"El Buen Vivir màs allá del desarrollo", por Eduardo Gudynas y Alberto Acosta. Revista Qué hacer, publicada por DESCO, No 181, Lima, enero / marzo 2011.

1. INTERNACIONAL
Ante la sede de la Asamblea Constituyente de Ecuador, en la pequeña localidad de Montecristi,
A. Acosta (izquierda, en ese momento presidente de la Asamblea) y E. Gudynas (derecha), 2008. (Foto:
CLAES)
El buen vivir mas allá
del desarrollo
Eduardo Gudynas y albErto acosta*
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2. La idea del “buen vivir” se está difundiendo en toda América Latina. Es un concepto
en construcción que aspira ir más allá del desarrollo convencional, y se basa en
una sociedad donde conviven los seres humanos entre sí y con la naturaleza. Se
nutre desde ámbitos muy diversos, desde la reflexión intelectual a las prácticas
ciudadanas, desde las tradiciones indígenas a la academia alternativa.
E
n buena medida, el buen vivir es esta perspectiva, el bienestar humano se
una reacción y también una mirada reduce al consumo material y la natura-
al futuro. En el primer caso, es una leza debe ser intensamente aprovechada.
respuesta a las limitaciones y contradic- Existen diversas discusiones sobre
ciones de las ideas y aplicaciones contem- cómo llevar adelante esa estrategia con-
poráneas del desarrollo. En el segundo, vencional de desarrollo donde, por ejem-
aglutina diversas miradas que desean plo, unos relevan el papel del mercado y
dejar atrás ese desarrollo convencional otros apelan al Estado. Sin dejar de reco-
y están ensayando nuevas perspectivas nocer la importancia de esas diferencias,
enmarcadas en otro tipo de valoraciones también es cierto que todas estas posturas
de la sociedad y el ambiente. comparten ese núcleo básico de ideas.
De esta manera, el buen vivir ha logra- Incluso bajo los gobiernos progresistas de
do una gran visibilidad en algunos países América Latina afloran esos componentes,
andinos, y desde estos se está difundiendo cuyo mejor ejemplo sea seguramente su
a todo el continente. En el Ecuador se le promoción de los sectores extractivistas.
expresa como buen vivir o sumak kawsay Por lo tanto, las ideas básicas del desa-
en kichwa, mientras que en Bolivia se rrollo convencional están profundamente
le invoca como vivir bien, suma qamaña arraigadas en la cultura latinoamericana,
en aimara, ñandareko en guaraní y sumak y en muchos casos los debates lidian sobre
kawsay en quechua. diferentes instrumentalizaciones.
Estas posiciones han estado sujetas a
La crítica aL desarroLLo diversas críticas desde hace décadas. Sus
bases conceptuales han motivado ácidos
Hace décadas se concibe al desarrollo
cuestionamientos, como por ejemplo
como crecimiento económico continuado,
por su reduccionismo económico, o por
mediado especialmente por exportaciones
suponer que el crecimiento puede ser
e inversión, lo que generaría efectos que
perpetuo. Las aplicaciones prácticas
beneficiarían al resto de la sociedad. Desde
en muchos casos no mejoran el bienes-
tar sino que desembocan en impactos
* E. Gudynas, ecólogo social uruguayo, investiga- sociales y ambientales. Iniciativas de
dor en el Centro Latino Americano de Ecología desarrollo muy publicitadas derivaban,
Social (CLAES).
A. Acosta, economista ecuatoriano, profesor e por ejemplo, en desplazamientos desde
investigador de FLACSO. Ex ministro de Energía las zonas rurales o pérdida de circuitos
y Minas y ex presidente de la Asamblea Consti-
tuyente del Ecuador. económicos locales.
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3. No pretendemos decir que fracasaron es necesaria una discusión conceptual
todos los emprendimientos que han invo- mucho más profunda que vaya más allá
cado metas del desarrollo. Pero sí desea- de los cambios instrumentales sobre el
mos señalar que esto sucedió en muchos desarrollo. En el mismo sentido, redes y
casos, y que más allá de algunos éxitos movimientos ciudadanos no solo reaccio-
puntuales son evidentes las limitaciones nan contra los fracasos concretos de pro-
en su base conceptual. Más de medio siglo yectos de desarrollo, sino que cuestionan
de planes tradicionales de desarrollo que sus bases conceptuales. Allí se encuentran
supuestamente resolverían los problemas muchas de las semillas del buen vivir.
