El cáncer en los niños requiere ser explicado de acuerdo a su edad para enfrentar los síntomas y secuelas del cáncer de la mejor manera.

1. Cómo hablar de
cáncer a los niños

2. Mi hijo tiene cáncer
Por complicado que parezca, el diagnóstico de
cáncer en un hijo es sólo el inicio de largo camino
que la familia debe recorrer. No existe una sola
forma de hacerlo; sin embargo, parece más
adecuado contar con la orientación de expertos en
el tema (oncología pediátrica),
para que expliquen qué es la
enfermedad, cómo enfrentarla
y, sobre todo, cómo hablar
de ella con el pequeño.

3. Se forman tumores
Las células humanas crecen y
se dividen para formar otras
conforme el cuerpo las requiere;
cuando envejecen o se dañan,
mueren y nuevas células las reemplazan.
En el cáncer, este proceso se descontrola; a
medida que las células se hacen más y más
anormales, las "viejas" o dañadas sobreviven
cuando deberían morir, mientras se producen
"nuevas" células que el organismo ¡no necesita!
Como consecuencia, estas células adicionales
se dividen sin interrupción y pueden formar
masas, es decir, tumores.
Las células dañadas no mueren.

4. Cáncer en México
Se estima que cada año en
México surgen entre 5 mil y
6 mil casos nuevos de esta
enfermedad en menores de
18 años, cifra que nos hace
pensar en la necesidad de
aprender cómo explicar el
cáncer a los niños para evitar
el miedo y angustia que suele
invadir a los pequeños pacientes.

5. Cáncer explicado para niños
Cuando una familia recibe el diagnóstico de cáncer
infantil entre sus hijos, la sensación de confusión,
ansiedad y desorientación que aparece suele impedir
pensar que, además de buscar el tratamiento médico
necesario, debe aprender el "lenguaje" que rodea a esta
enfermedad para explicar el problema al niño y,
seguramente, a sus hermanos, primos o amiguitos.
Conviene que los padres se informen del más mínimo
detalle acerca del tipo de cáncer pediátrico que
enfrentan en casa (leucemia, tumores cerebrales y
linfoma son los más comunes); esto permitirá que la
aceptación de la enfermedad por parte de su hijo sea
más tranquila y controlada.

6. Evitar miedo y confusión
• Tratándose de niños mayores que padecen
cáncer, conviene que reciban información clara
sobre la afección y sus efectos, usando lenguaje
adaptado a su edad y nivel de comprensión.
• Si el padecimiento afecta a menores de 4 años,
puede bastar con explicarles que están "enfermos"
y necesitan "medicinas" para mejorar.
• En todos los casos, la meta es
evitar miedo y confusión, así
como transmitir al niño un amor
y acompañamiento incondicional.

7. Orientación del médico
• Explicar al pequeño cómo actúa el cáncer en su
organismo puede confundirlo; en vez de darle
información detallada sobre el funcionamiento de
células desordenadas, conviene más hablarle de
una enfermedad que ha llegado y debe tratarse.
• Si el niño hace preguntas,
puede pedirse al médico
orientación sobre cómo
informar a un niño que tiene
cáncer, con su experiencia
sabrá cómo abordar el tema
o en qué momento hacerlo.

8. Tratamiento para cáncer en niños
• El diagnóstico y tratamiento del cáncer infantil es
proceso largo y se asocia a efectos secundarios, pero
gracias a los avances médicos, cada vez hay más
pacientes que completan la terapia con éxito y
abandonan el hospital, lo que les permite crecer y
desarrollarse como cualquier otro niño.
• Los índices de mortalidad de algunos tipos de cáncer
infantil han disminuido más de 50%, y más de 75% de
los pacientes sobreviven 5 años o más gracias al
avance en los tratamientos médicos y al gran número
de niños que participan en estudios clínicos.

9. Cómo superar el miedo
• Durante el proceso de la enfermedad a menudo papá o
mamá se agobian pensando "¿si algo sale mal?", "¿si
el tratamiento no funciona?"
• Aunque son pensamientos naturales, no ayudan. Sin
negar el cáncer, conviene sustituir esas ideas por
otras positivas, por ejemplo: "Mi hijo está en buenas
manos", "El médico dice que detectamos el cáncer en
momento oportuno y hay buen pronóstico".
• Si los padres se sienten muy tristes
y no pueden superar el miedo o
la angustia, deben consultar con
un psicólogo o pedir al médico
orientación al respecto.

