Num. 4 de la Revista digital gratuita "Conocimiento Interior" dedicada a la Mitología Griega y su trasposición psicológica. El valor del mito como instrumento de autoconocimiento, superación personal y desarrollo espiritual.
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3. PRESENTACIÓN Mitología Griega
En esta ocasión nos aventuramos en el mundo
En este número se afronta el mito griego
mitológico, un mundo de dioses, héroes, monstruos y
como camino de conocimiento y transformación
maravillas. Un mundo en el que historia y mito, reali-
interior.
dad y ficción son lo mismo porque solamente la mente
El contenido de la revista resulta insuficien-
racional puede diferenciar entre estos ámbitos.
te para tan elevado objetivo, pero estamos segu-
Pero para adentrarse en el mito hay que dejar
ros de que por lo menos servirá para fomentar el
atrás el intelecto lineal y lógico para así poder acceder
interés por esta perspectiva de la mitología que no
a la riqueza simbólica del mito.
es otra que el autoconocimiento y el desarrollo
Desde este punto de vista importa poco que la psíquico hasta los más elevados niveles.
guerra de Troya fuera un hecho histórico o inventado,
Es nuestra intención seguir abordando este
que el gran héroe Hércules existiera o fuera ficción,
tema en futuras ediciones de esta revista y pro-
que el viaje de Ulises de regreso a Ítaca tuviera lugar
fundizar en aspectos y ópticas que ofrecen una ri-
en la geografía terrestre o solamente en la mente de
queza sin igual porque Grecia siempre será fuente
Homero, que Teseo fuera el primer gran rey de Atenas
de Conocimiento y Luz interior
o un héroe legendario o que el laberinto del minotauro
existiera en Knossos o solamente en nuestro subcons- Los editores
ciente.
Todo ello puede ser de una forma o de otra o de
ambas sin que en ningún caso quede desvirtuado el
mensaje simbólico que la mitología dirige hacia el uni-
verso psicológico del ser humano. Un mensaje univer-
sal, fuera de cualquier tiempo o espacio, vigente como
nunca en nuestra época.
No importa si los hechos que relata el mito fue-
ron “reales” o no. Lo importante es que son capaces
de ponernos en contacto con nuestra propia realidad,
con la naturaleza humana y con todos los obstáculos y
energías de todo tipo que forman parte de la vida y
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del desarrollo álmico.
4. Mitología Griega
SUMARIO
LA HÉLADE 4
EL MITO, PUERTA HACIA
EL DESARROLLO INTERIOR 8
CONÓCETE A TI MISMO 12
EL ORIGEN DEL MAL 16
PROMETEO Y EL FUEGO
LA CAJA DE PANDORA 21
DIONISIO EL LIBERTADOR 24
LUZ Y OSCURIDAD:
EL DESPERTAR DE LA CONCIENCIA 26
LOS DOS CAMINOS 28
PERSEO, MEDUSA Y ANDRÓMEDA 32
TESEO: EL HÉROE DEL LABERINTO 48
EROS Y PSIQUE:
EL DESPERTAR A TRAVÉS DEL AMOR 60
HADES:
EL DESCENSO AL SUBCONSCIENTE 70
HERMES PSICOMPOMPOS 86
EL HOMBRE Y SU DESTINO 88
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6. Mitología Griega
Grecia, situada al sudeste de sin importancia. Sin embargo, no
Europa, es hoy en día, una pequeña hay tierra más famosa que Grecia;
península, sin embargo, en la anti- ningún pueblo ha dejado en la histo-
güedad su extensión era mucho ma- ria una huella más profunda que los
yor. griegos”
Como señala Isaac Asimov, “A Estamos impregnados de Grecia,
lo largo de toda su historia, Grecia nuestras ideas modernas sobre polí-
siempre ha estado rodeada de Esta- tica, medicina, arte, drama, historia
dos más grandes, más ricos y más y ciencia se remontan a esos anti-
poderosos. Sí sólo se consulta el ma- guos griegos. Nuestra forma de pen-
pa, en comparación con sus vecinos, sar, sentir y comunicar con el mundo
siempre parece una tierra pequeña y que nos rodea es su legado. Aún
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7. Mitología Griega
leemos sus escritos, estudiamos sus Esta palabra en la antigüedad
matemáticas, meditamos sobre su no tenía sentido peyorativo, sino
filosofía y nos inspiramos ante sus que señalaba simplemente a aquel
bellos edificios y estatuas. Toda la que no tenía una “educación grie-
civilización occidental desciende di- ga”, que no sabía la lengua helénica
rectamente de la obra de los anti- ni se había formado en su civiliza-
guos griegos quienes desarrollaron ción. En sentido más simple, bárbaro
de forma única el legado de sabidu- era aquel que no hablaba griego.
ría del antiguo Egipto. Con ello no designaban a pueblos
Solamente en lenguas no grie- “no civilizados”, por ejemplo, los
gas se usan los términos “griegos” y egipcios, aún teniendo una civiliza-
“Grecia”. Ellos a sí mismos se lla- ción muy desarrollada, eran “bárba-
maban y se siguen llamando “hele- ros”.
nos” (‘Ελληνες) y a su tierra La Más tarde, cuando la civiliza-
Hélade (Ελλάς / Ελλάδα). ción griega alcanzó su cúspide los
Su idioma, el griego, fue uno más profundos pensamientos de oc-
de los lazos de unión entre todos los cidente se plasmaron en lengua
estados o pueblos griegos. Aún polí- griega. Esta lengua se convirtió en
ticamente independientes todos se un instrumento vivo, capaz de crear
reconocían como griegos unidos por palabras nuevas que expresaran
una lengua común (aunque con dife- nuevas ideas, hasta el punto que
rentes dialectos) y una cultura pro- “cualquier nueva idea que se nos
pia, una forma de concebir al mun- ocurra, siempre podremos hallar una
do, al hombre y a los dioses que les palabra o frase en la lengua griega
diferencia del resto de los pueblos a para expresarla” (I. Asimov).
quienes llamaban “bárbaros”. Como es sabido el vocabulario cien-
tífico moderno en su mayoría ha to-
mado términos y raíces griegas para
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8. Mitología Griega
expresar nociones que los antiguos grada” , toda guerra o contienda era
griegos no conocieron, pero que ex- interrumpida durante los Juegos y
presan a la perfección su contenido. los enemigos en una batalla podían
El otro vínculo entre los dis- acudir libremente a Olimpia a com-
tintos pueblos griegos fue sus dioses petir en libertad por el honor de ser
y su Mitología. Es preferible el tér- coronado vencedor olímpico. Ade-
mino mitología a religión, ya que la más de los Juegos Olímpicos existían
“religión” griega carecía de dogmas otros panhelénicos, como los “Piti-
y ritos concretos y cerrados. En la cos” en Delfos o los “Istmitos” en
creación y desarrollo de sus mitos se Corinto o los Nemeos.
trasluce una libertad espiritual que Ser vencedor en los Juegos no supo-
va construyendo el camino hacia el nía ningún premio económico valio-
valor simbólico y trascendente del so, pero sí una gran fama y gloria. El
Mito como instrumento de desarrollo vencedor de Olimpia recibía una co-
espiritual. rona de hojas de olivo, volvía victo-
Como plasmación física de ese rioso a su ciudad y le era erigida una
sentimiento “religioso” común te- estatua. En los juegos Píticos la co-
nemos los santuarios comunes al rona era de hojas de laurel en honor
mundo griego. El ejemplo más cono- al dios Apolo.
cido es el de Delfos a cuyo oráculo El talante griego estaba especial-
acudían de todos los rincones de la mente dotado para las tareas del
Hélade para recibir respuestas. espíritu, aspiraban constantemente
Había acontecimientos comunes a al logro de lo superior y más perfec-
todos los griegos, uno de los más to. Llevaban en su vida un ideal de
importantes los Juegos Olímpicos, belleza, libertad y responsabilidad
celebrados en Olimpia en honor a en su comportamiento frente a los
Zeus cada cuatro años y durante los dioses y a los hombres, un deseo de
cuales regía la llamada “tregua sa- educarse y educar como medio de
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9. Mitología Griega
lograr “lo mejor” en todos los ámbi- quedó en el pasado porque de hecho
tos del saber y en la práctica de la vive y palpita dentro de cada uno de
vida y que tiene como fundamento nosotros como raíz que alimenta y
el “conócete a ti mismo” de Sócra- luz que ilumina el espíritu en todos
tes. los ámbitos.
Por ello podemos decir que la Héla-
de no es parte de la historia que
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10. Mitología Griega
EL MITO
PUERTA HACIA EL DESARROLLO INTERIOR
La Mitología en general y la
griega concretamente no es
solamente un conjunto de
historias más o menos
imaginadas o inventadas
por los antiguos para expli-
car las fuerzas y fenómenos
naturales. Es esta una
visión muy elemental,
superficial y pobre.
La mitología es mucho más
que eso. En Grecia era la
base de su cultura y de su
vida. La educación estaba
basada en dos grandes
obras literarias griegas “La
Iliada” y “La Odisea”, atribuidas a Homero. Esa era la fuente de principios, va-
lores humanos, morales, sociales y espirituales que podía llegar a formar ciu-
dadanos íntegros y capaces, sensibles e inteligentes.
Desde el punto de vista simbólico, la mitología griega es universal. Sin
entrar en la controversia de si describe acontecimientos reales o fantásticos, lo
cierto es que su valor como “guía interior” es inestimable. Mediante símbolos
y alegorías nos habla de nosotros mismos, de la senda interior, del gran viaje
hacia la perfección y el despertar. Sus dioses, héroes, monstruos...viven dentro
de cada ser humano independientemente del lugar y la época porque el mito se
desarrollo en un “espacio interior” fuera del tiempo, transmite una enseñanza
universal que, por lo tanto, es válida y muy útil para el ser humano actual, pa-
ra cada uno de nosotros.
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11. Mitología Griega
Una imagen, una historia, un personaje es simbólico cuando nos introdu-
ce en un camino que está más allá de su apariencia o significado inmediato.