del subdesarrollo, han tenido resultados En paralelo, en diversos países sud-
paupérrimos. En realidad, lo que se ob- americanos se han registrado procesos
serva en el mundo es un “mal desarrollo” políticos de reacción y rechazo al reduc-
generalizado, con diferentes expresiones cionismo de mercado, que en varios casos
de “mal vivir”, tanto en el sur como en desembocaron en gobiernos progresistas
el norte. El sociólogo español José María o de la nueva izquierda. En la segunda
Tortosa va más allá cuando afirma que mitad de la década del 2000, ocho paí-
“el funcionamiento del sistema mundial ses de América del Sur contaban con
contemporáneo es ‘maldesarrollador’ gobiernos progresistas que, más allá de
en su propia lógica, ya que está basado su amplia diversidad, han generado un
en una idea de ‘eficiencia’ que trata de contexto más propicio para profundizar
maximizar los resultados, reducir costes la crítica al desarrollo y, con ello, la idea
y conseguir la acumulación incesante de del buen vivir.
capital”.1 Por lo tanto, la búsqueda de una Estas circunstancias también permitie-
buena vida debe basarse en un proceso ron que algunos actores, especialmente
muy distinto al de este desarrollo tantas pueblos indígenas, lograran visibilizar
veces promocionado y anhelado. mejor su rechazo a las ideas clásicas
Es cierto que se han realizado muchas de desarrollo y rescataran sus posturas
exploraciones para corregir o transformar tradicionales enfocadas en el bienestar y
el desarrollo contemporáneo, como por la calidad de vida. Ese ha sido un aporte
ejemplo las conocidas como desarrollo fundamental para el buen vivir.
humano, desarrollo endógeno, o los Estos y otros factores fueron claves
distintos tipos de sustentabilidad.2 Sus para permitir la eclosión del debate sobre
aportes refuerzan la idea de que el estilo
1 Véase J. M. Tortosa, “Maldesarrollo inestable: un
de vida de los países industrializados, con diagnóstico”, Actuel Marx / Intervenciones, 7: 121-
un enorme consumo, es incompatible con 138. Santiago de Chile: Universidad Bolivariana
/ LOM Ediciones, 2008.
las capacidades ecológicas de absorción 2 Una excelente revisión de estas discusiones se
y resiliencia de la Tierra. La apropiación encuentra en K. Unceta Satrústegui, “Desarrollo,
subdesarrollo, maldesarrollo y postdesarrollo.
de los recursos naturales como una con- Una mirada transdisciplinar sobre el debate y
dición para el crecimiento económico ya sus implicaciones”, Carta Latinoamericana, 7: 1-34.
CLAES (http://www.cartalatinoamericana.
no puede ser la meta última. Por lo tanto, com), 2009.
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4. El buen vivir exige la armonía entre sociedad y naturaleza. (Caretas)
el buen vivir. Bajo ese rótulo se agruparon es un campo de ideas en construcción.
viejos y nuevos cuestionamientos sobre Seguidamente examinaremos algunas de
el desarrollo clásico, como la creencia en sus manifestaciones.
un proceso lineal universal o la necesidad
inevitable de destruir la naturaleza. Se eL buen vivir en Las nuevas
incorporaron saberes tradicionales que constituciones andinas
estaban subordinados, se cuestionaron
los transplantes culturales, y se abrie- Posiblemente la mayor visibilidad del
ron las puertas a nuevas ideas sobre las buen vivir se logró con su formalización
relaciones entre sociedad y naturaleza, en las nuevas constituciones de Bolivia
o sobre la pobreza y el bienestar. Todos y el Ecuador.
estos aportes están en marcha en estos En el caso del Ecuador, el buen vivir
precisos momentos; por ello, el buen vivir forma parte de una larga búsqueda de
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5. alternativas de vida fraguadas al calor algunas tradiciones occidentales que han
de las luchas populares, particularmente cuestionado distintos presupuestos de la
indígenas, desde mucho antes que Rafael modernidad dominante. Entre ellas se en-
Correa accediera a la presidencia. Sus cuentran posturas éticas alternativas que
contenidos apuntan a transformaciones reconocen los derechos de la naturaleza,
de fondo en la sociedad, la economía, la los aportes del feminismo como reacción
política y la relación con la naturaleza. Se a la dominación de base patriarcal, y las
articularon con agendas de otros movi- nuevas conceptualizaciones en áreas
mientos, en un heterogéneo conglomera- como la justicia y el bienestar humano.
