El cine de autor plasma visiones no convencionales y utiliza métodos vanguardistas para tratar temas de moda. A diferencia de las grandes producciones comerciales, el cine de autor se basa más en guiones propios y da más libertad creativa al director. Surgió en Europa después de la Segunda Guerra Mundial como reacción al cine fascista, dando lugar a movimientos como el Neorrealismo italiano que buscaba la máxima naturalidad.
1. El cine de autor aquel que plasma una
visión particular no convencional de las
ideas. Utiliza un método vanguardista al
tratar temas que están de moda en los
medios masivos de comunicación.
2. Son films que únicamente pocos
entienden, aceptan y les generan
satisfacción, invitando siempre a la
reflexión y a la crítica. Muchos otros
autores los utilizan como prototipo.
3. Esta corriente cinematográfica trabaja
de manera diferente en comparación
con las grandes producciones
comerciales. No ejerce mucha presión
en la dirección que, a la vez, suele
basarse en guiones propios, situación
que le permite abordar su creatividad
de manera magistral y original.
4. El origen de este cine radica cuando
Hollywood luchaba por superar la
crisis. En el resto del mundo se
imponían nuevas ideas fílmicas que
dieron lugar a estos conceptos de cine
de autor. Impregnados del espíritu de
las vanguardias artísticas de la primera
mitad del XX, en Europa comenzó la
tentativa formal, que llevó a la creación
de nuevas formas.
5. La primera de ellas, en la Europa
posterior a la Segunda Guerra Mundial,
fue el Neorrealismo. Nació en Italia,
como reacción al cine fascista del
régimen de Mussolini, y buscaba la
máxima naturalidad
6. El Neorrealismo se agotó pronto, pero
muchos cineastas formados o
desarrollados en éste, siguieron
rodando después (Federico Fellini,
Luchino Visconti, Roberto Rossellini,
etcétera).
7. Gran parte del quehacer intelectual en
torno al cine se desarrollaba no en los
estudios de productores, sino en los
foros, en donde se proyectaban filmes,
y se discutía sobre éstos entre el
público interesado.
8. Lo más interesante es que muchos
actores con el tiempo se convirtieron
en estrellas tan brillantes como las de
Hollywood: tal fue el caso de Brigitte
Bardot, entre otros.
9. Parte de su gracia radicaba en que se
permitían muchas libertades sexuales
que las estrellas de Estados Unidos no
podían o no querían por la censura
imperante en Hollywood.
10. Tampoco desapareció en Europa el cine
comercial. El despliegue de la
grandilocuencia por parte de Hollywood
encontró respuesta en el desarrollo del
péplum primero, y cuando éste se agotó,
en el cine del oeste.
11. Todas estas productoras trabajaban de
manera rudimentaria y no podían
competir con la alta calidad técnica de
Hollywood, por lo que se esmeraron en
la cantidad, redefiniendo así el cine de
serie B.