
sociedad y, sobretodo, con su patria en la mayoría de sus
obras. Esta insatisfacción la muestra expresando sentimientos
de rebeldía. En este poema muestra una lucha contra la
muerte, que se llevará a su persona, pero no la huella que
dejará a través de la palabra.
8. -Estructura : poema formado por tres
estrofas de cuatro versos endecasílabos y
heptasílabos, con rima asonante en los
pares.
9. Primera estrofa
Presenta una reflexión sobre la importancia de su voz en la
vida y la que tendrá su palabra cuando la muerte se lo lleve,
percatándose a la vez de lo mucho que ha malgastado su vida
y comparando la perdición de su tiempo con la de un anillo en
el agua en el segundo verso. Paralelamente, da musicalidad al
poema con el uso de un encabalgamiento entre el primer y
segundo verso.
10. Segunda estrofa
En esta estrofa, Blas de Otero vuelve a arrepentirse del mal
uso que le ha dado al tiempo en el que ha estado vivo,
sufriendo hambre, sed, y una soledad que no le han servido
para nada. Este desengaño lo compensa, una vez más, con el
descubrimiento del poder de su palabra, el cual nunca
desaparecerá. Vuelve a utilizar un encabalgamiento en el
primer verso, que es acompañado de una antítesis en el
segundo verso y una metáfora en el tercero, en la que utiliza
una sombra para representar su vida, la cual va segando en
silencio. De nuevo, termina la estrofa con el verso me queda
la palabra, que resalta, por segunda vez, la importancia de
ésta.
11. Tercera estrofa
En esta tercera y última estrofa, el autor reivindica su
indignación ante la situación social del momento en España
(su patria), que ha sido víctima de una dictadura, de la cual
Blas se muestra totalmente en contra, de la misma manera
que lo hace en la gran mayoría de sus obras de la etapa
social. Usa, una vez más, un encabalgamiento en el primer
verso, que también es víctima de una sinestesia, que combina
los sentidos propios de los labios y los ojos. En el penúltimo
verso utiliza una hipérbole para enfatizar su sentimiento
contrario al contexto social (si abrí los labios hasta
desgarrármelos). El último verso cierra el poema expresando,
por última vez, la poderosa presencia de la palabra en su vida,
estableciendo, en cierto modo, una especie de paralelismo a lo
largo del poema.