SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 16
Descargar para leer sin conexión
ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS
CIUDADES LATINOAMERICANAS
CIENCIAS SOCIALES
Introducción | Ciudades latinoamericanas en perspectiva histórica | Ciudades sobre ciudades | La ciudad en
damero | De la ventana enrejada española al balconcito francés | Ciudades de campesinos | El crecimiento urbano
desmesurado | Ciudades y ciudadanos
Autores: Prof. Mario Petrone (UBA), con la colaboración de Patricia Funes | Coordinación Autoral: Dra. Patricia Funes (UBA y CONICET) y Dr.
Áxel Lazzari (UBA)
PROGRAMA
DE CAPACITACIÓN
MULTIMEDIAL
EXPLORALAS CIENCIAS EN EL MUNDO CONTEMPORÁNEO
udades.qxd 21/03/2007 03:51 p.m. PÆgina 1
2 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES
La ciudad se relaciona con un sinnúmero
de términos estrechamente vinculados:
modernidad, capitalismo, progreso, "luces"
(de iluminación e "iluminismo-racionali-
dad"), burguesía (burgos), política (polis),
ciudadanía. Las ideas e ideologías suelen
asociarse al mundo urbano, así como su difu-
sión y registro. Histórica morada de sacerdo-
tes, letrados, reyes, presidentes, técnicos, la
ciudad es poder, administración, "contabili-
dad" y distribución de recursos materiales y
simbólicos. Incluso como experiencia de vida,
¿es posible pensar el "espacio público" sin
remitir a la experiencia urbana?
Sociológica e históricamente, lo urbano
suele definirse "frente" o "contra" el cam-
po, lo rural. Esquemas duales (o funcionalis-
ta-dualistas) establecen contradicciones en-
tre ambos mundos. Es difícil encontrar algu-
na utopía futurista que no se ubique en las
ciudades ("máquinas que hacen el trabajo
de hombres, hombres que se comportan
como máquinas", escribió Orwell). En cam-
bio, las utopías retrospectivas y/o milenaris-
tas se ligan a lo rural: arcadias perfectas,
igualitarias, ubicadas en un tiempo mitológi-
co y generalmente circular.
"La ciudad −dice Raymond Williams− se
alimenta (literalmente) de lo que el campo
produce y puede hacerlo a cambio de los
servicios que ofrece en las esferas de la auto-
ridad, la política, la ley y el comercio a quie-
nes están a cargo de la explotación rural, con
quienes, de modo característico, está ligada
orgánicamente por una necesidad mutua de
beneficio y poder." Sin embargo, con el
tiempo, esa relación en principio recíproca,
se autonomiza en favor de las ciudades, que
se alienan y adquieren una fisonomía apa-
rentemente autosustentable.
Las ciudades se definen como sistemas
sobrecapitalizados subsidiados desde la pe-
riferia, de donde provienen los recursos.
División del trabajo, estratificación, aliena-
ción y acumulación son notas que las carac-
terizan. Por lo mismo, la ciudad es sede de la
administración y el poder. El campo y la ciu-
dad son realidades históricamente variables,
tanto en sí mismas como en sus interrelacio-
nes. Mucho más en América Latina, donde
la "arcaización de lo moderno, la moderni-
zación de lo arcaico" generan zonas grises,
híbridas, mucho más polifónicas y menos
diáfanas que las díadas y los opuestos. Hay
más de dialéctica, de complementariedad y
de contaminación que lo que esas imáge-
nes sugieren.
Las ciudades latinoamericanas comparten
la lógica del capitalismo, aunque se objetiva y
enraíza con rasgos peculiares. Si las compara-
mos con otras sociedades del Tercer Mundo,
las ciudades latinoamericanas han mostrado
una densidad y complejidad propias.
En este fascículo veremos algunas imáge-
nes de las ciudades latinoamericanas,
centrándonos en el proceso histórico funda-
cional de las denominadas “ciudades masifi-
cadas”, procesos ligados a las transformacio-
nes de entreguerras. Si bien señalaremos los
principales rasgos de las ciudades en la his-
toria de la región, nos detendremos en
estas "ciudades de campesinos" que sur-
gieron en las décadas de 1940 y 1950, ya
que marcan un quiebre cuantitativo y cuali-
tativo de largo plazo que aún continúa.
EduardoNicolau/AE
INTRODUCCIÓN
San Pablo, una de las más grandes metrópolis latinoamericanas.
udades.qxd 21/03/2007 03:51 p.m. PÆgina 2
3ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS
CIUDADES SOBRE CIUDADES
La ciudad latinoamericana, si bien producto
del genérico proceso de la modernidad, tie-
ne sus linajes y precedencias.
El 8 de noviembre de 1516, las huestes de
Hernán Cortés avistaron Tenochtitlán, una
increíble ciudad compuesta de varias ciuda-
des, construidas sobre un lago. Los soldados
que acompañaban a Cortés habían viajado
por casi todo el mundo occidental conocido y
no podían sino compararla de manera
incompleta y aproximativa con Roma o Cons-
tantinopla. Los símiles eran del orden de la
magia o de los sueños. Escribió Bernal Díaz:
Y desde que vimos tantas ciudades y villas
pobladas en el agua, y en tierra firme otras gran-
des poblaciones, y aquella calzada tan derecha y
por nivel cómo iba a México, nos quedamos admi-
rados, y decíamos que parecía a las cosas de
encantamiento que cuentan en el libro de Amadís,
por las grandes torres y cúes [templos] y edificios
que tenían dentro del agua, y todos de calicanto, y
aun algunos de nuestros soldados decían que si
aquello que veían si era entre sueños, y no es de
maravillar que yo escriba aquí de esta manera, por-
que hay mucho que ponderar en ello que no sé
como lo cuente: ver cosas nunca oídas ni aun
soñadas como veíamos.
Otro tanto ocurrió con Cuzco, considera-
da el "ombligo" del mundo incaico, des-
cripta así por el Inca Garcilaso:
Tiene calles anchas y largas y plazas muy gran-
des, por lo cual los españoles en general, y los
escribanos y notarios en sus escrituras públicas,
usan del primer título porque el Cuzco en su
imperio fue otra Roma en el suyo; y así se puede
cotejar la una con la otra, porque se asemejan en
las cosas más generosas que tuvieron. La primera
y principal, en haber sido fundadas por sus prime-
ros reyes. La segunda en muchas y diversas nacio-
nes que conquistaron y sujetaron a su imperio. La
tercera en las leyes tantas y tan buenas y bonísi-
mas que ordenaron para el gobierno de sus repú-
blicas. La cuarta en los varones tantos y tan exce-
lentes que engendraron, y con su buena doctrina
urbana y militar criaron.
Tenochtitlán y Cuzco fueron parcialmente
destruidas y sobre ellas se edificaron "nue-
vas" ciudades: México sobre Tenochtitlán,
en el virreinato de la Nueva España, y Nueva
Toledo sobre las ruinas de Cuzco. Sobre sus
templos, las iglesias mayores, y sobre sus cal-
zadas, las calles, en dificultoso damero.
LA CIUDAD EN DAMERO
La conquista española, menos que la lusita-
na, se centró en la creación de ciudades. No
eran factorías, eran ciudades para estable-
cerse y crear una nueva sociedad, una
"nueva Europa". La ciudad era el centro de
expansión de un hinterland indeterminado.
Representaban al rey, a la religión católica (la
legitimidad de la conquista) y al mundo euro-
peo. Muchas de ellas se trazaron sobre ciu-
dades o encrucijadas de caminos precolom-
binos. Otras se crearon ex nihilo. También
hubo ciudades en los centros productivos:
Taxco, Guanajuato, Villa Rica de Albuquerque
(hoy Ouro Preto), pero la más impresionan-
te fue Potosí. Y las hubo puertos, que se vol-
vieron muy dinámicos hacia finales del siglo
XVIII, cuando se flexibilizó el monopolio co-
mercial. Justamente, de las ciudades de los
nuevos virreinatos borbónicos surgieron
los primeros movimientos independentistas.
En todos los casos, la idea era trasladar la
impronta del mundo conocido y civilizado.
Plano de Tenochtitlán, posiblemente realizado por Cortés (México, 1524).
CIUDADES LATINOAMERICANAS EN PERSPECTIVA HISTÓRICA
FoundationfortheAdvancenmentofMesoamericanStudies(FAMS)
udades.qxd 21/03/2007 03:51 p.m. PÆgina 3
4 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES
Por eso muchas se llamaron "nuevas" −Nue-
va España, Nueva Granada, Nueva Galicia;
New York, Nouvelle Orleans, Nova Lisboa−
o eran bautizadas con el nombre de ciuda-
des conocidas −Córdoba, Rioja, Cartagena
(de Indias)−. Como afirma Benedict Anderson,
los europeos del siglo XVI habían adoptado
el hábito de dar a lugares remotos "nuevas
versiones" de "antiguas" toponimias de sus
tierras de origen. "Lo sorprendente de los
nombres americanos de los siglos XVI y XVII
es que lo "nuevo" y lo "viejo" fueron inter-
pretados de manera sincrónica, no como
herencia". Nueva España junto a España, un
idioma de competencia entre hermanos y
no de herencia: "Entre 1500 y 1800, una
acumulación de innovaciones técnicas en
los campos de la construcción de barcos, la
navegación, la relojería y la cartografía,
hacía posible este tipo de imaginación".
El "orden" fue otro concepto importante
en la fundación de ciudades. Es la palabra
que obsesivamente utiliza el rey en las ins-
trucciones a Pedrarías Dávila (1513) para la
conquista de Tierra Firme:
Vistas las cosas que para los asientos de los
lugares necesarios e escogido el sitio más prove-
choso [...] habréis de repartir los solares del lugar
para hacer casas, y estos han de ser repartidos
según las calidades de las personas e sean de
comienzo dados por orden; por manera que [...] el
pueblo parezca ordenado, así en el lugar que se
dejare para la plaza, como el lugar en que hubie-
ra la iglesia, como en el orden que tuvieran las
calles; porque en los lugares que de nuevo se
hacen dando la orden en el comienzo sin ningún
trabajo ni costa quedan ordenados e los otros
jamás se ordenan.
Para Ángel Rama, la traslación del orden a
una realidad física −la fundación de ciuda-
des− implicaba un diseño urbanístico que
no podía dejarse al azar; debía tener racio-
nalidad, incluso, para prever el futuro y neu-
tralizar la entropía de un mundo con otras
lógicas que debía ser disciplinado desde el
espacio. "El resultado en América Latina fue
el damero, que reprodujeron, con o sin pla-
no a la vista, las ciudades barrocas y que se
prolongó hasta prácticamente nuestros días
[...]. Pero más importante aún que el dame-
ro es el principio rector que asegura todo un
régimen de transmisiones: de lo alto a lo
bajo, de España a América, de la cabeza del
poder a la conformación física de la ciudad
para que la distribución del espacio urbano
asegure y conserve la forma social. El orden
debe quedar estatuido antes de la existencia
física, real de las ciudades para impedir futu-
ros desórdenes."
No obstante estas previsiones, la mayoría
de las ciudades criollas fueron apenas algo
más que "aldeas": plaza, catedral, casa del
gobernador, cabildo, ejido. Acechadas por
la escasez, la invasión o la enfermedad. Pese
a las sincronías y los órdenes, las ciudades
latinoamericanas no se comportaban del
todo como la modernidad de la cual forma-
ban inequívocamente parte.
Luego de las independencias y el derrum-
bamiento de los espacios administrativos,
mercantiles y políticos del orden colonial, se
desató una fuerza centrífuga en el que for-
mas moleculares y rurales de dominación
conformaron un principio articulador de
reemplazo: las plantaciones, las haciendas,
las estancias, matrices del orden oligárquico,
se impusieron sobre las ciudades. Las con-
tradicciones entre puertos e "interiores",
entre conservadores y liberales, entre fede-
rales y centralistas tuvieron como protago-
nistas el orden urbano vs. el orden rural.
1. Representación de Cuzco, realizada
por Guamán Poma de Ayala (1572).
2. Plano de la ciudad de Buenos Aires
(1713) en el que se puede apreciar el
diseño en damero original.
1
2
BibliotecaReal,Copenhague,Dinamarca
BibliotecadelCongresodelaNaciónArgentina
udades.qxd 21/03/2007 03:51 p.m. PÆgina 4
5ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS
urbana muy influido por la cultura francesa
que animaba a las elites culturales. Las
reformas de Haussman en París inspiraron
esos cambios. Otra referencia importante
fueron las políticas emanadas de las escue-
las positivistas e higienistas. Las epidemias
DE LA VENTANA ENREJADA
ESPAÑOLA AL BALCONCITO
FRANCÉS
Creo que no hay imagen que mejor
defina el profundo cambio que a toda
velocidad regía a las ciudades latinoame-
ricanas, que la sustitución de la vieja ven-
tana enrejada de origen español, por el
balconcito de origen francés, moda que
fue arrasadora desde los años noventa.
Ángel Rama.
El proceso de consolidación de los Estados
latinoamericanos (hacia fines del siglo XIX)
volvió a poner de relevancia el mundo urba-
no. El proceso de centralización política pro-
ducto de los pactos intra e interoligárquicos
pautaban, al compás de la inserción de las
economías regionales al mercado mundial,
otro "orden" para el "progreso". Las nue-
vas funciones (administración estatal, vías
férreas, puertos, en síntesis, las obras de
infraestructura que demandaba una econo-
mía en expansión) imprimieron a las ciuda-
des nuevas fisonomías.
Las ciudades, sobre todo las capitales, des-
cribieron un proceso de reestructuración
de fiebre amarilla, disentería o cólera
demostraron que la ciudad era un espacio
colectivo y que ni las clases propietarias
estaban a salvo de esas epidemias en ámbi-
tos insalubres. De allí que se impusieran
obras de alcantarillado, apertura de calles,
avenidas, bulevares, iluminación y "airea-
miento" por medio de espacios verdes.
Además, el Estado corporizaba su presencia
física en edificios o "palacios" (las sedes de
los congresos, de los correos, las mismas
aduanas) reafirmando un poder político cada
vez más presente. Sin embargo, la moderni-
dad mostraba imágenes bifrontes, ambiva-
lentes, que se expresaron con mucha nitidez
en las ciudades.
Para las oligarquías latinoamericanas las
ciudades presentaban una fisonomía con-
tradictoria: por un lado, eran el espejo del
progreso, la modernidad, la civilización; por
otro, un ámbito de creciente hostilidad
cuando (como contracara de esos mismos
procesos) contingentes de obreros socialis-
tas y anarquistas se apropiaron de lo públi-
co. La calle se transformó en un lugar para
el ejercicio de la opinión, la recreación, el
encuentro, la protesta. Esta "publicidad"
aparecía transgrediendo la "privacidad" de
una política restringida a los clubes de nota-
bles y los círculos familiares. No se trataba de
una "ciudad desencantada", una "jaula de
hierro", sino de un improvisado bricolaje
BibliotecadelCongresodelaNaciónArgentina
Planos en damero de la fundación de las ciudades de Mendoza y San Juan.
Destrozos provocados durante la Semana Trágica (Buenos Aires, 7-15 de enero de 1919), como
consecuencia de la dura represión a la huelga general promovida por la FORA anarquista.
AGN
udades.qxd 21/03/2007 03:51 p.m. PÆgina 5
6 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES
nidas y se modernizó el puerto. Se constru-
yeron veredas y macadanes, se demolieron
viejos mercados y cientos de cortiços, con-
juntos habitacionales precarios donde se
aglomeraba buena parte de la población
pobre que debió dirigirse hacia las colinas,
lo que dio comienzo a un proceso de
"favelización" de larga data.
El conjunto de transformaciones era vivido
con un explícito ethos civilizatorio. Uno de
los narradores de la ciudad, Olavo Bilac lo
describía así:
Hace pocos días, los picos, entonando un him-
no jubiloso, iniciaron los trabajos de la Avenida
Central, tirando abajo las primeras casas conde-
nadas [...]. Comenzamos a marchar hacia nuestra
rehabilitación. Al derrumbarse las paredes [...] se
hacía presente un largo gemido. Era el gemido
triste y lamentoso del Pasado, del Atraso, del
Oprobio. La ciudad colonial, inmunda retrógrada
empeñada en sus viejas tradiciones, estaba sollo-
zando [...]. ¡Con qué alegría cantaban los picos
regeneradores [...] celebrando la victoria de la
higiene, del buen gusto y el arte!
Acompañó estas medidas un conjunto de
políticas destinadas a superar un problema
recurrente de las ciudades latinoamerica-
nas: las epidemias. En 1904, el gobierno de
Brasil hizo que el Congreso aprobara una
ley que declaraba obligatoria la vacunación
contra la viruela.
Los barrios centrales afectados por la
reforma y la zona del puerto se convirtieron
en el foco de la primera protesta de enver-
gadura contra el gobierno republicano: la
Revuelta de la Vacuna. El 13 de noviembre
de 1904, los opositores a la norma guberna-
mental levantaron barricadas y se lanzaron a
las calles. El conflicto, finalmente controlado
por la fuerza pública, terminó con un saldo
de 30 muertos, 110 heridos y 945 deteni-
dos. Como afirma José Murilo de Carvalho,
la Revuelta de la Vacuna fue una protesta
popular, más allá de la vacuna. Fue un pro-
nunciamiento espontáneo contra la refor-
ma urbana, la destrucción de casas, la ex-
pulsión de sectores de la población, las
medidas sanitarias (entre ellas, la prohibi-
ción de que mendigos y perros circularan
de modernidades que se yuxtaponían. Para
distintos actores, la modernidad tenía signi-
ficados diferentes.
RÍO DE JANEIRO: HIGIENISMO
Y REVUELTA DE LA VACUNA
Río de Janeiro sufrió un conjunto de meta-
morfosis hacia comienzos del siglo XX. Hay
que recordar que, todavía en 1872, un
número importante de sus habitantes (alre-
dedor de 200.000) eran esclavos y que fue
asiento de una corte hasta 1889.
La complejización de las funciones del
Estado y el crecimiento económico impac-
taron fuertemente en la ciudad, que requi-
rió de una nueva infraestructura y mayores
