SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 4
Descargar para leer sin conexión
La consecuencia
Borrador para un relato de ciencia-ficción
El profesor Karl-Ludwig Ehwald, premio Nobel por sus
trascendentales descubrimientos en el campo de la fisiología cerebral, se
queda un día dormido, en un súbito e inexplicable ataque de sueño, sobre
su mesa de trabajo. Al despertar se encuentra en un futuro no muy lejano,
más o menos en el año 2237. El lugar sigue siendo su estudio, que no ha
sufrido ningún cambio, pero que se halla ahora en el Museo Karl-Ludwig
Ehwald.
Es saludado por algunos científicos que se presentan a él como sus
hijos espirituales. Le explican que no está viviendo en absoluto un sueño.
Hasta le demuestran, en la medida en que ello es posible, que lo que le
rodea es realidad. Tales experiencias de saltos en el tiempo se deben a un
corrimiento temporal en los paralajes, que para entonces ya se puede
calcular previamente pero todavía no generar a voluntad. Se trata de un
fenómeno, por así decir, natural, que ya antes era conocido, pero mal
interpretado. En cualquier caso -le explican- el viajar a voluntad a través
de los tiempos no es posible. El periodo de tiempo que dura el fenómeno
y del cual, por consiguiente, dispone él asciende a sesenta y dos horas y
treinta y ocho minutos. Pasado este tiempo, deberá regresar, pero eso
sucede por sí solo, le dicen, por eso no tiene que preocuparse.
Ehwald decide conocer lo más a fondo posible ese para él mundo
futuro y sus progresos. Se le da, con la mayor gentileza, toda libertad, se
le procura vestimenta adecuada a los tiempos y todo lo necesario y hasta
se le pone a disposición una joven intérprete (germanista), pues el
lenguaje ha sufrido lógicamente grandes cambios, y muchas palabras le
resultan desconocidas.
El nuevo mundo que descubre le resulta casi paradisiaco. Todas las
personas que encuentra son de una extraordinaria mansedumbre y
amabilidad, para el gusto de Ehwald todo lo más un poquito aletargadas.
Se entera de que ya no hay criminalidad, agresiones o comportamiento
inmoral, o sea, nada que haga daño a los demás o a uno mismo. Tampoco
son posibles los accidentes de tráfico, pues para entonces todas las
máquinas son de una seguridad absoluta y se adelantan a cualquier
decisión de las personas. Tampoco existe el suicidio, y las guerras son
totalmente inimaginables. Incluso el matar a los animales para la poca
carne que se necesita (casi todos los hombres son vegetarianos) se hace
por medio de máquinas que, con absoluta garantía, no causan ningún
00022
Lasaf productions
género de dolor. Tampoco hay combates de boxeo ni otros deportes
violentos, que exciten las agresiones, sólo bailes en grupo y juegos de
destreza.
Una vez, sin embargo, observa Ehwald a un grupo de jóvenes que
están en un patio retirado y que con los torsos desnudos parecen
entregados a un extraño juego: uno está de pie, sonriente, y grita algo,
tras lo cual otro joven, igualmente sonriente, le amenaza con un
afiladísimo cuchillo.
La discusión parece que reduce un poco su inercia, finalmente el
segundo joven alza el cuchillo como para clavarlo, pero en el mismo
instante cae al suelo como tocado por el rayo. Ahora, el primero recoge el
cuchillo y amenaza con él a un tercero: el mismo efecto. Al final todos
yacen por tierra, inconscientes pero sonrientes aún, y muy lentamente
van reanimándose. Algunas personas mayores observan con gesto de
enfado el juego, uno murmura: «¡Qué infantilismo!». La intérprete explica
que el juego es completamente inofensivo. En su voz, Ehwald cree notar
un cierto pesar.
Ahora, el viajero comienza a interesarse por la cultura de ese mundo:
¿cómo es el arte, cómo está conformada la ética, la religión de esos
hombres? En primer lugar, es llevado a un concierto y sufre un shock. Lo
que allí escucha le pone los pelos de punta. La llamada música es un
infierno de agresividad, en comparación con la cual los más salvajes
ritmos de rock actuales resultan ser canciones infantiles. En segundo
lugar, lo llevan a un holo, lo que corresponde más o menos a nuestros
cines actuales, sólo que las proyecciones son tridimensionales y
completamente realistas. El espectador se encuentra en medio de ellas.
Nunca hasta entonces había visto Ehwald tal acumulación de cosas
repugnantes, de violencia, sadismo y brutalidad. Al final tiene que
vomitar, pero los demás espectadores, incluida la joven intérprete,
parecen habérselo pasado muy bien.
Finalmente, Ehwald se refugia en una iglesia, esperando encontrar, al
menos allí, algo distinto. Pero esas instituciones del futuro no tienen nada
en común con las que él conoce. Allí tampoco encuentra sino
representaciones de las más espantosas torturas y tormentos; el ritual al
que asiste le parece una pura blasfemia, un ensalzamiento de la infamia y
el mal. Completamente trastornado, Ehwald regresa a su museo. No
entiende cómo se ha podido llegar a tal estado de cosas, qué ha
sucedido.
En el tiempo que aún le queda busca respuesta en los colegas,
quienes, con la amabilidad que los caracteriza, le dan todas las
