El desarrollo sostenible se define como aquel desarrollo que satisface las necesidades del presente sin comprometer los recursos y posibilidades de las futuras generaciones. Se basa en tres pilares: lo social, lo económico y lo ambiental. Surge a finales del siglo XX como alternativa al desarrollo habitual para reconciliar el crecimiento económico con los recursos naturales y la sociedad, evitando comprometer la vida en el planeta o la calidad de vida humana.