servicios. Si bien el alcantarillado instalado
a mediados del siglo XIX (como consecuen-
cia de una epidemia de fiebre amarilla)
había mejorado la salubridad, hacia co-
mienzos del siglo XX era insuficiente. Entre
1903 y 1906, bajo la dirección del arquitec-
to Pereira Passos, se ampliaron e iluminaron
las calles angostas y oscuras, se trazaron ave-
EstefanRadovicz/AE
Rocinha, la favela más grande de Río de Janeiro, Brasil.
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 6
7ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS
Caricatura del prefecto de Río de Janeiro, Pereira Passos, y del director de Salud Pública, Oswaldo Cruz, publicada en la prensa brasileña
durante la "Revuelta de la Vacuna", en noviembre de 1904.
Archivo/AE
por la ciudad, la prohibición de escupir en la
vía pública y los transportes públicos) y, por
último, la vacuna obligatoria. La oposición
hacia la vacuna presentó aspectos moralis-
tas. Corrió el rumor de que debía ser aplica-
da en las nalgas. Los hombres consideraban
que el Estado no tenía derecho de meterse
en sus casas para tocar las partes "íntimas de
sus esposas".
LUCES Y SOMBRAS EN BUENOS AIRES
Los festejos de los centenarios de las inde-
pendencias encontraron a las capitales en el
cenit de los regímenes oligárquicos. Los
centenarios son ocasiones privilegiadas
para las recapitulaciones simbólicas. En las
conmemoraciones de los centenarios de las
independencias de los países de América
Latina se evidencian rotundas imágenes de
la "identidad" nacional. Las ciudades fue-
ron el centro de esos símbolos.
En 1910 llegó a la Argentina el mayor
número de inmigrantes de la historia del
país. Desembarcaron en el puerto de Buenos
Aires 289.000 personas (en promedio serían
cerca de 800 por día). La ciudad capital
tenía, entonces, 1.270.000 habitantes, de
los cuales el 51% eran inmigrantes. Entre
1906 y 1910 arribaron 1.200.000 inmigran-
tes a una ciudad que absorbía el 25 % de la
población total del país. La mayoría vivía en
conventillos y precarias piezas de alquiler.
Mientras tanto, Buenos Aires intentaba
tenazmente parecerse a París. La apertura
de la Avenida de Mayo, el Palacio de
Congreso, los petit-hoteles de la calle
Alvear o de la Plaza San Martín parecían
confirmarlo. En uno de los libros oficiales
del Centenario se leía: "París, soberana de
las ciudades [...], tu hermana muy joven
aún, hasta hoy recatada, va a presentarse al
mundo en Mayo de 1910. ¡Puedes sentirte
orgullosa! La humanidad, al contemplarla
[...] verá que pertenecen a la misma estirpe".
Los festejos del Centenario se realizaron
con toda pompa y boato, pero bajo estado
de sitio. Este recorte a las libertades indivi-
duales era la respuesta del Estado a la con-
flictividad social del movimiento obrero. Los
sectores anarquistas y socialistas venían
desplegando un conjunto de protestas que
el año anterior habían sido reprimidas dura-
mente, y la amenaza de boicot a los festejos
del Centenario llevaron al gobierno no sólo a
restringir las libertades, sino a sancionar la Ley
de Defensa Social, que profundizaba la
Ley de Residencia (1902), cuya derogación
era una parte importante de las reivindica-
ciones obreras. La Ley de Defensa Social era
un instrumento del Estado para penalizar
protestas y movilizaciones obreras. Y, de
hecho, el Estado hizo uso de esas faculta-
des ya que, para los festejos de Mayo, hubo
deportaciones, encarcelamientos y proscrip-
ciones. Es que el año 1910 es la condensa-
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 7
8 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES
ción de las contradicciones de la moderni-
zación argentina (mirada desde los sectores
dominantes). Como Jano, con dos caras:
una, la de la "oda al ganado y las mieses";
la otra, la de la bomba anarquista al jefe de
policía. Inmigrante y maximalista tienden a
ser una sola identidad, y la palabra "disol-
vente" (con la fuerza expresiva de la que
está impresa), un mote frecuente.
Algo inquietaba a las elites políticas y cul-
turales, aun más que los posibles efectos de
la llegada del cometa Halley, que cruzaba el
cielo porteño en mayo de ese año. Las luces
de la "Belle époque" argentina y de la repú-
blica oligárquica se iban apagando. Entre las
novedades del festejo del Centenario se pre-
veía la iluminación completa de los edificios
públicos de la Capital, cosa que ocurrió a
medias. Algunos hablaron de imprevisión;
otros, de sabotaje anarquista.
AGN
SubterráneosdeBuenosAiresS.E.
1
3
1. Construcción de la Estación Plaza Miserere de la Línea A de subterráneos,
la primera de Latinoamérica.
2 y 3. Las dos caras del Centenario: la oligarquía desfilando con la infanta
Isabel de España e inmigrantes recién llegados al puerto de Buenos Aires.
AGN
2
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 8
9ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS
Lucas Ayarragaray: [...] Yo quiero que se
sancione una ley, que lleve su acción has-
ta la raíz misma de la idea anarquista,
para ahogar todas sus siniestras manifes-
taciones, declarando delito esa mons-
truosidad que hoy germina en los duros
cerebros de algunos proletarios suscita-
da por las declamaciones malsanas de
ciertos ilusos. Yo proclamo sin ambages
que el anarquismo es un delito contrario
a la civilización argentina, porque no
está en nuestros antecedentes, en nues-
tra complexión social, económica e histó-
rica: y por eso, como miembro de la
comisión de legislación, presenté a su
seno un proyecto combinado, de exclu-
sión de extranjeros y de expulsión,
penando, además, a los que una vez
expulsados vuelvan al país. Ese proyecto
tomado en todos sus fundamentos y con
toda su doctrina intacta, lo ha reproduci-
do el diputado Meyer Pellegrini, con
modificaciones de detalle. Es siempre
muy difícil saber lo que un hombre trae
dentro de sí, las intenciones que abriga
en el seno de su conciencia; y con los
medios que tenemos hoy de preserva-
ción social no llegaremos a evitar la infil-
tración del virus anarquista en el pueblo,
por más que le opongamos un tamiz de
mallas más apretadas que el que tiene
actualmente la ley de inmigración y resi-
dencia en vigor. Y para ese caso necesita-
mos la ley de expulsión en la forma que
la he propuesto a la comisión de legisla-
ción, con sanciones para los que reinci-
dan y vuelvan al país después de ser
expulsados. Y no sólo eso; allí no queda-
ría la eficacia de la ley sino en límites
reducidos y deficientes: sería en realidad
una ley frustránea. El anarquismo se ha
desarrollado entre nosotros como se de-
sarrolla todo, por falta de autoridades
y contrapesos contrarios. Evitemos que
el delirio anarquista se propague a las
clases inferiores de la sociedad y asuma
formas bárbaras, como el atentado de
anoche, dirigido contra lo más granado
de nuestra sociedad, en desmán de asesi-
nato colectivo y anónimo.
[...] Yo estudié la materia y presenté [un
proyecto] en forma de ley especial, ley de
orden público y de carácter político-social.
Constituye una iniciativa nueva y me
cabe la satisfacción de haberla formula-
do. Por esa ley, que el diputado Meyer
Pellegrini modificó en detalles, pero con-
servando integralmente todos sus artícu-
los fundamentales, declaro delito el
anarquismo; prohíbo, en consecuencia,
los centros y asociaciones anarquistas, la
prensa anarquista, el mitin público anar-
quista y la reunión secreta, la bandera
anarquista; cancelo la carta de ciudada-
nía a los anarquistas; también a los que
fabriquen, expongan, etc., bombas; creo
todo un régimen de penas; amplío los
casos de expulsión; castigo a los que,
expulsados, regresan al país: es decir, ¡lle-
vo por primera vez en este país el fuego
de la ley hasta la raíz misma de la idea
anarquista!
[...] Yo sé que el derecho de defensa de
la sociedad deriva de un concepto su-
perior de subsistencia y de vida; pero en
estos momentos no está en cuestión la
existencia de la nación. Yo le doy al
monstruo anarquista toda la importancia
y reconozco todas las aberraciones bru-
tales que entraña; pero estoy tranquilo
sabiendo que nos bastan por ahora las
defensas especiales que tenemos en jue-
go para contener los siniestros delirios
de una banda de aventureros. ¡Nosotros
somos un partido conservador, somos el
partido burgués; el anarquismo, que es
el engendro monstruoso, que es la aberra-
ción del socialismo y que pretende atacar
en este momento la organización funda-
mental de la sociedad, desde la familia
hasta la propiedad, no debe intimidarnos;
nosotros, como partido conservador y bur-
gués, tenemos en nuestras manos el ejérci-
to, la fuerza moral, la tradición y el poder;
estamos perfectamente autorizados, por
todos los artículos de la Constitución,
desde la cláusula inicial hasta la última
de sus disposiciones, para poner en ejer-
cicio todos los poderes −los explícitos, los
implícitos, los virtuales− para defender
lo que constituye nuestra vida, nuestro
honor, nuestro progreso y nuestra esta-
bilidad futura como nación!
Entonces, ¿qué más quiere el Poder
Ejecutivo? ¿Acaso la opinión no ha pues-
to en sus manos para combatir el crimen
anarquista todas las delegaciones de
confianza, como nunca se otorgaron
iguales en este país? Nosotros damos, y
el país también da, todos los poderes
implícitos, todos los explícitos que hay
en la Constitución, para que defienda
con eficacia la sociedad. Nosotros cree-
mos que la familia y la propiedad son las
bases y fundamentos insustituibles y
definitivos de toda organización culta, y
no permitimos que ningún partido polí-
tico argentino, y menos bandas de
extranjeros aventureros, vengan a atacar
lo que todos consideramos las bases
inconmovibles del mundo moderno, de
esta civilización, que es un lejano reflejo
de una cultura que viene hasta nosotros,
de orígenes desconocidos, y a través de
las edades y de la historia, llega a la vir-
gen América para fundar esta civiliza-
ción argentina, que será grande y que
hace pocos días hemos conmemorado,
en presencia de delegaciones de América
y de Europa, como una demostración
inconmovible de nuestro destino y de
nuestro poder.
Diario de sesiones, Cámara de Diputados,
Buenos Aires, 27 de junio de 1910.
DISCURSO SOBRE LA LEY DE DEFENSA SOCIAL (1910)
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 9
10 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES
oposición, le pone hora, día y mes (las 18 del
domingo 20 de noviembre de 1910) a la Re-
volución en su Plan de San Luis Potosí. En
1914, los ejércitos campesinos llegaban a la
ciudad de México. La ciudad −en rigor, todo
México− se campesinizaba. “¡Existían Méxi-
co y los mexicanos!”, escribió un agudo ensa-
yista. La ciudad se llenó de zarapes multicolo-
res, de caras oscuras; los mercados callejeros
se multiplicaron. Y aunque Zapata y Villa llega-
ron al sillón presidencial, no fueron los que
ganaron la revolución. Sin embargo, fue un
punto de no retorno. En los años veinte, el
ethos civilizador y la praxis nacionalizadora de
José Vasconcelos desde la Secretaría de Edu-
cación Pública tenía como eje la idea del
"México mestizo". Para ello, la ciudad de Mé-
xico debía reconciliarse con lo rural. Su ambi-
cioso plan educativo contemplaba nuevas
imágenes para proyectar en la ciudad ese nue-
vo México. La Universidad, el Palacio de Go-
bierno, en síntesis, los espacios públicos y esta-
tales, se llenaron de murales de Diego Rivera
con sus indios, sus nopales y sus huarachas.
La difícil cimentación de la obra requirió de
mucha pericia técnica y fe en el progreso. La
columna mide 36 metros de altura y sumada
la del grupo escultórico que la corona, alcan-
za un total de 43 metros. La columna está
decorada con palmas, guirnaldas y anillos
con los nombres de los héroes de la
Independencia. La escultura que se encuen-
tra en la cúspide de la columna −"El Ángel",
que representa a la Victoria Alada− es de
bronce con recubrimiento de oro, mide 6,7
metros de altura y pesa siete toneladas.
Muchos, en su momento, criticaron el pro-
yecto por inviable o por efímero: pensaban
que la columna iba a desmoronarse ante el
primer temblor. Sin embargo, la columna
aún está en pie. Si bien el Ángel se cayó
durante el sismo de 1957, fue reinaugurado
en 1958 y sobrevivió a los subsiguientes sis-
mos que azotaron la ciudad.
Los festejos del Centenario fueron la apo-
teosis del porfiriato y la política de los "cientí-
ficos", y también su despedida. Sólo dos
meses después, Francisco Madero, líder de la
El Ángel de la Independencia, erigido en el Paseo de la Reforma, en la ciudad de México.
BibliotecaFranciscoXavierClavijero
MÉXICO:
DEL ÁNGEL DE LA INDEPENDENCIA
A LOS MURALES DE RIVERA
El 16 de septiembre de 1910, como parte
de los festejos del Centenario de la In-
dependencia, se inauguraba en la Ciudad
de México el monumento conocido como El
Ángel de la Independencia. El grupo escul-
tórico es un buen ejemplo de los símbo-
los de la confianza en la modernización. Se
comenzó a construir en 1902 y el mismo
Porfirio Díaz lo inauguró para los festejos.
Enclavado en una de las glorietas del Pa-
seo de la Reforma (el sucedáneo mexica-
no de los Campos Elíseos parisinos) era
un desafío para el futuro. La ciudad de
México está asentada sobre las aguas de
un gran lago y, por añadidura, es un fre-
cuente epicentro de sismos y terremotos.
Sin embargo, el arquitecto mexicano An-
tonio Rivas Mercado proyectó una altísima
columna coronada por una escultura de
bronce macizo.
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 10
11ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS
CIUDADES DE CAMPESINOS
El año 1930 suele ser sinónimo de cam-
bios políticos en América Latina. Muchas
interpretaciones enfatizan la relación entre
los efectos de la crisis capitalista y los golpes
de Estado que se suceden en un conjunto de
países de la región. Generalmente, las inter-
pretaciones se despliegan en este orden: pri-
mero, agotamiento del orden primario
exportador; segundo, muestras de agota-
miento de los distintos regímenes oligárqui-
cos. No en todos los países los cambios son
del mismo signo. En 1930 se sucedieron va-
rios golpes de Estado en América Latina: el
ocurrido en la Argentina clausuró la expe-
riencia de ampliación de la ciudadanía políti-
ca; el de República Dominicana habilitó la
larga dictadura de Rafael Leónidas Trujillo; el
protagonizado por Luis Miguel Sánchez
Cerro en Perú terminó con once años de
gobierno de Augusto B. Leguía y abrió la
posibilidad de las primeras elecciones li-
bres y competitivas en ese país, elecciones
que −aunque no lograron quebrar el orden
oligárquico− permitieron la creación del pri-
mer partido político de masas, el APRA, con-
trario a Sánchez Cerro; en Brasil, el golpe de
la Alianza Liberal inauguró la larga experien-
cia del Estado Novo de Getúlio Vargas. En
todos estos casos, el denominador común
fue la intervención de las Fuerzas Armadas;
sin embargo, muy distinto es el caso de
Marmaduque Grove en Chile, quien instau-
ró la fugaz experiencia de la "República
Socialista" (entre el 4 y el 16 de junio de
1932). Estos pocos ejemplos evidencian el
significado no unívoco que asume la crisis
política en la región, pero también un pro-
fundo cambio en el orden político, social y
económico. Si bien todos estos cambios se
expresaron en las ciudades, sobre todo en
las capitales, el cambio parecía venir de otros
lados, en principio, de las ciudades del inte-
rior: Sánchez Cerro era de la ciudad de
Arequipa (que, junto con Trujillo y Cuzco,
eran las más importantes del interior del
Perú), Getúlio Vargas era de Rio Grande Do
Sul; Lázaro Cárdenas, de Michoacán. Pero
esto no sólo desde los liderazgos era visible.
EL CRECIMIENTO URBANO
DESMESURADO
Desde la década de 1920, las ciudades capi-
tales habían sido un imán para migrantes
internos. También, objeto de críticas por la
excesiva apropiación de recursos, por el peso
desmesurado en las decisiones políticas y,
además, por ser la imagen de una moderni-
zación macrocéfala y en algún sentido "des-
gajada" de la "nación".
Por ejemplo, en el Perú, en esos años, des-
de las ciudades del interior se impugnó al
orden oligárquico simbolizado por Lima.
Desde comienzos de siglo, la ciudad experi-
mentó un alto nivel de urbanización y un
importante crecimiento demográfico: en
1876 tenía alrededor de 120.000 habitan-
tes; en 1907, 172.927; en 1920, 223.807, y
en 1931 había alcanzado los 376.097. Esto
se debió principalmente a la multiplicación
de las actividades mercantiles y a su carácter
de locus centralizador del poder. Nudo ferro-
viario, asiento de la burocracia estatal y de
T.Margoles/UNESCOPhotobank
1. El mural Mercado de Tlatelolco, de Diego Rivera, 1951, ilustra aspectos de la forma
de vida de los pobladores originarios de México.
2. Emiliano Zapata, líder de una fracción de campesinos durante la Revolución Mexicana.
OASIS
2
1
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 11
12 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES
las autoridades nacionales, centro neurálgi-
co de las actividades comerciales, bancarias
y financieras, era la ciudad más grande del
Perú en un contexto eminentemente rural
(en los años veinte, Arequipa, que la seguía
en importancia, tenía alrededor de 30.000
habitantes; Trujillo, 20.000). Los descentra-
listas arequipeños le criticaron a Lima la