informaciones: no depende ya de la voluntad de los hombres -eso le
explican- sino que a éstos les es literalmente imposible hacerse daño
unos a otros, más aún, les es imposible obrar el mal. El mal existe sólo en
la ficción, allí donde, por así decir, sólo puede surgir de una forma irreal,
no pudiendo por eso hacer daño a nadie. Es sólo imaginable -y por eso
Lasaf productions
como un deseo soñado-, pero no puede ser llevado a la práctica. Los
hombres son físicamente incapaces de ello. En cuanto uno decide de
verdad hacer algo que pudiera dañar a otro, pierde el conocimiento. Y
justamente porque está fuera del alcance, el mal es venerado y adorado.
A este proceso han contribuido en alto grado -le explican ahora a él- los
descubrimientos de Ehwald en el campo de la fisiología cerebral. Ellos
hicieron posible la manipulación del llamado «hielo negro» en el cerebelo,
una estructura celular molecular en la que tienen lugar las decisiones
morales. A principios del siglo XXI se supo que la recién descubierta
radiación de Kelber ejerce en ese centro una influencia que imposibilita
los actos criminales e inmorales pues, cuando se presenta un caso así,
tiene lugar una especie de efecto retroactivo que lleva a la pérdida del
conocimiento en la persona correspondiente. Al principio, el tratamiento
se aplicó a los delincuentes. Su capacidad de cometer delitos pudo ser
eliminada mediante una radiación continua sin secuelas de enfermedad,
como pasaba antes con la lobotomía. Justamente ellos se convirtieron
después en miembros especialmente útiles de la sociedad humana.
- Bueno, sí -grita Ehwald-, con los delincuentes, pase, pero ¿qué
ocurre con los otros? La humanidad no consta únicamente de
delincuentes.
Indudablemente, le responden, pero de eso, en definitiva, ya no se
podía uno fiar. Con el tiempo, el progreso científico y técnico había traído
inevitablemente consigo que todos sus logros estuviesen más a
disposición de todo el mundo. Era un proceso imparable. En los tiempos
de Ehwald todavía se mantenía un cierto secreto -para mencionar esto
sólo a manera de ejemplo- en lo concerniente a las armas genocidas.
Había acuerdos sobre la prohibición de armas nucleares y cosas
semejantes. Pero eso, lógicamente, no podía ser efectivo a largo plazo.
Llegó un momento en que cualquier estudiante de bachillerato podía
elaborar, con la técnica de los genes, su propia plaga de la humanidad,
cualquier reyezuelo megalómano podía construir su propia bomba
atómica con la que eliminar toda vida en la tierra. La humanidad estaba
así sometida al chantaje de cualquier suicida celoso que quisiera
vengarse del mundo injusto o de su amante infiel exigiendo cosas
absurdas. Los secuestros de aviones en la época de Ehwald fueron sólo
un inofensivo comienzo, pero cuanto más complejo era el sistema y más
disponible estaba, tanto más se iba exponiendo éste a todo género de
abusos. Por eso no quedó otra solución que ser consecuente, a la vista
de ese proceso irreversible, y eliminar radicalmente cualquier posibilidad
de abuso para garantizar la supervivencia de la especie humana. Y eso
fue decidido, hace más de una generación, por el Consejo superior de
Seguridad Mundial y puesto en práctica por los científicos. Entretanto
existe ya una emisora de rayos, que se procura a sí misma energía y que
por vía satélite envuelve a la tierra entera en la radiación de Kelber. Desde
entonces, la cuestión del bien y del mal ya no existe, sólo se interesan por
ella algunos historiadores.
- ¡Hay que destruir sin falta esa emisora! -tartamudea Ehwald.
Lasaf productions
Eso, le dicen, es completamente imposible. Se han tomado medidas
preventivas para evitar de todas todas ser otra vez objeto de chantaje.
NIngún ser vivo puede alcanzar, y menos aún desconectar, esa emisora.
La propia radiación de Kelber lo impide. Y eso está bien, opinan
unánimemente los colegas. Sólo hay que pensar, dicen, en lo que
sucedería, dada la disposición de ánimo que se ha generalizado entre los
hombres, dada su adoración de la violencia y de la brutalidad imaginaria,
si fuese posible desconectar la emisora. Sería, con toda seguridad, el final
de la historia humana y de todo el globo terráqueo.
- Y usted, respetado profesor Ehwald, tendrá que opinar con
nosotros que una humanidad viva sin libertad de decisión moral es mejor
que una humanidad que, con toda seguridad, se exterminaría a sí misma,
pues para ello seria ya suficiente un único criminal, loco o falto de
escrúpulos.
El profesor Dr. Karl-Ludwig Ehwald es catapultado a su propio
tiempo. Aquella misma tarde reduce a cenizas, en la chimenea de su
estudio, los resultados, esperados por todo el mundo, de su trabajo de
investigación de cuarenta años sobre el complejo celular del cerebro
humano que en siglos posteriores recibiría el nombre de «hielo negro».
No sabe que en la universidad de Heidelberg un joven investigador,
basándose en las publicaciones anteriores de Ehwald, descubre en ese
mismo instante las mismas células.
Michael Ende
Carpeta de apuntes
Lasaf productions