Más allá de los sentidos físicos y de la lógica común. Hay que traspasar la apa-
riencia formal, la realidad sensible y penetrar en su profundo contenido. El ni-
vel de asimilación del símbolo depende del nivel de conciencia del sujeto que
lo percibe. No hay un significado único, el mensaje del mito no es único y fijo,
cuando el individuo lo hace suyo se convierte en un mensaje personal y hasta
cierto punto indescriptible. Una palabra, una imagen, una historia, un mito es
un símbolo cuya representación interna, su significado depende de cada perso-
na, o más bien, del nivel de conciencia con el que es captado. De ahí la famosa
frase colocada en el frontispicio del templo de Delfos, “Conócete a ti mismo”
porque sin la capacidad de autoconocimiento, sin un estado consciente, la in-
terpretación del oráculo se hacía imposible o resultaba errónea.
El mito alude a realidades internas, pueden ser vividos en nuestro inter-
ior por ello Intuición y Mente Superior son los instrumentos para su compren-
sión. La mitología establece una conexión con esferas , ideas y energías más
sutiles que lo puramente físico. Por ello no puede ser asimilada solamente en
el nivel más físico o material. Nos transmite una concepción del mundo, del
universo y de las energías internas del ser humano, que, en sus aspectos esen-
ciales, es idéntica en todos los pueblos. Hay coincidencias asombrosas entre los
símbolos de diversas culturas que variando su forma son idénticos en su esencia
pues se refieren a una única y misma verdad, expresan principios y enseñanzas
eternas. La mitología se convierte así en un camino simbólico de autoconoci-
miento y superación interior y el mito en una puerta y un camino hacia el desa-
rrollo íntegro en los niveles humano, social y espiritual.
Cada dios, héroe, criatura mitológica, acontecimiento o historia tienen
una transposición interna y transmiten una enseñanza universal. Por ejemplo,
la aventura del héroe sigue generalmente un modelo: Una separación del mun-
do cotidiano, un acercamiento hacia una fuerza de poder y un regreso a la vida
para vivirla con más sentido y sabiduría. Es decir, es el prototipo de la senda
interior de transformación. La mitología es un instrumento de ayuda en nuestra
vida psicológica, cotidiana y espiritual.
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12. Mitología Griega
Heinrich Schlieman (1822-1890)
Teniendo como guía los poemas
homéricos, en especial “La Iliada” ,
descubrió la antigua Troya en 1.870 en
Hissarlik, la actual Turquía.
Hasta ese momento la comunidad
internacional de arqueólogos mantenía
que Troya era una leyenda producto de
la imaginación de Homero.
Homero, Museo de “El Louvre”
(Philippe-Laurent Roland)
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14. Mitología Griega
El oráculo de Delfos era el nal, que provenía de un punto de
más visitado de toda Grecia. Estaba partida más antiguo, de un punto de
en el interior del templo dedicado al vista más elevado que se confundía
dios Apolo y en su frontispicio se con la fuente misma de la inspira-
hallaba la inscripción "Γνώθι σε αυ- ción original, espontánea y divina.
τόν ", conócete a ti mismo. Estas pa-
Según los filósofos antiguos, la
labras fueron adoptadas por Sócra-
tes como uno de los principios de su enseñanza estaba en estrecha y di-
enseñanza, así como por otros sa- recta relación con la sabiduría y no
bios, como Pitágoras y Tales de Mi- apelaba tan sólo a la razón o a la ló-
leto. Con ello, estos filósofos se gica. Los filósofos griegos admitían
que el conocimiento racional, no era
proponían demostrar que su ense-
ñanza no era estrictamente perso- el más alto grado del conocimiento,
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15. Mitología Griega
no era la sabiduría. ¿Acaso la sabidu- en Atenas en el 470 o el 469 a.C.,
ría puede ser enseñada del mismo hijo de Sofronisco. Puede ser consi-
modo que el conocimiento exterior, derado como el fundador de la ética
por la palabra o mediante libros? El trascendental y se sirvió en sus en-
conocimiento racional externo no señanzas de la inscripción délfica. El
concierne más que a una facultad sentido que para él tiene este lema
limitada, que es la razón, mientras está en relación no sólo con el reco-
que la sabiduría concierne a la rea- nocimiento de nuestros límites, de
lidad del ser al completo. nuestra ignorancia, sino también con
Existe una preparación a la su afirmación de que la virtud reside
sabiduría más elevada que la simple en el conocimiento. Muchas son,
filosofía intelectual, y a la que po- además, las referencias de Sócrates
demos llamar preparación interior; a su enigmático "daimon", especie
éste parece haber sido el carácter de voz interior o inspiración divina
de los más altos grados de la escuela que le advertía antes de cometer un
de Pitágoras. error.
Ninguna enseñanza externa es El dominio de sí mismo, la
capaz de dar el conocimiento real, doma de las pasiones, es uno de los
que el hombre debe encontrar sola- grandes temas socráticos. "¿En qué
mente en sí mismo, pues, de hecho, se diferencia de una bestia el hom-
ningún conocimiento puede ser ad- bre sin dominio de sí e incontinen-
quirido sino mediante una compren- te?", se pregunta Sócrates. Todos sus
sión personal. apetitos, deseos y pasiones los tenía
Sin esta comprensión, ninguna bajo estricto control. Sabido es,
enseñanza puede desembocar en un además, que gustaba del diálogo y la
resultado eficaz. Es la razón de que conversación, pero no sólo por pasar
Platón dijera que "todo lo que el el rato, sino con intención de buscar
hombre aprende está ya en él". To- la verdad, el bien y la justicia.
das las experiencias, todas las cosas Hablaba con sus conciudadanos para
exteriores que le rodean no son más que abrieran los ojos ante la igno-
que una ocasión para ayudarle a to- rancia, fuente de todos los males e
mar conocimiento de lo que hay en injusticias.
sí mismo. Este despertar es lo que se En contra de la pretendida sa-
llama anámnesis, que significa "re- biduría de los sofistas, él proclama
miniscencia", recuerdo. la necesidad de conocerse a sí mis-
Fue el oráculo de Delfos el mo y reconocer nuestra ignorancia.
que, interrogado por Querefonte, Su sabiduría, dice, no está en saber
señaló a Sócrates como el hombre más cosas que los otros, sino en sa-
más sabio de Grecia. Sócrates, nació ber que no se sabe, frente a los que
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16. Mitología Griega
creen saber lo que no saben. Esta virtuosos. Nuestro primer deber es
conciencia de la propia ignorancia obedecer la orden délfica "conócete
(condición primera e indispensable a ti mismo", porque, como dice el
para que surja el deseo del verdade- maestro, "una vez que nos conozca-
ro conocimiento) quiere comunicarla mos, podremos aprender a cuidar de
a los demás para purificar sus almas nosotros, pero si no, nunca lo hare-
del error, fuente de toda culpa. Por mos". La función de la esencia es
eso su enseñanza es un continuo gobernar, regir los procesos, y esta
examen de sus interlocutores, a los función sólo puede ser bien ejercida
que asedia con preguntas, fingiendo si este gobierno esta asentado en la
querer aprender de ellos, pero con- verdad. La búsqueda de la verdad es
virtiéndose él auténticamente en su una búsqueda interior (eso sí, en
maestro. La mayéutica: método dia- diálogo con los otros), precedida e
léctico de preguntas y respuestas impulsada por el reconocimiento de
que lleva a sus interlocutores al en- la ignorancia.
cuentro de las verdades que subya-
cen en el fondo de su psiquis. Condenado a tomar la cicuta,
«Muchos, en efecto, me reprochan su entereza y serenidad ante la
que siempre pregunto a otros y yo muerte queda reflejada en los tex-
mismo nunca doy una respuesta tos. Uno de ellas cuenta que cuando
acerca de nada por mi falta de sabi- bajó del tribunal, ante el llanto de
duría, y es, efectivamente, un justo la gente, les dijo: "¿Por qué lloráis?
reproche. La causa de ello, que no ¿No sabéis que desde que nací esta-
soy sabio en modo alguno. Sin em- ba condenado por la naturaleza a
bargo, los que tienen trato conmigo, muerte?". También se cuenta que un
aunque parecen algunos muy igno- buen amigo -o su mujer Xantipa- le
rantes al principio, en cuanto avan- dijo: "Lo que más me duele es que
za nuestra relación, todos hacen mueras injustamente". El maestro
admirables progresos (...). Y es evi- replicó: "Preferirías que me hubie-
dente que no aprenden nunca nada sen condenado a muerte por haberlo
de mí, pues son ellos mismos y por sí merecido".
mismos los que descubren y engen-
dran bellos pensamientos». (Platón,
Teeteto, 150c-e)
Decía Sócrates que la virtud se
identifica con el conocimiento. Toda
culpa proviene de la ignorancia y
cuando los hombres se hacen cons-
cientes, se convierten también en
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18. Mitología Griega
El origen del mal en el mundo y en el interior del ser humano viene explicado
tanto en relatos mitológicos como literarios. Hemos elegido dos de los más
ilustrativos. Uno es el conocido “Mito de las Razas” relatado por Hesíodo ( S.
VIII a.C.) en su obra "Los Trabajos y los Días". El otro es el mito relatado por el
mismo autor y en la misma obra y conocido como “El mito de Pandora”.
Después de Homero,
Hesíodo es el más antiguo
de los poetas griegos hasta
hoy conocidos. Vivió en el
s. VIII a.C. y su ocupación
era la de campesino y pas-
tor hasta que un día, según
el mismo relata, fue visi-
tado por las musas quienes
le llamaron a su servicio y
le pidieron que cantara “la
verdad”. Así se convirtió en
poeta.
Las obras del Hesíodo
que se conservan son “La
Teogonía”, “Los trabajos y
los días” y “El escudo de
Hércules”
“Hesido y la Musa” (Gustave Moureau)
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19. Mitología Griega
Es este uno de los mitos más importantes ya que se refiere a la historia
de la humanidad y las etapas por las que ha pasado. Como en otras tradiciones,
por ejemplo la maya, se habla de distintas razas humanas, diferentes creacio-
nes de los dioses que fueron desapareciendo o siendo destruidas sucesivamente
hasta llegar a nuestra actual raza que vive en la llamada “Edad de Hierro” en
una situación moral y espiritual sumida en el error y la degeneración.
