1. LA MAYORÍA DE FAMILIAS
HOMOPARENTALES SE SIENTE INTEGRADA Y
POCO RECHAZADA.
La mayoría de las familias homoparentales, el 80,3%, se sienten apoyadas
por su entorno, además, en general, afirman que están integradas en la
sociedad, viven pocas experiencias de discriminación y satisfacen las
necesidades de sus hijos.
Son las principales conclusiones del informe "Familias homoparentales en
España: integración social, necesidades y derechos", que ha elaborado el
departamento de Psicología y Educación de la Universidad Autónoma de
Madrid y ha sido presentado por su autor principal, Santiago Agustín.
La investigación ha sido realizada a
partir de entrevistas a 71 familias
homoparentales -aquellas que están
encabezadas por dos personas del
mismo sexo que conviven con al
menos un hijo menor- y trata de dar
a conocer la realidad de este
colectivo, así como de mejorar su
situación, ha explicado Agustín.
Refleja que España es un país "pionero" en el respeto a este tipo de
familias pero también subraya la necesidad de esforzarse para mantener y
mejorar la tendencia, ya que sigue habiendo datos preocupantes como que el
40,9% haya sufrido algún tipo de rechazo dentro de su propia familia.
En este sentido, Agustín ha explicado que esta cifra es el resultado de
aquellas familias que dicen sentirse muy apoyadas por sus familiares pero ha
habido alguno de ellos que se ha opuesto a su condición a través de
comentarios despectivos.
A pesar de esta cifra, la investigación destaca que hay una percepción de
cambio en la sociedad y Agustín ha calificado el apoyo familiar recibido por
este colectivo de "muy positivo". De hecho, el 54,9% se siente muy apoyado
por sus familiares y el 25,4%, bastante.
2. El 95,1% habla con sus hijos de su orientación sexual
En cuanto a la relación con los hijos, un 95,1% de las familias entrevistadas
habla con sus hijos explícitamente sobre su orientación sexual y las
diferencias de familias con otras, siendo en un 80,5% de los casos un
temas bastante o muy habitual.
La mayoría de los encuestados, el 59,1%, señala que sus hijos tienen como
referentes afectivos principales no solo a sus dos padres o madres, sino a
personas externas al núcleo familiar como los abuelos, los tíos, o amigos de
la familia, entre otros.
El estudio indica que el 86,8% de las familias considera que su
homosexualidad no influirá en la orientación sexual de sus hijos: "Mis
padres eran heterosexuales y muy católicos. A mí no me influyó", señala uno
de los encuestados.
En relación al entorno social, el 90% de las familias homoparentales
reconoce que es objeto de "curiosidad" por parte de su entorno: "somos la
novedad", "no es a mala fe", responden algunos.
Así, el 71,8% se siente bastante o muy apoyado y solo el 15,5% se siente
rechazado, y el 12,7% ha sido objeto de algún comentario ofensivo.
Motivos para "felicitarse y preocuparse"
La mayoría no detecta ningún efecto positivo
o negativo de su modelo familiar a la hora de
que sus hijos se relacionen con otros niños
aunque existen situaciones preocupantes ya
que el 20,1% afirma que en algún momento
los menores han sido insultados.
En el ámbito escolar, Agustín ha señalado que
hay motivos para felicitarse y también para
preocuparse.
3. A la hora de escolarizar a los niños, un 41,2% de las familias prefiere un
centro cuyo ideario sea especialmente inclusivo con la diversidad familiar,
de los que el diez por ciento dijo que había sido muy difícil encontrarla;
asimismo, el 84,9% rechaza explícitamente matricular a sus hijos en
escuelas religiosas.
Existe una buena relación con el profesorado y el resto de familias pero hay
algunas tareas pendientes como incluir en los libros de textos y resto de
material didáctico los diversos tipos de familias, así como una mayor
formación de los profesores, entre otros.
De los entrevistados, el 59,2% ha tenido alguna dificultad jurídica o
administrativa -más los gays que las lesbianas- por cuestiones relativas a la
gestación subrogada, la adopción y otros incidentes puntuales, mientras que
el 12,7% ha vivido algún incidente de discriminación en el sistema
sanitario.
En mi opinión, creo que esto se debe al cambio que ha tenido la sociedad y
con ello la forma de pensar de las personas. Al principio este tipo de
relaciones se veía como algo fuera de lo norma, incluso había personas que lo
creían repugnante y se preguntaban ¿cómo dos hombres o dos mujeres se
pueden besar en la boca? ¿Cómo practican el sexo?, como estas preguntas,
habido muchísimas más, pero el ver cada vez más gente por la calle en la que
había relaciones de todo tipo ha hecho que las personas que antes tenían
prejuicios lo vean como algo normal y cada vez más natural, y sus preguntan
ahora sean ¿Por qué dos mujeres o dos hombres no se pueden enamorar?,
incluso ven más convenientes que inconvenientes este tipo de relaciones ya
que es más difícil convivir un hombre y una mujer con gustos muy distintos
por su genética, que dos mujeres y dos hombres que comparten gustos y
aficiones, además de formas similares de pensar.
Además de esto, la legalidad de este tipo de matrimonios y la posibilidad de
que tanto familias de dos sexos como de un mismo sexo puedan adoptar
niños, ha hecho que el mundo cambie y con ello las forma de pensar de
todos.
4. Ahora solo queda trabajar este tema con los alumnos y con los propios hijos,
porque son ellos mismos los causantes de muchos daños en la persona con
sus comentarios despectivos e insultos que no han sido trabajados para que
entiendan que esa no es la manera de tratar a personas con diferentes
gustos que ellas, o personas con diferente familia que ellos.
Si el cambio le hacemos desde que los niños son pequeños, muchas ideologías
cambiarán, mejorarán y permitirán una vida más fácil y mejor.