5. Los administradores tiene la responsabilidad de
crear condiciones favorables al desempeño y la
motivación de cada uno de sus subordinados.
Los administradores motivan a sus
subordinados es decir, que realizan cosas con
las que esperan satisfacer esos impulsos y
deseos e inducir a los subordinados a actuar de
determinada manera.
Los administradores crean y mantienen las
condiciones adecuadas para que los individuos
trabajen en conjunto en favor del cumplimiento
de objetivos comunes.
6.
7. Los seres humanos promedios poseen un disgusto
inherente por el trabajo y lo evitaran tanto como
sea posible.
Dada esta característica Humana de disgusto por
el trabajo, la mayoría de las personas deben ser
obligadas, controladas, dirigidas y amenazadas con
castigos para que empeñen los esfuerzos
necesarios para el cumplimiento de los objetivos
organizacionales.
Los seres humanos promedio prefieren que se les
dirija, desean evitar toda responsabilidad, poseen
una ambición relativamente limitada y, por encima
de todo, ansían seguridad.
8. La inversión de esfuerzo físico y mental en el trabajo es tan natural
como el juego o el descanso.
El control externo y la amenaza de castigo no son los únicos medios
para producir esfuerzos dirigidos al cumplimiento de objetivos
organizacionales. Las personas ejercen autodirección y autocontrol
en favor de los objetivos con los que se comprometen.
El grado de compromiso con los objetivos esta en proporción con la
importancia de las recomendaciones asociadas con su cumplimiento.
En las condiciones adecuadas, los seres humanos promedio aprenden
no solo a aceptar responsabilidades, sino también a buscarlas.
La capacidad de ejercer un grado relativamente alto de imaginación,
ingenio y creatividad en la solución de problemas organizacionales se
halla amplia, no estrechamente, distribuida en la población.
En las condiciones de la vida industrial moderna, las
potencialidades intelectuales de los seres humanos promedio se
utilizan solo parcialmente.
9.
10. La teoría X es pesimista, estática y rígida. De
acuerdo con ella, el control es
fundamentalmente externo; es decir, el superior
lo impone al subordinado.
La teoría Y es optimista, dinámica y flexible, con
el acento puesto en la auto-dirección y en la
integración de las necesidades individuales a las
demandas organizacionales.
Estos conjuntos de supuestos afectaran de
distinta manera el modo en que los
administradores realizan sus funciones y
actividades administrativas.
11.
12. En primer lugar los supuestos de la teoría X y Y son solo
eso supuesto. No son prescripciones ni sugerencias de
estrategias administrativas. Antes bien deben ser
sometidos a la prueba de la realidad. Se trata, además,
de deducciones intuitivas que no se basan en
investigaciones.
En segundo término, las teorías X y Y no implican la
existencia de una administración “dura” y otra “suave”.
El estilo “duro” puede generar resistencia y
antagonismo. El estilo “suave” puede resultar en una
administración de “dejar de hacer” incongruente con la
teoría Y. El administrador eficaz reconoce la dignidad y
capacidades, así como limitaciones, de las personas, y
ajusta la conducta según lo demande la situación.
13. Varios grupos de administradores no han
encontrado evidencias solidas sobre la existencia
de esta teoría de Maslow de que las necesidades
humanas componen una jerarquía y descubrieron
que el nivel más alto, la intensidad de las
necesidades variaba de un individuo a otro ; en
algunos individuos predominaban las necesidades
sociales, mientras que en otros las necesidades más
intensas eran las de autorrealización y Douglas T.
H dicen que el movimiento ascendente de la
prominencia de las necesidades resultaba de
cambios profesionales ascendentes, no de la
satisfacción de necesidades de menor orden.