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

132145584 el-caso-de-charles-dexter-ward-0-3-1-pdf
132145584 el-caso-de-charles-dexter-ward-0-3-1-pdf132145584 el-caso-de-charles-dexter-ward-0-3-1-pdf
132145584 el-caso-de-charles-dexter-ward-0-3-1-pdfNovato de la Weeb Fox Weeb
 
Fidel Catro: La historia me absolverá y otros discursos [2009]
Fidel Catro: La historia me absolverá y otros discursos [2009]Fidel Catro: La historia me absolverá y otros discursos [2009]
Fidel Catro: La historia me absolverá y otros discursos [2009]nuestrocanto
 
91 120 seleccion terror
91 120   seleccion terror91 120   seleccion terror
91 120 seleccion terrorDonGilgamesh
 
El camino de la cabra I
El camino de la cabra IEl camino de la cabra I
El camino de la cabra IEnxebrebooks
 
Fanzinufo 1 Cafe Ovni Valencia
Fanzinufo 1 Cafe Ovni ValenciaFanzinufo 1 Cafe Ovni Valencia
Fanzinufo 1 Cafe Ovni ValenciaNando Mdb
 
El Infierno que Baila Conmigo
El Infierno que Baila ConmigoEl Infierno que Baila Conmigo
El Infierno que Baila ConmigoÁngel Román
 
El Camino de la Cabra II
El Camino de la Cabra II El Camino de la Cabra II
El Camino de la Cabra II Enxebrebooks
 
La Mente de las Celulas
La Mente de las CelulasLa Mente de las Celulas
La Mente de las Celulasczaragon
 
Practica 1 2_6
Practica 1 2_6Practica 1 2_6
Practica 1 2_6RaiGalindo
 
@Lmuerz0 desnud0
@Lmuerz0 desnud0@Lmuerz0 desnud0
@Lmuerz0 desnud0unbornjuice
 
Ovnis, Alto Secreto
Ovnis, Alto SecretoOvnis, Alto Secreto
Ovnis, Alto SecretoPaula Mejía
 
Corazon Delator
Corazon DelatorCorazon Delator
Corazon Delatorademirh
 

La actualidad más candente (17)

132145584 el-caso-de-charles-dexter-ward-0-3-1-pdf
132145584 el-caso-de-charles-dexter-ward-0-3-1-pdf132145584 el-caso-de-charles-dexter-ward-0-3-1-pdf
132145584 el-caso-de-charles-dexter-ward-0-3-1-pdf
 
Fidel Catro: La historia me absolverá y otros discursos [2009]
Fidel Catro: La historia me absolverá y otros discursos [2009]Fidel Catro: La historia me absolverá y otros discursos [2009]
Fidel Catro: La historia me absolverá y otros discursos [2009]
 
Miradas
MiradasMiradas
Miradas
 
91 120 seleccion terror
91 120   seleccion terror91 120   seleccion terror
91 120 seleccion terror
 
El camino de la cabra I
El camino de la cabra IEl camino de la cabra I
El camino de la cabra I
 
Isaac asimov 2430 d.c.
Isaac asimov   2430 d.c.Isaac asimov   2430 d.c.
Isaac asimov 2430 d.c.
 
Fanzinufo 1 Cafe Ovni Valencia
Fanzinufo 1 Cafe Ovni ValenciaFanzinufo 1 Cafe Ovni Valencia
Fanzinufo 1 Cafe Ovni Valencia
 
El Infierno que Baila Conmigo
El Infierno que Baila ConmigoEl Infierno que Baila Conmigo
El Infierno que Baila Conmigo
 
El Camino de la Cabra II
El Camino de la Cabra II El Camino de la Cabra II
El Camino de la Cabra II
 
De la oscuridad
De la oscuridadDe la oscuridad
De la oscuridad
 
La Mente de las Celulas
La Mente de las CelulasLa Mente de las Celulas
La Mente de las Celulas
 
Practica 1 2_6
Practica 1 2_6Practica 1 2_6
Practica 1 2_6
 
@Lmuerz0 desnud0
@Lmuerz0 desnud0@Lmuerz0 desnud0
@Lmuerz0 desnud0
 
"El corazón delator" de Edgar A. Poe
"El corazón delator" de Edgar A. Poe"El corazón delator" de Edgar A. Poe
"El corazón delator" de Edgar A. Poe
 
Ovnis, Alto Secreto
Ovnis, Alto SecretoOvnis, Alto Secreto
Ovnis, Alto Secreto
 
Parcial
ParcialParcial
Parcial
 
Corazon Delator
Corazon DelatorCorazon Delator
Corazon Delator
 

Destacado

Destacado (20)

Republica bolivariana de venezuela instituto universitario politécnico barbara
Republica bolivariana de venezuela instituto universitario politécnico barbaraRepublica bolivariana de venezuela instituto universitario politécnico barbara
Republica bolivariana de venezuela instituto universitario politécnico barbara
 
