Breve historia del mueble

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ÍNDICE
PRÓLOGO……………………………………………………..5
INTRODUCCIÓN………………………………………………6
BREVE HISTORIA DEL MUEBLE…………………………….9
Antigüedad………………………………………………11
Mueble Egipcio………………………………………………….13
Mueble Griego…………………………………………………..15
Mueble Romano………………………………………………...18
Edad Media……………………………………………..23
Bizantino…………………………………………………………25
Románico………………………………………………………..27
Gótico……………………………………………………………30
Edad Moderna………………………………………….33
Renacimiento……………………………………………………35
Transición al Barroco…………………………………………...40
Barroco………………………………………………………….42
Rococó………………………………………………………….45
Neoclasicismo………………………………………………….52
Segundo Neoclasicismo……………………………………….54
Edad Contemporánea…………………………………57
S XIX……………………………………………………………..59
Arts & Crafts…………………………………………………………61

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Art Nouveau…………………………………………………………63
Sezession…………………………………………………………...67
S XX……………………………………………………………...69
Bauhaus……………………………………………………………69
Art decó…………………………………………………………….71
Mueble escandinavo………………………………………………73
Mueble moderno o contemporáneo………………………………74
20 SILLAS QUE CAMBIARON EL MUNDO……………….77
CONCLUSIÓN………………………………………………119
BIBLIOGRAFÍA Y WEBGRAFÍA……………………..........121

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PRÓLOGO
Este trabajo tiene como propósito hacer un rápido repaso a la historia
del mueble en general, desde la antigüedad pasando por la Edad
Media y la Edad Moderna hasta llegar a la Edad Contemporánea. Sin
embargo he considerado oportuno centrar el desarrollo de este proyecto
en la primera mitad del siglo XX, y en una pieza de mobiliario en
particular: la silla.
Como bien sabemos, hasta el siglo XIX la manufactura de muebles era
más una artesanía que una industria, por lo que en este sentido las
técnicas de fabricación de mueves han cambiado mucho más en los
últimos ciento cincuenta años que en los seis siglos anteriores. Esta es la
razón principal por la que el siglo XX toma especial relevancia en mi
trabajo.
Y el motivo por el que he decidido centrarme en la silla es por que la
considero la pieza principal del mobiliario; creo que si escoges a alquien
al azar por la calle y le preguntas que te diga el primer tipo de mueble que
se le venga a la mente la gran mayoría escogerían la silla.

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INTRODUCCIÓN
El mueble se originó como un objeto funcional y utilitario, ya que el
hombre tenía que satisfacer ciertas necesidades básicas: algo donde
dormir (una cama), algo donde sentarse (una silla), algo donde
almacenar cosas (una alacena), y así un largo etcétera. Aquí podemos
comprobar que el surgimiento del mobiliario se debe a motivos puramente
funcionales, como resulta lógico pensar. Luego, en un tiempo tan remoto
que no puede ser señalado, una vez las necesidades y se habían
cubierto, el hombre comenzó a desear objetos que además de ser
utilitarios y funcionales también estuvieran decorados atractivamente, es
decir que fueran prácticos y bonitos.
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La periodización de la historia del mobiliario recibe en términos generales
las mismas denominaciones que las empleadas en la historia del arte,
dado que los muebles comparten con las obras de arte arquitectónicas,
pictóricas y escultóricas gran parte de sus rasgos formales, aunque con
cierta humildad dado su carácter artesanal. Mientras que la pintura y la
escultura pueden tener un campo de fantasía ilimitado, los muebles están
necesariamente sujetos a ciertas normas físicas de estabilidad,
adecuación al uso (funcionalismo) y proporción al cuerpo humano
(ergonomía), semejantes a las limitaciones propias de la arquitectura.
Los periodos de tiempo dados para las diferentes épocas de estilo deben
tomarse únicamente como punto de partida aproximado, pues la

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transición de una época a otra tiene lugar de forma progresiva y el
comienzo de un nuevo estilo casi siempre va desarrollándose ya en las
últimas décadas del precedente.
Hechas estas aclaraciones, procedo a mostrar la periodización que
seguiré en este trabajo para confeccionar mi trayectoria por la historia del
mueble:
1. Antigüedad
o Egipto, Grecia y Roma
2. Edad Media
o Arte Bizantino, Románico y Gótico
3. Edad Moderna
o Renacimiento (siglo XV y XVI, de 1500 a 1600)
o Transición al Barroco. Estilo Luis XIII (siglo XVII, de 1610 a
1643)
o Barroco. Estilo Luis XIV (mediados siglo XVII y principios del
XVIII, de 1643 a 1715)
o Rococó. Estilo Luis XV (s. XVIII, de 1723 a 1774)
o Neoclasicismo. Estilo Luis XVI (s. XVIII, de 1774 a 1793)
o Segundo Neoclasicismo o Estilo Imperio (finales s. XVIII)

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4. Edad Contemporánea
o S. XIX
• Arts & Crafts (2ª mitad del siglo) INGLATERRA
• Art Nouveau (finales siglo XIX y principios del XX)
BÉLGICA y FRANCIA y Sezession AUSTRIA
o S. XX
• Bauhaus (1.919) ALEMANIA
• Art Decó (primera década del siglo) FRANCIA
• Mueble escandinavo
• Mueble moderno o contemporáneo

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Mueble egipcio
Aunque resulte extraño de creer, los primeros ejemplares de mobiliario
que conocemos (pertenecientes al Antiguo Egipto) pertenecen a los más
elaborados de la historia. Esto se debe en gran medida al estado tan
óptimo en el que se han conservado durante tantísimos años las tumbas
de los altos dignatarios del Antiguo Egipto. Como mandaba la tradición,
éstos eran enterrados rodeados de grandes lujos materiales para la otra
vida, es por ello que las piezas de mobiliario egipcias de las que
disponemos se encuentran más o menos intactas.
El mueble egipcio, cuyas piezas pertenecen mayoritariamente a las IV y V
Dinastías del Antiguo Egipto (2680-2255 a.C.), tenia una función
claramente práctica si bien era símbolo del poder de los altos
mandatarios, lo que le otorgaba una función ceremonial. Ofrece una gran
sencillez de estructuras. Es completamente cúbico y liso, dando la
impresión de solidez, sobriedad y un gran sentido de la estilización en su
copia de formas naturalistas, desde plantas (sobre todo el loto y el papiro)
hasta las maravillosas interpretaciones de animales como el león, el
escarabajo, el halcón, el pato, etc.
La madera es el material casi insustituible para la construcción del
mueble, entre las cuales se encuentran el cedro, ciprés, fresno y boj.
Estos materiales se utilizaban al descubierto en los muebles modestos y
populares, mientras que los muebles lujosos de la corte iban recubiertos

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con otros materiales más ricos como el oro y la plata, el hueso y el marfil;
otros, aún más delicados, como las telas, cueros, bordados y
almohadones de pluma tenían un mayor empleo en los lechos y muebles
de asiento.
La decoración en relieve de algunos muebles muestra símbolos de
dioses y escenas con significado religioso. Las ensambladuras se hacen
por caja y espiga con muy pocas clavijas de madera. Los acabados
barnizados y encerados fueron aplicados a la madera, y la talla era muy
común. Para el pulimento de las maderas usaban ya la piedra pómez y
encolaban mediante el empleo de vísceras de pez. Curvaban la madera
mediante el empleo del calor. Los apoyos verticales más corrientes para
los muebles de asiento son los de imitación a las patas del león o del
buey.
Otra modalidad empleada por los egipcios en la construcción de sillas es
el respaldo inclinado hacia atrás empleando para ello un puntal por
detrás que, arrancado directamente de las patas traseras, termina en el
travesaño más alto y le da estabilidad a la silla.

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Varias vistas de la silla típica griega. Esta corresponde al trono de Sitamun, en él
podemos ver las típicas patas de león, y el respaldo apuntalado por detrás.
Pertenece a la XVIII dinastía (1567-1320 a.C.).
Mueble griego
En las sociedades griegas primitivas, al menos eso parece deducirse de
los escasos restos que se conservan, el mobiliario no era ni únicamente
práctico, ni tampoco su uso era sólo ceremonial sino más bien una
mezcla de ambos.
En los muebles griegos se nota la influencia de los primeros diseños
egipcios pero las patas de los asientos, en forma de pata de animal,
fueron desapareciendo gradualmente para ser reemplazados por formas
rectangulares y torneadas (Johnson, 1978). En los muebles se empleaba,
principalmente madera (cedro, pino, ciprés), pero la vida pública y,

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privada, desarrolladas al aire libre, obligaba a buscar materiales de
mayor resistencia como la piedra, el mármol o el bronce. La madera se
recubría y taraceaba con materiales más ricos, como láminas de metales
preciosos, marfil y maderas finas, y la ornamentación del mobiliario se
basaba en decoraciones arquitectónicas.
La estructura de los muebles griegos es muy sencilla y mejor adaptada
al cuerpo humano como no lo fue la de los egipcios. Los soportes y
elementos verticales suelen ser tallados o torneados y el mueble en
general tiene un aspecto más ligero y racional. Las piezas se fijaban y
sujetaban con clavijas y los tableros iban embarrotados, es decir, con
barras en la cara posterior para evitar los movimientos de la madera.
Durante esta época también se empleaba la técnica para curvar la
madera por el calor. Los ejemplos funcionales y sencillos convivían con
otros más elaborados.
Las sillas griegas merecen especial atención. Existían dos tipos básicos.
Uno es el sólido trono o asiento de honor. Algunos de estos derivan
directamente de prototipos de Egipto. Los tronos alcanzan su solemnidad
máxima en las piezas creadas para los templos, aunque también había
tronos en las casas de los particulares, en las de los más adinerados.
Este tipo de asiento estaba fabricado en mármol, material resistente, ya
que la mayoría se disponían en el exterior de las casas. Solían tener el
respaldo redondeado y los laterales sólidos.

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El otro tipo de silla, considerada la innovación más distintiva de esta
época, fue la silla conocida como klismos. Aparece pintada en vasos,
esculpida en relieves y hasta ha sido reconstruida. Esta silla nos sugiere
practicidad y contemporaneidad en cierto modo. Está considerada una
pieza puramente femenina, que se ubicaba en un interior doméstico lleno
de comodidades. Como ya hemos dicho anteriormente, parece ser que
la silla klismos fue un invento íntegramente griego, puesto que no existen
antecedentes de ella en los vestigios egipcios ni de otra civilización de
Asia Occidental.
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Silueta de la silla Klismos. Ligera, con respaldo cóncavo y patas curvadas al
fuego que aportan a la silla una gran elegancia de línea, construido por los
griegos en el siglo V a. de C.