concentración de poder en desmedro de las
provincias; los trujillanos apristas, que la
dictadura de Leguía había favorecido el
capital extranjero en la economía azuca-
rera de la costa norte. Los indigenistas
cuzqueños instalaron uno de los temas re-
currentes en la cultura peruana: la confron-
tación costa-sierra, indio-blanco, represen-
tada por Lima y Cuzco. El antropólogo y
ensayista indigenista Luis Valcárcel, decía
en los años veinte:
En una sociología freudiana estas dos regiones
del Perú representan dos sexos. Feminidad la cos-
ta, masculinismo la sierra. El Cusco y la sierra son
la naturaleza, el ruralismo, lo perenne e indesa-
rraigable. Nada extraño que Lima sea extranjeris-
ta −¡hispanófila!− imitadora de los exotismos,
europeizada; y el Cusco, vernáculo, nacionalista,
castizo, con un rancio orgullo de legítima prosa-
pia americana.
En los años treinta y cuarenta, un movi-
miento social desconocido se precipitó sobre
las ciudades: la presencia masiva del "otro".
Un otro "rural", generalmente campesino,
muchas veces con una lengua "distinta" y
unos patrones culturales "extraños". Frente
a la pauperización de las economías rurales,
la gente se volcó a las ciudades. Si ese proce-
so era lento y casi imperceptible en los años
veinte, luego de la crisis de 1929 pasó a ser
un fenómeno social, colectivo y estructural.
Las ciudades se tiñeron de olores y colores
intensos, de comidas y músicas diversas. A
primera vista −como muchos análisis con-
temporáneos señalaron−, las sociedades pa-
recieron escindidas y "duales".
Las ciudades se volvieron desconocidas
para sus tradicionales moradores. Luis
Alberto Sánchez, al regresar a Lima desde el
exilio, escribió: "Aquella vez de mi tercer
regreso, en 1945, me aturdió el cambio físi-
co de mis conlugareños. Vi muchas mujeres
de ojos oblicuos. Muchos 'injertos'. Muchos
rostros aindiados o simplemente indios".
Además del impacto cultural sobre esas
ciudades "europeas", los migrantes eran
pobres. Expulsados de sus minifunidos, de
las haciendas o plantaciones, los migrantes
En los siglos duros y brutales de la
Colonia germinó un nuevo Perú que
hoy parece muy próximo a su defini-
ción. El pueblo español llegó para
fecundar el Nuevo Mundo, no sólo a
conquistarlo. Con la generosidad sin
par y desenfrenada, propia de su san-
gre y de su espíritu, con violencia cruel
e impaciente redujo al pueblo con-
quistado a la servidumbre, y no dejó
un punto del gran Tahuantinsuyu
donde no hubiera clavado su planta e
impuesto su mandato; pero con la
misma energía y desenfreno, pan y
fruto de su violencia, fecundó a ese
pueblo y multiplicó sobre la nueva
tierra los árboles, las plantas y el rei-
no animal superior de Europa. Pero
los siglos, el medio, el paisaje, la
inmensa mayoría del pueblo sojuzga-
do, modelaron, a pesar de todo, esa
tremenda fuerza. Y los descendientes
lejanos, los peruanos de hoy, han
encontrado que también lo indio es
su estirpe; y como el proceso ha de
seguir, como los elementos determi-
nantes seguirán fluyendo y mandan-
do, acaso más tarde esta estirpe india
podrá ser la dominante.
Pero ha bastado la conciencia de
hoy para que la antigua, la milenaria
ciudad imperial empiece a cobrar su
extinguida categoría espiritual: cen-
tro y símbolo del Perú nuevo.
Y los hombres de las cuatro regio-
nes −el anti, el kolla, el chinche y el
kunti− son los que conocen la historia
y tienen la conciencia del proceso y
del destino de este Perú más peque-
ño. Pero nacidos del centro, del foco
máximo de la cultura inca, esos están
empezando de nuevo a ir en peregri-
nación a la gran ciudad; y a la vista de
ella, a su proximidad, también se des-
cubren, como los indios quechuas, y
al entrar a sus calles lo hacen con la
veneración y el orgullo de los anti-
guos indios, aunque en estos es orgu-
llo y emoción que viene de un espíritu
más alto e iluminado.
[...] en las calles incas, estrechas,
duras y clavadas en la tierra como las
rocas perpendiculares de granito, y su
remate de balcones gráciles y casti-
zos, se funden con humana armonía
lo inca y lo castellano, con profunda
sed, en indisoluble y apasionada uni-
dad estética; las cúpulas y las torres
con muros indios, los escudos blaso-
nados con la piedra imperial de don-
de fueron esculpidos. Y como la voz
de toda esta ciudad hecha de ele-
mentos bárbaramente extraños, uni-
dad de genios, de razas, de mundos
diferentes, fundidos por la obra del
dolor, del tiempo y de la voluntad
humana, una voz áurea de esta nue-
va armonía, en el silencio de la auro-
ra, a las cinco de la madrugada, canta
la gran campana del Cuzco, la "María
Angola", con el oro inca refundido,
hecho voz cristalina e inimitable.
Porque cuando ella canta a esa hora
parece que fuera realmente la voz de
los aukis lejanos, de las estrellas y del
cielo, de la ancha quebrada oscura,
de las calles vacías, y del propio cora-
zón sensible de quien la escucha, del
espíritu transido o exaltado de quien
bajo la gran ciudad ha esperado has-
ta el alba.
José María Arguedas: Señores e indios.
Acerca de la cultura quechua,
Buenos Aires, Arca/Calicanto, 1976.
SEÑORES E INDIOS
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 12
13ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS
internos buscaban en las ciudades trabajo,
oportunidades, ascenso social. Ellos también
tenían las imágenes de abundancia y progre-
so que las elites habían forjado sobre los cen-
tros urbanos y pretendían participar de sus
beneficios.
¿De qué realidades laborales venían? Aquí
la circunstancia de nuestro país o del Uruguay
no es representativa de la región. En Chile
todavía existía el "inquilinaje"; en México
aún había "peones acasillados"; en Bolivia,
"pongos"; en Perú, yanaconas; en Ecuador,
huasipungos; en Brasil aún perduraban dis-
tintas formas de colonato. ¿Qué tienen en
común estas relaciones de trabajo? No son
asalariadas, o no principalmente. Por añadi-
dura, esas formas de trabajo iban acompaña-
das de micromundos, en los que el prebenda-
lismo, el patrimonialismo y el personalismo
de hacendados, plantadores, mayordomos y
propietarios atravesaban el conjunto de las
relaciones sociales y de poder.
Rotos, pelados, huasipungos, cholos, cabe-
citas negras, caipiras rodeaban unas ciuda-
des que no podían albergarlos ni como fuer-
za de trabajo ni como habitantes dignos, y
tampoco como ciudadanos. Favelas, callam-
pas, vecindades, pueblos jóvenes, villas mise-
ria, cantegriles poblaron los cordones de las
ciudades en Río de Janeiro, Santiago de
Chile, Lima, Buenos Aires, Montevideo, y en
poco tiempo formaron parte inescindible de
ellas. Parecían brotar "como hongos" (ese es
el significado de la palabra callampa).
El incremento de la población urbana fue
casi geométrico. En 1900, sólo diez ciudades
latinoamericanas superaban los 100.000
habitantes. Hacia 1940, Buenos Aires,
México, Río de Janeiro y San Pablo supera-
ban el millón; Santiago de Chile estaba cerca
de esa cifra, pero, además, Lima, Monte-
video y Rosario superaban los 500.000
habitantes y once ciudades superaban los
200.000 (Recife, Salvador y Porto Alegre en
Brasil; Avellaneda, Córdoba y La Plata en la
Argentina; Guadalajara en México; La Paz en
Bolivia; Bogotá en Colombia; Caracas en
Venezuela, y Valparaíso en Chile).
Las ciudades se extendieron geográfica-
mente hacia pueblos o "suburbios" circun-
dantes. Por ejemplo, el área urbana de
Santiago de Chile abarcaba hacia 1930 unas
6.500 hectáreas; treinta años después,
20.000. La rivera este del río Mapocho se
pobló de callampas. El primer censo de
viviendas de 1952 arrojó datos alarmantes:
el 15 % de la población de la ciudad (alrede-
dor de 200.000 personas) eran ocupantes de
hecho y sus asentamientos sufrían el 54 %
del déficit de agua potable y el 57 % del
déficit de alcantarillado. Una situación simi-
lar ocurrió en San Pablo, que había crecido
vertiginosamente desde fines del siglo XIX
por la expansión de la economía cafetalera y
la inmigración promovida desde el Estado.
En 1895, su población era de 130.000 habi-
tantes (de los cuales 71.000 eran extranje-
ros); en 1900 llegó a 239.000 y en 1950, a
2.660.000 habitantes. Después de la Primera
Guerra Mundial, y mucho más en la década
de 1930, se transformó en el área más in-
dustrializada de Brasil y de América Latina
(generaba más del 50 % de la producción
industrial del país). En los años cuarenta fue
marcada por una intervención urbanística sin
AGN
Habitación familiar de un conventillo porteño (ca. 1910).
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 13
14 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES
precedentes, sobre todo a partir del "Plan
Avenidas", que abría accesos rápidos de cir-
culación a orillas de los ríos para atender los
intereses de una industria automotriz cada
vez más pujante. La ciudad creció de manera
desordenada hacia la periferia, lo que generó
una grave crisis habitacional y una creciente
especulación inmobiliaria en la zona central.
En los cincuenta comenzó un proceso de
desconcentración del parque industrial que
se transfirió a otros municipios del área
metropolitana (el ABC paulista, Guarulhos) y
hacia el interior del Estado (Campinas, por
ejemplo). San Pablo ha sido históricamente
un polo de atracción de inmigrantes y, des-
pués de 1930, de migrantes internos, sobre
todo nordestinos. Paradójicamente, hoy San
Pablo es la ciudad "nordestina" más grande
de Brasil: en ella hay más nordestinos que en
Sergipe, la ciudad más grande del nordeste
brasileño.
Por su parte, la ciudad de México creció
desde los años cincuenta a razón de 36
metros cuadrados diarios: en 1940 ocupaba
11.783 hectáreas; en 1988, 125.000. El Dis-
trito Federal se ha extendido sobre todo el
valle de México. ¿Cómo surgen las vecinda-
des? Según Carlos Monsiváis "a un terreno
baldío acuden veinte o treinta familias que se
instalan como pueden en chozas precarias a
las que por cariño les dicen casa, con piso de
tierra y paredes de cartón. El líder les exige
dinero para tratar con las autoridades; los
colonos entregan lo que pueden; el líder va
con el funcionario y le grita recordándole los
derechos del pueblo [...] y el tiempo pasa y, si
no hay desalojos violentos, veinte o treinta
años después han conseguido una o dos
escuelas, una iglesia [...] agua potable, luz
eléctrica y algún otro atributo urbano".
El Distrito Federal mexicano (que hoy tie-
ne más o menos la misma cantidad de habi-
tantes que toda Venezuela), enfrenta serios
desafíos: la polución ambiental (para la que
se han imaginado innumerables soluciones,
hasta hacer una "ventana" en la montaña
Ajusco), el constante problema habitacional
y la falta de agua potable (hay algunas esti-
maciones que sostienen que el 70 % de los
niños ya nace con plomo en la sangre).
Lcleite/AE
Vista aérea de una de las grandes avenidas
que cruzan la ciudad de San Pablo, Brasil.
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 14
15ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS
derechos. El Estado, que desde los años
treinta había asumido un papel interven-
cionista y empresario en el orden económi-
co, también intervendría en el orden social,
movimiento que se hacía más visible en las
ciudades.
Hacia finales de los años treinta, durante
el período del Estado Novo, Getúlio Vargas
extendió derechos de jubilación, salario
mínimo y obras sociales a los obreros indus-
triales y del sector servicios que estuvieran
sindicalizados, pero excluyó a los campesi-
nos. La ciudadanía social precedió a la ciu-
dadanía política, es decir, antes de poder
votar, los obreros estuvieron incorporados
CIUDADES Y CIUDADANOS
De pronto pareció que había mucha
más gente, que se movía, que se movía
más, que gritaba más, que tenía más
iniciativa; más gente que abandonaba
la pasividad y demostraba que estaba
dispuesta a participar como fuera en la
vida colectiva.
José Luis Romero.
La sola presencia numérica de los migrantes
en las ciudades no implicó un registro auto-
mático por parte del poder político.
Los migrantes pidieron inclusión, sobre
todo en el plano social. Los sectores obre-
ros se organizaron y presionaron por sus
Masiva movilización en reclamo de la libertad del general Perón en la Plaza de Mayo, en Buenos Aires, el 17 de octubre de 1945.
AGN
Cárdenas, presidente de México, decreta
la nacionalización del petróleo el 23 de
marzo de 1938.
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 15
16 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES
El 23 de marzo de 1938, alrededor de
250.000 personas se concentraron en el
zócalo de la Ciudad de México para de-
mostrar su respaldo al decreto del presi-
dente Cárdenas sobre la nacionalización
del petróleo. Esa adhesión se explicaba en
el contexto de otras medidas, sobre todo,
la reforma agraria. Los 400.000 reemigra-
dos a México desde los Estados Unidos y
la caída de las economías mineras (sobre
todo la de la mina de plata de Guanajuato)
impusieron una fuerte presión sobre las
ciudades. Si bien el derecho a la tierra
estaba reconocido en la constitución revo-
lucionaria de 1917, no fue sino con el
reparto ejidal de Cárdenas que se rees-
tructuró el sistema de tenencia de la tierra
en México.
Pero no sólo las experiencias populistas
dieron respuestas a las demandas sociales.
Los gobiernos del Frente Popular en Chile
a partir de 1938 ampliaron derechos socia-
les a los trabajadores mineros y urbanos,
no así a los trabajadores rurales. En el cam-
po siguió existiendo (hasta la reforma agra-
ria de 1964) la "ley de trabas" que prohi-
bía la sindicalización campesina y los excluía
de los derechos.
Gente en las ciudades, ciudadanía y dere-
chos. ¿Será la razón por la que −desde en-
tonces− las ciudades latinoamericanas no
terminan de crecer?
por la vía de los derechos sociales. Para
votar había que ser alfabeto, y muy pocos
lo eran. Sin embargo, hacia 1945, los mis-
mos sindicatos del ABC paulista incluyeron
a los trabajadores (alfabetos y analfabetos)
en los registros electorales a través de las
planillas de cobro de sus salarios en las fábri-
cas. "Queremos Getúlio" fue su consigna,
quien regresó al poder en 1950.
Otro tanto ocurrió el 17 de octubre de
1945, cuando los obreros de la periferia
de la ciudad de Buenos Aires se traslada-
ron a la Plaza de Mayo para pedir por la
libertad de Juan Domingo Perón. No fue
poca la sorpresa. Los opositores hablaron
de "aluvión zoológico".
Bibliografía
AA.VV.: Grandes metrópolis de América Latina, San Pablo, Fundación
Memorial de América Latina y Fondo de Cultura Económica, 1993.
Anderson, Benedict: Comunidades imaginadas. Reflexiones sobre el
origen y la difusión del nacionalismo, México, FCE, 1993.
Arguedas, José María: Señores e indios. Acerca de la cultura quechua,
Buenos Aires, ARCA/CALICANTO, 1976.
Burga, Manuel y Alberto Flores Galindo: Apogeo y crisis de la República
Aristocrática, Lima, Rikhay, 1980.
Carvalho, José Murilo de: La formación de las almas. Imaginario de la
República en el Brasil, Quilmes, Universidad Nacional de Quilmes, 1997.
Funes, Patricia: "Literatura y nación en tiempos del Centenario", en:
Gerardo Caetano (dir.), Los uruguayos del Centenario. Nación, ciuda
danía, religión y educación (1910-1930), Montevideo, Taurus, 2000.
García Canclini, Néstor: Culturas híbridas. Estrategias para entrar y salir
de la modernidad, México, Grijalbo, 1989.
Gutman, Margarita y Thomas Reese (eds.): Buenos Aires 1910. El imagina-
rio para una gran capital, Buenos Aires, EUDEBA, 1999.
Morse, Richard y Jorge Hardoy (comps.): Cultura urbana latinoamericana,
Buenos Aires, CLACSO, 1985.
Rama, Ángel: Las máscaras democráticas del modernismo, Montevideo,
Arca, 1994.
Roberts, Bryan: Ciudades de campesinos. La economía política de la urba-
nización en el Tercer Mundo, México, Siglo XXI, 1980.
Romero, José Luis: Latinoamérica, las ciudades y las ideas, Buenos Aires,
Siglo XXI, 2001.
Sánchez, Luis Alberto: El Perú: retrato de un país adolescente, Lima,
PEISA, 1973.
Williams, Raymond: El campo y la ciudad, Buenos Aires, Paidós, 2001.
Página web
www.Tierramerica.net/ciudades
Agradecimientos
El equipo de Publicaciones de la Dirección Nacional de Gestión Curricular y
Formación Docente agradece a las siguientes instituciones y personas por
permitirnos reproducir material fotográfico y colaborar en la documenta-
ción de imágenes: UNESCO Photobank; OASIS Photobank; Biblioteca
Francisco Xavier Crivejo (México); Agencia Estado (Brasil); Biblioteca del
Congreso de la Nación Argentina; Archivo General de la Nación Argentina;
Renato Luiz Ferrerira, de Agencia Estado (Brasil).
Coordinadora del Área de Ciencias
Sociales, Lic. Raquel Gurevich
Coordinadora del Área de Desarrollo
Profesional, Lic. Silvia Storino
Coordinadora del Programa de
Capacitación Explora, Lic. Viviana Celso
Coordinadora de Publicaciones,
Lic. Raquel Franco
Coordinación y documentación,
Lic. Rafael Blanco
Edición, Lic. Gonzalo Blanco
Diseño y diagramación,
DG María Eugenia Más
Corrección, Norma A. Sosa Pereyra
www.me.gov.ar
Ministro de Educación, Ciencia y Tecnología, Lic. Daniel Filmus
Secretario de Educación, Lic. Juan Carlos Tedesco
Subsecretaria de Equidad y Calidad, Lic. Alejandra Birgin
Directora Nacional de Gestión Curricular y Formación Docente,
Lic. Laura Pitman
udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 16

