Los magos de Oriente siguen la estrella hasta Belén para adorar al recién nacido Jesús. La epifanía conmemora la búsqueda de sentido y luz de muchas personas. Los magos abandonaron su tierra para encontrar a Dios en forma de un niño, mostrando que el futuro está en salir de uno mismo y trascender. Jesús es el gran regalo que cambia nuestras vidas y se nos ofrece como pan de vida en la eucaristía.
2. Nacido Jesús en Belén de
Judea en los días del rey
Herodes, llegaron de
Oriente a Jerusalén unos
magos, diciendo: ¿Dónde
está el rey de los judíos
que acaba de nacer?
Porque hemos visto su
estrella y venimos a
adorarle.
Mateo 2, 1-12.
3. La epifanía es la
fiesta de aquellos que
buscan sentido a sus
vidas. ¡Cuántas
personas, hoy, viven
en la
oscuridad, buscan la
luz y no la
encuentran! Caminan
a tientas sin que
nadie las oriente.
4. Para los cristianos el futuro existe: es
Cristo, Dios, la Iglesia. El futuro está en
trascender de nosotros mismos y salir
afuera.
Los magos así lo hicieron. Abandonaron su
tierra y emprendieron un largo camino…
5. Los magos de Oriente
son imagen de todas
las culturas de la
humanidad en busca de
Dios.
En su búsqueda
encuentran una estrella
que los guía hasta la
cueva de Belén.
¿Esperaban que el fin
de su búsqueda era un
niño en brazos de su
madre?
6. El ser humano está
llamado a conocer a
Dios.
El evangelio de hoy
simboliza un abrazo
cultural entre los
pueblos.
Todos están llamados a
recibir esa inmensa
alegría que llenó a los
magos cuando llegaron
al establo.
7. Pero la fiesta de hoy se
caracteriza sobre todo
por el regalo.
Durante estos días, el
gasto económico de las
familias ha sido enorme.
Deberíamos ser
conscientes de que no
todo el mundo puede
permitírselo y que
muchas personas viven
en la pobreza.
8. Si tan sólo destináramos
un 10 % de lo que
consumimos y gastamos
en obras sociales, o en
contribuir a sostener las
misiones, ¡cuántos
problemas, cuántas
necesidades
ayudaríamos a paliar!
En medio de las fiestas,
olvidamos la pobreza
del portal de Belén…
9. Recuperemos el sentido
religioso de la ofrenda,
del regalo.
Los mejores regalos que
podemos ofrecer son los
valores, el tiempo, dar
sentido a la vida, dar
esperanza…
¡Darnos a nosotros
mismos!
10. Hagamos de magos y demos lo mejor que
tenemos a los que nos rodean:
alegría, confianza, afecto, consuelo, tiempo, escu
cha…
¿Cuánto tiempo hemos dedicado a la familia, a
nuestra comunidad, a Dios?
11. En su libro sobre la infancia de Jesús, el Papa
Benedicto compara el pesebre con el altar: donde
comían los animales ahora yace el que se
convierte en alimento para los hombres, el pan de
vida.
12. Cristo es el gran regalo que cambia nuestra vida.
Ese Niño Dios se nos hace pan y comida.
Cada día que venimos a la eucaristía, contemplamos
el misterio del Dios que se hace presente entre
nosotros, para siempre