1. LA ESCRITURA: UN CÓDIGO PARA COMUNICARNOS SIN HABLAR
No es lo mismo hablar que escribir. En la expresión oral, es decir, cuando
hablamos, hacemos gestos, utilizamos tonos de voz y también la mirada, entre
otras cosas, para hacernos entender. Pero cuando escribimos tenemos que
utilizar el código escrito para dar a entender nuestras expresiones. No te
olvides que escribimos para ser leídos.
Nuestro sistema lingüístico del español incluye ortografía, tildación,
puntuación, y otras herramientas y señales que ayudan al lector a
entendernos e interpretarnos correctamente.
3. 1) La persona que lo va a leer (el lector) tiene
que entender lo que quisimos decir. Por eso,
debemos ser lo más claros posible.
4. 2) Es mejor utilizar frases (oraciones) cortas
para ordenar nuestras ideas. De esta manera, el
que nos lea nos entenderá más fácil. (¡No
olvides que las oraciones empiezan con
mayúscula y terminan en punto!) Y después de
5. cada punto, será mejor releer lo escrito para ver
si se entiende, ¿no?
3) También es mucho más placentero leer un
texto con más de un párrafo. Si escribimos todo
de golpe y no ponemos punto y aparte para
separar párrafos, es posible que el que nos va a
6. leer… se aburra. ¡Sobre todo si no somos
escritores expertos!
4) Utilizar signos de puntuación: punto y
seguido, punto y aparte, coma (,), signos de
exclamación (¡!), signos de interrogación (¿?),
rayas de diálogo, comillas (“ ”) y todo lo
necesario para que nuestro lector interprete
7. nuestras ideas en el sentido justo. Sin ellos el
texto pierde coherencia. Fijate: no es lo mismo
escribir “Estoy realmente contento” que
“¿Estoy realmente contento?”.
5) No cometer errores de ortografía.
8.
9. 6) ¡Letra clara! Si ni siquiera nosotros
entendemos lo que escribimos, ¿quién podrá
defendernos?
10. 7) No repetir palabras.
No seamos repetitivos... Para eso están los
sinónimos.
11. 8) Pongamos las tildes donde tienen que estar.
No es lo mismo decir “Compro las gaseosas”
(yo), que “Compró las gaseosas” (él).
No es lo mismo decir:
- Sí, quiero.
Que:
12. - ¡Si quiero!
9) Para unir una oración con otra podemos
utilizar los famosos conectores. Se trata de
palabras o breves frases que conectan una idea
con otra anterior y nos ayudan a ordenarlas.
Por ejemplo: Además, luego, y, entonces, por
13. ejemplo, más tarde, por ese motivo, también,
es decir,... ¡Hay muchísimos de estos!
10) Debemos acostrumbrarnos a escribir con
borradores, donde podamos poner al margen
notas y correcciones personales, para luego
releer y pasar en limpio. Sí, reescribir y
reescribir hasta que quede cada vez más claro.
¡A la manera de los mejores escritores, que
14. nunca se quedan conformes! Por eso, leamos lo
que escribimos. Nosotros somos nuestros
primeros lectores y nuestros primeros críticos.
Para resumir todo lo anterior, los diez problemas básicos que un texto escrito
puede tener son:
1) No se entiende.
2) Oraciones muy largas que no son claras.
3) No separa en párrafos.
4) No utiliza signos de puntuación.
5) Presencia de errores de ortografía.
15. 6) La letra no es clara.
7) Repetición de palabras.
8) No utiliza tildes.
9) Falta de conexión de ideas con conectores.
10) El texto definitivo parece un borrador personal. Vuelve a 1): NO SE
ENTIENDE