2. PEGASOS, LINDOS
PEGASOS
Pegasos, lindos pegasos,
caballitos de madera...
Yo conocí siendo niño,
la alegría de dar vueltas
sobre un corcel colorado,
en una noche de fiesta.
En el aire polvoriento
chispeaban las candelas,
y la noche azul ardía
toda sembrada de estrellas.
¡Alegrías infantiles
que cuestan una moneda
de cobre, lindos pegasos,
caballitos de madera!
RECUERDO INFANTIL
Una tarde parda y fría
de invierno. Los colegiales
estudian. Monotonía
de lluvia tras los cristales.
Es la clase. En un cartel
se representa a Caín
fugitivo, y muerto Abel,
junto a una mancha carmín.
Con timbre sonoro y hueco
truena el maestro, un anciano
mal vestido, enjuto y seco,
que lleva un libro en la mano.
Y todo un coro infantil
va cantando la lección:
«mil veces ciento, cien mil;
mil veces mil, un millón».
Una tarde parda y fría
de invierno. Los colegiales
estudian. Monotonía
de la lluvia en los cristales.
ANTONIO MACHADO
TODO ES RONDA
Los astros son ronda de niños,
jugando la tierra a espiar...
Los trigos son talles de niñas
jugando a ondular..., a ondular...
Los ríos son rondas de niños
jugando a encontrarse en el mar...
Las olas son rondas de niñas,
jugando la Tierra a abrazar...
GABRIELA MISTRAL
ESCUELA DE LAS FLORES
En medio del prado
hay una escuela
adonde van las flores y las abejas,
amapolas y lirios,
violetas pequeñas,
campanillas azules,
que, con el aire, suenan.
En medio del prado
hay una escuela
y una margarita
que es la maestra.
GLORIA FUERTES
COMO SE DIBUJA
A UN NIÑO
Para dibujar un niño
hay que hacerlo con cariño.
Pintarle mucho flequillo,
—que esté comiendo un barquillo—;
muchas pecas en la cara
que se note que es un pillo;
—pillo rima con flequillo
y quiere decir travieso—.
Continuemos el dibujo:
redonda cara de queso.
Como es un niño de moda,
bebe jarabe con soda.
Lleva pantalón vaquero
con un hermoso agujero;
camiseta americana
y una gorrita de pana.
Las botas de futbolista
—porque chutando es artista—.
Se ríe continuamente,
porque es muy inteligente.
Debajo del brazo un cuento
por eso está tan contento.
Para dibujar un niño
hay que hacerlo con cariño.
GLORIA FUERTES
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4. EL HADA TRAVIESA
Yo soy el hada Teresa.
Soy un hada muy traviesa.
Con mi varita hago cientos
de hechizos y encantamientos.
Que al maestro picajoso
-que tiene un genio horrorosole crezca un rabo de gato
y maúlle todo el rato.
Yo soy el hada Teresa…
Que el sombrero a la vecina
se le transforme en gallina
y le ponga –¡qué descoco!un huevo encima del coco.
Yo soy el hada Teresa…
Que este niño tan pegón
se convierta en champiñón,
huevo frito o moco verde,
y así siempre me recuerde.
Yo soy el hada Teresa…
Que a la maestra gritona,
chillona y marimandona
le salgan, cuando dé un bote,
una barba y un bigote.
Yo soy el hada Teresa…
Carmen Gil
LA BRUJA
La bruja, la bruja
se quedó encerrada
en una burbuja.
La bruja, la boba
con escoba y todo
con todo y escoba.
Está prisionera
chillando y pateando
de mala manera.
Que llore, que gruña
que pique su cárcel
con diente y con uña.
Que salte, que ruede
que busque la puerta
que salga si puede.
¡Se quedó la bruja
presa para siempre
en una burbuja!
Mª Elena Walsh
Tiene un solo diente
orejas de burro
y un rulo en la frente.
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5. LA CIGARRA Y LA
HORMIGA
Cantando la cigarra
pasó el verano entero
sin hacer provisiones
allá para el invierno;
los fríos la obligaron
a guardar el silencio
y a acogerse al abrigo
de su estrecho aposento.
Viose desproveída
del precioso sustento:
sin mosca, sin gusano,
sin trigo y sin centeno.