Cuenta Hesíodo que fueron cinco las razas que se sucedieron desde el na-
cimiento de la humanidad.
Edad de oro: “De oro fue la primera raza de hombres perecederos que
crearon los inmortales, moradores del Olimpo...” Los hombres de la
edad de oro fueron los primeros; creados por los dioses Olímpicos, viví-
an en los tiempos en que reinaba Crono. A semejanza de los mismos dio-
ses, vivían con “el corazón libre de preocupaciones, al margen de las
penas y al abrigo de las miserias”; siempre jóvenes, desconocían la
enfermedad y la vejez. Pasaban el tiempo en un puro regocijo, ajenos
a todos los males, y, cuando llegaba la hora de la muerte “parecían su-
cumbir a un dulce sueño”. Poseían todo sin necesidad de trabajar o de
luchar: “El suelo fecundo producía por sí solo una abundante y generosa
cosecha y ellos vivían de sus campos, en la alegría y la paz, en medio de
bienes sin cuento”.
Edad de plata: “Los dioses crearon a cotinuación una nueva raza, pero
ya inferior, una raza de plata”. Correspondería al reinado de Zeus, ca-
racterizada por una relativa degradación en la relación con la ante-
rior. Los hombres tenían larga vida, cien años y vivían sometidos a sus
madres “sin que se le desarrollara la inteligencia...y se negaban a ren-
dir culto a los inmortales”. Zeus les hizo desaparecer bajo la tierra co-
mo castigo a su desobediencia.
Edad de bronce: “Zeus creó una tercera raza de hombres perecederos,
la raza de bronce, muy distinta a la anterior, violentos y robustos...con
el corazón como el rígido acero y causaban terror”. “A pesar de su vigor
también sucumbieron sin dejar nombre alguno sobre la tierra”
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20. Mitología Griega
Edad heroica: “Cuando, asimismo, la tierra hubo cubierto esta última
raza, al igual que lo hizo con las anteriores, Zeus, aún creó una cuarta,
raza esta más valiente y más justa, raza divina de héroes, llamados se-
midioses y cuya generación nos ha precedido...todos perecieron en las
duras guerras”. Los héroes eran el resultado de la mezcla entre dioses y
humanos.
La edad de hierro: Esta raza es la que vivimos, corresponde a la época
de Hesíodo,; la descripción que ofrece el autor no presenta más que en-
fermedades, vejez, muerte e incertidumbre ante un futuro desconoci-
do, angustia por el porvenir y trabajos sin fin.
¨Los de este linaje no cesarán de sufrir toda suerte de fatigas y miserias duran-
te el día, ni de ser consumidos durante la noche por las duras angustias ... aún
los mismos bienes irán siempre entremezclados con los males...los padres no
reconocerán a sus hijos ni éstos a sus padres, llegando al extremo de negar el
alimento a los ancianos. Impondrán la fuerza por encima del derecho y de-
vastarán ciudades los unos a los otros. Ningún valor se dará al juramento ni a
lo justo ni al bien, sólo se respetará al inicuo y al violente, se pondrá la fuerza
por encima del derecho, y la conciencia no existirá. Al compás de las miserias
humanas marcharán los Celos , con sus odiosos pensamientos. La Conciencia y
la Vergüenza volarán entonces de la vasta tierra al Olimpo...abandonando a los
hombres. Sólo quedará para los mortales angustias y dolores, y contra el mal
no existirá recurso alguno.
La última que abandonará la tierra será la justicia”.
Hesiodo describe como el crimen se entronizará en la sociedad humana;
la modestia, la verdad y el honor no serán considerados más que como palabras
vacías, el lugar que ocupaban como valores humanos, serán reemplazados por
el fraude, el engaño, la violencia y el enfermizo afán de ganancia..
Así vemos la Edad de Oro como un estado de inocencia y felicidad. La
verdad y el derecho permanecían siempre vigentes, aunque no estaban obliga-
dos por ninguna ley escrita, ni había magistrados encargados de hacerlos cum-
plir, ni castigos para los infractores y ello porque la ley y la justicia moraban
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21. Mitología Griega
dentro el mismo hombre. Reinaba una eterna primavera y la tierra daba sus
frutos sin que fuera necesario el trabajo de sembrar o recolectar.
A esta era feliz, sucedió la raza de hombres de la Edad de Plata, sin inte-
ligencia ni conciencia de sí mismos y de su lugar en la creación, raza inferior a
la del Oro, pero superior a la de Bronce, que vendrá después constituida por
hombres fuertes y violentos. A continuación nos habla Hesíodo de la raza de los
héroes o semi-dioses para pasar a continuación a la Edad de Hierro la más dura
y degenerada, la peor. Realmente Hesíodo, hace 2.600 años, consiguió descri-
bir a la perfección la época en la que vivimos.
En este relato de Hesíodo vemos distintos intentos por parte de los dioses
de crear una raza humana acorde con sus designios y también un proceso de
“degeneración” en cuanto a capacidades y facultades hasta llegar a la raza ac-
tual que ha perdido todo contacto con realidades trascendentes.
Según la mitología, es indudable que en épocas anteriores, sobre todo en
la llamada época heroica, el hombre estaba en contacto con una realidad tras-
cendente, esta facultad se fue perdiendo y como recuerdo quedaron los relatos
míticos. Solamente fue conservada en los llamados “ritos mistéricos” o de ini-
ciación durante los cuales el candidato a iniciado entraba en contacto con esa
otra realidad, vivía experiencias a las que el hombre común no podía acceder.
En muchos de estos cultos, la base o la guía era un mito. Así por ejemplo, en
los cultos mistéricos más famosos de la antigüedad, los de Eleusis, se utilizaba
el mito de Deméter y Perséfone.
El mito de las razas contiene la descripción de la evolución del género
humano como tal. Pero el mismo Hesíodo y en la misma obra, “Los trabajos y
los días”, nos refiere el mito de Pandora. Este nos explica qué sucedió en el
interior del ser humano y por qué fue privado de facultades y dotes. El mito de
Pandora se sitúa en una etapa concreta en el desarrollo de las edades que
hemos visto, después de la Edad de Oro a partir de la cual la humanidad inició
un proceso de degeneración.
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22. Mitología Griega
El Titán Prometeo ha
robado el fuego a los
dioses para entregar-
lo a la humanidad.
El fuego llevará al ser
humano a despertar a
niveles de conciencia
más elevados.
PROMETEO ROBA EL FUEGO A LOS DIOSES
(HEINRICH FRIEDRICH FUGER, 1817)
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23. Mitología Griega
El hombre había sido privado fuego es representado de igual for-
del fuego, y por ello permanecía ma en otras mitologías, por ejemplo
“dormido” en cuanto a poderes, fa- en la nórdica es encarnado por el
cultades y visión interior. Prometeo, dios Loki, elemento ígneo que en sí
un Titán que se había puesto del la- no es bueno ni malo, despendiendo
do de Zeus en su lucha contra Cro- de su uso puede ser destructivo o
nos, lleva a cabo una hazaña insóli- regenerador.
ta: roba el fuego a los dioses y des- Prometeo en griego significa “el
de el Olimpo lo baja a la tierra y lo que provee”, “el que prevé”, “el
entrega a los mortales. Por ello es que previene el resultado de sus ac-
castigado por Zeus, que le encadena tos.”
a una roca en el monte Caúcaso, du- Tenía un hermano que repre-
rante la noche un buitre o águila le senta el polo contrario, se llamaba
devora el hígado que volvía a crecer Epimeteo que significa “Imprevi-
durante el día. Fue liberado por sión”, el que comprende los resulta-
Hércules. dos después de actuar, el que re-
flexiona tarde, “el que ve con re-
Prometeo es el mismo fuego, traso”. Es una advertencia contra las
no solo físico, sino interno, el Fue- acciones descuidadas, que no prevén
go Divino de la Inteligencia de la las consecuencias que pueden aca-
humanidad. Es el elemento trans- rrear.
formador que permite al hombre Epimeteo va a jugar un papel impor-
llegar desde lo más terrenal hasta lo tante en el mito de Pandora.
más sublime, aquello que le permiti-
ría llegar a ser dios . El elemento
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24. Mitología Griega
El uso que se hacía del fuego toda la faz de la tierra. El paraíso se
no era el correcto y... surge el mito había terminado. Este fue el mo-
de Pandora. Zeus ordenó a Hefesto, mento en la historia de la humani-
dios del fuego, crear a una mujer y dad en que el género humano perdió
al resto de los dioses dotarla de to- el estado de perfección y el mal to-
dos los dones posibles. Atenea con la mó su lugar en el mundo y en la psi-
sabiduría, Hermes la elocuencia en quis humana.
las palabras, Apolo dotes para la
música, Afrodita la belleza iniguala- El mismo Hesíodo escribe:
ble, Demeter y Hestia la prudencia, “Antes de eso (la apertura de la caja
la constancia y la fortaleza. de Pandora) la raza humana vivía en
la Tierra al amparo y abrigo de todo
El resultado fue Pandora, que mal, de la dura fatiga y de las dolo-
significa ¨todos los dones, todas las rosas enfermedades que acarrean la
virtudes¨. muerte a los hombres. Pero Pando-
Le fue dada una caja cerrada (ánfo- ra, al levantar con sus propias ma-
ra según otras versiones), para en- nos la ancha tapa del ánfora que las
tregársela a su futuro esposo Epime- contenía, derramó y esparció sobre
teo con la recomendación de que en los hombres los más nefastos pesa-
ningún caso debía ser abierta. Vivie- res. Sólo la Esperanza se quedó en el
ron durante algún tiempo felices. interior... por consiguiente desde
aquel día innúmeres desdichas rei-
Pandora, o Epimeteo o ambos nan entre los hombres y están llenos
(depende de las versiones del mito) de males la Tierra y el mar...”
abrieron la caja de la que no salie-
ron más que horribles males, pestes, La comparación con el relato
guerras, hambres, muertes, vicios, bíblico de la expulsión del paraíso y
enfermedades, pasiones, envidia, ira de la Eva bíblica y Pandora es obvia
y toda clase de energías negativas y no se le escapó a John Milton, el
que se esparcieron por la tierra y gran poeta inglés, que la introdujo
dominan al hombre hasta nuestros en el Libro IV de su “Paraíso Perdi-
días. do”.
