El Comité Popular en Defensa de los Derechos Humanos se ha formado en México para defender los derechos humanos ante la violencia sistemática del Estado mexicano y las fuerzas represivas contra el pueblo y el movimiento popular. El comité está compuesto por campesinos, obreros, estudiantes y amas de casa y busca frenar las violaciones a los derechos humanos y constitucionales a través de la organización y participación del pueblo. El comité hace un llamado a otros sectores a unirse a su iniciativa para detener los abus
Estudio de opinión a nivel nacional (16.04.24) Publicación.pdf
México: Conformación del Comité Popular en Defensa de los Derechos Humanos
1. México: Conformación del Comité Popular en Defensa de los
Derechos Humanos
Red Nacional DDH, San Cristóbal de las Casas, Chiapas a 03 de abril
de 2014.
A los organismos defensores de los Derechos Humanos nacionales e
internacionales
A las organizaciones hermanas e independientes
A los medios de comunicación
A las personas, ciudadanos y militantes de organizaciones del
movimiento popular
Al pueblo en general:
Hacemos pública la conformación del Comité Popular en Defensa de
los Derechos Humanos.
Toda persona -sin distinción de sexo, ideología, credo, raza- por el
simple hecho de serlo, le son inherentes Derechos Humanos,
entonces, garantizar el respeto a los derechos de toda persona,
significa también, garantizar el respeto de los derechos de los
pueblos.
Sin embargo, en México, actualmente vivimos tiempos no menos
violentos que antaño; de conflictos y contradicciones, como de luchas
que han surgido de los pueblos contra la opresión y explotación,
como también es un tiempo que el imperialismo desarrolla nuevos
mecanismos de dominación.
En ese sentido, hacemos hincapié en las leyes neoliberales
recientemente aprobadas en nuestro país en: educación (art. 3),
trabajo y seguro social (art. 123), política, hacendaria y energética.
Todas ellas, nos queda claro, en beneficio de la oligarquía nacional y
extranjera.
Estas “innovaciones jurídicas”, camuflaje de la hipocresía,
demuestran su utilidad y sello clasista, en la libertad con que se
entregan los recursos naturales de nuestro pueblo a través de las
concesiones mineras, presas hidroeléctricas, parques eólicos,
supermercados, etcétera.
2. Más de aquellos mecanismos antipopulares en relación a la legislación
burguesa, es la represión al conjunto del movimiento popular,
evidenciados en los métodos represivos de la fuerza pública a través
del encapsulamiento de manifestantes, coartando de ese modo el
derecho a la protesta.
En ese tenor, el servilismo de los administradores del Estado se
manifiesta en la reciente iniciativa de ley aprobada en Quintana Roo
Ley de ordenamiento social que legaliza la represión, bajo el sofisma
de regular las marchas, y no afectar a terceros.
Más que afectar a terceros, es imponer el terror para dar paso a la
impunidad y cerrazón al diálogo; asegurando de ese modo las
ganancias que arroja el monopolio del turismo y la protección de los
intereses oligárquicos.
Además, con esa ley, se acepta el incremento del descontento
popular, por ende, la necesidad del Estado por su criminalización. Se
suma también la Ley Federal contra la delincuencia organizada, que
criminaliza la lucha popular y la defensa de los derechos humanos,
con el pretexto de la lucha contra el narcotráfico.
Tras siglos de dominación de la clase en el poder y de lucha de los
pueblos contra ella, surgen los derechos humanos, sin embargo,
después de años de lucha por el respeto a los derechos humanos y la
autodeterminación de los pueblos, para el caso del Estado mexicano,
es letra muerta.
Porque continúan con la práctica de los crímenes de lesa humanidad
a través de la tortura, ejecuciones extrajudiciales, desaparición
forzada, etcétera.
En ese contexto, en la entidad chiapaneca los casos de violación de
los derechos humanos se expresan en la presencia de grupos
paramilitares en los municipios de Venustiano Carranza ante la
represión directa, detenciones extrajudiciales, tortura física y
psicológica a comuneros de la Casa del Pueblo de las tierras
comunales de aquel municipio.
Ocosingo, contra los pobladores del ejido el Carrizal por las
constantes agresiones y hostigamiento de los grupos paramilitares
“Petules” y “ORCAO” que durante varios meses provocó la suspensión
de actividades escolares, la detención arbitraria de Daniel Gómez
Sántiz, entre otros casos; todos ellos miembros del Frente Nacional
de Lucha por el Socialismo.