Fsn205 detection mensongeentrevuecognitive
Fsn205 detection mensongeentrevuecognitiveFsn205 detection mensongeentrevuecognitive
Fsn205 detection mensongeentrevuecognitive
 
Tecnologia
TecnologiaTecnologia
Tecnologia
 
Parque Industrial Vergel
Parque Industrial VergelParque Industrial Vergel
Parque Industrial Vergel
 
Practica 2
Practica 2Practica 2
Practica 2
 
Creatividad acción y servicio
Creatividad acción y servicioCreatividad acción y servicio
Creatividad acción y servicio
 
Le surrealisme
Le surrealismeLe surrealisme
Le surrealisme
 
Sistemas operativos android
Sistemas operativos androidSistemas operativos android
Sistemas operativos android
 
Herramientas de aplicación Cuadernia
Herramientas de aplicación CuaderniaHerramientas de aplicación Cuadernia
Herramientas de aplicación Cuadernia
 
proceso productivo: El gorro de lana.
proceso productivo: El gorro de lana.proceso productivo: El gorro de lana.
proceso productivo: El gorro de lana.
 
Método Científico
Método CientíficoMétodo Científico
Método Científico
 
2008 Toyota Matrix 63,178 miles $11,900
2008 Toyota Matrix 63,178 miles $11,9002008 Toyota Matrix 63,178 miles $11,900
2008 Toyota Matrix 63,178 miles $11,900
 
Las colaciones
Las colacionesLas colaciones
Las colaciones
 
Pol 05-04
Pol 05-04Pol 05-04
Pol 05-04
 
Presentación02
Presentación02Presentación02
Presentación02
 
Le Royaume-uni et la PAC
Le Royaume-uni et la PACLe Royaume-uni et la PAC
Le Royaume-uni et la PAC
 
Rapport de-campagne normandie
Rapport de-campagne normandieRapport de-campagne normandie
Rapport de-campagne normandie
 
Actividad final
Actividad finalActividad final
Actividad final
 
futbol
futbolfutbol
futbol
 
Dossier de production groupe n°143
Dossier de production groupe n°143Dossier de production groupe n°143
Dossier de production groupe n°143
 

Similar a 00022 - michael ende - la consecuencia

Artaudantonin vangogh
Artaudantonin vangoghArtaudantonin vangogh
Artaudantonin vangoghEloy Libertad
 
Capitulo 1 libro
Capitulo 1   libroCapitulo 1   libro
Capitulo 1 libroKyoumaShu
 
REVISTA MAS ALLA-016 levitacion-ma016
REVISTA MAS ALLA-016 levitacion-ma016REVISTA MAS ALLA-016 levitacion-ma016
REVISTA MAS ALLA-016 levitacion-ma016Nombre Apellidos
 
Lo maravilloso. 30 3-1910, n.º 24
Lo maravilloso. 30 3-1910, n.º 24 Lo maravilloso. 30 3-1910, n.º 24
Lo maravilloso. 30 3-1910, n.º 24 cienciaspsiquicas
 
Duque Félix - Filosofía para el fin de los Tiempos -.pdf
Duque Félix - Filosofía para el fin de los Tiempos -.pdfDuque Félix - Filosofía para el fin de los Tiempos -.pdf
Duque Félix - Filosofía para el fin de los Tiempos -.pdfFernandoJosVergaraHe
 
Filosofía Para El Fin De Los Tiempos Tecnología Y Apocalipsis (Akal 2000) - F...
Filosofía Para El Fin De Los Tiempos Tecnología Y Apocalipsis (Akal 2000) - F...Filosofía Para El Fin De Los Tiempos Tecnología Y Apocalipsis (Akal 2000) - F...
Filosofía Para El Fin De Los Tiempos Tecnología Y Apocalipsis (Akal 2000) - F...ManuelGuillnMonje
 
sexo drogas biologia y un poco de rock and roll.pdf
sexo drogas biologia y un poco de rock and roll.pdfsexo drogas biologia y un poco de rock and roll.pdf
sexo drogas biologia y un poco de rock and roll.pdfpatriciasauto20
 
61 90 - seleccion terror
61   90 - seleccion terror61   90 - seleccion terror
61 90 - seleccion terrorDonGilgamesh
 
Antologia de texto primero medios 2013
Antologia de texto primero medios 2013Antologia de texto primero medios 2013
Antologia de texto primero medios 2013Raúl Olmedo Burgos
 
Al país de las montañas azules de blavatsky
Al país de las montañas azules de blavatskyAl país de las montañas azules de blavatsky
Al país de las montañas azules de blavatskyOriana Andrade
 
Guías de nivelación iii período comprensión lectora noveno
Guías de nivelación iii período comprensión lectora novenoGuías de nivelación iii período comprensión lectora noveno
Guías de nivelación iii período comprensión lectora novenowilmer ibañez
 
verdad y mentira en sentido extramoral- Nietszche.pdf
verdad y mentira en sentido extramoral- Nietszche.pdfverdad y mentira en sentido extramoral- Nietszche.pdf
verdad y mentira en sentido extramoral- Nietszche.pdfrodrigopedrosa25
 
