2. Objetivo:
Proporcionar a los matrimonios Coordinadores los
conocimientos y herramientas necesarias para
transmitir el mensaje de uno de los más importantes
tiempos litúrgicos de la Iglesia Católica: Adviento-
Navidad
3. Introducción
Con el Adviento la Iglesia Católica inicia un nuevo
Año Litúrgico.
El Adviento nació como tiempo de preparación
para celebrar la fiesta de la Navidad.
Una vez preparados los corazones nos disponemos
a celebrar el Nacimiento de Jesús.
4. Ciclo Litúrgico
Está dividido en tiempos, que se refiere a las distintas
épocas de la vida de Jesús, y así durante sus transcurso nos
conduce de un Cristo niño (Adviento-Navidad) a un Cristo
probado en la tentación (Cuaresma) pasando por un Cristo
Glorioso y Resucitado (Pascua) para contemplar a un Cristo
que es Rey del universo, principio y fin de todo lo creado,
origen y meta de nuestro peregrinar.
5. Año Litúrgico
Se organiza de manera diferente al calendario civil, pues la
unidad de medida a usar son las “semanas”. Tomando en
cuenta que nuestro día principal es el Domingo: Día del Señor
(porque es el día que resucitó)
El Año Litúrgico está centrado en
la Pascua de Cristo, o sea, en su
obra de Redención-Alianza que
se realiza con su muerte y
resurrección, síntesis de todo el
misterio de salvación.
6. Calendario Litúrgico
Se presenta organizado como un ciclo anual de los misterios de
Cristo y de las fiestas de la Virgen María y los Santos y tiene la
finalidad de insertar en el tiempo, la realidad de salvación que
se tiene en Cristo.
Para elaborarlo cada año se
ubica primeramente la
Pascua de Resurrección,
como fue fijada por el
Concilio de Nicea (año 325)
que cae entre el 21 de
marzo y 26 de Abril y puede
variar en 37 días su
situación en el calendario
normal.
7. Significado de Adviento
Al celebrar la Iglesia el Adviento, te invita a meditar en la
venida del Señor. Esta venida se nos presenta en tres
dimensiones:
Adviento Histórico: Es la espera en que vivieron los
pueblos que ansiaban la venida del Salvador. Va desde Adán
hasta la encarnación, abarca todo el Antiguo Testamento.
Escuchar en las lecturas a los Profetas, nos deja una
enseñanza importante para preparar los corazones a la
llegada.
8. Adviento Místico: Es la
preparación moral del
hombre de hoy a la venida
del Señor. Es un Adviento
actual. Es tiempo propicio
para la evangelización y la
oración que dispone al
hombre, como persona y a
la comunidad
humana, como sociedad, a
aceptar la salvación que
viene del Señor. Jesús es el
Señor que viene
constantemente al hombre.
Es necesario que el hombre
se percate de esta
realidad, para estar con el
corazón abierto, listo para
que entre el Señor.
9. Adviento Escatológico: Es
la preparación a la llegada
definitiva del Señor, al final
de los tiempos, cuando
vendrá para coronar
definitivamente su obra
redentora, dando a cada
uno según sus obras. La
Iglesia invita al hombre a
no esperar este tiempo con
temor y angustia, sino con
la esperanza de que cuando
esto ocurra, será para la
felicidad eterna del hombre
que aceptó a Jesús como su
salvador.
10. Esquema del Adviento
Iniciamos con las vísperas del domingo más cercano al 30 de
Noviembre y termina antes de las vísperas de la Navidad. Los
domingos de este tiempo se llaman 1º, 2º, 3º y 4º de Adviento
El color de los ornamentos
del altar y la vestidura del
sacerdote es el morado,
igual que en Cuaresma, que
simboliza austeridad y
penitencia.
11. 1º Domingo de Adviento
La vigilancia en espera de la venida del Señor.