Se cuenta también la represión que fueron objeto profesores de la
Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) el
pasado 29 de junio de 2013 en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, así
mismo la represión contra maiceros de la Región Centro y Frailesca
en noviembre de 2013. Todos ellos, evidencia palpable de las
agresiones y ataques a los derechos humanos.
3. La constante agresión paramilitar de las bases de apoyo zapatista, y
demás organizaciones de carácter popular que han denunciado en
diferentes ocasiones las acciones represivas implementadas por los
gobiernos estatal, federal y municipales.
No obstante, la normalidad con que es asumida por el pueblo la
permanente violación de los derechos humanos, es un indicador que
refleja el carácter sistemático con que el Estado y sus fuerzas
represivas; agreden, atacan a personas y al conjunto del movimiento
popular.
En el momento de ejercer el derecho de petición, de la protesta en
función de resolver necesidades concretas. Se impone el Estado
policíaco-militar a través de terror, de la criminalización de la pobreza
y la protesta popular.
En ese tenor, en el contexto actual, observamos diferentes
organismos e instituciones de derechos humanos sean oficiales o no,
como reconocimiento abierto o implícito de la violación de derechos
humanos no sólo en México sino en el mundo.
Por otra parte, si la violación de derechos humanos nos coloca en el
papel de víctimas, inmediatamente, nos colocamos contra el Estado
mismo, por consiguiente, la imparcialidad, el carácter mediador,
pacifismo, son sofismas del derecho burgués, que orilla a las víctimas
abandonar su caso y dar paso a la impunidad.
Mediatizando de ese modo la lucha de hombres y mujeres, de
organismos no gubernamentales para el respeto y cumplimiento de
los mismos. Más infamante aún es cuando la pobreza y la miseria,
arroja a las víctimas al silencio y la pasividad.
En ese sentido, surge la Red Nacional en Defensa de los Derechos
Humanos (RENDDH) el 10 de diciembre de 2013, de la que somos
parte. Como un esfuerzo más por exigir y defender los derechos
humanos, pero sobre todo, bajo la alternativa viable en la que se
suprima la explotación y opresión del pueblo trabajador, alternativa
política que para nosotros es el Socialismo.
Bajo aquel panorama surgimos y nos hemos conformado en el Comité
Popular en Defensa de los Derechos Humanos ante la necesidad de
hacer frente a las agresiones y abusos del Estado, estamos
integrados por campesinos, obreros, estudiantes, amas de casa, cuya
finalidad es contribuir en la defensa de los Derechos Humanos del
pueblo.
Hemos concluido que, la defensa de nuestros derechos humanos y
constitucionales, solo pueden ser llevados a cabo con plena garantía
desde el momento en que el pueblo por sí mismo decida a través de
sus diferentes expresiones organizativas hacer cumplir y valer sus
derechos por la vía de los hechos.
4. He ahí donde nuestra participación cobra relevancia, ya que nuestro
comité es parte del propio pueblo inmerso en cada una de las
actividades cotidianas, tanto laborales como políticas, nuestro campo
de acción y quehacer político son los barrios populares, comunidades
y colonias campesinas, las escuelas, la casa, etc.
Reafirmamos que la violencia y violación de nuestros derechos
humanos se ha dado de manera sistemática desde el Estado, a través
de sus diferentes cuerpos castrenses e instituciones políticas y
sociales.
Por ello convocamos a los distintos sectores populares, intelectuales y
personalidades progresistas, a sumarse a esta iniciativa y frenar las
violaciones a las garantías constitucionales y pactos y tratados
internacionales firmados y ratificados por el gobierno de México en
materia de Derechos Humanos.
Damos a conocer nuestra dirección electrónica para cualquier
información o asunto particular:rednacional.ddh@gmail.com
¡Alto a la criminalización de la pobreza, protesta y lucha popular!
¡Libertad a todos los presos políticos y de conciencia del país!
Atentamente:
Comité Popular en Defensa de los Derechos Humanos
¡Unidos y Organizados a Ejercer y Defender los Derechos Humanos!
Red Nacional en Defensa de los Derechos Humanos
RENDDH•