2. Amados u odiados, útiles o inútiles, excelentes o pésimos, los marcos
son instrumentos que forman ya parte habitual del web y que los
navegadores gestionan hoy día a la perfección. Los detractores de los
marcos afirman la inutilidad de subdividir ulteriormente las páginas
web, las cuales, en última instancia, pueden resultar poco legibles.
Otros, como yo, consideran que los marcos pueden llegar a ser muy
útiles ya que se evita cargar las mismas imágenes y se mantienen
ordenados el contenido y la estructura del sitio. Naturalmente, abusar de
los marcos puede producir como resultado pésimas impostaciones
gráficas, obteniendo un efecto contrario al previsto.
Un punto en contra de los marcos es, ciertamente, su incompatibilidad
con los programas de navegación gráfica destinados a invidentes, los
cuales se bloquean impidiendo la lectura de las páginas.
Una buena solución es crear una versión con marco y una versión sin
marco (como esta misma guía ha hecho).