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

Ciudad moderna y contemporánea
Ciudad moderna y contemporáneaCiudad moderna y contemporánea
Ciudad moderna y contemporánealachegon
 
Historia 4 movimientos arquitectónicos en europa y norteamérica
Historia 4 movimientos arquitectónicos en europa y norteaméricaHistoria 4 movimientos arquitectónicos en europa y norteamérica
Historia 4 movimientos arquitectónicos en europa y norteaméricaChristy Andrew
 
ciudad industrial, características y su relevancia en el urbanismo
 ciudad industrial, características y su relevancia en el urbanismo ciudad industrial, características y su relevancia en el urbanismo
ciudad industrial, características y su relevancia en el urbanismoArantxa Meneses
 
La arquitectura de la postguerra y el modernismo
La arquitectura de la postguerra y el modernismoLa arquitectura de la postguerra y el modernismo
La arquitectura de la postguerra y el modernismofrancisco gomez ruiz
 
ciudades jardín.pdf
ciudades jardín.pdfciudades jardín.pdf
ciudades jardín.pdfAna Gonzalez
 
Diseño urbano (2er parte)
Diseño urbano (2er parte)Diseño urbano (2er parte)
Diseño urbano (2er parte)Mireya Morales
 
Racionalismo y Organicismo Arquitectónico
Racionalismo y Organicismo ArquitectónicoRacionalismo y Organicismo Arquitectónico
Racionalismo y Organicismo ArquitectónicoMiguel Romero Jurado
 
Carta de atenas
Carta de atenasCarta de atenas
Carta de atenasROSS13
 
Análise da Biblioteca Jose Vasconcelos, Cidade do México
Análise da Biblioteca Jose Vasconcelos, Cidade do MéxicoAnálise da Biblioteca Jose Vasconcelos, Cidade do México
Análise da Biblioteca Jose Vasconcelos, Cidade do MéxicoNayara Chiochetta
 
Movimiento moderno en america latina.pdf
Movimiento moderno en america latina.pdfMovimiento moderno en america latina.pdf
Movimiento moderno en america latina.pdforlenyguillen
 
Plan Cerdá (Barcelona) - Bruno Ramírez Santacruz
Plan Cerdá (Barcelona)  - Bruno Ramírez SantacruzPlan Cerdá (Barcelona)  - Bruno Ramírez Santacruz
Plan Cerdá (Barcelona) - Bruno Ramírez SantacruzFabiola Aranda
 
Partido arquitectónico
Partido arquitectónicoPartido arquitectónico
Partido arquitectónicoMigue Speroni
 
Programa Arquitectónico de una Escuela Primaria
Programa Arquitectónico de una Escuela PrimariaPrograma Arquitectónico de una Escuela Primaria
Programa Arquitectónico de una Escuela PrimariaPaulino De Jesus Apellidos
 
La Ampliación de Vienna
La Ampliación de ViennaLa Ampliación de Vienna
La Ampliación de ViennaBruna Paz
 

La actualidad más candente (20)

Ciudad moderna y contemporánea
Ciudad moderna y contemporáneaCiudad moderna y contemporánea
Ciudad moderna y contemporánea
 
Supermodernismo.
Supermodernismo.Supermodernismo.
Supermodernismo.
 
Historia 4 movimientos arquitectónicos en europa y norteamérica
Historia 4 movimientos arquitectónicos en europa y norteaméricaHistoria 4 movimientos arquitectónicos en europa y norteamérica
Historia 4 movimientos arquitectónicos en europa y norteamérica
 
Plan cerda
Plan cerda  Plan cerda
Plan cerda
 
Alvar aalto
Alvar aaltoAlvar aalto
Alvar aalto
 
ciudad industrial, características y su relevancia en el urbanismo
 ciudad industrial, características y su relevancia en el urbanismo ciudad industrial, características y su relevancia en el urbanismo
ciudad industrial, características y su relevancia en el urbanismo
 
La arquitectura de la postguerra y el modernismo
La arquitectura de la postguerra y el modernismoLa arquitectura de la postguerra y el modernismo
La arquitectura de la postguerra y el modernismo
 
ciudades jardín.pdf
ciudades jardín.pdfciudades jardín.pdf
ciudades jardín.pdf
 
Diseño urbano (2er parte)
Diseño urbano (2er parte)Diseño urbano (2er parte)
Diseño urbano (2er parte)
 
Racionalismo y Organicismo Arquitectónico
Racionalismo y Organicismo ArquitectónicoRacionalismo y Organicismo Arquitectónico
Racionalismo y Organicismo Arquitectónico
 
Carta de atenas
Carta de atenasCarta de atenas
Carta de atenas
 
Arquitectura Peruana -Miraflores
Arquitectura Peruana -MirafloresArquitectura Peruana -Miraflores
Arquitectura Peruana -Miraflores
 
Análise da Biblioteca Jose Vasconcelos, Cidade do México
Análise da Biblioteca Jose Vasconcelos, Cidade do MéxicoAnálise da Biblioteca Jose Vasconcelos, Cidade do México
Análise da Biblioteca Jose Vasconcelos, Cidade do México
 
Movimiento moderno en america latina.pdf
Movimiento moderno en america latina.pdfMovimiento moderno en america latina.pdf
Movimiento moderno en america latina.pdf
 
Plan Cerdá (Barcelona) - Bruno Ramírez Santacruz
Plan Cerdá (Barcelona)  - Bruno Ramírez SantacruzPlan Cerdá (Barcelona)  - Bruno Ramírez Santacruz
Plan Cerdá (Barcelona) - Bruno Ramírez Santacruz
 
Partido arquitectónico
Partido arquitectónicoPartido arquitectónico
Partido arquitectónico
 
Programa Arquitectónico de una Escuela Primaria
Programa Arquitectónico de una Escuela PrimariaPrograma Arquitectónico de una Escuela Primaria
Programa Arquitectónico de una Escuela Primaria
 
La Ampliación de Vienna
La Ampliación de ViennaLa Ampliación de Vienna
La Ampliación de Vienna
 
Parc La Villette
Parc La VilletteParc La Villette
Parc La Villette
 
Urbanismo neoclásico
Urbanismo neoclásicoUrbanismo neoclásico
Urbanismo neoclásico
 

Similar a Algunas aproximaciones a las ciudades latinoamericanas.

Cssoc04 algunas-aproximaciones-a-las-ciudades1
Cssoc04 algunas-aproximaciones-a-las-ciudades1Cssoc04 algunas-aproximaciones-a-las-ciudades1
Cssoc04 algunas-aproximaciones-a-las-ciudades1ISFD N° 117
 
4°MDif -La ciudad moderna
4°MDif -La ciudad moderna4°MDif -La ciudad moderna
4°MDif -La ciudad modernaXimena Prado
 
Presentación Urbanismo I MARIA MARCHAN.pdf
Presentación Urbanismo I MARIA MARCHAN.pdfPresentación Urbanismo I MARIA MARCHAN.pdf
Presentación Urbanismo I MARIA MARCHAN.pdfMariaVictoriaMarchan2
 
ESPACIO PÚBLICO Y PAISAJE CULTURAL, Del Mega-equipamiento a la Chiwiña
ESPACIO PÚBLICO Y PAISAJE CULTURAL, Del Mega-equipamiento a la ChiwiñaESPACIO PÚBLICO Y PAISAJE CULTURAL, Del Mega-equipamiento a la Chiwiña
ESPACIO PÚBLICO Y PAISAJE CULTURAL, Del Mega-equipamiento a la ChiwiñaRamiro Zalles
 
Breve historia de Bogotá
Breve historia de BogotáBreve historia de Bogotá
Breve historia de Bogotáquebradasusaquen
 
Origenes del urbanismo novohispano
Origenes del urbanismo novohispanoOrigenes del urbanismo novohispano
Origenes del urbanismo novohispanoCi Sánchez
 
Grecia, Roma, Ciudad Medieval, Ciudad Bizantina, Ciudad Renacentista y Ciudad...
Grecia, Roma, Ciudad Medieval, Ciudad Bizantina, Ciudad Renacentista y Ciudad...Grecia, Roma, Ciudad Medieval, Ciudad Bizantina, Ciudad Renacentista y Ciudad...
Grecia, Roma, Ciudad Medieval, Ciudad Bizantina, Ciudad Renacentista y Ciudad...PaolaBarreto23
 
Cruz ortega, la ciudad. urbanismo.
Cruz ortega, la ciudad. urbanismo.Cruz ortega, la ciudad. urbanismo.
Cruz ortega, la ciudad. urbanismo.Cruz Ortega Sucre
 
Tema 2 frenando chueca goita
Tema 2 frenando chueca goitaTema 2 frenando chueca goita
Tema 2 frenando chueca goitaGABRIEL COCA
 
Ciudad Hispanoamericana. Estudios Urbanos.
Ciudad Hispanoamericana. Estudios Urbanos.Ciudad Hispanoamericana. Estudios Urbanos.
Ciudad Hispanoamericana. Estudios Urbanos.Scarlett Velasquez
 
La ciudad y sus origenes
La ciudad y sus origenesLa ciudad y sus origenes
La ciudad y sus origenesEdith Vivas
 
Ciudad en la actualidad
Ciudad en la actualidadCiudad en la actualidad
Ciudad en la actualidadAlbanyGodoy
 
Origen de las ciudades hasta actualidad
Origen de las ciudades hasta actualidadOrigen de las ciudades hasta actualidad
Origen de las ciudades hasta actualidadArantxa Meneses
 
Johan rodriguez
Johan rodriguezJohan rodriguez
Johan rodriguezjohanr94
 
Geografía Urbana
Geografía UrbanaGeografía Urbana
Geografía UrbanaAna Rey
 

Similar a Algunas aproximaciones a las ciudades latinoamericanas. (20)

El proceso de urbanización.
El proceso de urbanización.El proceso de urbanización.
El proceso de urbanización.
 
Cssoc04 algunas-aproximaciones-a-las-ciudades1
Cssoc04 algunas-aproximaciones-a-las-ciudades1Cssoc04 algunas-aproximaciones-a-las-ciudades1
Cssoc04 algunas-aproximaciones-a-las-ciudades1
 
4°MDif -La ciudad moderna
4°MDif -La ciudad moderna4°MDif -La ciudad moderna
4°MDif -La ciudad moderna
 
La Ciudad Moderna
La Ciudad ModernaLa Ciudad Moderna
La Ciudad Moderna
 
Presentación Urbanismo I MARIA MARCHAN.pdf
Presentación Urbanismo I MARIA MARCHAN.pdfPresentación Urbanismo I MARIA MARCHAN.pdf
Presentación Urbanismo I MARIA MARCHAN.pdf
 
ESPACIO PÚBLICO Y PAISAJE CULTURAL, Del Mega-equipamiento a la Chiwiña
ESPACIO PÚBLICO Y PAISAJE CULTURAL, Del Mega-equipamiento a la ChiwiñaESPACIO PÚBLICO Y PAISAJE CULTURAL, Del Mega-equipamiento a la Chiwiña
ESPACIO PÚBLICO Y PAISAJE CULTURAL, Del Mega-equipamiento a la Chiwiña
 
Urbanismo
UrbanismoUrbanismo
Urbanismo
 
Breve historia de Bogotá
Breve historia de BogotáBreve historia de Bogotá
Breve historia de Bogotá
 
Origenes del urbanismo novohispano
Origenes del urbanismo novohispanoOrigenes del urbanismo novohispano
Origenes del urbanismo novohispano
 
Grecia, Roma, Ciudad Medieval, Ciudad Bizantina, Ciudad Renacentista y Ciudad...
Grecia, Roma, Ciudad Medieval, Ciudad Bizantina, Ciudad Renacentista y Ciudad...Grecia, Roma, Ciudad Medieval, Ciudad Bizantina, Ciudad Renacentista y Ciudad...
Grecia, Roma, Ciudad Medieval, Ciudad Bizantina, Ciudad Renacentista y Ciudad...
 
La cuidad
La cuidadLa cuidad
La cuidad
 
Cruz ortega, la ciudad. urbanismo.
Cruz ortega, la ciudad. urbanismo.Cruz ortega, la ciudad. urbanismo.
Cruz ortega, la ciudad. urbanismo.
 
Tema 2 frenando chueca goita
Tema 2 frenando chueca goitaTema 2 frenando chueca goita
Tema 2 frenando chueca goita
 
Ciudad Hispanoamericana. Estudios Urbanos.
Ciudad Hispanoamericana. Estudios Urbanos.Ciudad Hispanoamericana. Estudios Urbanos.
Ciudad Hispanoamericana. Estudios Urbanos.
 