A su vez, Prometeo ha sido un
Pandora al ver su contenido, personaje abundantemente recogido
intentó cerrarla, pero sólo consiguió por los escritores. Byron y Shelley
retener dentro a la Esperanza, que también tomaron este tema.
ayuda desde entonces a todos los Prometeo es el fuego, símbolo del
hombres a soportar los males esca- despertar. En el cuadro de H.F.
pados de la caja y extendidos por Fuguer, ( pag. 18) el artista ha re-
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25. Mitología Griega
presentado al Titán con el fuego en
su mano a punto de despertar a un En la mitología griega pode-
hombre dormido, símbolo de toda la mos hallar muchos de sus significa-
humanidad. dos ocultos a través del significado
de los nombres que llevan héroes y
Pandora es un personaje dioses.
enigmático, por una parte fue crea- Es interesante la oposición
da como un reflejo de los dioses en entre Prometeo, el que puede ver el
la tierra, como la proyección en un resultado de sus acciones antes de
ser humano de facultades y capaci- realizarlas y Epimeteo, aquel cuya
dades divinas, en ella plasmaron ca- visión interior está nublada y sólo
da uno sus atributos. Pandora posee reconoce consecuencias cuando so-
todas las virtudes, todos los dones, brevienen. Dos actitudes que co-
pero también se le entrega una caja rresponden a estados de conciencia
cerrada que contiene todos los de- más activos o más adormecidos.
fectos y todos los males. Es símbolo
de la dualidad, entre el bien y el A partir de este relato, se ha
mal y todos sus derivados, encerrado venido dando en el interior del
en un polo se encuentra el germen, hombre una interminable lucha en-
la semilla del contrario tal y como tre luz y tinieblas, ya que poten-
las filosofías orientales transmiten a cialmente los dones divinales per-
través del emblema yin-yang. manecen en el interior del ser
humano. Esta lucha nos es revelada
El ser humano tiene una doble op- con todo detalle en multitud de mi-
ción. Por una parte la correcta uti- tos y a través de una riqueza inigua-
lización del fuego llevaría a Pandora lable de personajes y situaciones.
y Epimeteo a un desarrollo espiritual Así comienza “la reconquista del es-
cercano a la divinidad. La incorrecta tado perdido” a través de distintas
utilización a la degeneración. vías.
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26. DIONISIO EL LIBERTADOR
Mitología Griega
Uno de los mitos relacionados con el dios
Dionisio nos viene a transmitir el mismo
mensaje de dualidad en lo que se refiere a
la naturaleza psíquica del ser humano.
Dionisio, o Dionisos, fue llamado por los
griegos “el libertador” porque “libera a las
almas de la miseria y la oscuridad”.
Dios fundador del “teatro”, relacionado
con las viñas, el vino y el éxtasis místico.
En la mitología griega tiene aspectos muy
variados. Uno de ellos es Dionisio Zagreas,
que nació de Zeus transformado en
serpiente y de Perséfone. Perseguido
implacablemente por los Titanes (fuerzas
del caos y la oscuridad) intenta huir de los
mismos tomando diferentes formas.
Cuando había tomado la forma de un toro
es alcanzado por sus perseguidores quienes
le capturan y parten su cuerpo en 14
pedazos comiendo parte de su “carne”.
Zeus con su rayo extermina a los Titanes
como castigo y de las cenizas de los
mismos nacieron los seres humanos que
tienen de esta forma dentro por una parte,
el aspecto oscuro y negativo de los titanes
, pero por otra, una parte sagrada y divina
de Dionisio que se había incorporado al
DIONISIO, MUSEO DEL PRADO
cuerpo de aquellos.
Esta parte divina es la “psique” o alma que
debe ser liberada y purificada para poder regresar a su fuente. Esta es la base
de los Misterios Órficos y de uno de sus ritos llamado “omofagia” en el que los
iniciados, reunidos en grupo, ingerían carne de un toro, símbolo del dios Dioni-
sio, y bebían su sangre, en la creencia de que de este modo la fuerza y la luz
del dios alimentaba y fortalecía su alma.
Dionisio, en su aspecto de Zagreas, era un dios que moría y resucitaba y tam-
bién tenía un papel en los misterios de Eleusis ya que estaba unido al mundo
del “más allá” del que regresa después de la muerte. Plutarco escribe en rela-
ción con lo órficos: “Hablan de Dionisio como un dios que se destruye, desapa-
rece, abandona la vida y renace de nuevo”.
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29. Mitología Griega
Hay variedad de mitos que nos relatan procesos internos,
que nos hablan de monstruos y de héroes que existen en
nuestro interior. Muchos de ellos muestran con todo detalle
las armas que debemos emplear en nuestra lucha interna, el
método que debemos seguir, en definitiva, el camino del
desarrollo. Describen y evocan los elementos que componen
la psiquis, nos enseñan a diferenciar, a discernir.
Por ello, el mito es un valioso instrumento para el
autoconocimiento y la exploración de todos los niveles que
conforman nuestro mundo psíquico. No se trata solamente
del mundo más externo o formal, sino de llegar a los niveles
más profundos y llevar la luz a la oscuridad, hacer
consciente el inconsciente. Sólo así se puede generar un
cambio, un progreso real que no se refiera solamente a las
formas externas.
Hay dos polos, dos fuerzas antagónicas en el interior del ser
humano: Luz y Tinieblas. Despertamos en la medida que
somos capaces de iluminar nuestra oscuridad, de transmutar
energías, de morir internamente para así permitir el
nacimiento y la liberación de fuerzas conscientes. Esta es la
gran aventura, la gran hazaña de todos los tiempos, el viaje
interior que lleva a una transformación de aquel que lo
realiza, que descubre y despierta capacidades interiores
que estaban dormidas. Es una contienda que se desarrolla
allí donde se desarrolla el mito, en un “espacio interior”.
Cada mito tiene distintos niveles de interpretación y de
comprensión. La misma mitología no ofrece una versión
única de cómo se desarrollan las aventuras mitológicas ni de
las características de sus protagonistas.
Para evocar la conquista de la luz hemos elegido dos héroes
de los más conocidos en el mundo griego: Perseo y Teseo. A
través de sus hazañas nos van mostrando la senda interior
de desarrollo, el proceso del despertar. Existen dentro de
cada uno de nosotros, pero hay que activarlos,
fortalecerlos, dotarlos de las armas que necesitan para
cumplir su misión. Se trata del despertar del héroe interior.
29
30. Mitología Griega
LOS DOS CAMINOS
Hércules es el prototipo del
héroe, aquel que logró la
integración psíquica de todos
los elementos del hombre
autorrealizado.
Lo más conocido fueron sus 12
trabajos, realmente no fueron
sólo 12, pero por alguna causa
éstos quedaron marcados
simbolizando la integración de
12 cualidades, 12 partes que
conforman al ser superior.
El estudio y simbología de cada
uno de ellos y su significado
requiere un estudio en
profundidad que no puede ser
recogido en esta revista, pero
es muy interesante analizar
“Hércules entre la Virtud y el Vicio”
como inicia Hércules su Emmanuel Benner (1896)
reconquista interior.
En los albores de su juventud se encontró en la encrucijada de ele-
gir uno de dos caminos. El escritor clásico Jenofonte describe una conver-
sación entre Sócrates y Aristipo en la que el primero cuenta una historia
que él mismo oyó a un sabio anterior llamado Pródico; se trata del famo-
so mito de Heracles (Hércules) en la encrucijada de los caminos. Dice la
mitología, que siendo todavía muy joven a Hércules se le aparecieron dos
30
31. Mitología Griega
mujeres, ambas bellísimas, eran “Placer” ( o “Vicio”) y “Virtud”. La
primera intenta convencerle para que la acompañe por “el camino más
agradable y fácil”. La segunda le propone la vía de la virtud y el desarro-
llo interior, una “vía larga y difícil” que permite al final poseer la mayor
de las felicidades.
Y Placer le dijo: "Te veo, Hércules, indeciso del camino a tomar en la vi-
da. Si haces de mi tu amiga, te conduciré por el camino más agradable y
más cómodo, y nunca te faltará placer alguno, ni tu vida conocerá ningu-
na dificultad. En primer lugar, en vez de atender a la guerra y los nego-
cios, no te ocuparás sino de elegir los manjares y los vinos que te resulten
más agradables, de escoger los medios que más contribuyan al deleite de
tus ojos, tus oídos, tu olfato y tu tacto,... en fin todos los medios para al-
canzar una felicidad sin sombras. Si te inquietara la necesidad del dinero
indispensable para hacer frente a estos gastos, no temas que hayas de lo-
grarlo al precio de fatigas y dolores del cuerpo y del alma; antes, gozarás
del fruto de los trabajos de otros, no privándote de nada de lo que pudie-
ras sacar provecho. Gracias a mis relaciones, te conseguiré que puedas
fácilmente obtener ventajas de todo tipo". Hércules entonces le dijo:
"Mujer, ¿cómo te llamas?". Y ella dijo: "Mis amigos me llaman Felicidad,
pero mis enemigos, para denigrarme, me llaman Vicio".
Por su parte Virtud le habló así : “Tengo esperanzas de que elegirás el
camino que conduce a mi, que cumplirás la gran obra de las bellas y no-
bles acciones, y que me harás resplandecer ante los ojos de todos a fin de
que, por los beneficios que otorgo, más me estimen y más me conside-
ran... En primer lugar, si quieres que los dioses te sean favorables, co-
mienza por honrarlos. Si quieres que tus amigos te estimen, no les mez-
quines tus favores. Si deseas honra en la ciudad, séle útil. Si pretendes
que toda la Hélade admire tu virtud, esfuérzate por ser bienvenido en
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32. Mitología Griega
ella. Si quieres que la tierra te de frutos en abundancia, cultívala. Si te
propones enriquecerte en haciendas, cuida del ganado…En fin, si quieres
ser un hombre fuerte, es necesario que habitúes tu cuerpo a obedecer al
espíritu, y entrenarlo con ejercicios a soportar el sudor de tu frente.