Durante esta primer semana las lecturas bíblicas y la
predicación son una invitación con las palabras del Evangelio:
“Velen y estén preparados, que no saben cuando llegará el momento”
Avanzando en el camino hacia la
Navidad, debemos buscar el
perdón de quienes hemos
ofendido y darlo a quienes nos
hayan ofendido para comenzar el
Adviento viviendo en un
ambiente de armonía y amor.
Esta semana en familia
encendemos la primera vela de la
Corona de Adviento, color
morada, como signo de vigilancia
y deseos de conversión.
12. 2º Domingo de Adviento
La conversión, nota predominante de la predicación de Juan Bautista.
Durante la segunda semana, la liturgia nos invita a reflexionar
con la exhortación del profeta Juan Bautista: “Preparen el
camino, Jesús llega”
En la semana anterior nos
reconciliamos con las personas que
nos rodean; ahora la iglesia nos
invita a acudir al Sacramento de la
Reconciliación (Confesión) que nos
devuelve la amistad con Dios que
habíamos perdido por el pecado.
Encendemos la segunda vela
morada de la Corona de Adviento,
como signo del proceso de
conversión que estamos viviendo.
13. 3º Domingo de Adviento
El testimonio, que María, la Madre del Señor, vive, sirviendo y
ayudando al prójimo.
Coincide este domingo con la celebración de la Virgen de
Guadalupe, y precisamente la liturgia de Adviento nos invita a
recordar la figura de María.
María que se prepara para ser la
Madre de Jesús y que además está
dispuesta a ayudar y servir a quién
la necesita. Sabemos que María
está siempre acompañando a sus
hijos en la Iglesia, por lo que nos
disponemos a vivir esta tercer
semana de Adviento, meditando
acerca del papel que la Virgen
María desempeñó. Encendemos
como signo de espera gozosa, la
tercer vela, color rosa, de la
Corona de Adviento.
14. 4º Domingo de Adviento
El anuncio, del nacimiento de Jesús hecho a José y María.
Las lecturas y la predicación, dirigen su mirada a la disposición
de la Virgen María, ante el anuncio del nacimiento de su Hijo y
nos invita a “Aprender de María y aceptar a Cristo que es la
Luz del Mundo”
Como ya está tan próxima la
Navidad, nos hemos reconciliado
con Dios y con nuestros hermanos;
ahora nos queda solamente
esperar la gran fiesta. Como
familia debemos vivir la
armonía, la fraternidad y la alegría
que esta cercana celebración
representa. Encendemos la cuarta
vela de la Corona de Adviento.
15. Corona de Adviento
El círculo de follaje verde, recuerda la eternidad de Dios y nos
hace pensar en los miles de años de espera del Mesías, desde
Adán hasta su nacimiento y en la actual espera de la segunda
venida de Cristo. El color verde significa la esperanza de la
vida
Las cuatro velas que se colocan
alrededor, significan la luz que
disipan la tinieblas del pecado,
pueden ser tres de color morado,
que hablan del deseo de
conversión y una rosa que habla
de la alegría vivida con María, por
la inminente llegada de Jesús.
La vela blanca en el centro es la luz de Jesús que con su
nacimiento, viene a iluminar definitivamente la vida del hombre.
16. Celebración
Es una costumbre que reúne a la familia, pues es allí en donde
se sugiere la celebración. La familia unida hace una oración en
torno a la corona, con alguna meditación alusiva a las lecturas
dominicales.
Se enciende una vela cada semana
cantando algo que hable de la
espera del Salvador. La noche del
24 de diciembre con las cuatro
velas encendidas, se enciende por
último la vela blanca cantando
villancicos y se “acuesta al niño
Jesús” en el nacimiento, como de
costumbre, desde luego después
de haber leído el Evangelio del
relato del Nacimiento en Belén y
de haber hecho una reflexión y
oración todos juntos.
17. También existen otros significados de los colores de las velas:
Vela Blanca: Dios y hombre verdadero, sin pecado.
Vela Morada: Señal de penitencia, de conversión.