La ciudad y sus origenes
La ciudad y sus origenesLa ciudad y sus origenes
La ciudad y sus origenes
 
Ciudad en la actualidad
Ciudad en la actualidadCiudad en la actualidad
Ciudad en la actualidad
 
Origen de las ciudades hasta actualidad
Origen de las ciudades hasta actualidadOrigen de las ciudades hasta actualidad
Origen de las ciudades hasta actualidad
 
Johan rodriguez
Johan rodriguezJohan rodriguez
Johan rodriguez
 
Negros,mulatos cgna
Negros,mulatos cgnaNegros,mulatos cgna
Negros,mulatos cgna
 
Geografía Urbana
Geografía UrbanaGeografía Urbana
Geografía Urbana
 

Más de Pedro Roberto Casanova

TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO EN VETERANOS DE MALVINAS
TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO EN VETERANOS DE MALVINASTRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO EN VETERANOS DE MALVINAS
TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO EN VETERANOS DE MALVINASPedro Roberto Casanova
 
Victor Papanek, Diseñar para el mundo real.
Victor Papanek, Diseñar para el mundo real.Victor Papanek, Diseñar para el mundo real.
Victor Papanek, Diseñar para el mundo real.Pedro Roberto Casanova
 
El problema ético de la identidad digital en la educación virtual
El problema ético de la identidad digital en la educación virtualEl problema ético de la identidad digital en la educación virtual
El problema ético de la identidad digital en la educación virtualPedro Roberto Casanova
 
¿Cómo nos preparamos para Aprender 2017?
¿Cómo nos preparamos para Aprender 2017?¿Cómo nos preparamos para Aprender 2017?
¿Cómo nos preparamos para Aprender 2017?Pedro Roberto Casanova
 
Manual de aplicación secundaria - Aprender 2017
Manual de aplicación secundaria - Aprender 2017Manual de aplicación secundaria - Aprender 2017
Manual de aplicación secundaria - Aprender 2017Pedro Roberto Casanova
 
Manual coordinador de cabecera - Aprender 2017
Manual coordinador de cabecera - Aprender 2017Manual coordinador de cabecera - Aprender 2017
Manual coordinador de cabecera - Aprender 2017Pedro Roberto Casanova
 
Resolución 311/16 CFE, Comunicación conjunta 1/17 y Documento Apoyo 1/17.
Resolución 311/16 CFE, Comunicación conjunta 1/17 y Documento Apoyo 1/17.Resolución 311/16 CFE, Comunicación conjunta 1/17 y Documento Apoyo 1/17.
Resolución 311/16 CFE, Comunicación conjunta 1/17 y Documento Apoyo 1/17.Pedro Roberto Casanova
 
Res. 07/2017 Reglamentación Utilización de Edificios Escolares.
Res. 07/2017 Reglamentación Utilización de Edificios Escolares.Res. 07/2017 Reglamentación Utilización de Edificios Escolares.
Res. 07/2017 Reglamentación Utilización de Edificios Escolares.Pedro Roberto Casanova
 
Desempleo y precariedad laboral en mayores de 45 años. Retos de la formación ...
Desempleo y precariedad laboral en mayores de 45 años. Retos de la formación ...Desempleo y precariedad laboral en mayores de 45 años. Retos de la formación ...
Desempleo y precariedad laboral en mayores de 45 años. Retos de la formación ...Pedro Roberto Casanova
 
CONSTRUCCIÓN PSICOJURÍDICA DE LA FIGURA DE HOMICIDIO EN ESTADO DE EMOCIÓN VIO...
CONSTRUCCIÓN PSICOJURÍDICA DE LA FIGURA DE HOMICIDIO EN ESTADO DE EMOCIÓN VIO...CONSTRUCCIÓN PSICOJURÍDICA DE LA FIGURA DE HOMICIDIO EN ESTADO DE EMOCIÓN VIO...
CONSTRUCCIÓN PSICOJURÍDICA DE LA FIGURA DE HOMICIDIO EN ESTADO DE EMOCIÓN VIO...Pedro Roberto Casanova
 
O.M.S. Informe Mundial sobre la Diabetes.2016
O.M.S. Informe Mundial sobre la Diabetes.2016O.M.S. Informe Mundial sobre la Diabetes.2016
O.M.S. Informe Mundial sobre la Diabetes.2016Pedro Roberto Casanova
 
Registro Oncopediátrico Hospitalario Argentino - 2015
Registro Oncopediátrico Hospitalario  Argentino - 2015Registro Oncopediátrico Hospitalario  Argentino - 2015
Registro Oncopediátrico Hospitalario Argentino - 2015Pedro Roberto Casanova
 
DGCyEComunicacion conjunta ambito domiciliario
DGCyEComunicacion conjunta ambito domiciliarioDGCyEComunicacion conjunta ambito domiciliario
DGCyEComunicacion conjunta ambito domiciliarioPedro Roberto Casanova
 

Más de Pedro Roberto Casanova (20)

Qué es el Síndrome de Tourette
Qué es el Síndrome de TouretteQué es el Síndrome de Tourette
Qué es el Síndrome de Tourette
 
TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO
TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICOTRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO
TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO
 
TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO EN VETERANOS DE MALVINAS
TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO EN VETERANOS DE MALVINASTRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO EN VETERANOS DE MALVINAS
TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO EN VETERANOS DE MALVINAS
 
Resolución Conjunta 1664/2017
Resolución Conjunta 1664/2017Resolución Conjunta 1664/2017
Resolución Conjunta 1664/2017
 
Victor Papanek, Diseñar para el mundo real.
Victor Papanek, Diseñar para el mundo real.Victor Papanek, Diseñar para el mundo real.
Victor Papanek, Diseñar para el mundo real.
 
El problema ético de la identidad digital en la educación virtual
El problema ético de la identidad digital en la educación virtualEl problema ético de la identidad digital en la educación virtual
El problema ético de la identidad digital en la educación virtual
 
¿Cómo nos preparamos para Aprender 2017?
¿Cómo nos preparamos para Aprender 2017?¿Cómo nos preparamos para Aprender 2017?
¿Cómo nos preparamos para Aprender 2017?
 
Manual de aplicación secundaria - Aprender 2017
Manual de aplicación secundaria - Aprender 2017Manual de aplicación secundaria - Aprender 2017
Manual de aplicación secundaria - Aprender 2017
 
Manual coordinador de cabecera - Aprender 2017
Manual coordinador de cabecera - Aprender 2017Manual coordinador de cabecera - Aprender 2017
Manual coordinador de cabecera - Aprender 2017
 
Sindrome Asperger Guía Profesorado
Sindrome Asperger Guía ProfesoradoSindrome Asperger Guía Profesorado
Sindrome Asperger Guía Profesorado
 
Trastorno Obsesivo Compulsivo T.O.C.
Trastorno Obsesivo Compulsivo T.O.C.Trastorno Obsesivo Compulsivo T.O.C.
Trastorno Obsesivo Compulsivo T.O.C.
 
Resolución 311/16 CFE, Comunicación conjunta 1/17 y Documento Apoyo 1/17.
Resolución 311/16 CFE, Comunicación conjunta 1/17 y Documento Apoyo 1/17.Resolución 311/16 CFE, Comunicación conjunta 1/17 y Documento Apoyo 1/17.
Resolución 311/16 CFE, Comunicación conjunta 1/17 y Documento Apoyo 1/17.
 
Docentes que dejan huella.
Docentes que dejan huella.Docentes que dejan huella.
Docentes que dejan huella.
 
Res. 07/2017 Reglamentación Utilización de Edificios Escolares.
Res. 07/2017 Reglamentación Utilización de Edificios Escolares.Res. 07/2017 Reglamentación Utilización de Edificios Escolares.
Res. 07/2017 Reglamentación Utilización de Edificios Escolares.
 
Desempleo y precariedad laboral en mayores de 45 años. Retos de la formación ...
Desempleo y precariedad laboral en mayores de 45 años. Retos de la formación ...Desempleo y precariedad laboral en mayores de 45 años. Retos de la formación ...
Desempleo y precariedad laboral en mayores de 45 años. Retos de la formación ...
 
CONSTRUCCIÓN PSICOJURÍDICA DE LA FIGURA DE HOMICIDIO EN ESTADO DE EMOCIÓN VIO...
CONSTRUCCIÓN PSICOJURÍDICA DE LA FIGURA DE HOMICIDIO EN ESTADO DE EMOCIÓN VIO...CONSTRUCCIÓN PSICOJURÍDICA DE LA FIGURA DE HOMICIDIO EN ESTADO DE EMOCIÓN VIO...
CONSTRUCCIÓN PSICOJURÍDICA DE LA FIGURA DE HOMICIDIO EN ESTADO DE EMOCIÓN VIO...
 
O.M.S. Informe Mundial sobre la Diabetes.2016
O.M.S. Informe Mundial sobre la Diabetes.2016O.M.S. Informe Mundial sobre la Diabetes.2016
O.M.S. Informe Mundial sobre la Diabetes.2016
 
Registro Oncopediátrico Hospitalario Argentino - 2015
Registro Oncopediátrico Hospitalario  Argentino - 2015Registro Oncopediátrico Hospitalario  Argentino - 2015
Registro Oncopediátrico Hospitalario Argentino - 2015
 
Gente Tóxica...
Gente Tóxica...Gente Tóxica...
Gente Tóxica...
 
DGCyEComunicacion conjunta ambito domiciliario
DGCyEComunicacion conjunta ambito domiciliarioDGCyEComunicacion conjunta ambito domiciliario
DGCyEComunicacion conjunta ambito domiciliario
 

Último

Los Nueve Principios del Desempeño de la Sostenibilidad
Los Nueve Principios del Desempeño de la SostenibilidadLos Nueve Principios del Desempeño de la Sostenibilidad
Los Nueve Principios del Desempeño de la SostenibilidadJonathanCovena1
 
Fisiologia.Articular. 3 Kapandji.6a.Ed.pdf
Fisiologia.Articular. 3 Kapandji.6a.Ed.pdfFisiologia.Articular. 3 Kapandji.6a.Ed.pdf
Fisiologia.Articular. 3 Kapandji.6a.Ed.pdfcoloncopias5
 
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdfRAMON EUSTAQUIO CARO BAYONA
 
Monitoreo a los coordinadores de las IIEE JEC_28.02.2024.vf.pptx
Monitoreo a los coordinadores de las IIEE JEC_28.02.2024.vf.pptxMonitoreo a los coordinadores de las IIEE JEC_28.02.2024.vf.pptx
Monitoreo a los coordinadores de las IIEE JEC_28.02.2024.vf.pptxJUANCARLOSAPARCANARE
 
TUTORIA II - CIRCULO DORADO UNIVERSIDAD CESAR VALLEJO
TUTORIA II - CIRCULO DORADO UNIVERSIDAD CESAR VALLEJOTUTORIA II - CIRCULO DORADO UNIVERSIDAD CESAR VALLEJO
TUTORIA II - CIRCULO DORADO UNIVERSIDAD CESAR VALLEJOweislaco
 
PROGRAMACION ANUAL DE MATEMATICA 2024.docx
PROGRAMACION ANUAL DE MATEMATICA 2024.docxPROGRAMACION ANUAL DE MATEMATICA 2024.docx
PROGRAMACION ANUAL DE MATEMATICA 2024.docxEribertoPerezRamirez
 
Secuencia didáctica.DOÑA CLEMENTINA.2024.docx
Secuencia didáctica.DOÑA CLEMENTINA.2024.docxSecuencia didáctica.DOÑA CLEMENTINA.2024.docx
Secuencia didáctica.DOÑA CLEMENTINA.2024.docxNataliaGonzalez619348
 
4º SOY LECTOR PART2- MD EDUCATIVO.p df PARTE
4º SOY LECTOR PART2- MD  EDUCATIVO.p df PARTE4º SOY LECTOR PART2- MD  EDUCATIVO.p df PARTE
4º SOY LECTOR PART2- MD EDUCATIVO.p df PARTESaraNolasco4
 
Contextualización y aproximación al objeto de estudio de investigación cualit...
Contextualización y aproximación al objeto de estudio de investigación cualit...Contextualización y aproximación al objeto de estudio de investigación cualit...
Contextualización y aproximación al objeto de estudio de investigación cualit...Angélica Soledad Vega Ramírez
 
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicial
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación iniciallibro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicial
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicialLorenaSanchez350426
 
VOLUMEN 1 COLECCION PRODUCCION BOVINA . SERIE SANIDAD ANIMAL
VOLUMEN 1 COLECCION PRODUCCION BOVINA . SERIE SANIDAD ANIMALVOLUMEN 1 COLECCION PRODUCCION BOVINA . SERIE SANIDAD ANIMAL
VOLUMEN 1 COLECCION PRODUCCION BOVINA . SERIE SANIDAD ANIMALEDUCCUniversidadCatl
 
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024Rosabel UA
 
Día de la Madre Tierra-1.pdf día mundial
Día de la Madre Tierra-1.pdf día mundialDía de la Madre Tierra-1.pdf día mundial
Día de la Madre Tierra-1.pdf día mundialpatriciaines1993
 
cuadernillo de lectoescritura para niños de básica
cuadernillo de lectoescritura para niños de básicacuadernillo de lectoescritura para niños de básica
cuadernillo de lectoescritura para niños de básicaGianninaValeskaContr
 
Fichas de Matemática DE SEGUNDO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de Matemática DE SEGUNDO DE SECUNDARIA.pdfFichas de Matemática DE SEGUNDO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de Matemática DE SEGUNDO DE SECUNDARIA.pdfssuser50d1252
 
Manejo del Dengue, generalidades, actualización marzo 2024 minsa
Manejo del Dengue, generalidades, actualización marzo 2024 minsaManejo del Dengue, generalidades, actualización marzo 2024 minsa
Manejo del Dengue, generalidades, actualización marzo 2024 minsaLuis Minaya
 
sesión de aprendizaje 4 E1 Exposición oral.pdf
sesión de aprendizaje 4 E1 Exposición oral.pdfsesión de aprendizaje 4 E1 Exposición oral.pdf
sesión de aprendizaje 4 E1 Exposición oral.pdfpatriciavsquezbecerr
 

Último (20)

Los Nueve Principios del Desempeño de la Sostenibilidad
Los Nueve Principios del Desempeño de la SostenibilidadLos Nueve Principios del Desempeño de la Sostenibilidad
Los Nueve Principios del Desempeño de la Sostenibilidad
 
Fisiologia.Articular. 3 Kapandji.6a.Ed.pdf
Fisiologia.Articular. 3 Kapandji.6a.Ed.pdfFisiologia.Articular. 3 Kapandji.6a.Ed.pdf
Fisiologia.Articular. 3 Kapandji.6a.Ed.pdf
 
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf
05 Fenomenos fisicos y quimicos de la materia.pdf
 
Monitoreo a los coordinadores de las IIEE JEC_28.02.2024.vf.pptx
Monitoreo a los coordinadores de las IIEE JEC_28.02.2024.vf.pptxMonitoreo a los coordinadores de las IIEE JEC_28.02.2024.vf.pptx
Monitoreo a los coordinadores de las IIEE JEC_28.02.2024.vf.pptx
 
TUTORIA II - CIRCULO DORADO UNIVERSIDAD CESAR VALLEJO
TUTORIA II - CIRCULO DORADO UNIVERSIDAD CESAR VALLEJOTUTORIA II - CIRCULO DORADO UNIVERSIDAD CESAR VALLEJO
TUTORIA II - CIRCULO DORADO UNIVERSIDAD CESAR VALLEJO
 
PROGRAMACION ANUAL DE MATEMATICA 2024.docx
PROGRAMACION ANUAL DE MATEMATICA 2024.docxPROGRAMACION ANUAL DE MATEMATICA 2024.docx
PROGRAMACION ANUAL DE MATEMATICA 2024.docx
 
Secuencia didáctica.DOÑA CLEMENTINA.2024.docx
Secuencia didáctica.DOÑA CLEMENTINA.2024.docxSecuencia didáctica.DOÑA CLEMENTINA.2024.docx
Secuencia didáctica.DOÑA CLEMENTINA.2024.docx
 
4º SOY LECTOR PART2- MD EDUCATIVO.p df PARTE
4º SOY LECTOR PART2- MD  EDUCATIVO.p df PARTE4º SOY LECTOR PART2- MD  EDUCATIVO.p df PARTE
4º SOY LECTOR PART2- MD EDUCATIVO.p df PARTE
 
Contextualización y aproximación al objeto de estudio de investigación cualit...
Contextualización y aproximación al objeto de estudio de investigación cualit...Contextualización y aproximación al objeto de estudio de investigación cualit...
Contextualización y aproximación al objeto de estudio de investigación cualit...
 
VISITA À PROTEÇÃO CIVIL _
VISITA À PROTEÇÃO CIVIL                  _VISITA À PROTEÇÃO CIVIL                  _
VISITA À PROTEÇÃO CIVIL _
 
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicial
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación iniciallibro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicial
libro para colorear de Peppa pig, ideal para educación inicial
 
VOLUMEN 1 COLECCION PRODUCCION BOVINA . SERIE SANIDAD ANIMAL
VOLUMEN 1 COLECCION PRODUCCION BOVINA . SERIE SANIDAD ANIMALVOLUMEN 1 COLECCION PRODUCCION BOVINA . SERIE SANIDAD ANIMAL
VOLUMEN 1 COLECCION PRODUCCION BOVINA . SERIE SANIDAD ANIMAL
 
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024
Actividad transversal 2-bloque 2. Actualización 2024
 
Día de la Madre Tierra-1.pdf día mundial
Día de la Madre Tierra-1.pdf día mundialDía de la Madre Tierra-1.pdf día mundial
Día de la Madre Tierra-1.pdf día mundial
 
recursos naturales america cuarto basico
recursos naturales america cuarto basicorecursos naturales america cuarto basico
recursos naturales america cuarto basico
 
cuadernillo de lectoescritura para niños de básica
cuadernillo de lectoescritura para niños de básicacuadernillo de lectoescritura para niños de básica
cuadernillo de lectoescritura para niños de básica
 
Fichas de Matemática DE SEGUNDO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de Matemática DE SEGUNDO DE SECUNDARIA.pdfFichas de Matemática DE SEGUNDO DE SECUNDARIA.pdf
Fichas de Matemática DE SEGUNDO DE SECUNDARIA.pdf
 
Manejo del Dengue, generalidades, actualización marzo 2024 minsa
Manejo del Dengue, generalidades, actualización marzo 2024 minsaManejo del Dengue, generalidades, actualización marzo 2024 minsa
Manejo del Dengue, generalidades, actualización marzo 2024 minsa
 
sesión de aprendizaje 4 E1 Exposición oral.pdf
sesión de aprendizaje 4 E1 Exposición oral.pdfsesión de aprendizaje 4 E1 Exposición oral.pdf
sesión de aprendizaje 4 E1 Exposición oral.pdf
 
Aedes aegypti + Intro to Coquies EE.pptx
Aedes aegypti + Intro to Coquies EE.pptxAedes aegypti + Intro to Coquies EE.pptx
Aedes aegypti + Intro to Coquies EE.pptx
 

Algunas aproximaciones a las ciudades latinoamericanas.