Entonces Vicio retomando el diálogo le replicó, según Pródico: "¿No ves,
Hércules, cuán penoso y demorado es el camino a la felicidad por el que
esta mujer quiere llevarte? Yo te conduciré a la felicidad por un camino
fácil y breve". Y Virtud le replicó: "¡Miserable!, ¿Qué alegría puedes pro-
meter cuando no propones ninguno de los medios que puede conducir a
ella?
Hércules eligió el camino que conduce a la Virtud y así comenzó sus haza-
ñas heroicas que acabarían conduciéndole al Olimpo, al lado de los dio-
ses.
El tema de los dos caminos en la vida es muy antiguo en la tradición
helénica, fue transmitido de generación en generación por poetas y filó-
sofos. Ha sido utilizado por Homero, Platón, Hesíodo y Pitágoras entre
otros. «Sabemos que Pitágoras de Samos dividió la vida del hombre a la
manera de la letra Y. En efecto, la primera edad es indecisa y aún no se
ha entregado ni a los vicios ni a las virtudes. En cuanto a la bifurcación de
la letra Y, ésta comienza con la juventud; en ese momento los hombres
siguen, bien sea a los vicios, es decir, el lado izquierdo, bien sea a las vir-
tudes, es decir, el lado derecho.” (Servio).
Es esta una elección que se presenta a la mayoría de las personas y no
solamente una vez en la vida. Muy frecuentemente tenemos que optar
por un camino u otro, la mayoría de las veces es una opción interna que
en su momento se materializa en la vida.
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33. Mitología Griega
Corresponde a una forma de enfocar la existencia, para aquellos que eli-
gen “el placer” la senda toma una apariencia más atrayente, ofrece la sa-
tisfacción de los sentidos a través de objetos materiales y representa el
“apego psicológico” a bienes y riquezas. En este camino la mayor parte
de la energía se emplea en la consecución del “bienestar material” del
“tener más” con el menor esfuerzo. Tiene como finalidad el “mejor vivir“
a nivel sensorial, lo que llamamos progreso material. Los ideales y valores
predominantes son la comodidad, la riqueza y el placer.
La segunda senda, “la Virtud”, por el contrario, no ofrece bienes y como-
didad material, sino logros espirituales, desarrollo del alma, reconquista
de uno mismo a través del
desarrollo interior.
Es el camino del “ser cada vez más
íntegro”, una senda donde priman
los valores éticos, sociales y
espirituales. Representa la acción
encaminada a la armonización y
equilibrio psíquica y emocional, el
despertar de la conciencia,
integración de aspectos psicológicos
y acceso al desarrollo espiritual que
en el caso de Hércules le condujo a
la inmortalidad. Esta es la vía
interior que muestra el Mito.
HÉRCULES Y EL LEÓN DE NEMEA
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35. Mitología Griega
P erseo nace en Argos, ciudad griega situada en el Peloponeso
que da nombre a toda la región, Argólida. Es considerada una
de las ciudades más antiguas de Grecia, con un brillante pasado histórico
y mitológico.
A esta ciudad se une el mito de Perseo, nieto de Acrisio rey de la
Argólide. Su esposa dio a luz una niña, la bellísima Danáe, que fue ence-
rrada por su padre en una torre o cámara de bronce para impedir que tu-
viera un hijo ya que el oráculo le había advertido que perecería a manos
de su nieto. Sin embargo, Zeus, en forma de lluvia de oro cayó sobre la
torre y de este modo Danáe engendró un hijo que fue llamado Perseo.
Acrisio, dudando del origen divino de su nieto y por temor a que la profe-
cía se cumpliera, puso a ambos en un arca de madera y les dejó a su suer-
te entre las enfurecidas olas del mar. Por la intervención de Zeus, sanos y
salvos llegaron a la isla de Sérifos donde fueron recogidos por Dictis,
hermano del rey de la isla, Polidectes, quien crió a Perseo. Dictis fue pa-
ra Perseo como un padre.
Polidectes envía a Perseo a la peligrosa expedición de dar muerte a
Medusa, la única mortal de las tres Gorgonas. Sus dos hermanas, Esteno y
Euríale, eran inmortales. Medusa tenía un aspecto horripilante, sus cabe-
llos eran serpientes venenosas, tenía garras y colmillos mortíferos y vivía
con sus hermanas en el más lejano norte, en las tierras de los hiperbó-
reos.
Los dioses ayudaron al joven Perseo entregándole conocimientos y armas
que le ayudarían en su lucha. Atenea, la diosa de la sabiduría, le advirtió
que no debía mirar de frente a Medusa porque su mirada tenía el poder
de petrificar a todo aquel que se cruzaba en su camino y le regaló un es-
cudo tan bruñido y sutil que parecía la superficie de un espejo. “Cuando
35
36. Mitología Griega
llegues, le dijo, no mires a Medusa más que cuando se refleje en el escu-
do, porque si la miras directamente te convertirás en piedra”
También Hermes ayudó a Perseo entregándole una hoz diamantina
para que cortase la cabeza de Medusa. Pero Perseo necesitaba, además,
un par de sandalias aladas, un zurrón mágico para guardar la cabeza cor-
tada y el yelmo negro de la invisibilidad que pertenecía a Hades, el dios
del mundo subterráneo. Todas estas cosas estaban al cuidado de las nin-
fas del Estigia.
Perseo descendió al mundo subterráneo, llegó a la laguna Estigia,
las aguas de acceso al inframundo y consiguió de las ninfas los objetos
mágicos. Con la ayuda de estos objetos logró introducirse en la residencia
de las gorgonas. Atenea guió su mano y usó su escudo de bronce como es-
pejo para lograr cortar la cabeza de Medusa sin tener que mirarla. De la
sangre de Medusa nació el caballo alado Pegaso y también el gigan-
te Crisaor cuyo nombre significa “espada de oro”.
De regreso Perseo liberó a Andrómeda que estaba a punto de ser
ofrecida en sacrificio a un monstruo marino para aplacar la cólera de Po-
seidón. La madre de Andrómeda, Casiopea, había osado equiparar su be-
lleza y la belleza de sus hijas a la de las nereidas, criaturas que vivían en
las profundidades del mar bajo la protección de Poseidón y eran conside-
radas las más bellas de todas las criaturas.
Perseo se casó con Andrómeda, regresaron a Sérifos allí liberó a su
madre de una boda indeseada venciendo a sus opresores con la fuerza pe-
trificadota de la Medusa. A continuación entregó la cabeza a la diosa Ate-
nea quien la colocó en su escudo, o en su pecho. Es la llamada égida sím-
bolo de la invulnerabilidad garantizada por los dioses.
Más tarde, junto con su madre Danáe, regresó a su tierra natal, la Argóli-
da donde se convirtió en rey de Tirinto.
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37. Mitología Griega
Simbología
Perseo es la energía
de la conciencia humana.
La fuerza que, como el
héroe cuyo padre es Zeus,
lleva en su naturaleza una
parte divina pero que de-
be nacer en la tierra de
los hombres y de una mu-
jer mortal que es virgen.
Ese ser de naturaleza semi
divina, el héroe, se en-
cuentra abandonado de
poderes y de luz, y es “in-
vitado” a recuperar su
propia naturaleza inten-
tando la gran hazaña de
dar muerte a Medusa, aquella fuerza que aprisiona en su interior dos
elementos divinos : Pegaso, el caballo alado de los dioses y Crisaor, la es-
pada de oro.
Pegaso es una energía espiritual que tiene la facultad de “volar”
hacia el Olimpo, no está unido a la materia y tuvo como misión conducir y
ayudar a grandes héroes griegos en sus hazañas. Crisaor, la espada de
oro, es la misma voluntad humana forjada en el más precioso metal. El
símbolo de la espada se encuentra en varios mitos de todo el mundo, co-
mo atributo de poder y dominio.
El mensaje del mito es radical. Medusa debe ser decapitada para liberar
las fuerzas espirituales que tiene aprisionadas en su interior. No basta
vencerla, tiene que morir. Este episodio alude a lo que se conoce como
“muerte iniciática” o “muerte interior”, la muerte a un estado para re-
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38. Mitología Griega
nacer en otro superior, el tránsito entre dos niveles de conciencia o di-
mensiones espirituales.
Estados y energías negativos constituyen la Medusa interior, el terrible
monstruo que lleva encarcelada a la conciencia dentro de sí, quien “pe-
trifica” todo aquello que tiene vida y cuya muerte nos hace invulnerables
porque su cabeza se convierte en atributo divino que siempre acompaña a
la diosa Atenea, la sabiduría del alma. Medusa en el mito representa los
vicios, defectos, negatividad, odio, venganza, codicia, crueldad etc, lo
más impuro que encierra el germen de la mayor pureza (Pegaso).
Perseo se vale de dos “armas” imprescindibles:
El escudo-espejo, regalo de Atenea, representa la auto-observación
de sí mismo, de la parte más oscura de nuestro interior, aquello que
no podemos mirar directamente pero sí podemos captarlo mediante
la facultad de la auto-observación de nuestras reacciones, pensa-
mientos y emociones. Si enfocamos la mirada hacia dentro, veremos
reflejado aquello que queremos destruir en el espejo de la auto-
observación.
La espada (hoz), regalo de Hermes, simboliza la voluntad, el valor
inquebrantable de perfeccionamiento y avance. Aquello que nos
traerá el triunfo.
Atenea y Hermes curiosamente son los dos dioses del panteón heleno que
representan respectivamente la Sabiduría y la Inteligencia. Ambas son
capacidades necesarias para recorrer el camino de la senda interior.