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Lápida de Hegeso, en la que aparece tallada una klismos griega. Museo
Arqueológico Nacional, Atenas, hacia el año 400 a.C.
Mueble romano
El mobiliario romano es derivación directa del griego, si bien a partir de los
últimos tiempos de la República exhibe una pasión típicamente romana
por el lujo. Aún así, la influencia de Grecia es tan extraordinaria que llegan
a repetirse exactamente algunos prototipos (siglo I de nuestra era). Pero el
empleo del bronce da lugar a una nueva técnica que produce como
resultado ejemplares con detalles y elementos originales romanos. Los
muebles primitivos fueron muy rígidos y en su estructura se
adivina primero la influencia oriental y siempre la influencia griega.

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Los muebles de bronce son tan importantes que de este material se
hacen casi todos los de lujo, mientras que los de madera (cedro, arce,
tejo, acebo, roble, sauce y haya) quedan relegados para los tipos en que
es imprescindible este material como en armarios, mesas, etc. .También
se construyen muebles de piedra y mármol, y son de estos materiales
precisamente los que corresponden a la trascendental vida pública de la
época, como los foros, circos, teatros, etc.
Los muebles de bronce, cuya decoración es muy rica, unas veces se
cincelan y otras se recubren o incrustan de oro, plata, cobre, bronce,
marfil y carey . Todos los elementos verticales de las sillas y camas son
generalmente torneados, con los perfiles muy exagerados y violentos. En
los muebles de madera se advierten bien las tallas y molduras, y también
aparecen las incrustaciones de carey.
Una pieza típica originaria de la época romana es la butaca en forma de
medio tonel, derivada de un modelo frecuente entre los etruscos. En el arte
romano aparecen en ambientes netamente domésticos, por ejemplo
existe un relieve en el que se ve a un grupo de filósofos conversando
distendidamente, cómodamente sentados en butacas de medio tonel. Se
encontró un ejemplar de este tipo tallado en piedra caliza, imitación a una
butaca real de medio tonel que en su día debió estar confeccionada a
base de paja.

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Relieve grecorromano en el que aparece la típica silla de paja. Junto a éste,
prototipo de silla de mimbre realizada en piedra caliza.
Relieve grecorromano en el que aparece la típica silla de medio tonel.
Los romanos crearon una forma de silla de "klismos" más robusta y
también otros tipos de asiento, como los bancos con cuarterones y las
sillas de mimbre o paja como las vistas anteriormente. También se

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empezaron a crear diseños más prácticos y funcionales: mesas que se
podían mover y taburetes plegables. Un ejemplo de esto es el sella curulis
o silla curul, que era un taburete de tijera plegable que se convirtió en en el
emblema de la autoridad de los magistrados de la antigua Roma.
Típico taburete curul romano. Perspectiva, alzado y perfil.

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Mueble bizantino
En sus primeros momentos (siglo V), Bizancio se consideró como el
continuador natural (en los países del Mediterráneo oriental) del Imperio
Romano, siendo transmisor de formas artísticas que influyeron
poderosamente en la cultura occidental medieval. Constantinopla se
convirtió en el gran centro comercial, político y religioso de su época. Fue
también el principal centro artístico, reuniendo y albergando en él a los
artistas y artesanos más relevantes en todo tipo de artesanía de lujo.
Mientras que Grecia y Roma nos presentan la arqueología del mueble,
Bizancio (incluso sin poder presentar casi ejemplares conservados) tiene
la gran importancia de haber servido de puente entre el fenecido arte
romano y el nuevo resurgir medieval con el arte románico, de tanta
influencia bizantina (como veremos más adelante).
El estilo de mobiliario bizantino fue esencialmente una mezcla de
elementos oriental y grecorromano, y su uso era mayoritariamente
eclesiástico o como símbolo de la realeza. El mueble, desde el punto de
vista artístico, no es todavía más que un objeto cuyo fin parece
exclusivamente utilitario, tanto que muchas veces se resuelve con simples
armaduras o esqueletos recubiertos de tapicerías más o menos ricas,
según su destino en general. Los muebles son pobres, modestos y
desprovistos de interés artístico.

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La madera es el material más importante empleado en la construcción del
mueble durante esta época, pero el marfil fue el material más usado para
los muebles de mayor importancia. Por otra parte, muchos muebles eran
totalmente metálicos o enriquecidos al menos con aplicaciones de metal
y cubiertos luego con suntuosas tapicerías. Se seguían usando los
clásicos y populares taburetes y sillas plegables o en forma de X (de
tijera), con asientos de cuero.
Los muebles de los que se tienen más datos son las sillas y tronos. Los
tronos parece ser que eran de madera maciza con formas
arquitectónicas y decoración pintada. Algunos estaban realizados con
materiales preciosos, decorados con joyas y con bellos cojines. Bizancio
era famoso por sus magníficas tallas realizadas en marfil.
Trono de marfil bizantino, asiento chapado de finas láminas de marfil tallado.

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Contrario al estilo romano, las figura humanas y animales fueron menos
frecuentemente incorporadas, y los elementos decorativos tendieron a
ser rígidos y convencionales. Los asientos con soporte torneados van
siempre cubiertos de ricas telas de seda, tapices y almohadones que
proporcionan un efecto mullido a los muebles.
Podríamos decir pues que el mobiliario bizantino se caracteriza por
asimilar los modelos romanos revestidos de lujo oriental.
Mueble románico
El periodo entre el siglo XI y principios del siglo XIII se conoce por la
regeneración de la espiritualidad cristiana. El arte románico está
considerado el primer arte unificador de Europa occidental desde la caída
del Imperio Romano.
En las ciudades de la Europa occidental de la Edad Media, las artes, la
industria y el comercio adquirieron un esplendor no conocido hasta
entonces y al lado de los artistas que seguían las tradiciones de los
monasterios surgieron otros en correspondencia con los arquitectos
laicos. De entonces, datan las magníficas obras de carpintería y de
escultura en madera: cofres, armarios, arcas, bancos decorados con
pinturas, todo ello muy portátil y a propósito para ser transportable en
carros o sobre mulas cuando el dueño cambiaba de residencia, puesto

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que como ya sabemos ésta fue una época caracterizada por las
peregrinaciones.
Los monarcas y terratenientes medievales llevaban una vida nómada. Era
más fácil trasladarse a donde pudieran encontrar comida que llevar la
comida hasta un lugar determinado continuamente. Por esta razón, el
mobiliario era, o enormemente sólido y pesado para poderlo dejar en su
sitio cuando se abandonaba temporalmente una vivienda, o bien fácil de
transportar.
El mobiliario románico fijo habla de piezas fuertes y pesadas, macizas,
con una decoración a base de flora y de fauna o de figuras fantásticas.
Como siempre, la madera (pino, nogal, roble y castaño) es el material
imprescindible y característico del mobiliario.
Las piezas esenciales como hemos mencionado con anterioridad eran el
arca o cofre y el banco de piedra o de madera. Por lo que mejor se
conoce el diseño románico es por la variedad de representaciones de
muebles en la escultura francesa del siglo XII, en la que se utilizaron
interpretaciones esquemáticas y simplificadas de la ornamentación
grecorromana.
La rudeza de su estructura y la tosquedad de los materiales empleados
viene atenuada por el frecuente uso de almohadones y telas que las
recubrían por completo en la mayoría de los casos (reminiscencias
bizantinas).Como consecuencia del espíritu nómada de la época

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(conquistas, invasiones, peregrinaciones, etc.), muchos muebles de los
se construían eran desmontables para facilitar su rápido transporte.
El empleo de la marquetería es ya corriente (incrustaciones de maderas
finas de diversos colores, formando dibujos sobre un fondo también de
madera), así corno las aplicaciones de hierro forjado, sobre todo en
tronos y sillas episcopales.
Las tallas son abundantes, constituyendo, en el mueble religioso el motivo
de decoración más profusamente empleado. Al efectuarse la talla sobre
gruesos tablones permite un relieve profundo, abundando los motivos
geométricos y vegetales derivados de la escuela bizantina. En los
soportes verticales abundan los elementos torneados, de tono simple, a
base de anillos y óvalos, discos, esferas, patas torneadas con estrías en
espiral, etc.
Cofre románico
Silla episcopal románica, con
estructura de madera.

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Mueble gótico
El mueble en el período gótico sigue siempre las características
arquitectónicas de sus grandes edificios y si bien el estilo abarca tres
siglos de total difusión en todo el continente europeo, empiezan a
distinguirse claramente las diferentes características nacionales.
Los constructores de muebles de la alta Edad Media tuvieron siempre en
cuenta la utilidad del mismo adaptando siempre la ornamentación ala
estructura. Con ello el mueble gótico logró su aspecto característico de
proporción y unidad. Su austeridad no está exenta de belleza.
Una modificación muy importante lograda en esta época y que supuso
un gran avance en la manufactura de mobiliario es la división del mueble
en dos partes en cuanto a su técnica constructiva: por un lado el cuadro o
armazón rectangular y por otro los paneles más delgados insertos en el
armazón. Será en estos paneles donde encontraremos la ornamentación
inspirada principalmente en elementos de la arquitectura.
Con respecto a otra de las piezas más importantes del mobiliario en
general, la cama, parece ser que fue en el siglo XIII cuando se empezó a
dar cada vez más importancia al dosel, elemento que a principios del
siglo XIV se convirtió en absolutamente necesario en todo lecho con
pretensiones señoriales. La cama típica del último periodo medieval
estaba rodeada de colgaduras y la cabecera y el fondo se alzaban

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hasta el dosel. De este colgaban los cortinajes que, al correrlos, permitían
mayor intimidad y una temperatura ambiental más cálida. Los tejidos
utilizados correspondían al lujo más extravagante.
Cama gótica con dosel del siglo XV.

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Mueble renacentista
El estilo gótico, aunque popularmente extendido en el norte de Europa,
progresó poco en Italia, y ya por el año 1400 un nuevo estilo estaba
desarrollándose rápidamente allí. Este era el estilo renacentista, una
mezcla de formas grecorromanas nativas e ideas orientales derivada de
Constantinopla, capital del Imperio Bizantino.
Los humanistas italianos intensificaron su interés por el arte y la cultura
clásicas de Grecia y Roma desde la toma de Constantinopla por los
turcos en 1453, uno de los hitos que marcó el comienzo del Renacimiento
en sí y de la Edad Moderna en general (junto con otros como el
nacimiento de la imprenta, el descubrimiento de América o la conquista
del reino de Granada).
Si hasta ahora el mueble tenía un carácter eminentemente religioso
(abundaba en los monasterios: sillerías de coro, sillones, armarios y
bancos de iglesia), con el Renacimiento asistimos al nacimiento del
mueble civil y su importancia crece rápidamente. Los entalladores, únicos
artesanos del gótico, encuentran ahora para embellecer el mueble la
ayuda de otros artistas, y sus obras se enriquecen con multitud de
procedimientos decorativos.
Como prueba de una vuelta a los cánones clásicos podemos observar
que vuelve la silla de tijera con asiento de piel típica de Roma, la cual fue
muy recurrente durante el Renacimiento.