Vela Roja: Nos recuerda la actitud de amor de Dios
Vela Rosa: Alegría, el gozo que dará al hombre la venida de Jesús.
18. Navidad
Recordar el inicio de la redención con el Nacimiento del Salvador, el
misterio central de nuestra fe es la Resurrección de Cristo (La
Pascua) como este suceso abarca toda la vida de Jesús, celebrar la
Navidad es solemnizar el proceso inicial de nuestra salvación, de
nuestra Pascua.
Acoger ahora al Señor que quiere
nacer en el corazón del hombre. La
fiesta de Navidad invita a
reflexionar sobre el amor de Dios
que viene a los hombres. El Cristo
que tomó parte en la historia de
los hombres, hace dos mil años,
vive y continúa su misión
salvadora dentro de la misma
historia humana. Navidad es un
acontecimiento divino y humano,
que será siempre actual, mientras
haya un hombre en la tierra.
19. Historia
¿Por qué el 25 de diciembre? La fecha del nacimiento del Señor es
del todo desconocida. Tanto en oriente como en occidente la fecha
fue sugerida por celebraciones paganas dedicadas al culto al sol.
La Iglesia, en su afán de
evangelización, igual que
transformó algunos templos
paganos en
cristianos, cambió la fiesta
dedicada al dios Helios (sol)
en fiesta del Nacimiento de
Cristo (auténtico sol) que
viene al mundo para
iluminar al hombre.
20. Celebración Litúrgica
Con la Misa vespertina del día 24 termina el tiempo de Adviento y se
entra en la celebración del misterio navideño. Se leen textos del
Profeta Isaías, anunciando con alegría la llegada del salvador a
celebrar sus bodas con la humanidad.; de los Hechos de los
Apóstoles, con el primer discurso de San Pablo, que da testimonio de
Cristo, hijo de David, que viene a salvar a su pueblo; y desde luego
del Evangelio con el relato del nacimiento de Jesús en Belén.
21. Posadas
Son una tradición religiosa muy mexicana. Se trata de una novena
que nos prepara a la celebración de la Navidad. Durante estos nueve
días se reúnen las personas siguiendo un itinerario de oración y
reflexión sobre lo que José y María vivieron durante los últimos días
de la espera gozosa de su Hijo.
Hoy, se llama posada a
cualquier fiesta que se hace
con motivo de las fiestas
navideñas; pero muchas
veces están muy lejos de
tener un matiz religioso. Si
tu eres cristiano puedes
ayudar a mantener vivo y
auténtico el sentido de estas
fiestas.
22. Origen de las Posadas
Los primeros misioneros españoles transformaron las fiestas
prehispánicas paganas en fiestas cristianas: Durante el mes de
diciembre del 6 al 26, los antiguos mexicanos celebraban fiestas en
honor de Huitzilopochtli.
Los misioneros aprovecharon
la coincidencia de las fechas
introduciendo la celebración
del nacimiento de Jesús. En
ese tiempo las posadas se
realizaban en el atrio o patio
del templo o de los conventos
y concluían con las llamadas
“misas de aguinaldos”. Poco a
poco esta práctica se fue
extendiendo hacia los barrios
y vecindarios.
23. Significado de las Posadas
Las posadas son fiestas próximas a la Navidad que nos hace recordar
las dificultades que pasaron José y María antes de que Jesús naciera,
este recuerdo nos debe llevar a reflexionar a cerca de nuestra
preparación personal para recibir al Niño Jesús, para ser mejores
personas y abrir nuestro corazón al Salvador.
El caminar por la calle
rezando y cantando nos
recuerda nuestro peregrinar
por la vida para evangelizar.
La comida y los dulces que se
ofrece hablan del gusto de
compartir con los demás la
alegría de estar esperando a
Jesús. Romper la piñata
significa el deseo de romper
con la vida de pecado y
dejarse inundar con los dones
de Dios.
