El documento describe los principales paisajes agrarios de España. España se divide en cuatro zonas agrícolas principales: España húmeda al norte, con ganadería y silvicultura; la montaña húmeda con las mismas actividades; el interior continentalizado con secanos extensivos y regadíos mixtos; y la España mediterránea cálida con hortofruticultura. Los factores naturales como el clima y los suelos condicionan las actividades agrícolas en cada región.