Como muchos otros héroes mitológicos, Perseo tuvo que descender
al Hades, el mundo de las sombras, del más allá. Dice el mito que en la
laguna Estigia, aguas oscuras y profundas que separan el mundo de los vi-
vos del de los muertos, obtuvo un yelmo o casco que le hacía invisible en
el mundo físico y era propiedad de Hades, el dios del más allá. Si hace-
mos una lectura interior veremos que el descenso a los propios infra
mundos es necesario para el desarrollo del principio consciente. Incluso
muchas de las contiendas mitológicas se desarrollan en el “mundo de aba-
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39. Mitología Griega
jo”, es decir, en el subconsciente o infraconsciente. El héroe tiene que
adquirir el conocimiento de lo que se ve y de lo que no se ve.
También Andrómeda, la doncella que libera Perseo del monstruo
que la amenaza y con la que luego se casará, tiene su proyección interna,
en el mundo psíquico del ser humano. En una primera aproximación es la
misma conciencia, pero si se profundiza más nos remontamos a dos ener-
gías álmicas que deben ser desarrolladas. Una es la llamada por las tradi-
ciones espirituales Alma Humana. Es la propia conciencia en acción, re-
presentada por Perseo, aquella energía que nos impulsa, que lucha, que
es activa, cuya característica es la voluntad. La otra energía álmica es la
llamada Alma divina, una fuerza más sutil y pasiva, más intuitiva e imagi-
nativa no destinada a la lucha, sino a la plasmación de lo bello, a la inspi-
ración y al conocimiento intuitivo. Cuando el candidato ha llegado a un
grado de desarrollo se produce lo que los místicos llaman “las bodas del
alma”, el alma humana se fusiona con el alma divina en el interior del ser
humano. Esta unión tiene lugar cuando la medusa interior ha sido elimi-
nada y la conciencia liberada. Esta es la representación de Andrómeda.
Perseo tiene que rescatarla de la amenaza del monstruo que está a punto
de devorarla y conquistarla para finalmente unirse con ella.
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40. Mitología Griega
El pintor inglés Edgard Burne Jones (1833-1898)
plasmó en varios cuadros de gran belleza y expresividad
la aventura de Perseo
“LA LLAMADA”
El principio
consciente que
Perseo representa es
llamado, estimulado,
para iniciar su
búsqueda interior.
En la mitología se
representa como “la
llamada del héroe”.
En el cuadro vemos
al fondo el estado de
la conciencia
dormida y en primer
plano el comienzo
del despertar. La
conciencia toma
contacto con su
propia “sabiduría”
interna
representada por la
diosa Atenea, y ésta
le entrega los
medios necesarios
para que pueda
iniciar su misión.
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41. Mitología Griega
PERSEO Y LAS GRAYAS
Las Grayas eran tres hermanas que compartían un solo ojo y vivían en el reino
del Oeste, donde siempre era de noche. Perseo se ve obligado a consultarlas se-
gún algunas versiones para que le indicaran el camino hacia Medusa; según
otras, hacia la entrada al Hades, donde se encontraban las ninfas que le pro-
porcionarían las sandalias aladas, la alforja para depositar la cabeza de Medu-
sa una vez cortada y el casco de la invisibilidad de Hades. Perseo se apodera de
su ojo para obligarlas a revelar su secreto.
Este episodio alude a la activación de facultades relacionadas con los sentidos
internos de la clarividencia y la intuición.
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42. Mitología Griega
LAS NINFAS ARMAN A PERSEO
Perseo llega hasta las aguas del más allá, la laguna Estigia para obtener de las
ninfas sus dones. Es la etapa del viaje que corresponde al descenso psíquico al
subconsciente para recuperar capacidades espirituales.
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43. Mitología Griega
EL HALLAZGO DE MEDUSA
Perseo llega allá donde mora Medusa junto con sus, las Gorgonas.
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45. Mitología Griega
LA SANGRE DE MEDUSA
De la sangre del monstruo nacen Pegaso y Crisaor
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46. Mitología Griega
LA CONDENA CUMPLIDA
Perseo da muerte al monstruo que está a punto de devorar a Andrómeda. El
artista ha imaginado que se trata de un dragón-serpiente siguiendo la tradición
presente en todas las culturas según la cual el héroe elimina al dragón interior
para liberar su alma.
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47. Mitología Griega
LA ROCA DE LA PERDICIÓN
Perseo y Andrómeda se reencuentran. El héroe ha superado pruebas relacio-
nadas con los cuatro elementos : aire (trasladándose veloz con sus sandalias
aladas), tierra (descendiendo al mundo subterráneo), fuego y agua (venciendo
al monstruo-dragón que sale del agua para devorar a Andrómeda). Representa
el dominio de nuestros elementos internos en el aspecto psíquicos.
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48. Mitología Griega
LA CABEZA SINIESTRA
Perseo muestra a Andrómeda la cabeza de Medusa reflejada en el agua, donde
también se reflejan sus propios rostros. Es el espejo interior.
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49. Mitología Griega
Cúmulo de estrellas en la constelación de Perseo
Perseo fue inmortalizado por los dioses co-
locándole en el cielo y dando su nombre a
una constelación. Allí aparece como un
guerrero con el casco de Hades, el escudo
de Atenea, y la espada y los talares
de Hermes y en su mano, la cabeza de Me-
dusa.
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52. Mitología Griega
La historia de Teseo aparece comendación a su esposa: “Cuando
entretejida entre la historia, la mi- nuestro hijo haya adquirido la fuerza
tología y la arqueología. Está unida suficiente, que desentierre mi espa-
a dos zonas griegas: Ática y la isla da y mis sandalias y llevándolas con-
de Creta. sigo que se dirija a Atenas. En cuan-
Teseo era para los atenienses to lo vea sabré que es mi hijo”.
el héroe por excelencia y uno de sus Teseo creció y se convirtió en
más antiguos reyes mitológicos. Se- un hombre fuerte y atlético. Un día
gún la tradición unificó el Ática que sintió la necesidad de ir en busca de
anteriormente estaba dividida en su padre, consiguió mover la enor-
pequeños núcleos. Por otra parte, la me roca y con la espada al cinto y
más famosa de las hazañas de Teseo las sandalias puestas emprendió el
tuvo lugar en la isla de Creta y fue camino hacia Atenas.
la muerte del Minotauro. Fueron varias las luchas y
Teseo , uno de los más gran- pruebas a las que tuvo que hacer
des héroes griegos, nació en Trecén, frente en el camino. Saliendo victo-
ciudad que se extendía sobre una rioso de todas ellas llegó a Atenas
llanura que bordeaba el mar, en- donde fue reconocido por su padre.
frente de la isla de Poros, en el gol- En aquella época Atenas esta-
fo Sarónico. Su madre, Etra, era hija ba obligada a pagar un terrible tri-
del rey de Trecén, y su padre, Egeo, buto al reino de Minos, en Creta.
era rey de Atenas (Según otras ver- Cada nueve años debía enviar 7 don-
siones del mito, su padre era el cellas y 7 jóvenes para servir de
mismo dios Poseidón). Encarna el alimento al terrible monstruo llama-
prototipo de hombre que se hace a do Minotauro y que vivía confinado
sí mismo mediante el desarrollo de en el Laberinto de Creta, construido
fuerza, valor e inteligencia. Poco por Dédalo, el legendario y habilísi-
antes de su nacimiento, su padre de- mo arquitecto. El espantoso mons-
jó Trecén y a su joven esposa para truo, mitad hombre y mitad toro so-
volver a Atenas. Antes de marcharse lo se alimentaba de carne humana.
enterró bajo una enorme roca su es- Nadie hasta entonces había conse-
pada y sus sandalias y dejó una re- guido salir del laberinto.
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53. Mitología Griega
Teseo se ofreció como miem- El héroe se introduce en el la-
bro de la ofrenda al rey Minos para berinto mientras el resto de los jó-
intentar aniquilar al monstruo. El venes esperan en la entrada. A me-
barco que los trasladaba partió dida que avanza Teseo va desenro-
hacia Creta, sus velas eran negras en llando el ovillo siguiendo las instruc-
señal de luto. Teseo le había dicho a ciones de Ariadna. Finalmente des-
su padre que si tenía éxito a su re- pués de recorrer múltiples encruci-
greso el barco llevarría izadas velas jadas y caminos donde sólo reinaba
blancas, de lo contrario permanece- la oscuridad, llegó al centro del la-
rían las negras. berinto, a la cámara del monstruo.
Llegados a Creta, Allí se entabló una
Ariadna, hija del terrible batalla,
rey Minos, se finalmente Teseo
enamora de Teseo consigue arrancarle
y le presta su uno de sus cuernos
ayuda en la y clavárselo en el
hazaña. Averigua cerebro. La bestia
del mismo Dédalo cae muerta con un
que al minotauro aullido atroz. A
sólo se le podía continuación volvió
matar atrave- sobre sus pasos y
sándole el cerebro rescató a los demás
con uno de sus jóvenes atenienses.
afilados cuernos. Junto con Ariadna
Así se lo dice a se embarcaron
Teseo y además le da un ovillo de rumbo a Atenas.
hilo de seda. Teseo no tendría que Teseo, avisado en un sueño,
hacer más que atar una punta del debe abandonar a Ariadna en la isla
hilo a la entrada e ir devanando el de Naxos ya que la joven estaba
ovillo a medida que avanzara por destinada a ser la esposa del dios
entre los difíciles corredores del la- Dionisio. Lleno de dolor por la pér-
berinto hasta el centro del mismo dida olvidó izar las velas blancas.
donde se encontraba el minotauro. Día tras día, el rey Egeo iba a
Si sobrevivía a la lucha el hilo le un promontorio cercano a Atenas
guiaría hacia el exterior. oteando el horizonte con la esperan-
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54. Mitología Griega
za de ver avanzar la vela blanca, se- rítoo con la pretensión de raptar a
ñal de que su hijo estaba vivo. Pero Perséfone, allí quedó prisionero,
lo que un día vio era la nave que se sentado en la silla del Olvido y en-
acercaba con las velas negras, sím- cadenado con anillos de serpientes,
bolo de la muerte, ondeando al hasta que Hércules bajó a liberarlo.
viento. En la certeza de que su hijo Con el correr de los años y
había muerto e incapaz de sobrelle- después de una vida llena de vicisi-
var su dolor se quitó la vida arroján- tudes, Teseo murió en la isla de Es-
dose al mar desde el acantilado. ciros. Según una tradición,.después
Desde entonces en honor al padre de de las guerras persas, en el 476 a.C.