Habitaba la hormiga
allí tabique en medio,
y con mil expresiones
de atención y respeto
le dijo: «Doña hormiga,
pues que en vuestro granero
sobran las provisiones
para vuestro alimento,
prestad alguna cosa
con que viva este invierno
esta triste cigarra,
que, alegre en otro tiempo,
nunca conoció el daño,
nunca supo temerlo.
No dudéis en prestarme,
que fielmente prometo
pagaros con ganancias,
por el nombre que tengo».
LA GALLINA DE LOS
HUEVOS DE ORO
Erase una gallina que ponía
un huevo de oro al dueño cada día.
Aun con tanta ganancia mal contento,
quiso el rico avariento
descubrir de una vez la mina de oro,
y hallar en menos tiempo más tesoro.
Matóla, abrióla el vientre de contado;
pero, después de haberla registrado,
¿qué sucedió? que muerta la Gallina,
perdió su huevo de oro y no halló la mina.
SAMANIEGO
LOS RATONES
Juntáronse los ratones
para librarse del gato;
y después de largo rato
de disputas y opiniones,
dijeron que acertarían
en ponerle un cascabel,
que andando el gato con él,
librarse mejor podrían.
Salió un ratón barbicano,
colilargo, hociquirromo
y encrespando el grueso lomo,
dijo al senado romano,
después de hablar culto un rato:
- ¿Quién de todos ha de ser
el que se atreva a poner
ese cascabel al gato?
LOPE DE VEGA
La codiciosa hormiga
respondió con denuedo,
ocultando a la espalda
las llaves del granero:
«¡Yo prestar lo que gano
con un trabajo inmenso!
Dime, pues, holgazana,
¿qué has hecho en el buen tiempo?».
«Yo», dijo la cigarra,
«a todo pasajero
cantaba alegremente,
sin cesar ni un momento».
«¡Hola! ¿con que cantabas
cuando yo andaba al remo?
Pues ahora, que yo como,
baila, pese a tu cuerpo».
SAMANIEGO
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6. ARRIBA CANTA EL
PÁJARO
Arriba canta el pájaro
y abajo canta el agua.
(Arriba y abajo,
se me abre el alma).
¡Entre dos melodías,
la columna de plata!
Hoja, pájaro, estrella;
baja flor, raíz, agua.
¡Entre dos conmociones,
la columna de plata!
(¡Y tú, tronco ideal,
entre mi alma y mi alma!)
Mece a la estrella el trino,
la onda a la flor baja.
(Abajo y arriba,
me tiembla el alma).
LA PATA METE LA PATA
La pata desplumada,
cua, cua, cua,
como es patosa,
cua, cua, cua,
ha metido la pata,
cua, cua, cua,
en una poza.
-¡Grua!, ¡grua!, ¡grua!
En la poza había un Cerdito
vivito y guarreando,
con el barro de la poza,
el cerdito jugando.
El cerdito le dijo:
-Saca la pata,
pata hermosa.
Y la pata patera
le dio una rosa.
Por la granja pasean
comiendo higos.
¡El cerdito y la pata
se han hecho amigos!
JUAN RAMÓN JIMÉNEZ
Mariposa del aire,
qué hermosa eres,
mariposa del aire
dorada y verde.
Mariposa del aire,
¡quédate ahí, ahí, ahí!...
No te quieres parar,
pararte no quieres.
Mariposa del aire
dorada y verde.
Luz de candil,
mariposa del aire,
¡quédate ahí, ahí, ahí!...
¡Quédate ahí!
Mariposa, ¿estás ahí?
LORCA
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7. SE EQUIVOCÓ LA PALOMA
Se equivocó la paloma.
Se equivocaba.
Por ir al Norte, fue al Sur.
Creyó que el trigo era agua.
Se equivocaba.
Creyó que el mar era el cielo;
que la noche la mañana.
Se equivocaba.
Que las estrellas eran rocío;
que la calor, la nevada.
Se equivocaba.
Que tu falda era tu blusa;
que tu corazón su casa.
Se equivocaba.
(Ella se durmió en la orilla.
Tú, en la cumbre de una rama.)
ALBERTI
MANUELITA LA TORTUGA
Manuelita vivía en Pehuajó
pero un día se marchó.
Nadie supo bien por qué
a París ella se fue
un poquito caminando
y otro poquitito a pie.