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Sillón renacentista de tipo tijera, hecha en nogal, Veneciana, de mediados del
siglo XVI.
En el mueble del renacimiento comprobaremos que ha desaparecido, en
parte, la unidad de conjunto del mueble gótico. La influencia del mueble
italiano inspirado en los cánones clásicos, rico y lujoso y el gusto por la
decoración suntuosa (propia de los palacios y cortes europeas) hicieron
que ya entrado el siglo XVI la escultura desborde las líneas estructurales
del mueble, pasando a ocupar el primer plano lo que antes constituía el
complemento. La medida serena de austeridad y proporción deja paso a
la riqueza en todos sus aspectos.
Los perfiles adquieren una importancia extremada, rigurosamente
equilibrada, tomando como modelo la arquitectura clásica; en su logrado
diseño estriba precisamente, la perfección del mueble. La rica
marquetería, la talla imaginativa y la utilización de la madera de nogal en
lugar de la de roble (que era el material más utilizado en los primeros
trabajos de este periodo) caracterizaron los más llamativos esfuerzos del

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siglo XVI. El mueble se construía a base de armazón o vigueta, con
piezas de madera de roble o pino, según el país, y esta armazón va
recubierta con paneles más ligeros de madera de nogal.
El mueble más popular del renacimiento italiano fue el cassone, un
tradicional arcón de bodas. Su antecesor era el copero, mueble en el
que, en la Edad Media, se colocaban las copas y exponían las vajillas.
Cassone italiano perteneciente a la segunda mitad del siglo XV.
En el siglo XVI apareció el escritorio; al principio tenía formas inspiradas en
arcos romanos o en la arquitectura de los templos, más tarde se modificó
su aspecto inicial.
En Francia el mueble más representativo (como lo era en Italia el
cassone) fue el dressoire o aparador.

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Dressoire francés a caballo entre el estilo tardo gótico y el renacentista.
El mobiliario español del Renacimiento tenía un estilo característico, el
llamado estilo mudéjar que fue coetáneo del Renacimiento y el Gótico.
El mudéjar era un tipo de decoración típicamente española, el arte
desarrollado por artesanos musulmanes para los cristianos siguiendo la
estética y los conocimientos musulmanes.
Este peculiar estilo era el preferido para decorar los populares arcones y
los nuevos escritorios que se estaban poniendo de moda. La otra forma
de ornamentación era una forma de decoración a base de incrustaciones
de volutas de flores y hojas con pequeños jarrones a la manera clásica.
Los relieves de hierro forjado y a veces de plata, sobre un fondo de

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terciopelo rojo, era otra característica ornamentación española. Muy
característico fue el bargueño, un arcón con el frente abatible que
cuando era abierto dejaba ver numerosos cajoncitos cuyos frentes tenían
una decoración muy rica. El frente abatible se podía sostener sobre unos
apoyos deslizantes y utilizarse como mesa de escribir. En los laterales
tenía unas asas de hierro para facilitar su transporte. El bargueño se
utilizaba con frecuencia como arcón en viaje para transportar pequeños
objetos de valor y como pupitre móvil.
Bargueño salmantino de mediados del siglo XVI. También llamado de columnillas,
con tapa frontal abatible, decorada en su exterior con placas metálicas recortadas
y caladas, aplicadas sobre un fondo de tela roja.

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Mueble de transición al Barroco
Estilo Alfonso XIII
Durante el reinado de Luis XIII (1610-1643) el estilo Manierista italiano
favorecido por su madre, María de Medecis, continuó dominando el arte
francés. En este periodo de transición, el mueble adquiere paulatinamente
nuevas características y una cierta novedad pero también algunos
defectos, entre ellos la pesadez. La curva y la recta se disputan la
supremacía en la ornamentación.
El chapado con láminas de madera, que es muy apreciado, obliga a
suprimir las superficies curvas. Los muebles de ébano tienen un aspecto
geométrico cuya rigidez y serenidad se intenta compensar con soportes
torneados y profusos adornos en débil relieve. Con Luis XIII empieza el
tapizado mullido de los asientos y respaldos. En diversos tipos de sillones
se emplean los gruesos clavos ornamentales de influencia española así
como los cueros cordobeses gofrados (motivos ornamentales
estampados por medio de hierros calientes).
La novedad más importante en la técnica de los muebles Luis XIII es el
torneado de la madera que apareció ya tímidamente en el reinado
anterior; el uso en Francia de las taraceas e incrustaciones italianas y el
chapado de ébano. También se emplea la marquetería de cobre y
estaño. Muy típicas del reinado de Luis XIII son además las molduras
rizadas de origen flamenco, utilizadas para guarnecer cajones y marcos.

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La talla, de relieves muy acusados, es la ornamentación más frecuente.
Las estructuras son claras y, aunque se recubren por maderas ricas
como el ébano, acusan siempre sus líneas renacentistas al exterior.
Este suntuoso y quizás algo triste estilo presenta nuevos procedimientos y
singularidades propias que preparan el advenimiento del Barroco en
Francia.
Cabinet de ébano de la época de Luis XIII, mueble más característico de
principios del siglo XVII.

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Mueble Barroco. Estilo Luis XIV
Durante el reinado de Luis XIV (1643-1715) tuvo lugar el pleno desarrollo
del mueble barroco francés. Es por ello que al mobiliario barroco también
se le conoce como mobiliario de estilo Luis XIV.
A mediados del siglo XVI un nuevo estilo estaba emergiendo, el Barroco,
primero en Italia y más tarde en Francia, bajo el reinado de Luis XIV. El
Barroco vino a dar una nueva vida, en forma impetuosa y exuberante, a
fórmulas existentes antes del Renacimiento, desbordando normas
clásicas y rompiendo estructuras tradicionales. Este estilo tiene a
considerarse como un ordenador de masas y conjuntos, estructurador de
accesorios y detalles para lograr la obra armoniosamente completa.
El mobiliario más elegante y elaborado del barroco se realizó para la
corte de Luis XIV. El excelente artesano André Charles Boulle creó formas
y detalles inusuales con taraceas que combinan metal (peltre, oro, bronce
o plata), carey y ébano en diseños que formaban yuxtaposiciones
imaginativas de motivos clásicos: parecía como si la inspiración básica
fueran antiguos frescos romanos. Las patas con formas de columnas,
ricamente adornadas, se utilizaron para sostener mesas, sillas y arcones.
El mueble se hace más confortable y elegante, decorado con una gran
riqueza vemos que ha heredado la nobleza de las formas anteriores y
adquirido gracia y majestad.

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Armario incrustado de ébano y carey y policromado en oro, ejecutado para la
corona francesa; casi con certeza, obra primeriza de André Charles Boulle.
El estilo Luis XIV combina la curva con elementos rectilíneos y marca
francamente los ángulos rectos. El nuevo estilo ama la plenitud formal y la
magnificencia, entre ellas, abundancia de detalles, uso del dorado y
riqueza de los materiales. Abundan las aplicaciones de bronce para
reforzar los ángulos y las molduras, que sustituyen a la talla hasta ocultar
muchas veces la madera; el mueble llega a ser una escultura que
constituye su estructura propiamente dicha. También las tapicerías
alcanzan una extraordinaria importancia.
Podemos distinguir tres clases de muebles: los dorados, los tallados en
su totalidad y los que llevan aplicaciones de bronce y marquetería. La

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marquetería y el chapado se reservan para los muebles de gran
superficie: armarios y cómodas, mientras que en sillas, mesas y
consolas, se usa la talla. La madera se dora al temple y los muebles de
asiento se tapizan todos. Los bronces dorados refuerzan con escuadras
los ángulos de las puertas y darán carácter a los muebles durante todo
el siglo XVIII y quedan como un importante elemento decorativo. Gracias a
la línea curva los asientos pierden rigidez y toman un aspecto más grato y
familiar.
En los muebles de lujo se abandona por completo el torneado, tan
usado en el estilo Luis XIII. Mucho más confortables que el estilo anterior,
son de madera tallada, con espalda ancha, alta y rectangular, inclinada
hacia atrás y buscando siempre la comodidad del que los usa.
.! !
Sillón barroco en madera tallada y cuero repujado.

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Mueble Rococó. Estilo Luis XV
La transición entre el barroco majestuoso y frio de Luis XIV hacia el
“gracioso” rococó de Luis XV tiene lugar a través del estilo Regencia que
durará escasamente diez años, de 1715 hasta 1725. En este estilo, como
hemos dicho transitorio, se encuentran entrelazados los distintos
elementos que caracterizan los estilos Luis XIV y Luis XV, presentando en
algunos muebles elementos rectilíneos y severos y en otras superficies
cóncavas y convexas con ondulaciones totalmente inéditas.
En cuanto al estilo Luis XV o rococó, cabe destacar las siguientes como
características principales que lo definen: reducción de proporciones
adaptando el mobiliario a las estancias más pequeñas y más
acogedoras; empleo casi exclusivo de la línea curva, tanto en estructuras
como en la ornamentación; la estilización de las formas y la aparición de
diversos tipos de muebles más cómodos que responderán a nuevas
necesidades y preferencias.
Con el Luis XV se aprecian grandes innovaciones en la técnica y una
transformación profunda en las estructuras. Antes se acusaban al exterior
los elementos constructivos horizontales y verticales, ahora se disimulan
estos mismos elementos; los respaldos y asientos rígidos se redondean,
las patas firmes y sólidas se arquean y parecen doblarse; las estructuras
definidas y claras se pierden ahora en un mar de ondulaciones.

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Los muebles de asiento Luis XV se cubren enteros de tela y presentan
una silueta movida y graciosa con toda la elegancia que le presta una
curva armónica e ininterrumpida. La madera es siempre aparente sin que
el armazón quede nunca escondido por la tapicería, como ocurría en los
dos estilos Luis XIII y Luis XIV. Los muebles no acusarán divisiones
marcadas, por el contrario, la misma curva que empieza en los soportes
subirá hasta el respaldo enmarcándolo por entero.
Sillón modelo “Bergere” de estilo Luis XV. Asiento bajo y brazos unidos al
respaldo, todo cómodamente mullido. Estructura de madera a la vista.
El estilo rococó, cuyo punto álgido se alcanzó a mediados de¡ siglo XVIII,
fue muy adecuado para el arte de la talla (se utilizaban las maderas de
castaño, nogal, haya, caoba, palosanto y palo rosa). Los muebles
formaban parte integrante de la decoración, por lo que el motivo que, por

! 47
ejemplo, estaba tallado en el respaldo de una silla se repetía en el
entrepaño de la pared a la que estaba adosada.
El estilo rococó designa exactamente un capricho o una fantasía del estilo
Luis XV, un desbordamiento de la decoración hasta un extremo que roza
muchas veces la extravagancia. Dicho estilo se inspira en motivos
campestres: rocas, conchas, grutas y toda clase de combinaciones
concoideas. El periodo del rococó que alcanza mayor exquisitez lo
encontramos comprendido entre los años 1735 a 1765 y sus piezas de
mobiliario pueden ser consideradas como de las más suntuosas,
graciosas y elegantes de toda la historia del mueble.
En este apartado merece mención especial el mobiliario que se
desarrolló en Inglaterra durante los siglos XVII y XVIII, por poseer unas
características concretas que lo dotan de un estilo propio.
Al llegar el siglo XVIII son ya dos las naciones que influyen en sentidos
opuestos en la creación del mueble: de un lado el mueble cortesano de
gran lujo de la corte francesa: estilos Luis XIV, Regencia y Luis XVI (vistos
anteriormente), y paralelamente los estilos ingleses: Reina Ana, Adam,
Chippendale, etc., que destacan precisamente por su sobriedad,
sentido práctico y elegancia.

