1. 13 de noviembre de 2013
BENEMÉRITA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA
DE PUEBLA
Facultad de Ciencias Químicas
Licenciatura en Químico Farmacobiólogo
Paola Moreno García
Desarrollo de Habilidades en el uso de la Tecnología,
la Información y la Comunicación
Armas biológicas. Desarrollo, consecuencias y
prevención.
Profesor: Eugenio López Gaspar
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ÍNDICE
RESUMEN…………………………………………………………………………..3
INTRODUCCIÓN…………………………………………………………………..3
MARCO TEÓRICO…………………………………………………………………4
CONCLUSIÓN……………………………………………………………………...9
BIBLIOGRAFÍA……………………………………………………………………...9
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Resumen
Las armas biológicas son instrumentos peligrosos, fabricados para la destrucción en masa.
Originalmente su propósito era el de ser utilizadas durante los combates armados, sin
embargo, se han producido ataques terroristas en los que se hace uso de las armas
biológicas, estos ataques han recibido el nombre de bioterrorismo.
Durante la Convención de Armas biológicas llevada a cabo en 2010 por parte de la ONU se
llegó al acuerdo de prohibir el desarrollo, almacenamiento y uso de las armas bilógicas para
todos los países. El único defecto es que no se establece ningún mecanismo de verificación,
a pesar de que más de 100 naciones firmaron el tratado.1 Debido a esto varios países las
siguen desarrollando y produciendo para su posible uso en guerras, por lo que es importante
estar informado y tomar medidas por algún posible ataque con armas biológicas.
Introducción
A lo largo del ensayo se tratarán temas de interés sobre las armas biológicas, con el fin de
mantener informado a toda persona que quiera saber sobre el tema.
Pregunta 1. ¿Cómo y qué países desarrollan armas biológicas?
Tesis. En esta parte se abordarán los puntos importantes sobre el desarrollo de las armas
biológicas, sus características, los virus más utilizados, la efectividad y los países que las
desarrollan.
Pregunta 2. ¿Cuáles son las posibles consecuencias del uso de armas biológicas?
Tesis. Aquí se informará sobre las posibles consecuencias del uso de armas biológicas,
dedicando una parte a las consecuencias políticas, otra enfocada a la salud y por último las
consecuencias ambientales.
Pregunta 3. ¿Qué medidas de prevención se pueden tomar ante el uso de armas biológicas?
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En esta parte se tratarán las medidas que se toman para detectar alguna posible amenaza de
infección a causa del uso de armas biológicas, de igual manera se mencionarán las medidas
implementadas por los países ante las armas biológicas.
MARCO TEÓRICO
Conceptos básicos sobre armas biológicas
Antes que nada hay que definir lo que es un arma biológica, muchos se dan una idea debido
a las películas o series de ciencia ficción, sin embargo es necesario dar una definición
formal.
Primero, entendemos como guerra biológica el uso de enfermedades producidas por
microorganismos o agentes bioactivos (toxinas) con el fin de dañar o aniquilar a las fuerzas
militares del enemigo, sus poblaciones civiles o contaminar sus fuentes de agua o
alimentación.2
El empleo de las armas biológicas no es algo que se originó en los últimos tiempos, sino
que se remonta a épocas muy anteriores. La perversa idea de utilizar agentes infecciosos
para lograr efectos semejantes a los de las grandes epidemias ha sido considerada por el
hombre desde hace muchos años y existen descripciones en distintos periodos de la historia,
surtiendo en muchos casos efectos desastrosos a pesar del poco avance de la Microbiología
y ciencias afines y desde luego, del desconocimiento de la Biotecnología.3
Las armas biológicas son consideradas como armas de destrucción masiva, cuyas
consecuencias serían la devastación, la muerte y las enfermedades en las sociedades
humanas incompatibles con su supervivencia.
Las armas biológicas, tenderán a provocar el cuadro clínico en horas o días posteriores a la
exposición, pues se contrae la enfermedad a raíz de la infección causada por el agente
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biológico, causando un mayor impacto en los sistemas socio-sanitarios, ya que el número
de afectados ante un ataque biológico es potencialmente mucho mayor que el de un ataque
químico.4
Desarrollo de armas biológicas
Los dos factores claves en el posible uso de armas biológicas son: la fabricación y la
dispersión de las mismas. La fabricación no parece tener obstáculos para grupos con cierta
preparación, con los medios materiales y económicos necesarios, siendo la dispersión el
proceso más complicado y quizás el mayor obstáculo tecnológico en la creación de un
poderoso programa de Armas Biológicas.