Manuelita, Manuelita,
Manuelita dónde vas
con tu traje de malaquita
y tu paso tan audaz.
Manuelita una vez se enamoró
de un tortugo que pasó.
Dijo: ¿Qué podré yo hacer?
Vieja no me va a querer,
en Europa y con paciencia
me podrán embellecer.
En la tintorería de París
la pintaron con barniz.
La plancharon en francés
del derecho y del revés.
Le pusieron peluquita
y botines en los pies.
Tantos años tardó en cruzar el mar
que allí se volvió a arrugar
y por eso regresó
vieja como se marchó
a buscar a su tortugo
que la espera en Pehuajó
EL PÁJARO RUISEÑOR
A mi me canta en el pecho
un pájaro ruiseñor.
A ti te canta en la boca
el beso que te doy yo.
Cuántas aves se reúnen
para hacerse una canción!
Abro la mano y espero
que se pose el ruiseñor.
Cierras la boca y en ella
se mete mi corazón.
Cuídalo como yo cuido
en mi pecho al ruiseñor.
CARMEN CONDE
MARÍA ELENA WALSH
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8. El lagarto está llorando
El lagarto está llorando.
La lagarta está llorando.
El lagarto y la lagarta
con delantalitos blancos.
Han perdido sin querer
su anillo de desposados.
¡Ay! su anillito de plomo,
¡ay! su anillito plomado
Un cielo grande y sin gente
monta en su globo a los pájaros.
El sol, capitán redondo,
lleva un chaleco de raso.
¡Miradlos qué viejos son!
¡Qué viejos son los lagartos!
¡Ay, cómo lloran y lloran!
¡Ay, ay, cómo están llorando!
LORCA
LAS MOSCAS
Vosotras las familiares,
inevitables, golosas,
vosotras, moscas vulgares,
me evocáis todas las cosas.
Oh viejas moscas voraces,
como abejas en abril,
viejas moscas pertinaces
sobre mi calva infantil.
Moscas de todas las horas
de infancia y adolescencia,
de mi juventud dorada,
de esta segunda inocencia
que da el no creer en nada,
en nada.
Moscas del primer hastío
en el salón familiar
las claras noches de estío
en que yo empecé a soñar.
Y en la aborrecida escuela,
raudas moscas divertidas,
perseguidas, perseguidas
por amor de lo que vuela.
Yo sé que os habéis posado
sobre el juguete encantado,
sobre el librote cerrado,
sobre la carta de amor,
sobre los párpados yertos
de los muertos.
Inevitables golosas,
que ni labráis como abejas,
ni brilláis cual mariposas,
pequeñitas, revoltosas,
vosotras, amigas viejas,
me evocáis todas las cosas.
MACHADO
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9. LA JIRAFA RAFAELA
La jirafa Rafaela
usa gafas de su abuela
porque desde allá arribota
no ve ni hache ni jota.
Creyó que un enorme pino
era un jirafo muy fino
que le iba a hacer la corte;
¡vaya corte!
Que un erizo con un año
era una esponja de baño
y se lavó en bañador;
¡qué dolor!
Que la serpiente Consuelo
era un lazo para el pelo
y la llevó en la cabeza;
¡qué belleza!
Que un avestruz con sombrero
era un hermoso florero
y lo colocó de adorno;
¡qué trastorno!
Y que era Alejo el Cangrejo
un despertador muy viejo
que atrasaba con frecuencia;
¡qué paciencia!
La jirafa Rafaela
usa gafas de su abuela
porque desde allá arribota
no ve ni hache ni jota.
EN LOS ÁRBOLES DEL
HUERTO
En los árboles del huerto
hay un ruiseñor:
Canta de noche y de día
canta a la luna y al sol.
Ronco de cantar
al huerto vendrá la niña
y una rosa cortará.
Entre las negras encinas
hay una fuente de piedra
y un cantarillo de barro
que nunca se llena.
Por el encinar
con la luna blanca
ella volverá.
MACHADO
CARMEN GIL
CORDERITO
Corderito mío,
suavidad callada:
mi pecho es tu gruta
de musgo afelpada.
Carnecita blanca,
tajada de luna:
lo he olvidado todo
por hacerme cuna.
Me olvidé del mundo
y de mí no siento
más que el pecho vivo
con que te sustento.
Y sé de mí sólo
que en mí te recuestas.