CINEFILO - Fragmentos de un mundo feliz de ALDOUS HUXLEY
CINEFILO - Fragmentos de un mundo feliz de ALDOUS HUXLEYCINEFILO - Fragmentos de un mundo feliz de ALDOUS HUXLEY
CINEFILO - Fragmentos de un mundo feliz de ALDOUS HUXLEYMafe Cajina
 
El viaje del beagle espacial
El viaje del beagle espacialEl viaje del beagle espacial
El viaje del beagle espacialLeandro Leo
 
8-3-12citasyreferenciasbibliograficasgerlygomez
8-3-12citasyreferenciasbibliograficasgerlygomez8-3-12citasyreferenciasbibliograficasgerlygomez
8-3-12citasyreferenciasbibliograficasgerlygomezgerlicita1133
 

Similar a 00022 - michael ende - la consecuencia (20)

Artaudantonin vangogh
Artaudantonin vangoghArtaudantonin vangogh
Artaudantonin vangogh
 
Capitulo 1 libro
Capitulo 1   libroCapitulo 1   libro
Capitulo 1 libro
 
REVISTA MAS ALLA-016 levitacion-ma016
REVISTA MAS ALLA-016 levitacion-ma016REVISTA MAS ALLA-016 levitacion-ma016
REVISTA MAS ALLA-016 levitacion-ma016
 
Lo maravilloso. 30 3-1910, n.º 24
Lo maravilloso. 30 3-1910, n.º 24 Lo maravilloso. 30 3-1910, n.º 24
Lo maravilloso. 30 3-1910, n.º 24
 
Duque Félix - Filosofía para el fin de los Tiempos -.pdf
Duque Félix - Filosofía para el fin de los Tiempos -.pdfDuque Félix - Filosofía para el fin de los Tiempos -.pdf
Duque Félix - Filosofía para el fin de los Tiempos -.pdf
 
Filosofía Para El Fin De Los Tiempos Tecnología Y Apocalipsis (Akal 2000) - F...
Filosofía Para El Fin De Los Tiempos Tecnología Y Apocalipsis (Akal 2000) - F...Filosofía Para El Fin De Los Tiempos Tecnología Y Apocalipsis (Akal 2000) - F...
Filosofía Para El Fin De Los Tiempos Tecnología Y Apocalipsis (Akal 2000) - F...
 
Taller IV Sociales
Taller IV SocialesTaller IV Sociales
Taller IV Sociales
 
Taller IV Sociales
Taller IV SocialesTaller IV Sociales
Taller IV Sociales
 
sexo drogas biologia y un poco de rock and roll.pdf
sexo drogas biologia y un poco de rock and roll.pdfsexo drogas biologia y un poco de rock and roll.pdf
sexo drogas biologia y un poco de rock and roll.pdf
 
Revistas 2 ccpp
Revistas 2 ccppRevistas 2 ccpp
Revistas 2 ccpp
 
61 90 - seleccion terror
61   90 - seleccion terror61   90 - seleccion terror
61 90 - seleccion terror
 
Antologia de texto primero medios 2013
Antologia de texto primero medios 2013Antologia de texto primero medios 2013
Antologia de texto primero medios 2013
 
Al país de las montañas azules de blavatsky
Al país de las montañas azules de blavatskyAl país de las montañas azules de blavatsky
Al país de las montañas azules de blavatsky
 
Al país de las montañas azules - Helena Blavatsky
Al país de las montañas azules - Helena BlavatskyAl país de las montañas azules - Helena Blavatsky
Al país de las montañas azules - Helena Blavatsky
 
Antropología gnostica
Antropología gnosticaAntropología gnostica
Antropología gnostica
 
Guías de nivelación iii período comprensión lectora noveno
Guías de nivelación iii período comprensión lectora novenoGuías de nivelación iii período comprensión lectora noveno
Guías de nivelación iii período comprensión lectora noveno
 
verdad y mentira en sentido extramoral- Nietszche.pdf
verdad y mentira en sentido extramoral- Nietszche.pdfverdad y mentira en sentido extramoral- Nietszche.pdf
verdad y mentira en sentido extramoral- Nietszche.pdf
 
CINEFILO - Fragmentos de un mundo feliz de ALDOUS HUXLEY
CINEFILO - Fragmentos de un mundo feliz de ALDOUS HUXLEYCINEFILO - Fragmentos de un mundo feliz de ALDOUS HUXLEY
CINEFILO - Fragmentos de un mundo feliz de ALDOUS HUXLEY
 
El viaje del beagle espacial
El viaje del beagle espacialEl viaje del beagle espacial
El viaje del beagle espacial
 
8-3-12citasyreferenciasbibliograficasgerlygomez
8-3-12citasyreferenciasbibliograficasgerlygomez8-3-12citasyreferenciasbibliograficasgerlygomez
8-3-12citasyreferenciasbibliograficasgerlygomez
 