Además de requerir conocimientos de microbiología y acceso a un laboratorio de buena
calidad con medios de protección, son importantes, para
el uso de armas biológicas, los siguientes elementos: 1)
una carga explosiva, el agente biológico; 2) una
munición o recipiente que la lleve intacta y virulenta
hasta su entrega; 3) un sistema de entrega o misil
(proyectil, avión, envoltura o cualquier otro medio para
hacer llegar la carga); y 4) un mecanismo de dispersión, es decir, algo que contenga fuerza
explosiva o algún mecanismo o dispositivo de aspersión.
Para fabricar un arma biológica teóricamente se puede utilizar cualquier microorganismo
patogénico. Hay que tomar en cuenta que el microorganismo elegido tiene que poder
cultivarse en grandes cantidades y poder dispersarse con facilidad (de preferencia como
aerosol); debe ser muy infeccioso y de preferencia que pueda contagiarse de persona a
persona. Otro requisito es que se utilicen bajas dosis del organismo elegido para iniciar la
enfermedad, ya que muchas veces no basta que un solo virus o una bacteria infecte a una
persona. Los microorganismos con potencialidad de ser utilizados como armas deben ser
estables en el ambiente, para así asegurar su permanencia como agentes patogénicos y, por
último, hay que tomar en cuenta la existencia o no de medidas preventivas o terapéuticas.
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Otra de las cuestiones importantes es pensar dónde podrían utilizarse y en este sentido,
queda claro que, son muchos los escenarios susceptibles de ser usados para una dispersión
de armas biológicas. Así, estadios deportivos, grandes almacenes, depósitos de agua y
cadenas alimenticias son algunos ejemplos de este posible
uso.5
Lo que sucedió el 2 de abril de 1979 en Sverdlovsk, en la ex
Unión Soviética, no fue más que una prueba de algo que se
sospechaba desde hacía ya mucho tiempo: el armamento
biológico de destrucción masiva es una realidad.
En el complejo militar número 19, hubo una explosión que
accidentalmente liberó unos cuantos miligramos de esporas
de Bacillus anthracis. Pocos días después, 96 personas enfermaron de ántrax; 69 de las
cuales murieron. En mayo de 1992, Boris Yeltsin admitió que en Sverdlovsk se estaban
desarrollando armas biológicas, el ántrax entre ellas.
En la primera Guerra Mundial, Alemania usó el ántrax contra el ganado caballar y vacuno
que aportaban a las fuerzas aliadas España, Noruega, Argentina, Rumania y —hasta antes
de que se involucraran en la guerra, en 1917— los Estados Unidos. Se sospecha que
durante esta guerra, los rusos utilizaron la tularemia contra los alemanes durante el sitio de
Stalingrado; esta enfermedad es producida por la bacteria Francisella tularensis, la cual
puede causar úlceras en la piel, inflamación y dolor en las glándulas linfáticas, inflamación
de los ojos, dolor de garganta, úlceras en la boca, o enfermedades similares a la neumonía.
De igual manera los japoneses hicieron uso de armamento biológico contra los chinos y
además experimentaron con éste en prisioneros de guerra estadounidenses.
En países como Canadá, la Unión Soviética, el Reino Unido y los Estados Unidos, los
programas de armamento biológico se expandieron al finalizar la guerra y cobraron auge
durante la guerra fría.
A pesar de que la ONU prohibiera el desarrollo, almacenamiento y uso de las armas
biológicas, se sospecha que China, Vietnam, Laos, India, Bulgaria, Irak, Irán, Taiwán,
Siria, Cuba, Corea del Norte, Egipto, Israel, Japón, Estados Unidos y algunos países del ex
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bloque soviético todavía tienen programas de desarrollo de armamento biológico e incluso,
algunos de ellos cuentan con grandes cantidades almacenadas.
Consecuencias del uso de armas biológicas.
Existen diferentes consecuencias por el uso de armas biológicas. La principal –y por la que
se empezaron a desarrollar las armas biológicas- es la de una guerra entre los países
potencias.
Sin embargo, lo que últimamente ha alarmado a las autoridades de muchos países es que
ciertos grupos terroristas ya tienen acceso a armamento
biológico.
El bioterrorismo es el uso ilegítimo (o amenaza de uso)
de microorganismos o toxinas obtenidas de organismos
vivos para provocar enfermedades o muerte en seres
humanos, animales o plantas con el objetivo de
intimidar a gobiernos o sociedades para alcanzar objetivos ideológicos, religiosos o políticos. Por ejemplo, en 1995 se descubrió en Japón que el culto Aum Shinrikyo (Verdad
suprema) responsable del ataque al metro de Tokio con el gas neurotóxico Sarín, también
desarrolló armamento biológico e intentó usarlo en al menos ocho ocasiones. Incluso, se
sabe que en octubre de 1992, su líder, Shoko Asahara, y otros 40 miembros viajaron a Zaire
supuestamente para ayudar a las víctimas del ébola pero probablemente su objetivo fuera
obtener muestras del letal virus. Sólo en 1997, en Estados Unidos se investigaron cerca de
100 amenazas terroristas en 50 las cuales se alegaba la participación de agentes biológicos.
