El documento enfatiza la importancia de no dejar de congregarse, ya que esto lleva al enfriamiento espiritual y la apostasía. Nos ha reconciliado con Dios y nos da acceso al lugar santísimo a través de Cristo, por lo que debemos acercarnos a Dios con corazón sincero, mantener nuestra esperanza en Cristo y preocuparnos los unos por los otros, lo que no es posible si dejamos de congregarnos. Dejar de congregarse aleja de Dios y puede causar enfriamiento o muerte espiritual, por