Más de Lasafproductions

00028 - albert einstein - la convención sobre el desarme de 1932
00028 - albert einstein - la convención sobre el desarme de 193200028 - albert einstein - la convención sobre el desarme de 1932
00028 - albert einstein - la convención sobre el desarme de 1932Lasafproductions
 
00027 - albert einstein - este es mi pueblo
00027 - albert einstein - este es mi pueblo00027 - albert einstein - este es mi pueblo
00027 - albert einstein - este es mi puebloLasafproductions
 
00025 - michael ende - trotamundos
00025 - michael ende - trotamundos00025 - michael ende - trotamundos
00025 - michael ende - trotamundosLasafproductions
 
00021 - michael ende - esperanza perdida
00021 - michael ende - esperanza perdida00021 - michael ende - esperanza perdida
00021 - michael ende - esperanza perdidaLasafproductions
 
00019 - óscar wilde - el ruiseñor y la rosa
00019 - óscar wilde - el ruiseñor y la rosa00019 - óscar wilde - el ruiseñor y la rosa
00019 - óscar wilde - el ruiseñor y la rosaLasafproductions
 

Más de Lasafproductions (6)

00028 - albert einstein - la convención sobre el desarme de 1932
00028 - albert einstein - la convención sobre el desarme de 193200028 - albert einstein - la convención sobre el desarme de 1932
00028 - albert einstein - la convención sobre el desarme de 1932
 
00027 - albert einstein - este es mi pueblo
00027 - albert einstein - este es mi pueblo00027 - albert einstein - este es mi pueblo
00027 - albert einstein - este es mi pueblo
 
00025 - michael ende - trotamundos
00025 - michael ende - trotamundos00025 - michael ende - trotamundos
00025 - michael ende - trotamundos
 
00021 - michael ende - esperanza perdida
00021 - michael ende - esperanza perdida00021 - michael ende - esperanza perdida
00021 - michael ende - esperanza perdida
 
00019 - óscar wilde - el ruiseñor y la rosa
00019 - óscar wilde - el ruiseñor y la rosa00019 - óscar wilde - el ruiseñor y la rosa
00019 - óscar wilde - el ruiseñor y la rosa
 
Matematicas.
Matematicas.Matematicas.
Matematicas.
 

Último

Una sirena en París.::: Mathias Malzieu.
Una sirena en París.::: Mathias Malzieu.Una sirena en París.::: Mathias Malzieu.
Una sirena en París.::: Mathias Malzieu.aloisius93
 
Lotería Mexicana - todas las cartas de 1 a la 54
Lotería Mexicana - todas las cartas de 1 a la 54Lotería Mexicana - todas las cartas de 1 a la 54
Lotería Mexicana - todas las cartas de 1 a la 54anamapumarejo
 
Pétalos de papel. Versión definitiva.pdf
Pétalos de papel. Versión definitiva.pdfPétalos de papel. Versión definitiva.pdf
Pétalos de papel. Versión definitiva.pdfEVELIAGARCIACARO1
 
El Año Litúrgico es el desarrollo de los misterios de Cristo. sus tiempos, ce...
El Año Litúrgico es el desarrollo de los misterios de Cristo. sus tiempos, ce...El Año Litúrgico es el desarrollo de los misterios de Cristo. sus tiempos, ce...
El Año Litúrgico es el desarrollo de los misterios de Cristo. sus tiempos, ce...Josué Guillermo Peñate Reyes
 
reseña libro El Perfume de Patrick Süskind
reseña libro El Perfume de Patrick Süskindreseña libro El Perfume de Patrick Süskind
reseña libro El Perfume de Patrick Süskindtatianasuarez87
 
teorias de la vida del origen de ser humano
teorias de la vida del origen de ser humanoteorias de la vida del origen de ser humano
teorias de la vida del origen de ser humanoJenry8
 

Último (6)

Una sirena en París.::: Mathias Malzieu.
Una sirena en París.::: Mathias Malzieu.Una sirena en París.::: Mathias Malzieu.
Una sirena en París.::: Mathias Malzieu.
 
Lotería Mexicana - todas las cartas de 1 a la 54
Lotería Mexicana - todas las cartas de 1 a la 54Lotería Mexicana - todas las cartas de 1 a la 54
Lotería Mexicana - todas las cartas de 1 a la 54
 
Pétalos de papel. Versión definitiva.pdf
Pétalos de papel. Versión definitiva.pdfPétalos de papel. Versión definitiva.pdf
Pétalos de papel. Versión definitiva.pdf
 
El Año Litúrgico es el desarrollo de los misterios de Cristo. sus tiempos, ce...
El Año Litúrgico es el desarrollo de los misterios de Cristo. sus tiempos, ce...El Año Litúrgico es el desarrollo de los misterios de Cristo. sus tiempos, ce...
El Año Litúrgico es el desarrollo de los misterios de Cristo. sus tiempos, ce...
 
reseña libro El Perfume de Patrick Süskind
reseña libro El Perfume de Patrick Süskindreseña libro El Perfume de Patrick Süskind
reseña libro El Perfume de Patrick Süskind
 
teorias de la vida del origen de ser humano
teorias de la vida del origen de ser humanoteorias de la vida del origen de ser humano
teorias de la vida del origen de ser humano
 