24. Celebración de las Posadas
Las posadas son del 16 al 24 de diciembre, nueve días antes de la
Navidad. Generalmente los anfitriones se preparan con figuras que
representan a José y a María buscando en donde nacerá su Hijo, con
hojas de cantos para pedir posada, las oraciones necesarias y los
villancicos.
Durante los nueve días, se
reúnen los participantes
iniciando: En el nombre del
Padre, del Hijo y del Espíritu
Santo. Se reza enseguida el
Santo Rosario, pidiendo
posada entre cada uno de los
misterios. Al final entran en la
casa anfitriona para
reflexionar sobre una lectura
bíblica, enseguida se saborea
un rico ponche, los dulces y se
rompe la piñata.
25. Pastorelas
Durante la Colonia, los misioneros españoles aprovechaban la fuerte
tradición teatral de la cultura náhuatl para propagar de forma
didáctica la evangelización. Los jesuitas, llegados a la Nueva España
en 1572, ejercieron una amplia influencia en la educación del pueblo,
fueron los principios impulsores de las pastorelas.
Pronto salieron de los
atrios de las Iglesias para
escenificarse en las plazas
y calles de los distintos
pueblos, donde recogen
las costumbres y prácticas
de cada región. Así para
fines del siglo XVI, se
encuentran referencias de
una pastorela propiamente
mexicana.
26. Definición de Pastorela
Son recreaciones de las peripecias que enfrentan los pastores para
llegar a adorar al Niño Jesús. En el camino tiene que luchar con los
demonios que representan los siete pecados capitales, el arcángel
San Miguel libra una intensa batalla con Lucifer y finalmente triunfa
sobre él.
Hoy las pastorelas conservan
el tema central “El Nacimiento
y la adoración del Niño Jesús”,
e incorporando algunos
personajes y situaciones
nuevos o actuales. Nos hacen
reflexionar los obstáculos que
tiene el hombre para adorar a
Jesús, para aceptar su
mensaje y vivir de acuerdo a
su voluntad.
27. Nacimiento
Se atribuye a San Francisco de Asís, quien en 1223 en vísperas de la
Navidad, montó en el bosque de Greccio, el primer nacimiento de que
se tenga noticia, con hombres y animales vivos. Con el paso del
tiempo y la falta de espacio obligó a sustituir personas y animales por
figuras de madera o de barro.
Colocar el nacimiento en la
casa es para recordar el
escenario en el que Dios se
hizo hombre en Belén. El
nacimiento debe de ser el
adorno más importante en la
Navidad. La reunión familiar
de Navidad debe de ser
entorno a el nacimiento.
28. Significado de las Figuras
del Nacimiento
Choza: Representa sencillez y
humildad.
María: Representa la fidelidad y el
amor a Dios, mujer compresiva y
bondadosa.
José: Hombre que inspira obediencia
y fortaleza.
El Niño Jesús: Guía espiritual, que se
aloja en el corazón del hombre para
transmitirle su amor al mundo.
29. Significado de las Figuras
del Nacimiento
Buey: Su misión era mantener caliente
con su aliento, la cuna del niño Jesús.
Sirve como ejemplo a los hombres, para
que mantengan en sus hogares un
ambiente cálido y amoroso.
Burro: Animal más humilde de la
creación, motivo por el cual fue el elegido
para acompañar a María y estar en el
pesebre.
Ovejas: Significan obediencia y
docilidad, inspiran confianza.
Musgo: Hierba que deja pisarse por
todos los pies, sin importar su clase o
posición.
30. Significado de las Figuras
del Nacimiento
El Ángel: Simboliza la bondad, el amor y
la misericordia
Tres Reyes Magos: A través de sus
obsequios (oro, incienso y mirra), le
muestran a Jesús su naturaleza real,
divina, así como su sufrimiento y muerte.
Pastores: Representan la humildad,
sencillez, servicio, ayuda y alegría de los
humanos que cuidan con amor a su
rebaño.