Otra consecuencia por el uso de armas biológicas son las implicaciones a la salud, ya que
los virus son difíciles de controlar y sobre todo si son esparcidos deliberadamente al
ambiente.
Los ataques biológicos pueden situarse entre dos categorías extremas, la de ataque mínimo
y la de ataque masivo, y su posición variará en función del tipo de agente empleado, la
forma de utilizarlo y la vulnerabilidad de la población amenazada.
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Los agentes biológicos son mucho más letales que los químicos porque suelen ser difíciles
de diagnosticar, pues no se presentan de manera natural, tienen cuadros clínicos similares a
los causados por otras enfermedades y requieren un periodo de incubación (que puede ser
de 24 horas a seis semanas) para que causen efecto.
El impacto directo se manifiesta en los servicios de salud por la demanda excesiva de
atención y la disponibilidad de antídotos, antibióticos y vacunas en cantidades suficientes
para cubrir las necesidades inmediatas. Asimismo, se debe contemplar el daño a la
economía.6
Medidas de prevención
Con el fin de mantener bajo control esta amenaza, existe una serie de medidas preventivas
para proteger de posibles enfermedades tanto a las personas que manejan dicho material
biológico como a su entorno. Estas medidas conforman la bioseguridad, que se aplica en
hospitales, empresas farmacéuticas y, sobre todo, laboratorios donde se trabaja con
parásitos, bacterias o virus.
Por otro lado, Europa y el mundo en general se enfrentan a diferentes situaciones en las
cuales puede ser factible el uso de armas biológicas. Para ello, algunas instituciones como:
Agencia Europea de Defensa (EDA), Séptimo Programa Marco de Investigación y
Desarrollo Tecnológico (7PM), Organización de Investigación y Tecnología de la OTAN
(RTO - Research and Technology
Organization), han tomado conciencia de este hecho, con el propósito de aportar
soluciones.
La capacidad para detectar una amenaza y responder a ella es la llave que determinara el
impacto de una agresión, la cual incluirá conceptos y sistemas diseñados para identificar
señales de un ataque en su fase más temprana.
La prevención, en lo concerniente al posible uso de Armas Biológicas, debe de estar
estructurada desde un aspecto muy amplio mediante planes generales de actuación a nivel
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estatal hasta un nivel de concreción máximo a la hora de usar detectores de agentes
biológicos.
CONCLUSÍON
Como se puede observar las armas biológicas son un hecho y ya han sido utilizadas
anteriormente, debemos de estar conscientes del riesgo que corremos y de las medidas que
se está implementando para contrarrestar las consecuencias en el uso de armas biológicas.
Por su eficiencia, eficacia y efectividad son una opción atractiva para mentes perversas y
deseosas de aterrorizar a la población. La única forma de combatir al terror es con
información.
BIBLIOGRAFÍA
1. Organización de las Naciones Unidas. Resolución aprobada por la Asamblea
General el 8 de diciembre de 2010. 11 de enero de 2011. Recuperado de:
http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/65/92
2. Revista de divulgación de la UNAM. Armas biológicas. 31 de octubre del 2013.
Recuperado
de:
http://www.comoves.unam.mx/numeros/articulo/15/armas-
biologicas
3. Enrique A. Sirveira y Alfredo Pérez Amores. Historia de las armas biológicas y el
bioterrorismo. Cuba, Revista electrónica de Veterinaria, marzo 2010.
4. Ignacio Ibáñez Ferrándiz. Bioterrorismo: la amenaza latente. Madrid, Instituto de
Estudios Europeos de la Universidad San Pablo-CEU, 2005.
5. Instituto Español de Estudios Estratégicos. Armas biológicas: situación y desarrollo.
7 de noviembre de 2012. Recuperado de:
http://www.ieee.es/Galerias/fichero/docs_opinion/2012/DIEEEO832012_ArmasBiologicas_SituacionRespuesta_I.BuenoAtanze.pdf
6. Orbelín Soberanis Ramos y Celso Ramos García. El bioterrorismo desde el punto de
vista de la salud pública. Octubre de 2008. Recuperado de:
http://www.amimc.org.mx/revista/2009/29-1/elbioterrorismo.pdf
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