00022 - michael ende - la consecuencia

  • 1. La consecuencia Borrador para un relato de ciencia-ficción El profesor Karl-Ludwig Ehwald, premio Nobel por sus trascendentales descubrimientos en el campo de la fisiología cerebral, se queda un día dormido, en un súbito e inexplicable ataque de sueño, sobre su mesa de trabajo. Al despertar se encuentra en un futuro no muy lejano, más o menos en el año 2237. El lugar sigue siendo su estudio, que no ha sufrido ningún cambio, pero que se halla ahora en el Museo Karl-Ludwig Ehwald. Es saludado por algunos científicos que se presentan a él como sus hijos espirituales. Le explican que no está viviendo en absoluto un sueño. Hasta le demuestran, en la medida en que ello es posible, que lo que le rodea es realidad. Tales experiencias de saltos en el tiempo se deben a un corrimiento temporal en los paralajes, que para entonces ya se puede calcular previamente pero todavía no generar a voluntad. Se trata de un fenómeno, por así decir, natural, que ya antes era conocido, pero mal interpretado. En cualquier caso -le explican- el viajar a voluntad a través de los tiempos no es posible. El periodo de tiempo que dura el fenómeno y del cual, por consiguiente, dispone él asciende a sesenta y dos horas y treinta y ocho minutos. Pasado este tiempo, deberá regresar, pero eso sucede por sí solo, le dicen, por eso no tiene que preocuparse. Ehwald decide conocer lo más a fondo posible ese para él mundo futuro y sus progresos. Se le da, con la mayor gentileza, toda libertad, se le procura vestimenta adecuada a los tiempos y todo lo necesario y hasta se le pone a disposición una joven intérprete (germanista), pues el lenguaje ha sufrido lógicamente grandes cambios, y muchas palabras le resultan desconocidas. El nuevo mundo que descubre le resulta casi paradisiaco. Todas las personas que encuentra son de una extraordinaria mansedumbre y amabilidad, para el gusto de Ehwald todo lo más un poquito aletargadas. Se entera de que ya no hay criminalidad, agresiones o comportamiento inmoral, o sea, nada que haga daño a los demás o a uno mismo. Tampoco son posibles los accidentes de tráfico, pues para entonces todas las máquinas son de una seguridad absoluta y se adelantan a cualquier decisión de las personas. Tampoco existe el suicidio, y las guerras son totalmente inimaginables. Incluso el matar a los animales para la poca carne que se necesita (casi todos los hombres son vegetarianos) se hace por medio de máquinas que, con absoluta garantía, no causan ningún 00022 Lasaf productions
  • 2. género de dolor. Tampoco hay combates de boxeo ni otros deportes violentos, que exciten las agresiones, sólo bailes en grupo y juegos de destreza. Una vez, sin embargo, observa Ehwald a un grupo de jóvenes que están en un patio retirado y que con los torsos desnudos parecen entregados a un extraño juego: uno está de pie, sonriente, y grita algo, tras lo cual otro joven, igualmente sonriente, le amenaza con un afiladísimo cuchillo. La discusión parece que reduce un poco su inercia, finalmente el segundo joven alza el cuchillo como para clavarlo, pero en el mismo instante cae al suelo como tocado por el rayo. Ahora, el primero recoge el cuchillo y amenaza con él a un tercero: el mismo efecto. Al final todos yacen por tierra, inconscientes pero sonrientes aún, y muy lentamente van reanimándose. Algunas personas mayores observan con gesto de enfado el juego, uno murmura: «¡Qué infantilismo!». La intérprete explica que el juego es completamente inofensivo. En su voz, Ehwald cree notar un cierto pesar. Ahora, el viajero comienza a interesarse por la cultura de ese mundo: ¿cómo es el arte, cómo está conformada la ética, la religión de esos hombres? En primer lugar, es llevado a un concierto y sufre un shock. Lo que allí escucha le pone los pelos de punta. La llamada música es un infierno de agresividad, en comparación con la cual los más salvajes ritmos de rock actuales resultan ser canciones infantiles. En segundo lugar, lo llevan a un holo, lo que corresponde más o menos a nuestros cines actuales, sólo que las proyecciones son tridimensionales y completamente realistas. El espectador se encuentra en medio de ellas. Nunca hasta entonces había visto Ehwald tal acumulación de cosas repugnantes, de violencia, sadismo y brutalidad. Al final tiene que vomitar, pero los demás espectadores, incluida la joven intérprete, parecen habérselo pasado muy bien. Finalmente, Ehwald se refugia en una iglesia, esperando encontrar, al menos allí, algo distinto. Pero esas instituciones del futuro no tienen nada en común con las que él conoce. Allí tampoco encuentra sino representaciones de las más espantosas torturas y tormentos; el ritual al que asiste le parece una pura blasfemia, un ensalzamiento de la infamia y el mal. Completamente trastornado, Ehwald regresa a su museo. No entiende cómo se ha podido llegar a tal estado de cosas, qué ha sucedido. En el tiempo que aún le queda busca respuesta en los colegas, quienes, con la amabilidad que los caracteriza, le dan todas las informaciones: no depende ya de la voluntad de los hombres -eso le explican- sino que a éstos les es literalmente imposible hacerse daño unos a otros, más aún, les es imposible obrar el mal. El mal existe sólo en la ficción, allí donde, por así decir, sólo puede surgir de una forma irreal, no pudiendo por eso hacer daño a nadie. Es sólo imaginable -y por eso Lasaf productions