Teseo, ese mar lleva el nombre de un oráculo habló de un hombre
Egeo. gigantesco sepultado en Esciros. En
Teseo llegó a ser rey de Ate- su tumba aparecieron unas sandalias
nas y su gobierno fue útil, bueno y y una espada y los buscadores inter-
sabio. Se casó con Hipólita, reina de pretaron que se trataba de Teseo.
las Amazonas, fue amigo de Hércu- Sus restos fueron llevados a Atenas
les y participó junto a otros héroes por Cimón y enterrados según una
en muchas hazañas.Teseo también versión en el Teseion y según otra
descendió al Hades con su amigo Pi- cerca de la acrópolis de Atenas.
El Teseion, templo situado en el Ágora de Atenas y uno de los mejor consefvados. Aunque se sabe
que estuvo dedicado a Hefesto, se le conoce con el nombre del héroe Teseo.
En sus metopas se representan las hazañas del mismo.
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55. Mitología Griega
Este es uno de los mitos más de Ulises de vuelta a Ítaca después
conocidos de la antigüedad que en- de haber participado en la guerra de
cierra un profundo simbolismo psico- Troya. Se trata de un auténtico via-
espiritual. Como en el resto de rela- je iniciático en el que el héroe debe
tos, los elementos del mito son inte- superar diferentes pruebas antes de
riores, hay que buscarlos en nuestro recobrar a su esposa Penélope y su
propio mundo psicológicos. Repre- reino, Ítaca.
senta la liberación de la animalidad,
la conquista de la condición verda- En el caso de Teseo, éste ini-
deramente humana, de un hombre cia el viaje para reunirse con su pa-
dotado de conciencia y de lucidez. dre, el rey, y acceder a la condición
de heredero de su reino que, en este
Son muchos los mitos que re- caso, es Atenas. Independientemen-
latan el viaje de un héroe para re- te de la parte histórica que encierra
cobrar o tomar posesión de un el mito, desde el punto de vista de
reino. Una de las obras clásicas más la simbología psicológica, no se trata
famosas, la Odisea, describe el viaje de un reino externo, sino de un
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56. Mitología Griega
estado interior, una realidad espiri- lla de cada conciencia para vencer a
tual que ha sido perdida o de la cual las energías que la esclavizan y ser
internamente estamos separados. cada vez más libre, más íntegra.
El héroe crece y se fortalece Una vez que el principio
alejado de su padre y despojado de consciente ha conseguido estable-
su auténtica dignidad. Es realmente cerse y crecer en fuerza e inteligen-
el símbolo de la conciencia humana cia puede afrontar la prueba del Mi-
que nace y crece en un mundo ma- notauro, el monstruo mitad hombre
terial que no es el suyo, ignorante mitad toro que se encuentra en el
de su propia fuerza y de su divini- centro del laberinto interior. En esta
dad. Pero es en ese mundo extraño y prueba se librará un duro combate
a veces hostil donde encontrará las entre las dos naturalezas, la inteli-
armas para iniciar el camino como lo gencia y espiritualidad contra la
hizo Teseo. Espada y sandalias son la brutalidad y el instinto
herencia oculta del ser espiritual el
legado que debemos desenterrar y EL LABERINTO
así armados, comenzar el camino
hacia nuestra Atenas interior, la El símbolo del laberinto como
senda hacia un estado psíquico y es- manifestación material de la bús-
piritual de mayor plenitud y visión queda espiritual es muy antiguo, se
consciente. encuentra en la mayoría de las cul-
En este viaje interior cada turas y mitologías, desde Egipto,
hombre tiene que vencer y eliminar Mesopotamia y Grecia pasando por
diferentes aspectos psicológicos que la Edad Media y Renacimiento hasta
en el mito vienen representados por nuestros días. En varias catedrales
las hazañas de Teseo hasta llegar al góticas del Medievo, sus constructo-
reino de su padre y ser reconocido res nos dejaron laberintos en piedra
por el mismo. Nos relata el mito que como alusión al camino de la inicia-
el héroe se convierte en el liberta- ción. Una construcción de época ac-
dor de la esclavitud humana, allí por tual, la maravillosa Sagrada Familia
donde pasa vence y elimina a seres en Barcelona, también hace honor a
que están esclavizando y atemori- la tradición mostrando en una de sus
zando a los habitantes de los alre- fachadas, la dedicada a La Pasión,
dedores. Si todo esto lo interioriza- un misterioso laberinto.
mos, nos encontraremos con la bata-
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57. Mitología Griega
Son laberintos rituales y sa- se dispone a enfrentarse con esas
grados pero también mentales. En fuerzas brutas y destructivas.
ellos se adentra el “héroe”, la inte-
ligencia astuta.
Por una parte el laberinto es-
tá relacionado con la muerte, es el
camino que conduce al “más allá”,
al mundo invisible para nuestros
sentidos, a la región más oscura del
infraconsciente donde habita nues-
tro propio minotauro y que en un
principio está oculto e invisible para
la conciencia. El ser humano que
llega al centro del laberinto tras
haberlo recorrido será un hombre
transformado. Y aquel que logra sa-
lir y volver de nuevo a la superficie,
será un ser humano renacido. El ca-
mino peligroso y difícil es la misma
senda hacia la iluminación.
También el laberinto simboli- EL MINOTAURO
za las profundidades de la mente
inferior, aquella donde habitan los El minotauro no tiene una
instintos y pasiones más bajas e in- simbología única, cada uno tenemos
humanas, un mundo que se encuen- nuestro propio “minotauro” ence-
tra en la profundidad laberíntica de rrado en el subconsciente. En el mi-
nuestra psique y no se muestra en el to es el fruto nacido de la unión fa-
nivel superficial del diario vivir; sólo tal de la esposa del rey Minos, Pasi-
percibimos su sombra a través de los fae, con un toro enviado por Posei-
efectos negativos que produce. De dón. Era la vergüenza y el secreto
allí parten muchas de las reacciones de la familia real y por ello Minos
humanas que nos resultan incom- encarga a Dédalo la construcción de
prensibles. un lugar al que nadie pueda acceder
Teseo es la inteligencia, la y regresar con vida: el laberinto.
fuerza y la luz de la conciencia que
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58. Mitología Griega
El minotauro posee cuerpo un bellísimo toro blanco que Posei-
humano, es un toro con cuerpo de dón hizo surgir del mar y la madre
hombre o, desde otro punto de vis- una reina mortal Pasifae.
ta, un hombre con cabeza de toro,
que se alimenta de carne humana, LA SEÑORA DEL LABERINTO
es decir, de nuestras propias energí-
as. Como en el mito estamos obliga- El peligro que representa el
dos a entregarle lo mejor de noso- laberinto no es solamente que en-
tros mismos para mantenerlo con vi- cierre un monstruo invencible, sino
da. Es la fuerza de los instintos, las el de perderse en su interior y no
pasiones y la “mente animal” que encontrar nunca la salida. Por ello
eclipsa el discernimiento y, desde el para internarse en el laberinto el
centro del laberinto, conduce gran héroe necesita de la ayuda funda-
parte de nuestra existencia. mental del “hilo de Ariadna”, sin él
Si ingresamos a un nivel aún no hay esperanza de regresar.
más profundo de la simbología, po-
demos decir que el minotauro es la Ariadna también es conocida
sombra de Teseo, el doble oscuro como “la señora del laberinto”, una
del héroe. Si en Teseo resplandece diosa antiquísima que en la mitolo-
la luz, la inteligencia y el amor, el gía posterior pasó a convertirse en
minotauro se caracteriza por la bru- la hija del rey Minos. Esta denomi-
talidad, el instinto y la violencia. Lo nación figura grabada en una anti-
que se encuentra en el centro del gua tablilla de la época micénica
laberinto es el descubrimiento de encontrada en Creta y escrita en
uno mismo en su parte más oculta, una escritura griega de las más anti-
enterrada en el mundo subterráneo, guas.
todo aquello que no queremos ver y La “señora del laberinto” era
hemos encerrado en nuestras pro- la diosa que guiaba al aspirante que
fundidades. Este paralelismo nos lo se adentraba en el laberinto, la dio-
muestra el mito al señalar el origen sa de la iniciación, aquella que co-
de uno y otro. Como se ha dicho an- noce “el camino”. El hilo de Ariad-
teriormente, según una versión, el na es interior, representa la co-
padre de Teseo es el dios Poseidón, nexión interna con el mundo espiri-
habría nacido de una reina mortal y tual, el elemento que une el cons-
del dios. El padre del minotauro es ciente con lo inconsciente, la luz
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59. Mitología Griega
con la oscuridad. Aquel principio di- Ariadna se enamora de Teseo
vino que reside en el interior del porque para conectar con la Ariadna
hombre y que puede conducirnos interior es necesario desarrollar el
desde nuestroS mundos inferiores amor, la energía más poderosa que
hasta la superficie de luz. nos conecta con la divinidad. Su
“hilo” maravilloso es el camino a re-
correr dentro del laberinto, para
salir hay que seguir su rastro.
Teseo y Ariadna
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60. Mitología Griega
Creta es una isla que se encuentra situada en el centro del Mediterráneo orien-
tal equidista aproximadamente de las costas del Peloponeso griego, de las de
Asia Menor y del Norte de África. Es muy montañosa y tiene una antiquísima
tradición mitológica y de culto ritual. Muchos de sus montes están horadados
de numerosa cuevas que por algunos estudiosos han sido identificadas como el
laberinto del mito y han acogido culto desde la más remota antigüedad.
Según la mitología el mismo Zeus nació en Creta. En una de las laderas del
monte Ida se abre una gruta en la que Rea escondió al recién nacido Zeus para
sustraerlo a la ira del padre Cronos, confiándolo al cuidado de la cabra Amal-
tea. Desde Homero a Tucídides, la tradición griega conservó el recuerdo de la
espléndida civilización que floreció en Creta, según datos oficiales en el ΙII mi-
lenio a.C.