! 48
Hasta este momento los estilos siempre tomaron el nombre de los
monarcas o épocas que rigieron su norma; en cambio, desde ahora
seles conocerá por el de los artistas creadores, y, así, el nombre de
Chippendale, caracteriza toda una época del mueble inglés.
Las incrustaciones se utilizaron muy poco debido a que los
ebanistas preferían usar madera fina de nogal y caoba, que se
trabajaba con mucha destreza, para sacar el máximo partido a las vetas.
Se designa estilo Reina Ana al mobiliario inglés de los dos primeros
decenios del siglo XVIII. Sus características principales además del uso
de la laca y la marquetería son un diseño sobrio, elegante aunque con
algo de empaque y el empleo de maderas claras: nogal, fresno y
chapeado con maderas preciosas. En este periodo encontramos ya las
patas curvadas, tipo pata cabriolé (terminación de las patas típica del
siglo XVIII, que consistía en una garra de animal como el león o el águila
sobre una bola), de origen oriental. En dicho estilo escasea la labor de
talla y no son empleados elementos arquitectónicos ni molduras para
realizar separaciones en la fachada de los muebles tales como armarios.
La proporción y la simetría son factores dominantes en el aspecto del
mobiliario de este periodo.
Hacia el final del periodo rococó en Inglaterra, el ebanista londinense
Thomas Chippendale, fue el primero en categorizar las variedades del

! 49
rococó como el francés, chino o gótico y ofrecer ejemplos de cada una.
Los innovadores diseños franceses de la década de 1750 fueron
traducidos por Chippendale a diseños muy elaborados, sin utilizar oro
molido ni taraceas como hacían los franceses.
El elemento del estilo rococó más subrayado por Chippendale y por la
mayoría de los artesanos ingleses fue su aire de capricho, inspirado en
los diseños franceses por la utilización nueva de los motivos clásicos.
En el estilo Chippendale notaremos que abundan los muebles "al gusto
chino". Esta moda oriental enriqueció algunos muebles con detalles
nuevos, tales como los enrejados o las celosías, que igual podían
emplearse en los respaldos de sillas como en los cabeceros de las
camas.
Los grandes planos de los muebles se chapaban con maderas exóticas
o se lacaban y se doraban; la marquetería es una mezcla de la flora
holandesa y de la geometría italiana. Chippendale produjo una enorme
variedad en los dibujos de los respaldos de los muebles, mezclando los
motivos chinos con los del rococó.
Es en la segunda mitad del siglo XVIII cuando los ebanistas y
decoradores ingleses se adelantaron y crearon un estilo neoclásico
inspirado en el arte ornamental de finales del Imperio Romano,
denominado estilo Adam. Este estilo fue casi exclusivo de la aristocracia

! 50
y de la burguesía rica. El mobiliario presenta unas estructuras ligeras de
buen gusto con maderas refinadas y diseño elegante.
Sillón inglés estilo Adam, siglo XVIII.
Aun siendo de tipo popular y campestre, las sillas Windsor, de maderas
curvadas, con el respaldo de palos torneados verticales, el central más
ancho y el siento de madera, han sido uno de los pocos muebles que
han gozado de una estima tan prolongada. Desde el comienzo, las sillas
Windsor fueron fabricadas en serie. Cada una de las piezas era realizada
por un artesano especializado y luego eran montadas, inicialmente en
pequeños talleres y posteriormente en verdaderas fábricas.

! 51
Silla Windsor, primera silla de que pudo disponer la clase media y baja de la
sociedad inglesa del siglo XVIII.
El sentido de la proporción, utilidad práctica, estructuras sencillas con
elegante y sobria ornamentación es el aspecto más destacado de los
muebles ingleses de esta segunda mitad del siglo XVIII. Empiezan a
producirse los muebles en serie para la clase media que acusa una
notoria elevación del gusto artístico. Se proporciona también por vez
primera el mobiliario completo para el conjunto de una habitación o una
vivienda. Las molduras han desaparecido de los muebles. Se ha logrado
una línea de gran ligereza y es tanta la simplicidad de las estructuras
que para lograr una distinción entre los muebles ricos y los económicos
se acude a la labor de marquetería y las maderas exóticas.

! 52
Mueble Neoclásico. Estilo Luis XVI
En reacción a los excesos del rococó e inspirado por el redescubrimiento
de Herculano (1738) y Pompeya (1748), el neoclasicismo dominó durante
el reinado de Luis XVI (1774-1793). Al final del siglo XVIII los muebles son
cada vez más numerosos y su técnica llega a su máxima perfección.
Con el naciente sentido del culto a lo clásico las líneas se hacen rectas y
reposadas. Así llega a tener el estilo Luis XVI o neoclásico rasgos propios
que le distinguen de los precedentes y del Estilo Imperio que después de
los breves años de la revolución le sigue; su elegancia, ligereza y finura
no es rebuscada sino natural y no está exenta de coquetería y feminidad,
aunque no llega a la de Luis XV, que es más graciosa y movida.
El Luis XVI se diferencia del Imperio por ser una adaptación más original y
elegante, aunque a veces algo amanerada, de lo antiguo, pero siempre
con un sentido más femenino.
El estilo Luis XVI presenta una mayor rigidez en su diseño con algunas
piezas en que, por dominar exclusivamente la línea recta, ofrecen un
aspecto algo severo, pero el mobiliario en su conjunto no desdeña la
curva graciosa ni la decoración ondulada.
Hay un grupo de muebles fabricados totalmente en línea recta y con la
única ornamentación de finas molduras de cobre encuadrando cajones y

! 53
detalles de estructura, mientras que otro grupo combina armoniosamente
rectas y curvas con predominio rectilíneo.
Por último quedan los muebles sobrecargados de ornamentación:
apliques de bronce, placas de porcelana y de concha. Con la excepción
de estos últimos muebles señalados, todos los restantes presentan una
estructura clara y una decoración limitada geográficamente a su función
específica sin salirse de sus cuadros ni invadir ninguna línea constructiva.
El uso de maderas exóticas (en especial, la caoba, el ébano o el palo de
rosa) en chapado se generaliza y extiende. Los tapizados se manifiestan
espléndidos. Siguen los bronces aplicados, mucho más ligeros pero muy
finamente dorados y cincelados, y la marquetería adquiere ahora un
mayor desarrollo. Surge una nueva moda con el mueble pintado. Los
torneados, que estaban desterrados desde el Luis XIII, vuelven ahora
decorados con pequeñas aplicaciones de bronce, como goterones,
capiteles, ramas de laurel en espiral, y, sobre todo, las típicas estrías
talladas.
Los muebles de asiento tienen quizás un aspecto menos acogedor que
los del estilo precedente. El aspecto es más arquitectural y la decoración
fina y sobria presentando un conjunto equilibrado y de gran distinción.
Los soportes son verticales (las patas), de sección circular y con
acanaladuras verticales o en espiral y de menor sección a medida que
bajan en dirección a la base.

! 54
Famosa silla Luis XVI. Respaldo calado que muestra influencia de la ebanistería
inglesa pero totalmente asimilada o afrancesada.
Durante esta época el mueble, técnicamente, es cada vez más perfecto;
a los ensambles de caja y espiga, de lengüeta, de cola de milano o
golondrina siguen variaciones de los mismos cada vez más
complicados, obligados por la calidad de la obra y el avance de la
técnica.
Mueble Estilo Imperio. Segundo Neoclasicismo
La utilización de diseños inspirados en hallazgos arqueológicos aumentó
en la ultima parte del siglo XVIII e influyó en el mobiliario realizado en Gran
Bretaña y en todo el continente europeo. Este nuevo auge marca la

! 55
segunda fase del neoclasicismo, denominado Estilo Imperio porque
se identificó con las actividades imperiales de Napoleón I.
El nuevo estilo, en su afán de adaptación a las formas antiguas, está falto
de personalidad, aunque no de originalidad. Pero su influencia y su
desbordamiento han sido tan grandes que, después de la abdicación de
Napoleón en 1814, dura aún otros quince años y con él puede decirse
que terminan los llamados estilos históricos de Francia y de Europa en el
mueble.
El mueble de esta época es exageradamente simétrico. La estructura se
concreta en cubos, prismas, bloques cerrados, superficies planas, casi
sin molduras, a las que superponen para darle más ligereza.
Banco estilo imperio, el cual presenta una fuerte influencia de los muebles de las
antiguas Grecia y Roma.

! 56
El estilo imperio se convirtió en un estilo que traspasó todas las fronteras,
con interpretaciones escandinavas, alemanas, rusas y americanas.
El concepto básico era siempre el mismo: prototipos antiguos
adaptados al gusto del emergente siglo XIX. Los diseñadores intentaban
volver a conseguir el sentido de la monumentalidad y grandeza del que
habían carecido desde principios del siglo XVIII.

! 59
SIGLO XIX
Durante los comienzos del siglo XIX el mueble aún estaba influido por la
pasada época, la del Imperio, puesto que como señalamos al principio
siempre existe una transición de una época a otra, en algunos casos
apenas se percibe y en otros se dilata más en el tiempo. Por lo tanto a
principios de siglo el mobiliario sigue teniendo un carácter aburguesado y
aparente, que evoluciona hacia un arte sin trascendencia, adormecido
entre la mecanización y la industrialización.
En España estaba en boga el denominado estilo Isabelino, que se
desarrolló durante el reinado de Isabel II (1833-1868), y que tomó el relevo
del estilo Imperio. Los muebles eran aún muy macizos, los materiales
predominantes eran las maderas de pino y caoba y los contrachapados,
y las técnicas decorativas más abundantes eran la marquetería y las
aplicaciones de bronce y latón con relieves troquelados representando
cisnes, góndolas y jarrones. Abunda la línea curva, orgánica y suntuosa.
En Inglaterra se desarrolla, en paralelo al estilo Isabelino español, el estilo
victoriano, que predominó durante el reinado de la Reina Victoria (1837-
1901), y en Francia el estilo del Rey Luis Felipe. Durante este periodo se
asiste a la mayor proliferación del mueble decorativo de los últimos años.