  • 1. ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS CIENCIAS SOCIALES Introducción | Ciudades latinoamericanas en perspectiva histórica | Ciudades sobre ciudades | La ciudad en damero | De la ventana enrejada española al balconcito francés | Ciudades de campesinos | El crecimiento urbano desmesurado | Ciudades y ciudadanos Autores: Prof. Mario Petrone (UBA), con la colaboración de Patricia Funes | Coordinación Autoral: Dra. Patricia Funes (UBA y CONICET) y Dr. Áxel Lazzari (UBA) PROGRAMA DE CAPACITACIÓN MULTIMEDIAL EXPLORALAS CIENCIAS EN EL MUNDO CONTEMPORÁNEO udades.qxd 21/03/2007 03:51 p.m. PÆgina 1
  • 2. 2 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES La ciudad se relaciona con un sinnúmero de términos estrechamente vinculados: modernidad, capitalismo, progreso, "luces" (de iluminación e "iluminismo-racionali- dad"), burguesía (burgos), política (polis), ciudadanía. Las ideas e ideologías suelen asociarse al mundo urbano, así como su difu- sión y registro. Histórica morada de sacerdo- tes, letrados, reyes, presidentes, técnicos, la ciudad es poder, administración, "contabili- dad" y distribución de recursos materiales y simbólicos. Incluso como experiencia de vida, ¿es posible pensar el "espacio público" sin remitir a la experiencia urbana? Sociológica e históricamente, lo urbano suele definirse "frente" o "contra" el cam- po, lo rural. Esquemas duales (o funcionalis- ta-dualistas) establecen contradicciones en- tre ambos mundos. Es difícil encontrar algu- na utopía futurista que no se ubique en las ciudades ("máquinas que hacen el trabajo de hombres, hombres que se comportan como máquinas", escribió Orwell). En cam- bio, las utopías retrospectivas y/o milenaris- tas se ligan a lo rural: arcadias perfectas, igualitarias, ubicadas en un tiempo mitológi- co y generalmente circular. "La ciudad −dice Raymond Williams− se alimenta (literalmente) de lo que el campo produce y puede hacerlo a cambio de los servicios que ofrece en las esferas de la auto- ridad, la política, la ley y el comercio a quie- nes están a cargo de la explotación rural, con quienes, de modo característico, está ligada orgánicamente por una necesidad mutua de beneficio y poder." Sin embargo, con el tiempo, esa relación en principio recíproca, se autonomiza en favor de las ciudades, que se alienan y adquieren una fisonomía apa- rentemente autosustentable. Las ciudades se definen como sistemas sobrecapitalizados subsidiados desde la pe- riferia, de donde provienen los recursos. División del trabajo, estratificación, aliena- ción y acumulación son notas que las carac- terizan. Por lo mismo, la ciudad es sede de la administración y el poder. El campo y la ciu- dad son realidades históricamente variables, tanto en sí mismas como en sus interrelacio- nes. Mucho más en América Latina, donde la "arcaización de lo moderno, la moderni- zación de lo arcaico" generan zonas grises, híbridas, mucho más polifónicas y menos diáfanas que las díadas y los opuestos. Hay más de dialéctica, de complementariedad y de contaminación que lo que esas imáge- nes sugieren. Las ciudades latinoamericanas comparten la lógica del capitalismo, aunque se objetiva y enraíza con rasgos peculiares. Si las compara- mos con otras sociedades del Tercer Mundo, las ciudades latinoamericanas han mostrado una densidad y complejidad propias. En este fascículo veremos algunas imáge- nes de las ciudades latinoamericanas, centrándonos en el proceso histórico funda- cional de las denominadas “ciudades masifi- cadas”, procesos ligados a las transformacio- nes de entreguerras. Si bien señalaremos los principales rasgos de las ciudades en la his- toria de la región, nos detendremos en estas "ciudades de campesinos" que sur- gieron en las décadas de 1940 y 1950, ya que marcan un quiebre cuantitativo y cuali- tativo de largo plazo que aún continúa. EduardoNicolau/AE INTRODUCCIÓN San Pablo, una de las más grandes metrópolis latinoamericanas. udades.qxd 21/03/2007 03:51 p.m. PÆgina 2
  • 3. 3ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS CIUDADES SOBRE CIUDADES La ciudad latinoamericana, si bien producto del genérico proceso de la modernidad, tie- ne sus linajes y precedencias. El 8 de noviembre de 1516, las huestes de Hernán Cortés avistaron Tenochtitlán, una increíble ciudad compuesta de varias ciuda- des, construidas sobre un lago. Los soldados que acompañaban a Cortés habían viajado por casi todo el mundo occidental conocido y no podían sino compararla de manera incompleta y aproximativa con Roma o Cons- tantinopla. Los símiles eran del orden de la magia o de los sueños. Escribió Bernal Díaz: Y desde que vimos tantas ciudades y villas pobladas en el agua, y en tierra firme otras gran- des poblaciones, y aquella calzada tan derecha y por nivel cómo iba a México, nos quedamos admi- rados, y decíamos que parecía a las cosas de encantamiento que cuentan en el libro de Amadís, por las grandes torres y cúes [templos] y edificios que tenían dentro del agua, y todos de calicanto, y aun algunos de nuestros soldados decían que si aquello que veían si era entre sueños, y no es de maravillar que yo escriba aquí de esta manera, por- que hay mucho que ponderar en ello que no sé como lo cuente: ver cosas nunca oídas ni aun soñadas como veíamos. Otro tanto ocurrió con Cuzco, considera- da el "ombligo" del mundo incaico, des- cripta así por el Inca Garcilaso: Tiene calles anchas y largas y plazas muy gran- des, por lo cual los españoles en general, y los escribanos y notarios en sus escrituras públicas, usan del primer título porque el Cuzco en su imperio fue otra Roma en el suyo; y así se puede cotejar la una con la otra, porque se asemejan en las cosas más generosas que tuvieron. La primera y principal, en haber sido fundadas por sus prime- ros reyes. La segunda en muchas y diversas nacio- nes que conquistaron y sujetaron a su imperio. La tercera en las leyes tantas y tan buenas y bonísi- mas que ordenaron para el gobierno de sus repú- blicas. La cuarta en los varones tantos y tan exce- lentes que engendraron, y con su buena doctrina urbana y militar criaron. Tenochtitlán y Cuzco fueron parcialmente destruidas y sobre ellas se edificaron "nue- vas" ciudades: México sobre Tenochtitlán, en el virreinato de la Nueva España, y Nueva Toledo sobre las ruinas de Cuzco. Sobre sus templos, las iglesias mayores, y sobre sus cal- zadas, las calles, en dificultoso damero. LA CIUDAD EN DAMERO La conquista española, menos que la lusita- na, se centró en la creación de ciudades. No eran factorías, eran ciudades para estable- cerse y crear una nueva sociedad, una "nueva Europa". La ciudad era el centro de expansión de un hinterland indeterminado. Representaban al rey, a la religión católica (la legitimidad de la conquista) y al mundo euro- peo. Muchas de ellas se trazaron sobre ciu- dades o encrucijadas de caminos precolom- binos. Otras se crearon ex nihilo. También hubo ciudades en los centros productivos: Taxco, Guanajuato, Villa Rica de Albuquerque (hoy Ouro Preto), pero la más impresionan- te fue Potosí. Y las hubo puertos, que se vol- vieron muy dinámicos hacia finales del siglo XVIII, cuando se flexibilizó el monopolio co- mercial. Justamente, de las ciudades de los nuevos virreinatos borbónicos surgieron los primeros movimientos independentistas. En todos los casos, la idea era trasladar la impronta del mundo conocido y civilizado. Plano de Tenochtitlán, posiblemente realizado por Cortés (México, 1524). CIUDADES LATINOAMERICANAS EN PERSPECTIVA HISTÓRICA FoundationfortheAdvancenmentofMesoamericanStudies(FAMS) udades.qxd 21/03/2007 03:51 p.m. PÆgina 3
  • 4. 4 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES Por eso muchas se llamaron "nuevas" −Nue- va España, Nueva Granada, Nueva Galicia; New York, Nouvelle Orleans, Nova Lisboa− o eran bautizadas con el nombre de ciuda- des conocidas −Córdoba, Rioja, Cartagena (de Indias)−. Como afirma Benedict Anderson, los europeos del siglo XVI habían adoptado el hábito de dar a lugares remotos "nuevas versiones" de "antiguas" toponimias de sus tierras de origen. "Lo sorprendente de los nombres americanos de los siglos XVI y XVII es que lo "nuevo" y lo "viejo" fueron inter- pretados de manera sincrónica, no como herencia". Nueva España junto a España, un idioma de competencia entre hermanos y no de herencia: "Entre 1500 y 1800, una acumulación de innovaciones técnicas en los campos de la construcción de barcos, la navegación, la relojería y la cartografía, hacía posible este tipo de imaginación". El "orden" fue otro concepto importante en la fundación de ciudades. Es la palabra que obsesivamente utiliza el rey en las ins- trucciones a Pedrarías Dávila (1513) para la conquista de Tierra Firme: Vistas las cosas que para los asientos de los lugares necesarios e escogido el sitio más prove- choso [...] habréis de repartir los solares del lugar para hacer casas, y estos han de ser repartidos según las calidades de las personas e sean de comienzo dados por orden; por manera que [...] el pueblo parezca ordenado, así en el lugar que se dejare para la plaza, como el lugar en que hubie- ra la iglesia, como en el orden que tuvieran las calles; porque en los lugares que de nuevo se hacen dando la orden en el comienzo sin ningún trabajo ni costa quedan ordenados e los otros jamás se ordenan. Para Ángel Rama, la traslación del orden a una realidad física −la fundación de ciuda- des− implicaba un diseño urbanístico que no podía dejarse al azar; debía tener racio- nalidad, incluso, para prever el futuro y neu- tralizar la entropía de un mundo con otras lógicas que debía ser disciplinado desde el espacio. "El resultado en América Latina fue el damero, que reprodujeron, con o sin pla- no a la vista, las ciudades barrocas y que se prolongó hasta prácticamente nuestros días [...]. Pero más importante aún que el dame- ro es el principio rector que asegura todo un régimen de transmisiones: de lo alto a lo bajo, de España a América, de la cabeza del poder a la conformación física de la ciudad para que la distribución del espacio urbano asegure y conserve la forma social. El orden debe quedar estatuido antes de la existencia física, real de las ciudades para impedir futu- ros desórdenes." No obstante estas previsiones, la mayoría de las ciudades criollas fueron apenas algo más que "aldeas": plaza, catedral, casa del gobernador, cabildo, ejido. Acechadas por la escasez, la invasión o la enfermedad. Pese a las sincronías y los órdenes, las ciudades latinoamericanas no se comportaban del todo como la modernidad de la cual forma- ban inequívocamente parte. Luego de las independencias y el derrum- bamiento de los espacios administrativos, mercantiles y políticos del orden colonial, se desató una fuerza centrífuga en el que for- mas moleculares y rurales de dominación conformaron un principio articulador de reemplazo: las plantaciones, las haciendas, las estancias, matrices del orden oligárquico, se impusieron sobre las ciudades. Las con- tradicciones entre puertos e "interiores", entre conservadores y liberales, entre fede- rales y centralistas tuvieron como protago- nistas el orden urbano vs. el orden rural. 1. Representación de Cuzco, realizada por Guamán Poma de Ayala (1572). 2. Plano de la ciudad de Buenos Aires (1713) en el que se puede apreciar el diseño en damero original. 1 2 BibliotecaReal,Copenhague,Dinamarca BibliotecadelCongresodelaNaciónArgentina udades.qxd 21/03/2007 03:51 p.m. PÆgina 4
  • 5. 5ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS urbana muy influido por la cultura francesa que animaba a las elites culturales. Las reformas de Haussman en París inspiraron esos cambios. Otra referencia importante fueron las políticas emanadas de las escue- las positivistas e higienistas. Las epidemias DE LA VENTANA ENREJADA ESPAÑOLA AL BALCONCITO FRANCÉS Creo que no hay imagen que mejor defina el profundo cambio que a toda velocidad regía a las ciudades latinoame- ricanas, que la sustitución de la vieja ven- tana enrejada de origen español, por el balconcito de origen francés, moda que fue arrasadora desde los años noventa. Ángel Rama. El proceso de consolidación de los Estados latinoamericanos (hacia fines del siglo XIX) volvió a poner de relevancia el mundo urba- no. El proceso de centralización política pro- ducto de los pactos intra e interoligárquicos pautaban, al compás de la inserción de las economías regionales al mercado mundial, otro "orden" para el "progreso". Las nue- vas funciones (administración estatal, vías férreas, puertos, en síntesis, las obras de infraestructura que demandaba una econo- mía en expansión) imprimieron a las ciuda- des nuevas fisonomías. Las ciudades, sobre todo las capitales, des- cribieron un proceso de reestructuración de fiebre amarilla, disentería o cólera demostraron que la ciudad era un espacio colectivo y que ni las clases propietarias estaban a salvo de esas epidemias en ámbi- tos insalubres. De allí que se impusieran obras de alcantarillado, apertura de calles, avenidas, bulevares, iluminación y "airea- miento" por medio de espacios verdes. Además, el Estado corporizaba su presencia física en edificios o "palacios" (las sedes de los congresos, de los correos, las mismas aduanas) reafirmando un poder político cada vez más presente. Sin embargo, la moderni- dad mostraba imágenes bifrontes, ambiva- lentes, que se expresaron con mucha nitidez en las ciudades. Para las oligarquías latinoamericanas las ciudades presentaban una fisonomía con- tradictoria: por un lado, eran el espejo del progreso, la modernidad, la civilización; por otro, un ámbito de creciente hostilidad cuando (como contracara de esos mismos procesos) contingentes de obreros socialis- tas y anarquistas se apropiaron de lo públi- co. La calle se transformó en un lugar para el ejercicio de la opinión, la recreación, el encuentro, la protesta. Esta "publicidad" aparecía transgrediendo la "privacidad" de una política restringida a los clubes de nota- bles y los círculos familiares. No se trataba de una "ciudad desencantada", una "jaula de hierro", sino de un improvisado bricolaje BibliotecadelCongresodelaNaciónArgentina Planos en damero de la fundación de las ciudades de Mendoza y San Juan. Destrozos provocados durante la Semana Trágica (Buenos Aires, 7-15 de enero de 1919), como consecuencia de la dura represión a la huelga general promovida por la FORA anarquista. AGN udades.qxd 21/03/2007 03:51 p.m. PÆgina 5
  • 6. 6 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES nidas y se modernizó el puerto. Se constru- yeron veredas y macadanes, se demolieron viejos mercados y cientos de cortiços, con- juntos habitacionales precarios donde se aglomeraba buena parte de la población pobre que debió dirigirse hacia las colinas, lo que dio comienzo a un proceso de "favelización" de larga data. El conjunto de transformaciones era vivido con un explícito ethos civilizatorio. Uno de los narradores de la ciudad, Olavo Bilac lo describía así: Hace pocos días, los picos, entonando un him- no jubiloso, iniciaron los trabajos de la Avenida Central, tirando abajo las primeras casas conde- nadas [...]. Comenzamos a marchar hacia nuestra rehabilitación. Al derrumbarse las paredes [...] se hacía presente un largo gemido. Era el gemido triste y lamentoso del Pasado, del Atraso, del Oprobio. La ciudad colonial, inmunda retrógrada empeñada en sus viejas tradiciones, estaba sollo- zando [...]. ¡Con qué alegría cantaban los picos regeneradores [...] celebrando la victoria de la higiene, del buen gusto y el arte! Acompañó estas medidas un conjunto de políticas destinadas a superar un problema recurrente de las ciudades latinoamerica- nas: las epidemias. En 1904, el gobierno de Brasil hizo que el Congreso aprobara una ley que declaraba obligatoria la vacunación contra la viruela. Los barrios centrales afectados por la reforma y la zona del puerto se convirtieron en el foco de la primera protesta de enver- gadura contra el gobierno republicano: la Revuelta de la Vacuna. El 13 de noviembre de 1904, los opositores a la norma guberna- mental levantaron barricadas y se lanzaron a las calles. El conflicto, finalmente controlado por la fuerza pública, terminó con un saldo de 30 muertos, 110 heridos y 945 deteni- dos. Como afirma José Murilo de Carvalho, la Revuelta de la Vacuna fue una protesta popular, más allá de la vacuna. Fue un pro- nunciamiento espontáneo contra la refor- ma urbana, la destrucción de casas, la ex- pulsión de sectores de la población, las medidas sanitarias (entre ellas, la prohibi- ción de que mendigos y perros circularan de modernidades que se yuxtaponían. Para distintos actores, la modernidad tenía signi- ficados diferentes. RÍO DE JANEIRO: HIGIENISMO Y REVUELTA DE LA VACUNA Río de Janeiro sufrió un conjunto de meta- morfosis hacia comienzos del siglo XX. Hay que recordar que, todavía en 1872, un número importante de sus habitantes (alre- dedor de 200.000) eran esclavos y que fue asiento de una corte hasta 1889. La complejización de las funciones del Estado y el crecimiento económico impac- taron fuertemente en la ciudad, que requi- rió de una nueva infraestructura y mayores servicios. Si bien el alcantarillado instalado a mediados del siglo XIX (como consecuen- cia de una epidemia de fiebre amarilla) había mejorado la salubridad, hacia co- mienzos del siglo XX era insuficiente. Entre 1903 y 1906, bajo la dirección del arquitec- to Pereira Passos, se ampliaron e iluminaron las calles angostas y oscuras, se trazaron ave- EstefanRadovicz/AE Rocinha, la favela más grande de Río de Janeiro, Brasil. udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 6
