PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO: CLAVES PARA LA REFLEXIÓN.pdf
HOMILÍA DEL DOMINGO 3º DE PASCUA. CICLO B. DIA 19 DE ABRIL DEL 2015. EL ENCUENTRO DEL SEÑOR.
1. EL ENCUENTRO CON EL SEÑOR
FORTALECE NUESTROS CORAZONES.
Queridos amigos: Os invito a que como los discípulos de Emaús reconozcamos
al Señor en el encuentro.
Él se encuentra con nosotros en la oración y en la reflexión, en el compartir y en
servir.
El Señor se hace presente entre nosotros por la Palabra y en la Comida.
Eso es lo que tiene que ser la Eucaristía.
Primero, el saludo: “Paz a vosotros”. A todos nos hace falta esa paz del Señor
para quitar miedos y dudas y poder encontrarnos con Él.
Segundo: el Señor quiere ver las heridas del corazón producidas por la
impaciencia, la falta de generosidad y de perdón.
Tercero: les dice: ¿tenéis algo que comer?
Cristo quiere compartir con nosotros la comida, el alimento. Él se hace comida y
alimento para nosotros cuando nos encontramos con Él.
A medida que los discípulos y nosotros nos encontramos con Cristo, entendemos
mejor que su palabra nos llena de luz y de sentido. Nos hace entender que
nuestra debilidad puede ser fortalecida por la fuerza de su Espíritu. Nos hace
entender que el encuentro sincero abre posibilidades, crea expectativas, alivia
dificultades y obra maravillas.
El Señor, en el encuentro con nosotros, nos hace caer en la cuenta de la
necesidad que tenemos de encontrarnos, de convivir, de hablarnos y de
compartir.
Necesitamos encontrar al Señor, encontrándonos con los olvidados y excluidos,
con los abandonados y oprimidos.
¡Que estos encuentros fortalezcan nuestros corazones!
Gabriel.
3º. Domingo de Pascua. Ciclo. B. Madrid. 19 de Abril de 2015.