! 60
Silla de estilo Victoriano
Las primeras piezas de mobiliario de estilo victoriano eran bastante
sencillas, pero gracias al nacimiento de la mecanización (impulsado
por la industrialización que había comenzado allá por el final del siglo
XVII y principios del XVIII), la fabricación del mueble asiste al mayor
avance de los tiempos, haciendo posible la rápida proliferación del
mobiliario de la época. Las técnicas constructivas, que venían
desarrollándose desde el siglo XVIII y que alcanzaron su esplendor por
aquel entonces, se industrializan surgiendo así la fabricación en serie de
modelos económicos, puesto que gracias a la introducción de la
máquina en el proceso se prescinde de la mano de obra abaratando así
los costes.
El nacimiento de la era industrial provoca ya desde el siglo XVII una
paulatina reestructuración de la sociedad y del mundo laboral, y la
máquina convierte la delicada artesanía del mueble en una producción

! 61
en cadena, una industria que repite una y otra vez interpretaciones de los
estilos históricos. Es este clima el que propicia la aparición del movimiento
intelectual que tratamos en el siguiente apartado.
Movimiento Arts & Crafts
El movimiento Arts and Crafts ("Artes y Oficios") fue una escuela artística
que surgió en Inglaterra a mediados del siglo XIX, y que se desarrolló en
el Reino Unido y en los Estados Unidos durante la segunda mitad del
siglo XIX y en los comienzos del siglo XX. William Morris está considerado
el precursor de este movimiento y el que acuñó el término. El Arts and
Crafts surge con la intención de retomar el modo de hacer de la edad
media, huyendo de la revolución industrial.
El movimiento revalorizó los oficios medievales, en plena época victoriana,
con lo cual reivindicó la primacía del ser humano sobre la máquina, con
la filosofía de utilizar la tecnología industrial al servicio del hombre, pero
potenciando la creatividad y el arte frente a la producción en serie. En lo
expresivo se caracteriza por el uso de líneas serpenteadas y asimétricas,
y constituyó sobre todo un arte decorativo.
Resulta comprensible que Morris quisiera luchar contra la máquina y la
vulgar imitación de los nobles materiales; por ejemplo, el haya imitaba a
la caoba, las chapas de latón al bronce fundido, el papel pintado a las

! 62
sedas que tapizan las paredes, etc., todo fruto de la obsesión por
abaratar costes. Lo que Morris buscaba era un retorno a las tradiciones
medievales de manufactura del mueble, un retorno a la artesanía. Los
integrantes del movimiento Arts & Crafts produjeron modelos de piezas de
mobiliario clásico e histórico siguiendo las técnicas tradicionales pero
simplificando el proceso, obteniendo así unos bellos ejemplares que
resultaron admirables por su belleza y excelente artesanía, que no
tardaron en ser imitados y que sirvieron como fuente del diseño de
mobiliario de la edad contemporánea.
Silla de junco producida por la empresa Morris, de 1870 en adelante
No obstante, la sociedad del momento no quería renunciar a la economía
de la producción industrial en serie a cambio de los ideales del
movimiento. Sin embargo hay que resaltar lo indicado anteriormente:
Morris influyó de una manera altamente notoria en los cánones a seguir

! 63
por los movimientos artísticos venideros, sirviendo de inspiración al tan
conocido Art Nouveau.
Movimiento Art Nouveau
El Art Nouveau (arte nuevo) es un movimiento artístico que surge a fines
del siglo XIX y se proyecta hasta las primeras décadas del siglo XX.
Se podría afirmar que es un estilo decorativo que toma su nombre a raíz
de una exposición que realiza el pintor noruego Munch en la galería
parisina "La maison del Art Nouveau". Aunque se conoce con distintos
nombres según los países: modernismo en España, Jugendstil en
Alemania, Sezession (en Austria), Liberty en Inglaterra y Floreale en Italia.
Todas estas denominaciones hacen referencia a la intención de crear un
arte nuevo, joven, libre y moderno, que representara una ruptura con los
estilos dominantes en la época.
En arquitectura e interiorismo, la estética del art nouveau muestra una
clara inspiración en la naturaleza a la vez que se incorporaban
novedades derivadas de la revolución industrial, como el hierro y el cristal.
En gran medida estas aspiraciones se basaron en las ideas estéticas de
William Morris provenientes del Arts & Crafts, que proponían democratizar
la belleza y socializar el arte, en el sentido de que hasta los objetos más
cotidianos tuvieran valor estético y fueran accesibles a toda la población,

! 64
aunque sin utilizar las nuevas técnicas de producción masiva que
impedían el desarrollo del buen hacer artesanal.
El Art Nouveau es el primer movimiento que se desprende casi por
completo de la imitación de los estilos de la Edad Moderna
(Renacimiento, Barroco, Rococó, Neoclasicismo, etc.) en busca de la
identidad de lo urbano y lo moderno, puesto que nacía un nuevo siglo.
En el mobiliario, sus primeros exponentes fueron los arquitectos belgas
Henri van de Velde y Victor Horta, quienes amueblaron los interiores de
sus edificios para completar las formas sinuosas de los decorados
arquitectónicos. H. van de Velde (1863-1957), nos muestra una
admiración por la máquina, sin perder el artista su individualismo. En sus
muebles se advierten las características del Art Nouveau, de líneas
sencillas, con la casi total ausencia de tallas y con una ornamentación
vegetal.
Silla diseñada por Henry van de Velde, de 1895.

! 65
En Francia, el arquitecto Hector Guimard (1867-1942) diseñó muebles
igualmente asimétricos y con una gran diversidad de formas talladas.
Silla hecha con madera de un árbol frutal, diseñada por Hector Guimard en 1908.
En Alemania destacan durante esta época Peter Behrens (1888-1940) y
Max Berg como los máximos exponentes del Art Nouveau, más conocido
como Judgenstill en el país germano. En Alemania pronto se transforman
las características propias del Art Nouveau evolucionando hacia un estilo
propio, no sólo por la ornamentación sino por el estudio de las
proporciones, de los materiales y por la relación de cada parte con el
todo, el conjunto.
En Escocia, el arquitecto Charles Rennie Mackintosh (1868-1928) que
también aprovechó los interiores de sus construcciones con gran ingenio
y desarrolló piezas de mobiliario únicas que tienen que haber parecido
excéntricas y curiosas en su tiempo. Elementos típicos empleados por

! 66
Mackintosh fueron las maderas de roble pintadas, las elegantes taraceas
y los montajes de metal.
Uno de los elementos más característicos de Mackintosh, reconocible en
muchas de sus piezas, es el respaldo alto de sus sillas que claramente
destaca en el conjunto de las mismas.
Silla Hill House, diseñada en 1903 por Charles Rennie Mackintosh. De madera
lacada y tapizada en tela.
En España, como ya sabemos, destacó el arquitecto catalán Antoni
Gaudi, máximo precursor del movimiento modernista. También diseñó
muebles, fundamentalmente sillas, piezas de una gran originalidad en las
que plasmaba los fundamentos del art nouveau internacional y a los que
ponía su marca personal.

! 67
Silla tallada en roble, diseñada por Antoni Gaudí en 1904.
Movimiento Sezession
Antes de pasar al siguiente capítulo y cambiar de siglo he considerado el
movimiento denominado Sezession, merece especial atención por una
serie de razones que expongo más adelante. Este movimiento reúne unas
características especiales que hacen que sea diferente a los movimientos
coetáneos, dando lugar a un nuevo cambio en la concepción del diseño
en general, y propiciando así el nacimiento de otros estilos del siglo XX
como el Bauhaus alemán y el Art Decó francés.
Paralelo al Art Nouveau de Francia, se desarrolla en Austria un estilo que
comparte la mayoría de las características del primero, pero que presenta
otras que lo hacen especial. Este estilo se denominó Sezession. El
arquitecto y diseñador austriaco Josef Hoffmann (1870-1955) está
considerado el precursor de este estilo, y el fundador (junta a otros artistas
de esa época) del Wiener Wekstätte en 1903 (Taller de Viena).

! 68
El Wekstätte realizó, entre otros tipos de artes decorativas, mobiliario de
formas cúbicas que contrastaban de modo radical con la obsesión por
las formas curvilíneas del Art Nouveau, el ángulo recto se utilizaba de
forma constante y los detalles eran austeros.
Silla dela serie Fledermaus, diseñada en 1906 por Josef Hoffmann. Fabricada en
madera y tela.
Junto con Joseff Hoffman, otros arquitectos vieneses como Josef Olbrich
(1867-1908), Otto Wagner (1841-1918) y Kolo Moser (1868-1918) fueron
los primeros que se dedicaron a diseñar muebles para la fabricación en
masa. Esta separación de diseño y producción en dos procesos
de fabricación básicamente diferentes el uno del otro, realizados por
personas diferentes, está considerada hoy en día como la hora de
nacimiento del diseño.

! 69
SIGLO XX
Movimiento Bauhaus
La Bauhaus (del alemán “casa de la construcción”) fue la escuela de
arte, artesanía, diseño y arquitectura fundada en 1919 por Walter Gropius
en Weimar, Alemania. La Bauhaus llegó a ser casi sin duda la institución
del diseño más influyente en el desarrollo del arte del siglo XX.
Aunque al principio se viera influenciado por las teorías del movimiento de
De-Stijl1
, Gropius se rige más por el trabajo práctico y su significado
social. Este centro de formación fue como un gran laboratorio donde
arquitectos, artistas, artesanos y técnicos, colaboraron y realizaron un
trabajo común en la construcción, las artes decorativas, los oficios de
diferentes artesanías, y todo ello como una evolución y continuación de
movimientos anteriores como el austriaco Sezession y el inglés Arts &
Crafts. Asimismo, buscan en todos los ámbitos de las artes aplicadas los
vínculos entre un diseño funcional y reducido y las necesidades del
hombre en una época dominada por la industria y la técnica.
!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
1
Movimiento artístico que nace en Holanda en 1917 que transmitía sus ideas a
través de la publicación que llevaba el mismo nombre y que se editó hasta 1931.

! 70
“Arquitectos, escultores, pintores, ... debemos regresar al trabajo manual ...
Establezcamos, por lo tanto, una nueva cofradía de artesanos, libres de esa
arrogancia que divide a las clases sociales y que busca erigir una barrera
infranqueable entre los artesanos y los artistas.“
Walter Gropius
Los arquitectos principales de la Bauhaus que diseñaron algunas de las
sillas más repetidas de la historia fueron Marcel Breuer y Ludwig Mies Van
der Rohe.
Breuer diseñó su sillón Wassily de tubo de acero cromado y lona en 1925
y su copiada silla en voladizo de tubo con asiento y respaldo de mimbre
enmarcados en madera en 1928. En 1929 Mies Van der Rohe diseñó su
famosa silla Barcelona, una obra maestra formada por dos elegantes
marcos curvados en forma de X, de tiras de acero cromadas que soporta
cojines de cuero. El objetivo de ambos arquitectos era concebir muebles
estéticamente agradables y aptos para la producción en serie.
Sillón Wassily, diseñado en 1925 por Marcel Breuer. Acero y cuero negro.

