El documento discute la metáfora marxista de la estructura social como un edificio con una base económica y una superestructura política e ideológica. Explica que esta metáfora representa la idea de que la superestructura depende y está determinada por la base económica. También critica las interpretaciones abstractas y generalizadas del marxismo, argumentando que es necesario un enfoque más concreto y detallado en las reales relaciones de producción de la sociedad.
Análisis de las relaciones de producción y la estructura económica en Marx
1. María Camila Daza Leguizamón - Universidad La Gran Colombia
Competencias Comunicativas II
2. MEDIOS DE PRODUCCIÓN =TRABAJO=EMPRESARIO/OBRERO--TASA DE GANANCIA
Sector Industrial/Obrero -- Capital Industrial Sector Comercial/Tasa de Ganancia
Sector Financiero/Trabajador -- Tasa de Interés Sector Terrateniente/Renta
Sector Servicios/Trabajador – Ganancia (EXEDENTE|||PLUSVALIA
3. Cualquiera puede convencerse fácilmente de
que representar la estructura de toda sociedad
como un edificio compuesto por una base
(infraestructura) sobre la que se levantan los
dos pisos de la superestructura constituye una
metáfora, más exactamente una metáfora
espacial: la de una tópica.
Gravedad
Como toda metáfora, ésta sugiere,
hace ver alguna cosa. ¿Qué cosa? Que los pisos
superiores no podrían sostenerse (en el aire) por
sí solos sino se apoyan precisamente sobre su
base. La metáfora del edificio tiene pues por
objeto representar ante todo la determinación
en última instancia por medio de la base
económica”.
4. "A lo largo de la producción social de su vida, los hombres
contraen unas relaciones determinadas, necesarias, independientes
de su voluntad; relaciones de producción que son el resultado de un
determinado grado de evolución de sus fuerzas materiales de
producción. La totalidad de estas relaciones de producción
constituye la estructura económica de la sociedad, su base real,
sobre la que se levanta una superestructura jurídica y política, y a
la que corresponden unas determinadas formas sociales de
conciencia. El modo de producción de la vida material condiciona
de un modo general el proceso social, político y cultural de la vida.“
El párrafo anterior es uno de los más importantes del
marxismo, es la piedra angular del materialismo histórico, de la
Economía Política Marxista y del socialismo científico; es decir, de
la Teoría de la Revolución Comunista.
5. A todas las personas a las que les doy clase de marxismo y que vienen con
la herencia del marxismo de los años 60, les sugiero que lean en voz alta el índice de
El Capital. De forma resumida ese índice contiene los siguientes apartados: la
transformación de la mercancía en dinero, la transformación del dinero en capital, y la
división del capital en industrial, comercial y productor de interés. Una vez que han
leído en voz alta el índice, les formulo la siguiente pregunta: ¿Han encontrado como
parte de ese índice las parejas de categorías “relaciones de producción – fuerzas
productivas” y “estructura económica – superestructura política e ideológica”? Si no
las han encontrado, ¿por qué razón se presentan esas categorías como las categorías
rectoras del pensamiento de Marx? Por una sencilla razón: porque entre los marxistas
ha imperado el pensamiento generalista, abstracto y especulativo. Han echado en saco
roto lo que para Ilích Ulianov era sin duda la quintaesencia de la dialéctica: los
matices y la transición entre los contrarios.
6. Después de afirmar que es la fuerza de
gravedad la que hace que los pisos se sostengan
sobre la base, me pregunto: ¿cuál es la fuerza
actuante en el ente social para que la metáfora sea
válida? Y respondo: Tanto Marx como Althusser no
la nombran, no la explican y es la fuerza que
justificaría la metáfora. Pero él sí tiene la respuesta,
asi La Filosofía Concreta da una respuesta muy
sencilla a la pregunta del último punto:
en los entes sociales actúan las mismas fuerzas que
en cualquier otro ente: fuerzas de atracción, de
cohesión, y fuerzas de repulsión o desintegradolas,
manifestadas en una estructura piramidal en donde
las fuerzas de cohesión cúspicas tienden a mantener
la pirámide unida, y las fuerzas de base
individuales tienden a desintegrar el ente social”.
7. Pensemos en cualquier familia trabajadora con dos hijos. Pagan una
hipoteca al banco por su vivienda, trabajan tanto el padre como la madre en una
industria de alimentación, y cada día van al supermercado a comprar los productos
alimenticios y de limpieza.
Estas son las relaciones de producción en las que viven inmersa la familia en
cuestión: en su condición de hipotecados mantienen relaciones económicas con los
bancos, en su condición de trabajadores mantienen relaciones económicas con el
capital industrial, y en su condición de consumidores mantienen relaciones
económicas con el capital comercial. Y estas tres formas económicas o relaciones
de producción son las que, entre otras, se estudian en El Capital: la compra y venta
de la fuerza de trabajo, el capital industrial, el capital comercial y el capital
productor de interés. Pero los marxistas en vez de estudiar al detalle estas concretas
relaciones de producción, se pierden en las abstracciones y las generalidades de
aquel concepto de relaciones de producción elaborados por Borísoc, Zhamin y
Makárova.