Tu fiesta, hijo mío,
apagó las fiestas.
GABRIELA MISTRAL
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10. LA GARRA DE LA GUERRA
Hay que decir lo que hay que decir
pronto
de pronto
visceral
del tronco;
Con las menos palabras posibles
que sean posibles los imposibles
hay que hablar poco y decir mucho
hay que hacer mucho
y que nos parezca poco:
arrancar el gatillo a las armas
por ejemplo
Gloria Fuertes
NIÑOS DE SOMALIA
Yo como
Tú comes
El come
Nosotros comemos
Vosotros coméis
¡Ellos no!
Gloria Fuertes
TRISTES GUERRAS
Tristes guerras
si no es amor la empresa.
Tristes, tristes.
Tristes armas
si no son las palabras.
Tristes, tristes.
Tristes hombres
si no mueren de amores.
Tristes, tristes.
Miguel Hernández
TÚ NO MATES
(Al hijo. Fragmento)
Sé fuerte y generoso en este mundo,
el dolor más atroz, el más profundo,
lo llevan en el alma los que hieren.
Defiéndete si puedes, burla, esquiva,
pero si no te queda alternativa,
tú no mates, tu sé de los que mueren.
Laura Capmany
General, tu tanque es más fuerte que un coche.
Arrasa un bosque y aplasta a cien hombres.
Pero tiene un defecto:
necesita un conductor.
General, tu bombardero es poderoso.
Vuela más rápido que la tormenta y carga más
que un elefante.
Pero tiene un defecto:
necesita un piloto.
General, el hombre es muy útil.
Puede volar y puede matar.
Pero tiene un defecto:
puede pensar.
Bertolt Brecht
CANCIÓN QUINCE
Ramo de oliva, vamos
a verdear el aire,
que todo sea ramos
de olivos en el aire.
Defenderemos la tierra
roja que vigilamos.
Que todo sea ramos
de olivos en el aire.
Puestos en pie de paz,
unidos, laboramos.
Ramo de oliva, vamos
a verdear el aire.
A verdear el aire.
Que todo sea ramos
de olivos en el aire.
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11. Blas de Otero
IMAGÍNATE
Primero cogieron a los comunistas,
y yo no dije nada porque yo no era un comunista.
Luego se llevaron a los judíos,
y no dije nada porque yo no era un judío.
Luego vinieron por los obreros,
y no dije nada porque no era ni obrero ni
sindicalista.
Luego se metieron con los católicos,
y no dije nada porque yo era protestante.
Y cuando finalmente vinieron por mí,
no quedaba nadie para protestar.
Bertolt Brecht
Imagina que no existe el Cielo
es fácil si lo intentas
sin el Infierno debajo nuestro,
arriba nuestro, solo las nubes
Imagina a toda la gente
viviendo el hoy...
Imagina que no hay países
no es difícil de hacer
nadie por quien matar o morir
ni tampoco religión
imagina a toda la gente
viviendo la vida en paz...
Puedes decir que soy un soñador
pero no soy el único
espero que algún día te unas a
nosotros
y el mundo vivirá como uno
Imagina que no hay posesiones
quisiera saber si puedes
sin necesidad de gula o hambre
una hermandad de hombres
imagínate a toda la gente
compartiendo el mundo
Puedes decir que soy un soñador
pero no soy el único
espero que algún día te unas a nosotros
y el mundo vivirá como uno
Jhon Lennon
Poema 19
Niña morena y ágil, el sol que hace las frutas,
el que cuaja los trigos, el que tuerce las algas,
hizo tu cuerpo alegre, tus luminosos ojos
y tu boca que tiene la sonrisa del agua.
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12. Un sol negro y ansioso se te arrolla en las hebras
de la negra melena, cuando estiras los brazos.
Tú juegas con el sol como con un estero
y él te deja en los ojos dos oscuros remansos.
Niña morena y ágil, nada hacia ti me acerca.
Todo de ti me aleja, como del mediodía.
Eres la delirante juventud de la abeja,
la embriaguez de la ola, la fuerza de la espiga.
Mi corazón sombrío te busca, sin embargo,
y amo tu cuerpo alegre, tu voz suelta y delgada.
Mariposa morena dulce y definitiva,
como el trigal y el sol, la amapola y el agua.
Neruda
12