! 71
Sillón Barcelona, diseñado por Ludwig Mies Van der Rohe en 1929. Acero y cuero
negro.
La Bauhaus fue clausurada en 1933 por las autoridades de Alemania
bajo el mandato del partido nazi, pero esto no supuso el fin de las ideas
de la escuela, puesto que durante sus escasos catorce años de duración
desarrolló una labor intensa que perduró mucho después y que
indiscutiblemente es la cuna de todo el diseño posterior del siglo XX.
Movimiento Art Decó
Este movimiento surgió en la primera década del siglo XX, aunque el
nombre se acuñó a raíz de la celebración de la Exposición de Artes
Decorativas de París de 1925. Este movimiento adopta características de
otros anteriores, como el interés por las formas geométricas del Sezession
o el empleo de nuevos materiales como el acero y el cuero de la
Bauhaus.
El estilo perduró hasta 1939 y entre los representantes más célebres de
este movimiento destacan Charles-Edouard Jeanneret (1887-1965), más

! 72
conocido Le Corbusier por el pseudónimo que adoptó para firmar sus
publicaciones, René Herbst y Eileen Gray. Sus diseños de mobiliario
basados en tubos de acero se caracterizan frecuentemente por el uso de
acolchados (marca de la Bauhaus).
Le Corbusier sintió la necesidad de realizar muebles apropiados para sus
construcciones y junto con su primo Pierre Jeanneret y la diseñadora
Charlotte Perriand, desarrolló diseños usando “materiales modernos”,
como el acero cromado-plateado en una forma que genera excelente
utilidad y también demuestra su preferencia ideológica relacionada a la
producción industrial.
Chaise Longue a Reglage Continu, diseñada por Le Corbusier, P. Jeanneret y Ch.
Perriand en 1928.
Le Corbusier conoció a Walter Gropius y a Mies Van der Rohe mientras
estuvo trabajando en el estudio del arquitecto alemán Peter Behrens
durante 1910. Hoy en día estos tres están considerados las figuras más
importantes de la arquitectura moderna en Europa.

! 73
Mueble escandinavo
El mobiliario escandinavo, también conocido como nórdico, toma
especial relevancia hacia la segunda década del siglo XX por un
acontecimiento que tiene lugar en Estados Unidos. Estamos hablando de
la Feria Mundial de Nueva York de 1939, en la cual hubo una pequeña
exposición de muebles de procedencia finlandesa. Estos muebles se
caracterizaban, entre otras cosas, por ser de láminas de madera
contrachapadas con secciones gruesas y resistentes, cuyas piezas
solían ser continuas (como el asiento y el respaldo e incluso los
reposabrazos). Se fabricaban en Finlandia y eran distribuidos por la firma
Artek, y su diseñador era el arquitecto finlandés Alvar Aalto (1898-1976),
quien había explorado muy bien las ideas constructivas de la Bauhaus,
pero que sustituyó el empleo de acero en las estructuras por madera de
abedul y álamo, típicas de su país.
Sillón de brazos Paimio, diseñado por Alvar Aalto en 1930-1. Madera laminada y
estratificada.

! 74
Más adelante, el diseñador danés Arne Jacobsen (1902-1971),
exponente claro del estilo nórdico al igual que Alvar Aalto, creó muebles
de madera laminada de exquisitas proporciones y particularmente aptos
para la fabricación en serie. Puede verse en sus diseños simples y
sencillos cómo Jacobsen refleja la dilatada tradición escandinava del
empleo y la manipulación de la madera en el mobiliario, hecho que cobra
sentido si tenemos en cuenta que la madera era y es uno de los
productos nacionales más importantes en la mayoría de los países
escandinavos.
Silla Ant, diseñada por Arne Jacobsen en 1955. Madera laminada y acero.
Mueble moderno o contemporáneo
Como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial la vida artística y
cultural en Europa se vio prácticamente reducida a cenizas a mediados
del siglo XX. La mayoría de los artistas, arquitectos y diseñadores están
en el exilio, y los que no lo están no disponen de los medios necesarios

! 75
para llevar a cabo su tarea. Europa no pasaba su mejor momento, y es
en Estados Unidos donde diseñadores y arquitectos consiguen plasmar
sus ideas y realizarlas.
Durante la guerra, cuando la producción era tan reducida, la firma H.G.
Knoll comenzó a producir los diseños de Jens Risom, un danés que
aprendió el arte y el diseño de mobiliario escandinavo en Copenhague, y
más tarde la firma contaría también con los trabajos del arquitecto
estadounidense de origen finlandés Eero Saarinen (1910-1961) y del
diseñador italiano Harry Bertoia (1915-1978).
Otra firma de muebles muy importante de la época fue Herman Miller,
dirigida por el arquitecto americano George Nelson. Uno de los mayores
aciertos de Nelson fue incorporar a la firma los diseños del ahora
archiconocido arquitecto y director de cine estadounidense Charles
Eames (1907-1978), que junto con su esposa Ray Eames es responsable
de numerosos diseños icónicos de mobiliario del siglo XX convertidos ya
en un clásico. Eames logró el máximo reconocimiento tras su
participación en un concurso organizado por el MoMa de Nueva York
(Museo de Arte Moderno) en 1941, llamado “Organic Design in Home
Furnishings” (Diseño Orgánico en el Interiorismo), donde ganó el primer
premio con su diseño de silla que empleaba por primera vez en el asiento
la madera estratificada conformada tridimensionalmente.

! 76
Silla LCW (Lounge Chair Wood), diseñada en 1945 por Charles y Ray Eames.
Madera laminada.
Tras la Segunda Guerra Mundial, en 1948, el MoMa organizó otro
concurso titulado “Low-cost Furniture Design”, el cual quiere fomentar el
diseño y la producción de mobiliario de bajo coste para adaptarse a la
situación actual de la posguerra, época de crisis económica y escasez
de material. Una de las primeras sillas que se proyectaron con el asiento
de plástico reforzado es otro diseño de Eames, y que procede de este
concurso.
Estas dos firmas de muebles obtienen una gran acogida y experimentan
un éxito gradual, exportando sus piezas a Europa (en particular a
Dinamarca e Italia). Gracias a esto el trabajo de los diseñadores
estadounidenses continuó con una constante expasión.

! 77
20 SILLAS
QUE CAMBIARON
EL MUNDO

! 79
SIDE CHAIR No 14
1859
Michael Thonet
Como ya sabemos, hasta finales del siglo XIX las sillas eran en su
mayoría hechas a mano por los artesanos. Sin embargo, la creciente
demanda de piezas de mobiliario obligó en cierto modo a los artesanos a
desarrollar nuevas técnicas de fabricación en masa que se basaban en
las nuevas tecnologías de la era de la industrialización y que se abrían a
nuevos mercados.
En el año 1859 el austriaco Michael Thonet diseño con gran éxito una
silla compuesta únicamene por seis piezas de madera (que se moldeaba
y curvaba a través del vapor) y diez tornillos. Su fabricación era rápida y
de bajo coste, era fácil de desmontar y transportar, ligera y duradera;
todo esto la convirtió rápidamente en uno de los productos industriales
más exitosos del siglo XIX, máxima expresión de la simplicidad.
¿Por qué marcó un antes y un después?
A parte de ser la primera silla concebida para ser producida en
masa fue la primera obtenida siguiendo la técnica de moldeo de madera
mediante vapor de agua.

! 81
SILLA CON RESPALDO ALTO
1900
Charles Rennie Mackintosh
La llegada del siglo XX trajo consigo una oleada de arquitectos
rompedores que contribuyeron a la consagración del modernismo. En
Escocia, Charles Rennie Mackintosh (1868-1928) fusionó de una manera
muy acertada el estilo tradicional del oficio celta con toques orientales,
con el fin de crear un distintivo estilo que se encontraba entre el Arts &
Crafts, el Art Nouveau y el austriaco Sezession.
En el año 1900 Catherine Cranston le encargó a Mackintosh el
diseño de un salón de té para señoras en el centro de Glasgow. Esta sala
tenía unos techos muy altos, y los ventanales se prolongaban hasta éste.
Para acentuar esa verticalidad decidió completar el diseño de la sala con
esta silla de diseño propio. La altura tan notable y las formas geométricas
tan pronunciadas del respaldo continuaban con la verticalidad de la sala.
Se ha probado que el trabajo de Mackintosh tuvo una gran influencia
en el desarrollo de otros estilos europeos de principios del siglo XX por sus
composiciones arquitectónicas. Entre otros, el austriaco Josef Hoffmann
de la Wiener Werkstätte adoptó muchos de los aspectos de los diseños
de Mackintosh.

! 83
SILLA No 728 PARA EL
CABARET DE FLEDERMAUS
1907
Josef Hoffmann
En el año 1907 la Wiener Werkstätte completó con éxito otro proyecto
ambicioso: el diseño del cabaret Fledermaus de Viena, el cual suponía no
sólo el diseño del espacio interior sino también del mobiliario.
La contribución principal del arquitecto y diseñador austriaco Josef
Hoffman (1870-1956) fue sin duda alguna la creación de esta silla, de
corte limpio, que se disponía alrededor de las mesas que también fueron
diseñadas por Hoffmann. El diseño modesto y la falta de ostentación era
el reflejo perfecto del estilo Sezession.
La estructura minimalista de la silla Cabaret Fledermaus la hizo
completamente moderna. Sólo las pequeñas esferas negras que
descansan bajo los reposabrazos y el asiento (muy características de los
diseños de Hoffman) pueden considerarse un toque de extravagancia o
rareza.

! 85
RED/BLUE CHAIR
1917-18
Gerrit Thomas Rietveld
La Red/Blue Chair (silla roja/azul) diseñada por el arquitecto y
ebanista holandés Gerrit Thomas Rietveld (1888-1964) estaba a la cabeza
de todos los experimentos llevados a cabo por los miembros del
movimiento holandés De-Stijl, fundado en 1917. Este movimiento
combinaba un racionalismo severo con un concepto del arte espiritual y
casi místico. En los trabajos de De-Stijl, el espacio y el plano se reducen a
composiciones rigurosamente rectangulares, al mismo tiempo que limita
el uso de los colores a los primarios: amarillo, rojo y azul. En un principio
Rietveld diseñó esta silla para su producción en masa (estaba
confeccionada con piezas de madera lisas de medidas estándares) ,sin
embargo, esto nunca llegó a ocurrir. Hoy en día la Red/Blue Chair
permanece como una pieza única e icónica, símbolo de la abstracción,
en el Toledo Museum of Art de Ohio.
Esta silla fue uno de los primeros experimentos realizados que
llevaron a tres dimiensiones los principios de la filosofía de un movimiento
artístico. Al principio la silla estaba pintada en una escala de grises, pero
en 1918 Rietveld decidió pintarla en rojo, azul, amarillo y negro en honor a
las pinturas de su compañero y miembro de De-Stijl Piet Mondrian.

