El gato persa es una raza de pelo largo originaria de Irán que se caracteriza por su cara ancha y plana. Fueron introducidos en Italia en el siglo XVII y desarrollados en Inglaterra a finales del siglo XIX. Para cuidarlos adecuadamente se requiere un cajón sanitario grande, bolsas de arena y cortinas para ocultarlo. Los colores de pelaje más comunes son blanco, negro, azul, rojo y crema. Estos gatos también pueden sufrir algunas enfermedades genéticas
2. HISTORIA
El Persa es una raza de gato caracterizada por tener una
cara ancha y plana y un gran abundante pelaje de variados
colores. Son considerados comúnmente como gatos
aristocráticos (el 75% de los gatos de pedigree registrados
son persas). Los primeros gatos persas fueron introducidos
en Italia desde Persia (actual Irán) en la década de 1620 y a
sus descendientes se les llamó de muchas maneras. La rama
persa actual se desarrolló a finales de 1800 en Inglaterra y
proviene del gato de Angora turco.
3. Aseo y cuidados generales del gato Persa
Para cuidar apropiadamente a nuestro
pequeño gato Persa resulta aconsejable adquirir
determinados artículos esenciales antes de su llegada
al hogar. Necesitaremos como mínimo y en primer
lugar un cajón sanitario que sea algo grande, ya que si
su tamaño es excesivamente reducido tal circunstancia
supone que nos será preciso adquirir otro mayor en un
momento posterior. Estos cajones pueden ser de tipo
sencillo y abierto o bien de los denominados
cupuliformes que hacen posible retener el mal olor en
su interior. También podemos adquirir una cortina
apropiada al objeto de que el cajón resulte oculto de
forma discreta pero accesible a nuestro gatito.
Asimismo necesitaremos contar con una bolsa de
arena especial para esparcirla dentro del cajón