1. KENIA | 13 de Abril
Esperanza y
un futuro
Félix
Otro camino
Un primo de Félix le ofreció llevarlo a la uni-
versidad adventista, a unos treinta kilómetros de
F élix golpeó fuertemente con su hacha el allí.
tronco que tenía frente a él. Este chico —Es una institución bastante grande —dijo su
quinceañero sabía que cortar árboles para hacer primo—. Allí seguro tienen trabajo para ti.
leña era ilegal, pero estaba desesperado. Ha- Félix accedió. Él no sabía nada sobre los ad-
biendo doce niños en la casa de sus padres, le ventistas; pero, si podía ganar dinero para estu-
tocaba ganarse por sí solo el dinero para poder diar, sería magnífico.
pagar sus estudios. Nuevamente tomó el hacha y Félix y su primo llegaron a la entrada de la
golpeó fuertemente el tronco del árbol. universidad.
Entonces, escuchó algo. De repente, pudo ver —Aquí vas a estar bien —le dijo su primo,
MISIÓN ADVENTISTA - DIVISIÓN AFRICANA CENTRO -- ORIENTAL
a varios hombres abriéndose paso entre la ma- mientras se despedía de él dándole la mano y
leza que lo rodeaba. Sintió como si sus pies unas palmaditas en la espalda; luego se dio me-
se enterraran en el suelo y su corazón se saliera dia vuelta, y dejó a Félix solo y expectante.
del pecho. ¡Me agarraron!, pensó. Sin embar- A medida que caminaba por las instalaciones
go, se dio cuenta de que los extraños no eran de la universidad, Félix comenzó a escuchar un
del Gobierno, pero su presencia igualmente hermoso canto que lo atrajo. Siguió las voces y
era problemática. Sus hombros se encogieron. encontró a un grupo reunido. Se detuvo a escu-
—Si nos das la mitad de tu leña, no te char, y la paz que emanaba del lugar lo sobre-
haremos nada —dijo uno de los hombres. cogió. Algunos jóvenes estudiantes notaron su
—Si me la quitan, no voy a tener suficiente presencia y se acercaron para invitarlo a entrar a
dinero para pagar mi escuela —dijo Félix mien- la reunión. Félix los siguió, sorprendido por lo
tras caminaba lentamente hacia atrás. amigables que eran. Los jóvenes le dijeron que
Los hombres se fueron acercando con rostros la reunión formaba parte de un campestre que
cada vez más amenazantes. Félix tomó fuer- se estaba realizando en la universidad y que con-
temente su hacha y salió disparado hacia su tinuaría durante toda la semana.
casa. Los hombres no lo siguieron, pero perdió Cuando terminó la reunión, sus nuevos ami-
la leña y, con ella, su esperanza de regresar a la gos le pidieron que les hablara de él. Ellos com-
7 escuela.
Material adaptado y facilitado por RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © www.escuela-sabatica.com

2. partieron su fe con él, y le preguntaron en qué Pero los ahorros de Félix crecieron más lento
kenya
creía. Cuando se enteraron de que a él le gus- de lo que él esperaba, y muchas veces se sintió
taba cantar, lo invitaron a unirse al coro y a desanimado. Sin embargo, él no se dio por
tomar estudios bíblicos. Para Félix, todo esto vencido, y se mantuvo animado asistiendo al
era como un sueño. Apenas había estado en coro, los estudios bíblicos y los Conquistadores.
ese lugar dos horas, y ya había hecho amigos Unos meses después, Félix decidió bautizarse
y encontrado algo que le gustaba. Tenía la en la Iglesia Adventista.
esperanza de conseguir un trabajo y comenzar Muy impaciente por comenzar sus estudios,
a asistir a la escuela con estos chicos. ¡Estaba Félix compró libros de texto usados para estu-
muy emocionado! diar, mientras tanto, por su cuenta. Estudió bio-
logía, agricultura y economía, esperando poder
Una nueva vida, nueva esperanza aprender lo suficiente para presentar los exá-
Félix consiguió trabajo limpiando los jar- menes nacionales, graduarse en la secundaria y
dines de la facultad, lavando automóviles y comenzar la universidad. Durante muchas no-
haciendo cualquier otra cosa en la que pudie- ches estuvo inclinado leyendo, alumbrado por
ran pagarle. Finalmente, alquiló una habi- un candelabro y respondiendo exámenes que se
tación fuera de la universidad. La habitación hacía él mismo. Luego iba con sus amigos para
era pequeña; no tenía electricidad ni cale- que le corrigieran los exámenes.
facción y, cuando llovía, se filtraba el agua Finalmente, Félix presentó los exámenes na-
por el techo. Pero era barata y podría ahorrar cionales y los aprobó. Estaba muy emocionado
algo de dinero para sus estudios. y decidido continuar su educación superior, pe-
ro no tenía dinero, así que se alistó en el programa
de trabajo y estudio de la universidad, y trabajó
durante un año. Así, pudo ganar lo suficiente
Cápsula informativa para estudiar un semestre. De esa manera, co-
menzó su largo viaje hacia la realización de su
 En Kenia viven más de setecientos mil ad- sueño. Trabajar un año, estudiar un semestre;
ventistas. Una de cada 71 personas es ad- trabajar un año, estudiar un semestre.
ventista, pero millones aún no saben que Actualmente, Félix sigue estudiando y es vi-
Jesús viene pronto. cepresidente del cuerpo de alumnos de la
Los pioneros de Misión Global están dando universidad. También es diácono y director de

inicio a nuevas congregaciones en regio- Conquistadores en la iglesia del campus. “La
nes en las que viven pocos adventistas. En Universidad de África Oriental en Baratón me
otras regiones, también se han establecido acogió y me ayudó a hacer realidad mi objetivo.
escuelas y hospitales que ayudan a com-
partir el evangelio con muchos otros. Estando aquí, he hecho realidad mi sueño de
educarme, y he entendido que Dios tiene muchos
 Parte de la ofrenda del decimotercer sábado otros planes para mí. Ahora tengo una nueva
ayudará a expandir el alcance de la Univer-
fe, nuevos amigos y una nueva esperanza”.
sidad Adventista de África Oriental, ayu-
Parte de la ofrenda del decimotercer sábado
www.AdventistMission.org
dando a proveer dormitorios para alumnos
casados y el cuerpo docente, y también un ayudará a proveer dormitorios para los alum-
edificio de aulas para la escuela primaria de nos y el cuerpo docente. Muchas gracias por su
la universidad. contribución para satisfacer las necesidades de
otros jóvenes como Félix en África oriental. 
Material adaptado y facilitado por RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © www.escuela-sabatica.com 8