El documento discute cómo los países y ciudades pueden consolidarse a través del marketing urbano. Explica que China se ha consolidado convirtiendo sus ciudades en centros comerciales para sus productos y servicios, y promocionando sus atracciones al mundo. También enfatiza que los ciudadanos deben sentirse parte del proceso de consolidación de la marca de su ciudad para validar sus atributos ante visitantes e inversionistas.