El documento define el plagio académico como copiar obras ajenas y presentarlas como propias, y explica que los derechos de autor protegen a los autores de obras literarias, artísticas y científicas al concederles control sobre el uso y explotación de sus creaciones. También recomienda citar directamente, parafrasear en palabras propias, incluir una lista de referencias y seleccionar un manual de estilo para citar y organizar las fuentes de manera uniforme a fin de evitar el plagio.