  • 3. como un deseo soñado-, pero no puede ser llevado a la práctica. Los hombres son físicamente incapaces de ello. En cuanto uno decide de verdad hacer algo que pudiera dañar a otro, pierde el conocimiento. Y justamente porque está fuera del alcance, el mal es venerado y adorado. A este proceso han contribuido en alto grado -le explican ahora a él- los descubrimientos de Ehwald en el campo de la fisiología cerebral. Ellos hicieron posible la manipulación del llamado «hielo negro» en el cerebelo, una estructura celular molecular en la que tienen lugar las decisiones morales. A principios del siglo XXI se supo que la recién descubierta radiación de Kelber ejerce en ese centro una influencia que imposibilita los actos criminales e inmorales pues, cuando se presenta un caso así, tiene lugar una especie de efecto retroactivo que lleva a la pérdida del conocimiento en la persona correspondiente. Al principio, el tratamiento se aplicó a los delincuentes. Su capacidad de cometer delitos pudo ser eliminada mediante una radiación continua sin secuelas de enfermedad, como pasaba antes con la lobotomía. Justamente ellos se convirtieron después en miembros especialmente útiles de la sociedad humana. - Bueno, sí -grita Ehwald-, con los delincuentes, pase, pero ¿qué ocurre con los otros? La humanidad no consta únicamente de delincuentes. Indudablemente, le responden, pero de eso, en definitiva, ya no se podía uno fiar. Con el tiempo, el progreso científico y técnico había traído inevitablemente consigo que todos sus logros estuviesen más a disposición de todo el mundo. Era un proceso imparable. En los tiempos de Ehwald todavía se mantenía un cierto secreto -para mencionar esto sólo a manera de ejemplo- en lo concerniente a las armas genocidas. Había acuerdos sobre la prohibición de armas nucleares y cosas semejantes. Pero eso, lógicamente, no podía ser efectivo a largo plazo. Llegó un momento en que cualquier estudiante de bachillerato podía elaborar, con la técnica de los genes, su propia plaga de la humanidad, cualquier reyezuelo megalómano podía construir su propia bomba atómica con la que eliminar toda vida en la tierra. La humanidad estaba así sometida al chantaje de cualquier suicida celoso que quisiera vengarse del mundo injusto o de su amante infiel exigiendo cosas absurdas. Los secuestros de aviones en la época de Ehwald fueron sólo un inofensivo comienzo, pero cuanto más complejo era el sistema y más disponible estaba, tanto más se iba exponiendo éste a todo género de abusos. Por eso no quedó otra solución que ser consecuente, a la vista de ese proceso irreversible, y eliminar radicalmente cualquier posibilidad de abuso para garantizar la supervivencia de la especie humana. Y eso fue decidido, hace más de una generación, por el Consejo superior de Seguridad Mundial y puesto en práctica por los científicos. Entretanto existe ya una emisora de rayos, que se procura a sí misma energía y que por vía satélite envuelve a la tierra entera en la radiación de Kelber. Desde entonces, la cuestión del bien y del mal ya no existe, sólo se interesan por ella algunos historiadores. - ¡Hay que destruir sin falta esa emisora! -tartamudea Ehwald. Lasaf productions
  • 4. Eso, le dicen, es completamente imposible. Se han tomado medidas preventivas para evitar de todas todas ser otra vez objeto de chantaje. NIngún ser vivo puede alcanzar, y menos aún desconectar, esa emisora. La propia radiación de Kelber lo impide. Y eso está bien, opinan unánimemente los colegas. Sólo hay que pensar, dicen, en lo que sucedería, dada la disposición de ánimo que se ha generalizado entre los hombres, dada su adoración de la violencia y de la brutalidad imaginaria, si fuese posible desconectar la emisora. Sería, con toda seguridad, el final de la historia humana y de todo el globo terráqueo. - Y usted, respetado profesor Ehwald, tendrá que opinar con nosotros que una humanidad viva sin libertad de decisión moral es mejor que una humanidad que, con toda seguridad, se exterminaría a sí misma, pues para ello seria ya suficiente un único criminal, loco o falto de escrúpulos. El profesor Dr. Karl-Ludwig Ehwald es catapultado a su propio tiempo. Aquella misma tarde reduce a cenizas, en la chimenea de su estudio, los resultados, esperados por todo el mundo, de su trabajo de investigación de cuarenta años sobre el complejo celular del cerebro humano que en siglos posteriores recibiría el nombre de «hielo negro». No sabe que en la universidad de Heidelberg un joven investigador, basándose en las publicaciones anteriores de Ehwald, descubre en ese mismo instante las mismas células. Michael Ende Carpeta de apuntes Lasaf productions