En torno a la figura del rey Minos se tejió la historia y la mitología y de él tomó
su nombre la “civilización minoica”. Este legendario rey hijo de Zeus y de Eu-
ropa y padre de Ariadna encargó a Dédalo la construcción del laberinto para
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61. Mitología Griega
guarida del Minotauro. El palacio de Knossos fue el centro principal de esta cul-
tura cuyos restos fueron descubiertos por Arthur Evans a principios del s.XX
quien dedicaría más de treinta años de su vida a excavarlo. Se calcula que el
palacio tiene unos 1.500 aposentos. Al igual que el de Troya, también el mito
del Laberinto halló correspondencia en la realidad arqueológica. Excavando
tras las huellas de antigua leyendas, Evans reveló los misterios de Knossos. Lo
que descubrió el arqueólogo y según su propia opinión, no estaría destinado a
la morada real, sino más bien identifica el palacio con un centro ritual o de
culto basándose en su laberíntico plano y en su decoración.
La intrincada distribución de corredores y estancias evocaba en el arqueólogo
inglés el recuerdo del mito del Laberinto. En realidad, todo el palacio era una
especie de laberinto con diferentes estratos. La civilización minoica llegó a un
extraordinario refinamiento como lo prueban los restos encontrados. Lo que
llama poderosamente la atención es la utilización que hizo del símbolo del toro
y que quedó plasmada en frescos de maravilloso colorido que escenifican la lu-
cha ritual con este animal.
A la entrada norte del
palacio llega una vía
que procede directa-
mente del puerto. Se-
gún el mito, ésta fue
la entrada por la que
Teseo se introdujo en
el palacio de Minos
para enfrentarse al
Minotauro. En los mu-
ros del patio central
del palacio los exca-
vadores hallaron una
enorme cabeza de to-
ro. Este animal es el
antagonista con el que el cretense mide su valor y agilidad escenificando un
combate interior. Un fresco hallado por Evans ofrece diversas escenas de esta
lucha en la que participan tanto hombres como mujeres.
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63. Mitología Griega
Eros era hijo de Afrodita, es el dios del amor. En
muchas representaciones aparece como un niño con ar-
co y flechas, pero en esta historia es un joven bello y
apuesto. Con sus flechas tenía el poder de inocular el
amor a dioses y hombres. Cualquiera que fuese rozado
por su flecha se enamoraba inmediatamente e la prime-
ra persona que veía. Psique, es una mortal, la personi-
ficación del alma; hija de un rey de Anatolia y la más
bella de sus hermanas.
Afrodita acusa a Psique de pretender ser más be-
lla que ella y envía a su hijo Eros para que la castigue
atravesándola el corazón con una flecha y asegurándose
de que cerca de ella haya algún ser horrible y despre-
ciable del cual quedaría irremediablemente enamorada.
Cuando Eros fue a buscarla Psique estaba durmiendo en
un prado, rodeada de flores, y quedó tan impresionado
por su belleza que se enamoró de ella. Esa Pero ocurre
algo inesperado: antes de lanzar la flecha, Eros se ena-
moró de ella. Esa misma noche, Eros llevó a Psique a su
palacio con la promesa de que cada noche estaría con
ella a cambio de que nunca le preguntara quien era ni
le mirara el rostro ni intentara descubrir su nombre. Así
pretendía protegerla y protegerse de su madre Afrodita.
Eros y Psique se amaban profundamente y todas las ma-
ñanas antes de que el sol saliera el joven se iba.
Un día Psique recibió la visita de sus hermanas. A
pesar de que Eros le había advertido de la envidia que
albergaban en sus corazones, Psique acepta que la
vean, pero una vez que se han ido no puede liberarse de
sus insinuaciones, le había repetido una y otra vez “si él
no quiere revelar su rostro, es porque es un monstruo”.
Así penetro el germen de la duda y la desconfianza en el
corazón de Psique y una noche enciende una lámpara y
se atreve a mirar el rostro de su amado. En ese momen-
to, cae una gota de cera hirviendo sobre la cara de
Eros, que se despierta y precipitadamente se va triste y
decepcionado.
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64. Mitología Griega
Esa noche Eros no la visitó y se
dio cuenta de que su enamorado
no volvería. Pasaron varios me-
ses, tristes y largos y Psique an-
duvo por el mundo buscándolo
sin conseguir encontrarlo hasta
que se dirigió a rogar a Afrodita
para que le devolviera el amor de
su hijo. Ésta, aun rencorosa, po-
ne obstáculos a ese amor pero le
da una oportunidad de recupe-
rarlo a través de cuatro pruebas
casi imposibles de pasar por una
mortal.
La primera prueba, consistía en
ordenar millones de granos. En
un granero había un enorme
montón de granos de trigo, cen-
teno y cebada. La prueba consis-
tía en hacer tres montones sepa-
rados antes del anochecer. Se
sintió desolada, la tarea era im-
posible, pero fue ayudada por un
ejército de hormigas que con di-
ligencia y rapidez realizaron el
trabajo.
La segunda prueba: A la mañana
siguiente, Afrodita le puso otra
prueba, tenía que ir, atravesando
un río, a un bosque donde pasta-
ba un rebaño de ovejas muy es-
peciales ya que sus vellones bri-
llaban como el oro. Psique debía
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65. Mitología Griega
llevar a Afrodita un mechón de
aquella preciosa lana. Psique, al
borde de la desesperación y ante
la imposibilidad de conseguir lo
que se la pide está a punto de lan-
zarse al río en busca de la muerte.
Pero entonces una caña que crecía
cerca del río le aconsejó que fuese
a por la lana al atardecer, y así
cuando las ovejas, que eran muy
peligrosas, estuviesen descansando
sacudiera las ramas de los árboles
para encontrar la lana de oro,
pues quedaba diseminada por el
bosque enredada en su espesura.
Así consigue Psique pasar la se-
gunda prueba.
La tercera prueba que le impone
Afrodita es llevarle una jarrita de
agua helada de una fuente tene-
brosa, cuyas aguas negruzcas ali-
mentaban la laguna Estigia y el río
Cocito. La fuente se encontraba en
la entrada al Hades y estaba guar-
dada por dragones. La prueba pa-
recía imposible, hasta las mismas
aguas se defendían a sí mismas ge-
nerando terribles remolinos. En
este caso Psique es ayudada por el
águila de Zeus que cogió la jarrita
entre sus garras, pasó entre los
dragones y consiguió la jarrita de
agua para Psique.
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66. Mitología Griega
La cuarta y última prueba, era la más difícil de todas. Consistía en bajar
al mundo de ultratumba (el Hades), donde Perséfone (reina de los Infiernos)
debía darle un pequeño cofre lleno de amor. Era una prueba muy difícil, ya que
quien baja al Infierno ya no puede regresar, dice el mito que el mismo Orfeo le
ayudó a encontrar el camino hacia el Hades.
Siguiendo estos consejos, Psique empieza su última prueba llevando dos
monedas y dos pedazos de tarta a la entrada del Hades, pagándole con una de
las monedas a Caronte para que le cruce en su barca hacia la otra orilla de la
laguna Estigia donde se encuentra la entrada al Hades.
Durante el trayecto Psique, se ve rodeada de terribles sombras del más
allá que aún no han encontrado su camino. Desembarca en la otra orilla y allí
se debe enfrentar al can Cerbero, un perro con tres cabezas cuya misión es
impedir a los vivos entrar y a los muertos salir del Hades. Entrega al monstruo
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67. Mitología Griega
uno de los pedazos de tarta. Tras esto, lle-
gó cerca de donde estaba Perséfone. A par-
tir de es punto el dios Hermes guía a Psique
hasta que se encuentra frente a Perséfone,
la reina del inframundo.
Una versión del mito dice que ésta
ofrece a Psique todo tipo de lujos y como-
didades que ella rechaza, lo que busca es el
Amor, y así es como Perséfone le entrega el
cofre del amor y la belleza con la recomen-
dación de que no lo abriera.
Llevada por la tentación y la curiosi-
dad apenas llegó a la luz del sol lo abrió y
del cofre salió el sueño eterno. Psique se
dejó caer sobre la hierba, cerró los ojos y
se durmió. Allí la reencontró Eros quien
limpió el sueño de sus ojos y suplicó a Zeus
que les ayudara. Zeus se apiadó de ellos y
otorgó la inmortalidad a Psique quien se
unió a Eros celebrándose una gran boda en
el Olimpo.
Simbología
La historia de Eros y Psique es la historia
del alma humana. Psique en griego significa
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68. Mitología Griega
“alma” y su raíz fue utilizada posteriormente para extender el significado al
mundo psíquico. Esta bella narración nos transmite el camino del despertar a
través del amor y relata las pruebas que el alma debe pasar hasta conseguir la
unión eterna con Eros.
El Amor es la fuerza creadora primigenia del universo. Según la tradición
órfica el mundo fue creado por Eros que nació del “huevo cósmico”. Es la ener-
gía mediante la cual se puede trascender cualquier estado inferior. Ya no se
trata de recuperar un reino perdido, ni de llegar a gobernar en nuestro propio
mundo. Se trata de conseguir la unión con el Amor y dejar que opere el desper-
tar interno a través suyo.
El mito, en este caso, no nos presenta a un héroe lleno de fuerza física e
inteligencia. Aquí hay una heroína que va a ser sometida a un difícil camino
probatorio para recobrar a Amor. Es nuestra propia alma, que a pesar de su
fragilidad contiene dentro de sí la suficiente fuerza y determinación para su-
perar las difíciles pruebas del Amor.
Psique es una joven mortal que “duerme” en un prado de flores hasta que
llega Eros y la despierta. Así comienza el mito, el alma habita la tierra, el
mundo material, pero está dormida, privada de lucidez y entendimiento y sólo
con la llegada del Amor puede ser despertada. Así comienza el ciclo del alma
en su experiencia material que tiene varias fases:
Despertar por el Amor
Separación a causa de la atracción de Psique por el mundo material
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