1. LA DESTRUCIÓN DEL MEDIO AMBIENTE
Documentales, películas, congresos,
publicidades, artículos periodísticos… Cada vez
son más los medios que exponen la
problemática del medio ambiente. Se ven
campañas que intentan concientizar a la
población sobre el cambio climático, la tala
indiscriminada de árboles, la irracional
matanza de algunas especies animales, el
efecto invernadero, la contaminación, el
consumo inconsciente de la energía, el
derroche de agua potable, se ve mucha gente
interiorizada en el tema, preocupada y que
intenta hacer algo pero... ¿qué se hace
realmente para evitar destruir nuestro
planeta?
Aunque suene algo apocalíptico, se puede decir que de a poco estamos matando a nuestro
único hogar: el Planeta Tierra. Y parece que recién ahora se está tomando un poco de
conciencia. Vemos a famosos en campañas contra el uso de pieles naturales, estrellas
hollywoodenses que utilizan energía solar en sus mansiones y hasta un ex candidato a
presidente de los EE.UU. realizando un muy buen documental sobre el calentamiento global y
sus consecuencias. Pero la sensación que todos tenemos es que este alud destructivo no para,
por más intento que se haga. Muchos ciudadanos han tomado los consejos ecologistas y los
han puesto en práctica en su cotidianidad: Intentar ahorrar energía en el hogar, contribuir al
reciclaje, evitar comprar productos que dañan la capa de ozono y demás. Hay estados que sí
tienen políticas contra la contaminación, controles sobre desechos tóxicos y programas de
reciclaje de basura. Hay algunos que cumplen estas políticas estrictamente, varios lo hacen a
medias, algunos no las cumplen y otros ni siquiera las tienen. Por supuesto esto no alcanza.
2. Da la sensación que si no se hace un
esfuerzo enorme a nivel mundial, si no se
pone en primer lugar la problemática del
medio ambiente en todas las agendas de
los gobiernos de turno, si no se controla
rigurosamente todo aquello que sigue
agrandando el agujero de la capa de
ozono, dejando desiertos nuestros
bosques, provocando inundaciones,
extinguiendo especies, elevando la
temperatura de la tierra y consumiendo
todos los recursos naturales
indiscriminadamente, las futuras
generaciones tendrán que adaptarse a
un mundo realmente caótico. Entonces
debemos pensar que tantos
documentales y campañas de
concientización quedan sólo en el
discurso, porque si bien algo logran, es
un poquito que lucha contra un
monstruo enorme que sigue
destruyendo, que parece no tener fin,
que parece no importarle nada de nada.
El hombre no puede vivir en armonía con
su medio ambiente y está haciendo todo
lo posible para que tampoco puedan sus
hijos, sus nietos y sus bisnietos.
Por lo tanto, la idea es que tanto material circulando pro - ecología, sea tomado en cuenta
desde el ciudadano común, que puede optar por derrochar agua potable o usarla de manera
más consciente, hasta las grandes multinacionales que contaminan ríos con desechos
industriales, sabiendo que se puede evitar invirtiendo un poco de dinero tratándolos
debidamente. Que por lo menos valga la pena el esfuerzo de Al Gore y de Greenpeace por
intentar cambiar algo. Porque pareciera que todo el mundo sabe pero pocos hacen. Todos
están informados pero a muchos no les conviene o no les interesa aplicar lo aprendido. Y eso
no sirve si queremos salvar nuestro planeta.El futuro del planeta está en nuestras manos.