! 87
SILLA B3 (SILLA WASSILY)
1925
Marcel Breuer
La silla B3 de Marcel Breuer (1902-1981) fue uno de los primeros
diseños que salió de la escuela de Bauhaus, y que ayudó a consolidar
su reputación como símbolo del diseño funcional. Además, fue uno de los
primeros diseños que experimentó con el acero tubular como estructura.
Se dice que su diseñador, Marcel Breuer, se inspiró en el manillar de su
bicicleta Adler para crear la estructura de la silla B3.
Al parecer Breuer le entregó uno de sus primeros prototipos de esta
silla a su colega de la Bauhaus Wassily Kandinski, de ahí que ésta
tomara el sobrenombre de Wassily cuando fue rediseñada en 1960.
La silla B3 surgió como una solución al reto técnico de redefinir cómo
debe ser una silla y cual debe ser su apariencia. Mientras que su
estructura definida, descrita por unos tubos de níquel la hace parecer más
un boceto técnico en realidad se convirtió gracias a su amplio volumen y
a sus líneas simples en la silla perfecta e icono del diseño de mobiliario
de Bauhaus.

! 89
SILLA BARCELONA
1929
Ludwig Mies Van der Rohe
Lilly Reich
En el año 1929 el famoso arquitecto alemán Ludwig Mies Van der
Rohe (1886-1969) trabajó con su colega la interiorista Lilly Reich (1885-
1947) en el diseño del Pabellón de Alemania para la Exposición Universal
que tuvo lugar en Barcelona en el año 1929.
La silla se compone de una estructura de acero cromado y dos
cojines de cuero. Resulta cuanto menos curiosa la experimentación con
las patas de las sillas que se vive en el interior de la Bahuaus, la
búsqueda por minimizar la típica estructura de madera de cuatro patas
clásica se convierte en una obsesión para el taller de carpintería e
interiorismo de la escuela de Weimar. Así aparecen sillas sin patas
traseras, sillas de tres patas o sillas como la Barcelona donde la
estructura de acero cromado es lineal, formando el respaldo y las patas
de una misma estructura en forma de X.
Es una de las primeras sillas que rompen con el esquema tradicional
que todos tenemos de la silla: cuatro patas repartidas en cada esquina
de un asiento cuadrangular.

! 91
LC2 LE GRAND CONFORT CHAIR
1929
Le Corbusier
La butaca perfecta para las formas del hombre. Esa es la mejor
definición para el mobiliario creado por el arquitecto e interiorista suizo Le
Corbusier, que siempre tuvo muy presente en sus trabajos la
antropometría humana. De líneas simples y puras, esta silla va más allá
de las modas temporales.
El sillón LC2 (Petit Modèle) es una de las piezas más reconocidas
del mobiliario del siglo XX. El volumen y el equilibrio de su diseño se
adhieren a los principios establecidos por el estilo de la época, En este
diseño podemos comprobar claramente que Le Corbusier se vio
influenciado por los principios sobre las nuevas técnicas y materiales de
la Bauhaus. Ejemplos de esto es la estructura tubular y el asiento de
espuma forrado de cuero negro. El marco externo define las formas
geométricas del sillón que son el resultado de la visión creativa de Le
Corbusier.
Esta pieza forma parte de la colección permanente del Design
Museum de Londres y es un homenaje a los principios básicos del
diseño del siglo pasado que han demostrado ser atemporales.

! 93
PAIMIO LOUNGE CHAIR
1930-31
Aalvar Aalto
A medida que el siglo XX avanzaba las nuevas tecnologías e
ideologías se combinaban unas con otras, pues los diseñadores retaban
al pasado en busca de nuevas soluciones que dieran forma a un futuro
diferente, y mejor. Aún estaban lejos de lograr la aprobación del nuevo
mercado, pero la mayoría de los diseñadores adoptaron una estrategia:
aprovechar los proyectos fundados por las autonomías (como la creación
de hospitales y colegios) para diseñar, crear y producir piezas de
mobiliario radicales. El diseñador Finlandés Alvar Aalto (1898-1976) tomó
buena nota de ello, y aprovechó la creación del Sanatorio Paimio con un
claro objetivo: se presentó ante la comisión diciendo que cada uno de los
elementos del sanatorio debería contribuir al proceso de curación de los
pacientes. Y así presentó su silla. La Paimio fue el resultado de tres años
de experimentación cuyo objetivo era crear una silla que fuera cómoda
para largos periodos y que ayudara a los pacientes con la respiración.
El asiento continuo y con forma de pergamino fue modulado con
una sola pieza de abedul laminado, mientras que su estructura flexible y
curvada le daba a la madera un aspecto “mullido” y acogedor.

! 95
SILLA ZIG-ZAG
1932-34
Gerrit Thomas Rietveld
A pesar de que Rietveld abandonó De-Stijl en 1928, su silla zig-zag
se considera una declaración más de abstracción llevada a la realidad
que plasma los principios del movimiento de diseño holandés al que
perteneció.
Al igual que su Red/Blue Chair la silla Zig-zag es una representación
reducida a la forma y el plano que abandona toda referencia a las formas
y tradiciones naturales.
La silla está construida a base de tablones de madera pura,
originariamente roble, que crean una forma escultural impresionante. Las
marcadas líneas diagonales de este diseño se derivan de los
conocimientos de ingeniería que Rietveld poseía, pero también se dice
que el diseño pudo ser la respuesta a la cuestión planteada por su
colega de De-Stijl Theo Van Doesburg (1883-1931) sobre la incorporación
de líneas oblicuas al diseño de interiores.

! 97
LCW-LOUNGE CHAIR WOOD
1945
Charles and Ray Eames
Poco antes de su llegada a Los Ángeles a principios de los
cuarenta, Charles Eames (1907-78) y su mujer Ray (1912-88)
comenzaron a experimentar con la madera laminada empleando madera
y pegamento que Charles “tomaba prestado” de los estudios donde
trabajaba como director de cine. En un primer lugar la intención del
matrimonio fue crear un asiento moderno, un todo continuo con el
respaldo. Sin embargo el sistema de laminado hacía que la madera
quebrara debido al ángulo tan pronunciando en el encuentro del respaldo
con el asiento. La solución aportada fue separar esta pieza continua en
dos, unidas a su vez por un elegante esqueleto también de madera
laminada. El sistema empleado en las juntas era de un material no rígido,
lo que le otorgaba cierta flexibilidad a la silla permitiendo así adaptarse al
cuerpo de la persona que se sentaba.
Esta característica fue pionera y demuestra el afán de los Eames por
diseñar un mobiliario que fuera cómodo, funcional y a la vez a un precio
asequible, lo que convirtió a la silla LCW en la pieza estrella de la era post
Segunda Guerra Mundial.

! 99
SILLA DAR/DSR
1948
Charles and Ray Eames
Otra de las obsesiones del matrimonio Eames era diseñar un modelo de
silla que se pudiera adaptar a las necesidades del usuario. El mix &
match de este modelo de silla con el que se presentaron al concurso de
Diseño de Mobiliario Low-Cost celebrado en el MoMA de Nueva York en
1948, fue una demostración brillante de cómo esto se puede conseguir. El
asiento de fibra de vidrio reforzado se podía combinar con tres tipos de
bases diferentes: varillas de acero que imitaban a la Torre Eiffel (en la
imagen de arriba), patas de madera con traviesas de acero (imagen de
abajo izquierda) o dos bandas de madera curvada (mecedora, imagen
de abajo derecha). A su vez, el asiento también adoptó dos formas, una
que incorporaba posa brazos (DAR Dining Armchair Rod) y otra sin (DSR
Dining Sidechair Rod). Inicialmente las sillas estaban disponibles sólo en
gris pero pronto se amplió esta gama a colores más vivos.
La silla DAR/DSR del matrimonio Eames fue la primera silla elaborada
con plástico que se llevó a la producción en masa. Estos diseños
desenfadados llenos de inventiva fueron los precursores de un nuevo
estilo contemporáneo en el interiorismo, con su énfasis en la ligereza, la
fluidez y el concepto abierto del diseño.

! 101
SILLA DIAMOND
1952-53
Harry Bertoia
“Si observas esta silla, podrás ver que está hecha principalmente de
aire”, así es como Harry Bertoia (1915-78) describió su silla Diamond.
Durante los años cuarenta el diseñador de origen italiano Bertoia trabajó
junto al matrimonio Eames en el desarrollo de las técnicas de la madera
laminada y jugó un papel muy importante en el diseño de la silla LCW. Sin
embargo, en 1950 fundó su propio estudio de diseño en Pennsylvania
cansado de que su aportación a la creación de la mencionada silla no se
tuviera en cuenta. Poco después de iniciar su carrera por separado
desarrolló una colección de sillas para la pionera firma de la industria del
mueble Knoll, de la cual la silla Diamond fue la pieza estelar.
La estructura esquemática de malla metálica de la silla Diamond
permite su fabricación con una cantidad mínima de material, puesto que
como dijo el propio Bertoia el material principal del que está hecha la silla
es aire.

! 103
SILLA TULIP
1955-56
Eero Saarinen
La Tulip Chair forma parte de una serie de diseños de mobiliario que el
arquitecto y diseñador de origen finlandés Eero Saarinen concibió a lo
largo de su carrera, y es la manifestación de su búsqueda de una forma
ininterrumpida que pudiera cumplir .con las funciones básicas requeridas
por el cuerpo humano. La silla Tulip y la Terminal de las aerolíneas TWA
(también diseñada por Saarinen) comparten conceptos similares, a
saber, la fusión de elementos estructurales en una forma única
autodeterminante, paradigmática de este acercamiento global al diseño.
Este fue un gran reto para Saarinen: la silla tenía que resultar cómoda
para personas de todas las complexiones y tamaños; debía fabricarse
con materiales contemporáneos; y como pieza de producción en serie,
tenía que ser impersonal para adaptarse a diferentes entornos. El prototipo
cumplía con estos cinco criterios. La estructura de fibra de vidrio
moldeada gira sobre un pie de aluminio fundido de una pieza, que
distribuye el peso sobre el suelo.
La silla Tulip fue la primera silla cuyo material empleado se obtuvo
mediante ensayos químicos y cuya forma se consiguió mediante moldes,

! 105
670 EAMES LOUNGE CHAIR
1956
Charles y Ray Eames
El matrimonio Eames dedicó parte de su carrera creativa al diseño de
mobiliario que fuera apto para la producción en masa y que se
comercializara a precios asequibles. Sin embargo el elegante y lujurioso
sillón 670 es una excepción, el cual se fabricaba con materiales de
primera calidad.
Este sillón consiste fundamentalmente en tres piezas o conchas: el
reposa cabezas, el respaldo y el asiento, cada una de ellas elaborada
con 5 finas capas de madera laminada más una de contrachapado de
palisandro de Brasil. Todo esto acolchado y tapizado con cuero negro.
Al igual que sucedía con otros diseños del matrimonio Eames, el sillón
670 fue rápidamente copiado con versiones de baja calidad, sin
embargo este diseño no se devaluó sino que tuvo un impacto enorme en
el desarrollo del diseño de mobiliario a lo largo del siglo XX por aunar en
una misma pieza máximo confort y calidad. El curioso sistema mediante
el cual están unidos el reposa cabezas y el respaldo al asiento a través
de los apoya brazos ha llevado al sillón 670 a estar expuesto en el MoMa.