10. ¿Cómo hablar del cáncer
a los niños?
Cuando un padre o madre se
pregunta ¿cómo ayudo a mi hijo
con cáncer?, suele encontrar
numerosas respuestas; sin
embargo, las más útiles tienen
que ver con la forma en que
maneja sus ideas y emociones
frente a la enfermedad, y para
ello puede tomar en cuenta
los siguientes consejos:

11. Consejos frente a la enfermedad
• Acudir desde el principio a un médico
especializado para recabar información sobre el
diagnóstico y tratamiento sobre cáncer en niños.
Si no le satisfacen los datos, buscar una segunda
(y tercera, cuarta…) opinión, hasta estar
completamente seguros del diagnóstico.
• Dar explicaciones sinceras y
fáciles de comprender al niño,
ya que al conocer la verdad,
colaborará mejor con los
tratamientos.

12. • Buscar la proximidad con su hijo, manteniendo el
contacto visual y físico, y comprender que él puede
reaccionar de cualquier forma.
• Contestar a sus preguntas sin mentir; incluso, es
válido que un padre responda "no lo sé, pero lo voy
a investigar con el médico".
• Animar a que el niño hable sobre todas sus dudas,
esto permitirá conocer también sus miedos y
preocupaciones.
• En los menores de 5 años,
hacerles sentir que sus
padres los protegen en
todo momento.

13. • Emplear su lenguaje, es decir, comunicar teniendo
en cuenta su capacidad cognitiva.
• Si el paciente está entre los 6 y 9 años, ofrecerle
información sobre los pasos a seguir y explicar, por
ejemplo, que las células de su organismo han
comenzado a funcionar de manera descontrolada.
• En el caso de adolescentes, hablarles sobre la
importancia de su colaboración con los
tratamientos y su actitud ante el médico y el
personal sanitario que lo atiende.
• Preparar al paciente para los posibles cambios
físicos, como la pérdida de cabello o el aumento de
peso, antes de que sucedan.

14. Mejorar la comunicación
Para los padres, saber que su hijo padece una
enfermedad tan seria como el cáncer puede resultar
una experiencia muy estresante y dolorosa; sin
embargo, más allá de esos sentimientos normales,
la confianza que brinden al niño es fundamental.
Un niño que percibe la dificultad que tienen sus
padres en aceptar su diagnóstico, tiende a evitar
hablar de sus propias preocupaciones y temores, lo
cual le priva de una importante fuente de apoyo.

15. Consejos para familias que
enfrentan el cáncer de un hijo
• Usen el término "cáncer": esto brinda al pequeño
información clara y reduce la confusión y malos
entendidos, sobre todo cuando en la escuela
escucha la palabra en boca de compañeros o en
adultos e, incluso, si observa programas en la
televisión y no está acompañado por sus padres.
• Asegúrenle que el cáncer no es contagioso:
así minimizarán el miedo al contacto con
sus compañeros en la escuela o
amigos en casa, y podrá seguir
jugando como cualquier otro niño.

16. • Continuar con la rutina cotidiana: conviene hacer
cualquier esfuerzo por mantener la rutina del
pequeño (y sus hermanos) lo más estable posible,
pero preparándolo también para una visita al
médico o al hospital en momentos inesperados.
• ¡No eres culpable de tener cáncer! Muchos niños
se sienten responsables de la enfermedad, como
si el hecho de padecerla fuera su culpa. Se
recomienda a las familias de niños con cáncer
tranquilizarlos, apoyarlos y ayudarles a expresar y
a afrontar sus sentimientos, aclarando que ellos no
hicieron nada malo contra su salud.

17. • Dialogar sobre la muerte: la familia debe estar
preparada para hablar sobre la muerte con chicos
y grandes por igual. Conviene usar términos
específicos y claros, evitando eufemismos como
"pasar a mejor vida" o "dormirse para siempre".
Los niños pueden confundir el sueño con la muerte
y pueden tener miedo de fallecer mientras
duermen, o pensar que una persona puede
despertar de la muerte.

18. SyM – Cecilia Jiménez
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