Este documento narra la vida de un perro desde su nacimiento hasta su muerte a los 20 meses de edad. Fue abandonado por su familia humana a los 16 meses y desde entonces vivió en la calle, donde sufrió maltrato y finalmente fue atropellado por un auto, dejándolo paralizado y en agonía hasta que una mujer lo ayudó a morir para acabar con su sufrimiento. El documento concluye diciendo que los animales deben ser educados y cuidados con cariño por sus dueños, no abandonados.