  • 7. 7ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS Caricatura del prefecto de Río de Janeiro, Pereira Passos, y del director de Salud Pública, Oswaldo Cruz, publicada en la prensa brasileña durante la "Revuelta de la Vacuna", en noviembre de 1904. Archivo/AE por la ciudad, la prohibición de escupir en la vía pública y los transportes públicos) y, por último, la vacuna obligatoria. La oposición hacia la vacuna presentó aspectos moralis- tas. Corrió el rumor de que debía ser aplica- da en las nalgas. Los hombres consideraban que el Estado no tenía derecho de meterse en sus casas para tocar las partes "íntimas de sus esposas". LUCES Y SOMBRAS EN BUENOS AIRES Los festejos de los centenarios de las inde- pendencias encontraron a las capitales en el cenit de los regímenes oligárquicos. Los centenarios son ocasiones privilegiadas para las recapitulaciones simbólicas. En las conmemoraciones de los centenarios de las independencias de los países de América Latina se evidencian rotundas imágenes de la "identidad" nacional. Las ciudades fue- ron el centro de esos símbolos. En 1910 llegó a la Argentina el mayor número de inmigrantes de la historia del país. Desembarcaron en el puerto de Buenos Aires 289.000 personas (en promedio serían cerca de 800 por día). La ciudad capital tenía, entonces, 1.270.000 habitantes, de los cuales el 51% eran inmigrantes. Entre 1906 y 1910 arribaron 1.200.000 inmigran- tes a una ciudad que absorbía el 25 % de la población total del país. La mayoría vivía en conventillos y precarias piezas de alquiler. Mientras tanto, Buenos Aires intentaba tenazmente parecerse a París. La apertura de la Avenida de Mayo, el Palacio de Congreso, los petit-hoteles de la calle Alvear o de la Plaza San Martín parecían confirmarlo. En uno de los libros oficiales del Centenario se leía: "París, soberana de las ciudades [...], tu hermana muy joven aún, hasta hoy recatada, va a presentarse al mundo en Mayo de 1910. ¡Puedes sentirte orgullosa! La humanidad, al contemplarla [...] verá que pertenecen a la misma estirpe". Los festejos del Centenario se realizaron con toda pompa y boato, pero bajo estado de sitio. Este recorte a las libertades indivi- duales era la respuesta del Estado a la con- flictividad social del movimiento obrero. Los sectores anarquistas y socialistas venían desplegando un conjunto de protestas que el año anterior habían sido reprimidas dura- mente, y la amenaza de boicot a los festejos del Centenario llevaron al gobierno no sólo a restringir las libertades, sino a sancionar la Ley de Defensa Social, que profundizaba la Ley de Residencia (1902), cuya derogación era una parte importante de las reivindica- ciones obreras. La Ley de Defensa Social era un instrumento del Estado para penalizar protestas y movilizaciones obreras. Y, de hecho, el Estado hizo uso de esas faculta- des ya que, para los festejos de Mayo, hubo deportaciones, encarcelamientos y proscrip- ciones. Es que el año 1910 es la condensa- udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 7
  • 8. 8 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES ción de las contradicciones de la moderni- zación argentina (mirada desde los sectores dominantes). Como Jano, con dos caras: una, la de la "oda al ganado y las mieses"; la otra, la de la bomba anarquista al jefe de policía. Inmigrante y maximalista tienden a ser una sola identidad, y la palabra "disol- vente" (con la fuerza expresiva de la que está impresa), un mote frecuente. Algo inquietaba a las elites políticas y cul- turales, aun más que los posibles efectos de la llegada del cometa Halley, que cruzaba el cielo porteño en mayo de ese año. Las luces de la "Belle époque" argentina y de la repú- blica oligárquica se iban apagando. Entre las novedades del festejo del Centenario se pre- veía la iluminación completa de los edificios públicos de la Capital, cosa que ocurrió a medias. Algunos hablaron de imprevisión; otros, de sabotaje anarquista. AGN SubterráneosdeBuenosAiresS.E. 1 3 1. Construcción de la Estación Plaza Miserere de la Línea A de subterráneos, la primera de Latinoamérica. 2 y 3. Las dos caras del Centenario: la oligarquía desfilando con la infanta Isabel de España e inmigrantes recién llegados al puerto de Buenos Aires. AGN 2 udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 8
  • 9. 9ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS Lucas Ayarragaray: [...] Yo quiero que se sancione una ley, que lleve su acción has- ta la raíz misma de la idea anarquista, para ahogar todas sus siniestras manifes- taciones, declarando delito esa mons- truosidad que hoy germina en los duros cerebros de algunos proletarios suscita- da por las declamaciones malsanas de ciertos ilusos. Yo proclamo sin ambages que el anarquismo es un delito contrario a la civilización argentina, porque no está en nuestros antecedentes, en nues- tra complexión social, económica e histó- rica: y por eso, como miembro de la comisión de legislación, presenté a su seno un proyecto combinado, de exclu- sión de extranjeros y de expulsión, penando, además, a los que una vez expulsados vuelvan al país. Ese proyecto tomado en todos sus fundamentos y con toda su doctrina intacta, lo ha reproduci- do el diputado Meyer Pellegrini, con modificaciones de detalle. Es siempre muy difícil saber lo que un hombre trae dentro de sí, las intenciones que abriga en el seno de su conciencia; y con los medios que tenemos hoy de preserva- ción social no llegaremos a evitar la infil- tración del virus anarquista en el pueblo, por más que le opongamos un tamiz de mallas más apretadas que el que tiene actualmente la ley de inmigración y resi- dencia en vigor. Y para ese caso necesita- mos la ley de expulsión en la forma que la he propuesto a la comisión de legisla- ción, con sanciones para los que reinci- dan y vuelvan al país después de ser expulsados. Y no sólo eso; allí no queda- ría la eficacia de la ley sino en límites reducidos y deficientes: sería en realidad una ley frustránea. El anarquismo se ha desarrollado entre nosotros como se de- sarrolla todo, por falta de autoridades y contrapesos contrarios. Evitemos que el delirio anarquista se propague a las clases inferiores de la sociedad y asuma formas bárbaras, como el atentado de anoche, dirigido contra lo más granado de nuestra sociedad, en desmán de asesi- nato colectivo y anónimo. [...] Yo estudié la materia y presenté [un proyecto] en forma de ley especial, ley de orden público y de carácter político-social. Constituye una iniciativa nueva y me cabe la satisfacción de haberla formula- do. Por esa ley, que el diputado Meyer Pellegrini modificó en detalles, pero con- servando integralmente todos sus artícu- los fundamentales, declaro delito el anarquismo; prohíbo, en consecuencia, los centros y asociaciones anarquistas, la prensa anarquista, el mitin público anar- quista y la reunión secreta, la bandera anarquista; cancelo la carta de ciudada- nía a los anarquistas; también a los que fabriquen, expongan, etc., bombas; creo todo un régimen de penas; amplío los casos de expulsión; castigo a los que, expulsados, regresan al país: es decir, ¡lle- vo por primera vez en este país el fuego de la ley hasta la raíz misma de la idea anarquista! [...] Yo sé que el derecho de defensa de la sociedad deriva de un concepto su- perior de subsistencia y de vida; pero en estos momentos no está en cuestión la existencia de la nación. Yo le doy al monstruo anarquista toda la importancia y reconozco todas las aberraciones bru- tales que entraña; pero estoy tranquilo sabiendo que nos bastan por ahora las defensas especiales que tenemos en jue- go para contener los siniestros delirios de una banda de aventureros. ¡Nosotros somos un partido conservador, somos el partido burgués; el anarquismo, que es el engendro monstruoso, que es la aberra- ción del socialismo y que pretende atacar en este momento la organización funda- mental de la sociedad, desde la familia hasta la propiedad, no debe intimidarnos; nosotros, como partido conservador y bur- gués, tenemos en nuestras manos el ejérci- to, la fuerza moral, la tradición y el poder; estamos perfectamente autorizados, por todos los artículos de la Constitución, desde la cláusula inicial hasta la última de sus disposiciones, para poner en ejer- cicio todos los poderes −los explícitos, los implícitos, los virtuales− para defender lo que constituye nuestra vida, nuestro honor, nuestro progreso y nuestra esta- bilidad futura como nación! Entonces, ¿qué más quiere el Poder Ejecutivo? ¿Acaso la opinión no ha pues- to en sus manos para combatir el crimen anarquista todas las delegaciones de confianza, como nunca se otorgaron iguales en este país? Nosotros damos, y el país también da, todos los poderes implícitos, todos los explícitos que hay en la Constitución, para que defienda con eficacia la sociedad. Nosotros cree- mos que la familia y la propiedad son las bases y fundamentos insustituibles y definitivos de toda organización culta, y no permitimos que ningún partido polí- tico argentino, y menos bandas de extranjeros aventureros, vengan a atacar lo que todos consideramos las bases inconmovibles del mundo moderno, de esta civilización, que es un lejano reflejo de una cultura que viene hasta nosotros, de orígenes desconocidos, y a través de las edades y de la historia, llega a la vir- gen América para fundar esta civiliza- ción argentina, que será grande y que hace pocos días hemos conmemorado, en presencia de delegaciones de América y de Europa, como una demostración inconmovible de nuestro destino y de nuestro poder. Diario de sesiones, Cámara de Diputados, Buenos Aires, 27 de junio de 1910. DISCURSO SOBRE LA LEY DE DEFENSA SOCIAL (1910) udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 9
  • 10. 10 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES oposición, le pone hora, día y mes (las 18 del domingo 20 de noviembre de 1910) a la Re- volución en su Plan de San Luis Potosí. En 1914, los ejércitos campesinos llegaban a la ciudad de México. La ciudad −en rigor, todo México− se campesinizaba. “¡Existían Méxi- co y los mexicanos!”, escribió un agudo ensa- yista. La ciudad se llenó de zarapes multicolo- res, de caras oscuras; los mercados callejeros se multiplicaron. Y aunque Zapata y Villa llega- ron al sillón presidencial, no fueron los que ganaron la revolución. Sin embargo, fue un punto de no retorno. En los años veinte, el ethos civilizador y la praxis nacionalizadora de José Vasconcelos desde la Secretaría de Edu- cación Pública tenía como eje la idea del "México mestizo". Para ello, la ciudad de Mé- xico debía reconciliarse con lo rural. Su ambi- cioso plan educativo contemplaba nuevas imágenes para proyectar en la ciudad ese nue- vo México. La Universidad, el Palacio de Go- bierno, en síntesis, los espacios públicos y esta- tales, se llenaron de murales de Diego Rivera con sus indios, sus nopales y sus huarachas. La difícil cimentación de la obra requirió de mucha pericia técnica y fe en el progreso. La columna mide 36 metros de altura y sumada la del grupo escultórico que la corona, alcan- za un total de 43 metros. La columna está decorada con palmas, guirnaldas y anillos con los nombres de los héroes de la Independencia. La escultura que se encuen- tra en la cúspide de la columna −"El Ángel", que representa a la Victoria Alada− es de bronce con recubrimiento de oro, mide 6,7 metros de altura y pesa siete toneladas. Muchos, en su momento, criticaron el pro- yecto por inviable o por efímero: pensaban que la columna iba a desmoronarse ante el primer temblor. Sin embargo, la columna aún está en pie. Si bien el Ángel se cayó durante el sismo de 1957, fue reinaugurado en 1958 y sobrevivió a los subsiguientes sis- mos que azotaron la ciudad. Los festejos del Centenario fueron la apo- teosis del porfiriato y la política de los "cientí- ficos", y también su despedida. Sólo dos meses después, Francisco Madero, líder de la El Ángel de la Independencia, erigido en el Paseo de la Reforma, en la ciudad de México. BibliotecaFranciscoXavierClavijero MÉXICO: DEL ÁNGEL DE LA INDEPENDENCIA A LOS MURALES DE RIVERA El 16 de septiembre de 1910, como parte de los festejos del Centenario de la In- dependencia, se inauguraba en la Ciudad de México el monumento conocido como El Ángel de la Independencia. El grupo escul- tórico es un buen ejemplo de los símbo- los de la confianza en la modernización. Se comenzó a construir en 1902 y el mismo Porfirio Díaz lo inauguró para los festejos. Enclavado en una de las glorietas del Pa- seo de la Reforma (el sucedáneo mexica- no de los Campos Elíseos parisinos) era un desafío para el futuro. La ciudad de México está asentada sobre las aguas de un gran lago y, por añadidura, es un fre- cuente epicentro de sismos y terremotos. Sin embargo, el arquitecto mexicano An- tonio Rivas Mercado proyectó una altísima columna coronada por una escultura de bronce macizo. udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 10
  • 11. 11ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS CIUDADES DE CAMPESINOS El año 1930 suele ser sinónimo de cam- bios políticos en América Latina. Muchas interpretaciones enfatizan la relación entre los efectos de la crisis capitalista y los golpes de Estado que se suceden en un conjunto de países de la región. Generalmente, las inter- pretaciones se despliegan en este orden: pri- mero, agotamiento del orden primario exportador; segundo, muestras de agota- miento de los distintos regímenes oligárqui- cos. No en todos los países los cambios son del mismo signo. En 1930 se sucedieron va- rios golpes de Estado en América Latina: el ocurrido en la Argentina clausuró la expe- riencia de ampliación de la ciudadanía políti- ca; el de República Dominicana habilitó la larga dictadura de Rafael Leónidas Trujillo; el protagonizado por Luis Miguel Sánchez Cerro en Perú terminó con once años de gobierno de Augusto B. Leguía y abrió la posibilidad de las primeras elecciones li- bres y competitivas en ese país, elecciones que −aunque no lograron quebrar el orden oligárquico− permitieron la creación del pri- mer partido político de masas, el APRA, con- trario a Sánchez Cerro; en Brasil, el golpe de la Alianza Liberal inauguró la larga experien- cia del Estado Novo de Getúlio Vargas. En todos estos casos, el denominador común fue la intervención de las Fuerzas Armadas; sin embargo, muy distinto es el caso de Marmaduque Grove en Chile, quien instau- ró la fugaz experiencia de la "República Socialista" (entre el 4 y el 16 de junio de 1932). Estos pocos ejemplos evidencian el significado no unívoco que asume la crisis política en la región, pero también un pro- fundo cambio en el orden político, social y económico. Si bien todos estos cambios se expresaron en las ciudades, sobre todo en las capitales, el cambio parecía venir de otros lados, en principio, de las ciudades del inte- rior: Sánchez Cerro era de la ciudad de Arequipa (que, junto con Trujillo y Cuzco, eran las más importantes del interior del Perú), Getúlio Vargas era de Rio Grande Do Sul; Lázaro Cárdenas, de Michoacán. Pero esto no sólo desde los liderazgos era visible. EL CRECIMIENTO URBANO DESMESURADO Desde la década de 1920, las ciudades capi- tales habían sido un imán para migrantes internos. También, objeto de críticas por la excesiva apropiación de recursos, por el peso desmesurado en las decisiones políticas y, además, por ser la imagen de una moderni- zación macrocéfala y en algún sentido "des- gajada" de la "nación". Por ejemplo, en el Perú, en esos años, des- de las ciudades del interior se impugnó al orden oligárquico simbolizado por Lima. Desde comienzos de siglo, la ciudad experi- mentó un alto nivel de urbanización y un importante crecimiento demográfico: en 1876 tenía alrededor de 120.000 habitan- tes; en 1907, 172.927; en 1920, 223.807, y en 1931 había alcanzado los 376.097. Esto se debió principalmente a la multiplicación de las actividades mercantiles y a su carácter de locus centralizador del poder. Nudo ferro- viario, asiento de la burocracia estatal y de T.Margoles/UNESCOPhotobank 1. El mural Mercado de Tlatelolco, de Diego Rivera, 1951, ilustra aspectos de la forma de vida de los pobladores originarios de México. 2. Emiliano Zapata, líder de una fracción de campesinos durante la Revolución Mexicana. OASIS 2 1 udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 11