Estrella: Significa renovación.
Representa la luz inagotable y
refrescante que disipa las tinieblas para
darnos esperanza.
31. Árbol de Navidad
La costumbre de adornar árboles o ramas en los últimos días de
diciembre tuvo su origen en el norte de Europa (Alemania), mucho
siglos antes de Cristo. El follaje verde y las luces que los adornaban
estaban asociados al solsticio de invierno, cuando la naturaleza
parece muerta. Se pedía entonces al dios-sol que volviera revistiendo
de luz y color los campos.
Los escandinavos consideraban
al árbol como símbolo de
duración y renovación de vida.
Los egipcios usaban hojas de
palma con 12 brotes como
expresión de la terminación del
año y del triunfo sobre la
muerte. Los romanos decoraban
sus casas con follaje verde signo
de fertilidad. Los judíos en
invierno celebraban la fiesta de
las luces encendiendo durante 8
días velas.
32. Árbol de Navidad
El Cristianismo conocía todas estas tradiciones, pues muchos
cristianos eran paganos convertidos. Comprendieron que era
imposible arrancar las tradiciones y prefirieron darles un sentido
cristiano. Así el árbol y las luces se utilizaron para evocar a Jesús.
Árbol de la Vida, Luz del Mundo.
Para los católicos el árbol con sus
ramas verdes, simboliza la vida
eterna que trajo Cristo al mundo.
Las luces simboliza el advenimiento
de la Luz y la gloria de Dios. La
estrella que se coloca en la cúspide,
es el recuerdo de la Estrella de
Belén que atrajo a los hombres. Los
regalos que se colocan debajo de
él, simbolizan la cantidad de dones
que Dios nos trae con su
Encarnación y que hemos de
compartir unos con otros.
33. La Piñata
Tiene su origen en China. A México llegó por medio de los españoles que
a su vez la conocieron por los italianos. Al principio en Europa la piñata
se adoptó para las festividades de Cuaresma, ya en México, los
misioneros agustinos la utilizaron para divertir, instruir y evangelizar a
los indígenas y se proponía sobre todo las fiestas de Navidad.
La figura tradicional es una estrella con
siete picos que significan los pecados
capitales. La piñata vestida de oropeles,
representa al mundo con sus engaños y
vanidades. La venda con que se tapa los
ojos de quien le va a pegar, significa la
fe, el palo, significa la fuerza de la
virtud que rompe la falsedad del
mundo, el romperse la piñata, significa
que se rompe con el pecado y la
seducción del mundo; los dulces o
frutas que caen de ella, significa la
verdad y los dones que se derraman
sobre el hombre.
34. La Epifanía
La EPIFANIA o manifestación del Señor, evoca la adoración de los
Reyes Magos de Oriente al Niño Jesús, y se celebra el 2º domingo
después de la Navidad y puede ser antes o después del 6 de enero.
Esta fiesta expresa ante todo la universalidad de la salvación y la
manifestación de Jesús como Salvador de todos los
pueblos, representados en los Magos de Oriente.
Este Tiempo de Navidad finaliza
con el domingo del Bautismo del
Señor, el siguiente al 6 de
enero, mismo que a su
vez, marca el inicio de la
primera parte del Tiempo
Ordinario.
35. La Epifanía
En la Biblia se les menciona por primera vez en Mt. 2 1-16. Aquí no
se menciona cuantos Reyes Magos eran, ni como se llamaban o su
descripción física.
Al pasar el tiempo y analizar los
textos bíblicos se dijo que fueron
tres, pues fue la cantidad de
regalos que el Niño Jesús recibió
de ellos (oro, incienso y mirra).
Sus nombres Melchor, Gaspar y
Baltasar, aparecen en un Códice
del siglo VII. Melchor es descrito
como un anciano, Gaspar como
un joven blanco y Baltasar como
un hombre de raza negra y barba
espesa. Cada uno representa a
un continente: Europa, África y
Asia.