! 107
HEART CONE CHAIR
1959
Verner Panton
La Heart Cone Chair debe su nombre a su silueta en forma de corazón.
Diseñada en 1959 por Verner Panton (1926-98), este sillón combina la
elegancia de los años 50 con la gracia y el estilo atrevido del diseño de
los sesenta, tan plasmado en los diseños del matrimonio Eames. No
obstante, a pesar de toda su extravagancia, la Heart Cone Chair es un
sillón idóneo para la vida diaria y sorprendentemente cómodo para casi
todo tipo de estancias.
Esta extravagante pieza presenta una forma cónica que termina en un
exagerado respaldo en forma de corazón. La resistente estructura
descansa sobre una base cruciforme de acero inoxidable. El suave
tapizado de cachemir proporciona comodidad y aporta un toque de
elegancia.
Al parecer Panton diseñó esta pieza tras realizar un viaje en coche por
Europa que le sirvió de inspiración. Su ambición era cruzar las fronteras
del diseño de mobiliario tradicional y mejorar los hogares con diseños
únicos, coloridos y atrevidos.

! 109
SILLA POLYPROP
1962-63
Robin Day
Desde mediados de la década de los sesenta la silla Polyprop se ha
infiltrado en cientos de colegios, hospitales, fábricas y otros espacios
públicos de muchos países. Ésta has sido LA silla del aprendizaje, la del
descanso, y la espera por antonomasia, tan presente en todos sitios que
ha llegado casi a pasar desapercibida por la historia del mueble.
Mientras que la mayoría no reparamos en esta silla, ésta supuso un gran
logro en su época en cuanto a la técnica de fabricación. Su creador fue el
británico Robin Day (1915-) y su mujer, la diseñadora textil Lucienne Day
(1917-), matrimonio que fue considerado el equivalente al estadounidense
formado por Charles y Ray Eames. Lo que Day quiso conseguir con su
silla era una versión más económica de la silla de fibra de vidrio de los
Eames, y para conseguirlo exploró el campo del moldeo por inyección,
un proceso de fabricación en masa que proliferó tras la Segunda Guerra
Mundial pero que hasta ese momento no había sido empleado en el
diseño de muebles.
La silla estaba compuesta por una única pieza de polipropileno (de ahí
su nombre). Era fácil de transportar, limpiar y apilar, y se podía fabricar de
manera rápida un gran número de ejemplares.

! 111
SILLA PANTON
1968
Verner Panton
La silla Panton nos recuerda a la Zig-Zag de Rietveld, si bien la primera
muestra los novedosos avances de mitad de siglo con respecto a los
materiales empleados. Hizo su primera aparición en la revista de diseño
danesa Mobilia en 1967, si bien es cierto que el diseño se venía
desarrollando desde años atrás. Causó una gran sensación no sólo por
su llamativa forma orgánica (que recuerda al cuerpo humano en posición
sedente) sino por las técnicas empleadas en su fabricación.
Su diseñador fue Verner Panton (1926-98). En 1956 Panton diseñó la
silla S, hecha a base de madera laminada y que era apilable, y dos años
más tarde comenzó a hacer bocetos de lo que era básicamente una
evolución de la silla S pero en plástico, lo que acabó siendo la silla
Panton. No fue hasta mediados de la siguiente década cuando, con el
apoyo del fundador de la firma de muebles Vitra, Willi Fehlbaum, la silla
comenzó a fabricarse. En sus inicios estaba hecha de resina de poliéster
reforzada con fibra de vidrio, pero desde 1980 se ha venido fabricando en
espuma de poliuretano rígida.
Fue la primera silla fabricada de una sola pieza.

! 113
SACCO
1968
Piero Gatti, Cesare Paolini & Franco Teodoro
A finales de los años sesenta Italia se estaba posicionando en la
primera línea del diseño contemporáneo, mientras que firmas como
Cassina y Zanotta demostraron estar preparadas para afrontar lo que
parecían ser unos diseños innovadores, extravagantes e incluso poco
prácticos. Es el caso de Zanotta, la cual asumió el riesgo de fabricar el
modelo sacco que al final resultó ser un éxito rotundo. Por un lado el
sacco fue un claro ejemplo de iconoclasia, una pieza de diseño que era
anti-diseño, y cuya característica formal principal era precisamente que
carecía de forma. Pero por otro lado quedo probado que fue objeto
divertido y práctico con gran acogida entre el público más joven.
Sacco fue diseñado por Piero Gatti (1940-), Cesare Paolini (1937-) y
Franco Teodoro (1939-), y consistía en un gran saco de tela o cuero
negro relleno de cientos de esferas de poliestireno.
Esta pieza acabó con casi todos los aspectos de la silla tradicional:
asiento, respaldo, reposabrazos, patas, etc., moldeándose así con el
cuerpo de quien se sentara en él. Es el claro progenitor del conocidísimo
puf, que inauguró un nuevo género de mobiliario.

! 115
SILLA PASTIL
1968
Eero Aarnio
Un año después de haber diseñado la Silla Pastil, en 1968, Eero
Aarnio, recibió el Premio de Diseño Industrial Americano por esta silla. The
New York Times escribió: “La silla Pastil está diseñada para soportar al
cuerpo humano con comodidad". El estilo atemporal de ambas sillas
realizadas inicialmente en fibra de vidrio tiene plena vigencia en la
actualidad a pesar de haber pasado más de 40 años desde su diseño.
Eero Aarnio (1932-) nació en Helsinki en 1932, pasando a la historia
como uno de los diseñadores industriales escandinavos más influyentes
del siglo XX. Aarnio hizo el primer prototipo de la silla Pastil en poliestireno,
que le ayudó a verificar las mediciones, la ergonomía y la capacidad de
balanceo, aunque el prototipo final de la silla estaba realizado en fibra de
vidrio. La silla Pastil añade un toque de color a los interiores, gracias a su
diseño fresco y original y a la gran variedad de colores en que se puede
encontrar en el mercado.
El diseñador de interiores finlandés siguió las tendencias de los años 60
donde había un gran interés por las formas nuevas y orgánicas y aplicó
los aspectos de la cultura popular para crear su silla Pastil.

! 117
SILLA WIGGLE
1972
Frank O’Gehry
“Empecé a jugar con él, a pegar láminas entre sí y a darles formas con
ayuda de una sierra de mano y de una navaja…”, estas son las
palabras con las que Frank O’Gehry (1929-) describía sus experimentos
con la creación de mobiliario empleando cartón ondulado que
casualmente acabaron dando lugar a la silla Wiggle. Gehry es más
conocido por sus trabajos de arquitectura como el Museo Guggenheim,
pero también hizo sus pinitos en el diseño de mobiliario.
La primera colección de muebles de Gehry llamada Easy Edges
(bordes fáciles) se produjo entre 1969 y 1973, la cual otorgó una nueva
estética a un material del día a día como es el cartón. La silla Wiggle está
compuesta de unas sesenta capas de cartón rígido adheridas con un
fuerte pegamento y atornilladas, y sus fluidas curvas parecen una
reinterpretación de baja tecnología de las técnicas de madera laminada
empleadas por el matrimonio Eames unas décadas antes. A pesar de
esto, su meticulosa artesanía y su casi imperceptible ingeniería
salvaguardó a esta silla de ser un simple ejercicio de extravagancia.
Fue la primera silla creada a base de un material verde 100% reciclable.

! 119
CONCLUSIÓN
Parece ser que todo a nuestro alrededor está diseñado y que la palabra
“diseño” se ha convertido en una palabra habitual, que usamos a diario y
con cierta espontaneidad. ¿Pero qué es lo que hace un objeto sea de
diseño? O en el tema que nos ocupa, ¿quién decide qué silla es de
diseño y qué silla no lo es? Siento decepcionar pero nadie tiene la
respuesta a esta pregunta... sino que cada uno tendremos una opinión
formada al respecto. Sin embargo creo que muchos de nosotros
coincidiremos en la concepción de diseño que expondré en las siguientes
líneas, que es la mía, y que con gran agrado descubrí que también es la
que comparte el gran diseñador poeta, escultor, pedagogo y autor de
libros italiano Bruno Munari.
Para mí, la respuesta a “¿Qué es una silla de diseño?” (con diseño nos
referimos a funcional, práctica y que cumple las funciones para las que
ha sido creada) es que ha perdurado en el tiempo, al margen de la
estética, de la opinión pública (sea buena o mala), etc. En el hecho de
que se sigua produciendo y vendiendo hoy día reside la
respuesta a nuestra pregunta.
Y en palabras de Bruno Munari (texto en el que habla del ebanista
Michael Thonet, credor de la silla número 14, extraído de su libro “¿Cómo
nacen los objetos?”, publicado en 1983):

! 120
“Michael Thonet era un carpintero ebanista, nacido en Boppard a orillas
del Rhin en 1796. Si hubiese sido un artesano repetidor de viejas formas,
y no alguien creativo, ahora yacería en el olvido como la inmensa
mayoría de los artesanos repetitivos, pero el solo hecho de estar
ahora hablando de su trabajo significa que era un verdadero
diseñador, como se dice ahora.”
Bruno Munari
“¿Cómo nacen los objetos?”

! 121
BIBLIOGRAFÍA
LUCIE-SMITH, E. 1980. Breve Historia del Mueble. Ediciones del
Serbal. Barcelona, España.
DESIGN MUSEUM, 2009. Fifty Chairs that Changed the World. Editorial
Conran Octopus, Londres, Reino Unido.
AROLA, M. 1966. Historia del Mueble. Ediciones Zeus. Barcelona,
España.
ENCARTA, 1998. Mobiliario. Enciclopedia Microsoft. Microsoft
Corporation.
GÁLVIN, C. 1992. Mobiliario. La innovación formal en el diseño
finlandés. AITIM, Nº 159.España.
VITRA, 1997. 100 Sillas Clásicas. Vitra Design Museum
WEBGRAFÍA
http://wiki.ead.pucv.cl/images/7/70/Como_Nacen_los_Objetos_-
_Bruno_Munari.pdf
http://www.disenoyarquitectura.net/2009/05/sillas-modernas.html

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