  • 12. 12 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES las autoridades nacionales, centro neurálgi- co de las actividades comerciales, bancarias y financieras, era la ciudad más grande del Perú en un contexto eminentemente rural (en los años veinte, Arequipa, que la seguía en importancia, tenía alrededor de 30.000 habitantes; Trujillo, 20.000). Los descentra- listas arequipeños le criticaron a Lima la concentración de poder en desmedro de las provincias; los trujillanos apristas, que la dictadura de Leguía había favorecido el capital extranjero en la economía azuca- rera de la costa norte. Los indigenistas cuzqueños instalaron uno de los temas re- currentes en la cultura peruana: la confron- tación costa-sierra, indio-blanco, represen- tada por Lima y Cuzco. El antropólogo y ensayista indigenista Luis Valcárcel, decía en los años veinte: En una sociología freudiana estas dos regiones del Perú representan dos sexos. Feminidad la cos- ta, masculinismo la sierra. El Cusco y la sierra son la naturaleza, el ruralismo, lo perenne e indesa- rraigable. Nada extraño que Lima sea extranjeris- ta −¡hispanófila!− imitadora de los exotismos, europeizada; y el Cusco, vernáculo, nacionalista, castizo, con un rancio orgullo de legítima prosa- pia americana. En los años treinta y cuarenta, un movi- miento social desconocido se precipitó sobre las ciudades: la presencia masiva del "otro". Un otro "rural", generalmente campesino, muchas veces con una lengua "distinta" y unos patrones culturales "extraños". Frente a la pauperización de las economías rurales, la gente se volcó a las ciudades. Si ese proce- so era lento y casi imperceptible en los años veinte, luego de la crisis de 1929 pasó a ser un fenómeno social, colectivo y estructural. Las ciudades se tiñeron de olores y colores intensos, de comidas y músicas diversas. A primera vista −como muchos análisis con- temporáneos señalaron−, las sociedades pa- recieron escindidas y "duales". Las ciudades se volvieron desconocidas para sus tradicionales moradores. Luis Alberto Sánchez, al regresar a Lima desde el exilio, escribió: "Aquella vez de mi tercer regreso, en 1945, me aturdió el cambio físi- co de mis conlugareños. Vi muchas mujeres de ojos oblicuos. Muchos 'injertos'. Muchos rostros aindiados o simplemente indios". Además del impacto cultural sobre esas ciudades "europeas", los migrantes eran pobres. Expulsados de sus minifunidos, de las haciendas o plantaciones, los migrantes En los siglos duros y brutales de la Colonia germinó un nuevo Perú que hoy parece muy próximo a su defini- ción. El pueblo español llegó para fecundar el Nuevo Mundo, no sólo a conquistarlo. Con la generosidad sin par y desenfrenada, propia de su san- gre y de su espíritu, con violencia cruel e impaciente redujo al pueblo con- quistado a la servidumbre, y no dejó un punto del gran Tahuantinsuyu donde no hubiera clavado su planta e impuesto su mandato; pero con la misma energía y desenfreno, pan y fruto de su violencia, fecundó a ese pueblo y multiplicó sobre la nueva tierra los árboles, las plantas y el rei- no animal superior de Europa. Pero los siglos, el medio, el paisaje, la inmensa mayoría del pueblo sojuzga- do, modelaron, a pesar de todo, esa tremenda fuerza. Y los descendientes lejanos, los peruanos de hoy, han encontrado que también lo indio es su estirpe; y como el proceso ha de seguir, como los elementos determi- nantes seguirán fluyendo y mandan- do, acaso más tarde esta estirpe india podrá ser la dominante. Pero ha bastado la conciencia de hoy para que la antigua, la milenaria ciudad imperial empiece a cobrar su extinguida categoría espiritual: cen- tro y símbolo del Perú nuevo. Y los hombres de las cuatro regio- nes −el anti, el kolla, el chinche y el kunti− son los que conocen la historia y tienen la conciencia del proceso y del destino de este Perú más peque- ño. Pero nacidos del centro, del foco máximo de la cultura inca, esos están empezando de nuevo a ir en peregri- nación a la gran ciudad; y a la vista de ella, a su proximidad, también se des- cubren, como los indios quechuas, y al entrar a sus calles lo hacen con la veneración y el orgullo de los anti- guos indios, aunque en estos es orgu- llo y emoción que viene de un espíritu más alto e iluminado. [...] en las calles incas, estrechas, duras y clavadas en la tierra como las rocas perpendiculares de granito, y su remate de balcones gráciles y casti- zos, se funden con humana armonía lo inca y lo castellano, con profunda sed, en indisoluble y apasionada uni- dad estética; las cúpulas y las torres con muros indios, los escudos blaso- nados con la piedra imperial de don- de fueron esculpidos. Y como la voz de toda esta ciudad hecha de ele- mentos bárbaramente extraños, uni- dad de genios, de razas, de mundos diferentes, fundidos por la obra del dolor, del tiempo y de la voluntad humana, una voz áurea de esta nue- va armonía, en el silencio de la auro- ra, a las cinco de la madrugada, canta la gran campana del Cuzco, la "María Angola", con el oro inca refundido, hecho voz cristalina e inimitable. Porque cuando ella canta a esa hora parece que fuera realmente la voz de los aukis lejanos, de las estrellas y del cielo, de la ancha quebrada oscura, de las calles vacías, y del propio cora- zón sensible de quien la escucha, del espíritu transido o exaltado de quien bajo la gran ciudad ha esperado has- ta el alba. José María Arguedas: Señores e indios. Acerca de la cultura quechua, Buenos Aires, Arca/Calicanto, 1976. SEÑORES E INDIOS udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 12
  • 13. 13ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS internos buscaban en las ciudades trabajo, oportunidades, ascenso social. Ellos también tenían las imágenes de abundancia y progre- so que las elites habían forjado sobre los cen- tros urbanos y pretendían participar de sus beneficios. ¿De qué realidades laborales venían? Aquí la circunstancia de nuestro país o del Uruguay no es representativa de la región. En Chile todavía existía el "inquilinaje"; en México aún había "peones acasillados"; en Bolivia, "pongos"; en Perú, yanaconas; en Ecuador, huasipungos; en Brasil aún perduraban dis- tintas formas de colonato. ¿Qué tienen en común estas relaciones de trabajo? No son asalariadas, o no principalmente. Por añadi- dura, esas formas de trabajo iban acompaña- das de micromundos, en los que el prebenda- lismo, el patrimonialismo y el personalismo de hacendados, plantadores, mayordomos y propietarios atravesaban el conjunto de las relaciones sociales y de poder. Rotos, pelados, huasipungos, cholos, cabe- citas negras, caipiras rodeaban unas ciuda- des que no podían albergarlos ni como fuer- za de trabajo ni como habitantes dignos, y tampoco como ciudadanos. Favelas, callam- pas, vecindades, pueblos jóvenes, villas mise- ria, cantegriles poblaron los cordones de las ciudades en Río de Janeiro, Santiago de Chile, Lima, Buenos Aires, Montevideo, y en poco tiempo formaron parte inescindible de ellas. Parecían brotar "como hongos" (ese es el significado de la palabra callampa). El incremento de la población urbana fue casi geométrico. En 1900, sólo diez ciudades latinoamericanas superaban los 100.000 habitantes. Hacia 1940, Buenos Aires, México, Río de Janeiro y San Pablo supera- ban el millón; Santiago de Chile estaba cerca de esa cifra, pero, además, Lima, Monte- video y Rosario superaban los 500.000 habitantes y once ciudades superaban los 200.000 (Recife, Salvador y Porto Alegre en Brasil; Avellaneda, Córdoba y La Plata en la Argentina; Guadalajara en México; La Paz en Bolivia; Bogotá en Colombia; Caracas en Venezuela, y Valparaíso en Chile). Las ciudades se extendieron geográfica- mente hacia pueblos o "suburbios" circun- dantes. Por ejemplo, el área urbana de Santiago de Chile abarcaba hacia 1930 unas 6.500 hectáreas; treinta años después, 20.000. La rivera este del río Mapocho se pobló de callampas. El primer censo de viviendas de 1952 arrojó datos alarmantes: el 15 % de la población de la ciudad (alrede- dor de 200.000 personas) eran ocupantes de hecho y sus asentamientos sufrían el 54 % del déficit de agua potable y el 57 % del déficit de alcantarillado. Una situación simi- lar ocurrió en San Pablo, que había crecido vertiginosamente desde fines del siglo XIX por la expansión de la economía cafetalera y la inmigración promovida desde el Estado. En 1895, su población era de 130.000 habi- tantes (de los cuales 71.000 eran extranje- ros); en 1900 llegó a 239.000 y en 1950, a 2.660.000 habitantes. Después de la Primera Guerra Mundial, y mucho más en la década de 1930, se transformó en el área más in- dustrializada de Brasil y de América Latina (generaba más del 50 % de la producción industrial del país). En los años cuarenta fue marcada por una intervención urbanística sin AGN Habitación familiar de un conventillo porteño (ca. 1910). udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 13
  • 14. 14 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES precedentes, sobre todo a partir del "Plan Avenidas", que abría accesos rápidos de cir- culación a orillas de los ríos para atender los intereses de una industria automotriz cada vez más pujante. La ciudad creció de manera desordenada hacia la periferia, lo que generó una grave crisis habitacional y una creciente especulación inmobiliaria en la zona central. En los cincuenta comenzó un proceso de desconcentración del parque industrial que se transfirió a otros municipios del área metropolitana (el ABC paulista, Guarulhos) y hacia el interior del Estado (Campinas, por ejemplo). San Pablo ha sido históricamente un polo de atracción de inmigrantes y, des- pués de 1930, de migrantes internos, sobre todo nordestinos. Paradójicamente, hoy San Pablo es la ciudad "nordestina" más grande de Brasil: en ella hay más nordestinos que en Sergipe, la ciudad más grande del nordeste brasileño. Por su parte, la ciudad de México creció desde los años cincuenta a razón de 36 metros cuadrados diarios: en 1940 ocupaba 11.783 hectáreas; en 1988, 125.000. El Dis- trito Federal se ha extendido sobre todo el valle de México. ¿Cómo surgen las vecinda- des? Según Carlos Monsiváis "a un terreno baldío acuden veinte o treinta familias que se instalan como pueden en chozas precarias a las que por cariño les dicen casa, con piso de tierra y paredes de cartón. El líder les exige dinero para tratar con las autoridades; los colonos entregan lo que pueden; el líder va con el funcionario y le grita recordándole los derechos del pueblo [...] y el tiempo pasa y, si no hay desalojos violentos, veinte o treinta años después han conseguido una o dos escuelas, una iglesia [...] agua potable, luz eléctrica y algún otro atributo urbano". El Distrito Federal mexicano (que hoy tie- ne más o menos la misma cantidad de habi- tantes que toda Venezuela), enfrenta serios desafíos: la polución ambiental (para la que se han imaginado innumerables soluciones, hasta hacer una "ventana" en la montaña Ajusco), el constante problema habitacional y la falta de agua potable (hay algunas esti- maciones que sostienen que el 70 % de los niños ya nace con plomo en la sangre). Lcleite/AE Vista aérea de una de las grandes avenidas que cruzan la ciudad de San Pablo, Brasil. udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 14
  • 15. 15ALGUNAS APROXIMACIONES A LAS CIUDADES LATINOAMERICANAS derechos. El Estado, que desde los años treinta había asumido un papel interven- cionista y empresario en el orden económi- co, también intervendría en el orden social, movimiento que se hacía más visible en las ciudades. Hacia finales de los años treinta, durante el período del Estado Novo, Getúlio Vargas extendió derechos de jubilación, salario mínimo y obras sociales a los obreros indus- triales y del sector servicios que estuvieran sindicalizados, pero excluyó a los campesi- nos. La ciudadanía social precedió a la ciu- dadanía política, es decir, antes de poder votar, los obreros estuvieron incorporados CIUDADES Y CIUDADANOS De pronto pareció que había mucha más gente, que se movía, que se movía más, que gritaba más, que tenía más iniciativa; más gente que abandonaba la pasividad y demostraba que estaba dispuesta a participar como fuera en la vida colectiva. José Luis Romero. La sola presencia numérica de los migrantes en las ciudades no implicó un registro auto- mático por parte del poder político. Los migrantes pidieron inclusión, sobre todo en el plano social. Los sectores obre- ros se organizaron y presionaron por sus Masiva movilización en reclamo de la libertad del general Perón en la Plaza de Mayo, en Buenos Aires, el 17 de octubre de 1945. AGN Cárdenas, presidente de México, decreta la nacionalización del petróleo el 23 de marzo de 1938. udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 15
  • 16. 16 EXPLORA CIENCIAS SOCIALES El 23 de marzo de 1938, alrededor de 250.000 personas se concentraron en el zócalo de la Ciudad de México para de- mostrar su respaldo al decreto del presi- dente Cárdenas sobre la nacionalización del petróleo. Esa adhesión se explicaba en el contexto de otras medidas, sobre todo, la reforma agraria. Los 400.000 reemigra- dos a México desde los Estados Unidos y la caída de las economías mineras (sobre todo la de la mina de plata de Guanajuato) impusieron una fuerte presión sobre las ciudades. Si bien el derecho a la tierra estaba reconocido en la constitución revo- lucionaria de 1917, no fue sino con el reparto ejidal de Cárdenas que se rees- tructuró el sistema de tenencia de la tierra en México. Pero no sólo las experiencias populistas dieron respuestas a las demandas sociales. Los gobiernos del Frente Popular en Chile a partir de 1938 ampliaron derechos socia- les a los trabajadores mineros y urbanos, no así a los trabajadores rurales. En el cam- po siguió existiendo (hasta la reforma agra- ria de 1964) la "ley de trabas" que prohi- bía la sindicalización campesina y los excluía de los derechos. Gente en las ciudades, ciudadanía y dere- chos. ¿Será la razón por la que −desde en- tonces− las ciudades latinoamericanas no terminan de crecer? por la vía de los derechos sociales. Para votar había que ser alfabeto, y muy pocos lo eran. Sin embargo, hacia 1945, los mis- mos sindicatos del ABC paulista incluyeron a los trabajadores (alfabetos y analfabetos) en los registros electorales a través de las planillas de cobro de sus salarios en las fábri- cas. "Queremos Getúlio" fue su consigna, quien regresó al poder en 1950. Otro tanto ocurrió el 17 de octubre de 1945, cuando los obreros de la periferia de la ciudad de Buenos Aires se traslada- ron a la Plaza de Mayo para pedir por la libertad de Juan Domingo Perón. No fue poca la sorpresa. Los opositores hablaron de "aluvión zoológico". Bibliografía AA.VV.: Grandes metrópolis de América Latina, San Pablo, Fundación Memorial de América Latina y Fondo de Cultura Económica, 1993. Anderson, Benedict: Comunidades imaginadas. Reflexiones sobre el origen y la difusión del nacionalismo, México, FCE, 1993. Arguedas, José María: Señores e indios. Acerca de la cultura quechua, Buenos Aires, ARCA/CALICANTO, 1976. Burga, Manuel y Alberto Flores Galindo: Apogeo y crisis de la República Aristocrática, Lima, Rikhay, 1980. Carvalho, José Murilo de: La formación de las almas. Imaginario de la República en el Brasil, Quilmes, Universidad Nacional de Quilmes, 1997. Funes, Patricia: "Literatura y nación en tiempos del Centenario", en: Gerardo Caetano (dir.), Los uruguayos del Centenario. Nación, ciuda danía, religión y educación (1910-1930), Montevideo, Taurus, 2000. García Canclini, Néstor: Culturas híbridas. Estrategias para entrar y salir de la modernidad, México, Grijalbo, 1989. Gutman, Margarita y Thomas Reese (eds.): Buenos Aires 1910. El imagina- rio para una gran capital, Buenos Aires, EUDEBA, 1999. Morse, Richard y Jorge Hardoy (comps.): Cultura urbana latinoamericana, Buenos Aires, CLACSO, 1985. Rama, Ángel: Las máscaras democráticas del modernismo, Montevideo, Arca, 1994. Roberts, Bryan: Ciudades de campesinos. La economía política de la urba- nización en el Tercer Mundo, México, Siglo XXI, 1980. Romero, José Luis: Latinoamérica, las ciudades y las ideas, Buenos Aires, Siglo XXI, 2001. Sánchez, Luis Alberto: El Perú: retrato de un país adolescente, Lima, PEISA, 1973. Williams, Raymond: El campo y la ciudad, Buenos Aires, Paidós, 2001. Página web www.Tierramerica.net/ciudades Agradecimientos El equipo de Publicaciones de la Dirección Nacional de Gestión Curricular y Formación Docente agradece a las siguientes instituciones y personas por permitirnos reproducir material fotográfico y colaborar en la documenta- ción de imágenes: UNESCO Photobank; OASIS Photobank; Biblioteca Francisco Xavier Crivejo (México); Agencia Estado (Brasil); Biblioteca del Congreso de la Nación Argentina; Archivo General de la Nación Argentina; Renato Luiz Ferrerira, de Agencia Estado (Brasil). Coordinadora del Área de Ciencias Sociales, Lic. Raquel Gurevich Coordinadora del Área de Desarrollo Profesional, Lic. Silvia Storino Coordinadora del Programa de Capacitación Explora, Lic. Viviana Celso Coordinadora de Publicaciones, Lic. Raquel Franco Coordinación y documentación, Lic. Rafael Blanco Edición, Lic. Gonzalo Blanco Diseño y diagramación, DG María Eugenia Más Corrección, Norma A. Sosa Pereyra www.me.gov.ar Ministro de Educación, Ciencia y Tecnología, Lic. Daniel Filmus Secretario de Educación, Lic. Juan Carlos Tedesco Subsecretaria de Equidad y Calidad, Lic. Alejandra Birgin Directora Nacional de Gestión Curricular y Formación Docente, Lic. Laura Pitman udades.qxd 21/03/2007 03:52 p.m. PÆgina 16