do con fuerzas sobre todo urbanas, hasta Este tipo de aportes permite ir cons-
cristalizarse en el proceso constituyente truyendo y moldeando la idea del buen
de 2007 y 2008. vivir desde varios frentes, generando así
En el caso de Bolivia, el proceso de distintas definiciones. Un buen ejemplo
debate es quizá más reciente y sin duda para ilustrar este punto es la conceptua-
más tensionado. En este país, la idea de lización ofrecida por René Ramírez, mi-
la “vida buena” o “vivir bien” es una nistro de Planificación del Ecuador, en la
expresión casi de tono reivindicatorio de que el buen vivir es, entre otras cosas, “la
algunos líderes indígenas, militantes e consecución del florecimiento de todos y
intelectuales. Por esta razón, el concepto todas en paz y armonía con la naturaleza
siempre apareció asociado a los vocablos y la prolongación indefinida de las cul-
de lengua aimara suma qamaña, cuya mejor turas humanas”, incorporando aspectos
traducción posiblemente esté referida al como las libertades, las oportunidades, las
‘buen convivir’. Sin embargo, esta ex- capacidades y las potencialidades reales
presión es muy reciente y para algunos de los individuos.
fue creada por intelectuales aimaras, ya En la nueva Constitución del Ecuador
que no es parte del “lenguaje cotidiano (2008), esta idea es presentada como los
o las representaciones locales” de esas “derechos del buen vivir”, dentro de los
comunidades.3 cuales se incluye una amplia variedad
De todos modos, esto representa uno de derechos (como a la alimentación, a
de los aspectos positivos de la construc- un ambiente sano, al agua, a la comuni-
ción del concepto por varias razones. Por cación, a la educación, a la vivienda, a
un lado, estos ejemplos muestran que está la salud, a la energía, etc.). Por ejemplo,
en marcha un diálogo con las tradiciones el artículo 14 “reconoce el derecho de la
culturales indígenas, y que ellas pueden población a vivir en un ambiente sano
crear o re-crear nuevas conceptualizacio- y ecológicamente equilibrado, que ga-
nes adaptadas a las circunstancias actua- rantice la sostenibilidad y el buen vivir,
les. El buen vivir no es un simple regreso sumak kawsay”.
a las ideas de un pasado lejano, sino la
construcción de otro futuro. Por otro 3 Como se alerta en A. Uzeda V., “Suma qamaña.
Visiones indígenas y desarrollo”, Traspatios, 1:
lado, en ese diálogo también intervienen 33-51. Cochabamba: CISO, UMSS, 2009.
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6. Esta Constitución rompe con la con- Así, en el caso ecuatoriano queda claro
cepción clásica de priorizar unos derechos que la conquista del buen vivir es una
sobre otros al reconocerlos como interde- expresión de un conjunto de derechos,
pendientes y de igual jerarquía (artículo y que para asegurarlos es indispensable
11, numeral 6). Por lo tanto, los derechos encarar cambios sustanciales en las estra-
al buen vivir ocupan un mismo plano que tegias de desarrollo. Es, a no dudarlo, una
otros conjuntos de derechos, entre los cuales propuesta de vanguardia que tensiona el
están los derechos de personas y grupos de concepto de desarrollo con una propuesta
atención prioritaria, comunidades, pueblos a ser construida, el buen vivir.
y nacionalidades, participación, libertad, de Posturas como estas generaron tensio-
la naturaleza, y protección; y a su vez, este nes y críticas en el proceso constituyente
conjunto tiene un correlato en una sección ecuatoriano: para algunos, el buen vivir
dedicada a las responsabilidades. era una invocación a una vida despreo-
Seguidamente se indican dos campos cupada y pasiva, mientras que otros lo
principales de acción, también en un calificaban como un retorno a las cavernas;
mismo nivel de jerarquía: por un lado el aquellos acostumbrados a las verdades
“régimen del buen vivir”, y por el otro, el indiscutibles clamaban por concreciones
“régimen de desarrollo”. Este último es definitivas, mientras que otros, incluso al-
definido como “el conjunto organizado, gunos de los que apoyaron este principio,
sostenible y dinámico de los sistemas al parecer no tenían clara la trascendencia
económicos, políticos, socio-culturales y de esta decisión. Es que el buen vivir
ambientales, que garantizan la realización no puede ser simplemente asociado al
del buen vivir, del sumak kawsay. (…) “bienestar occidental”, ni tampoco niega
El buen vivir requerirá que las personas, la posibilidad de propiciar la moderniza-
comunidades, pueblos y nacionalidades ción de la sociedad, particularmente con
gocen efectivamente de sus derechos, y la incorporación en la vida de muchos y
ejerzan responsabilidades en el marco valiosos avances tecnológicos de la hu-
de la interculturalidad, del respeto a sus manidad, sino que apunta a otras bases
diversidades, y de la convivencia armó- conceptuales.
nica con la naturaleza” (artículo 275). Los En el caso de la nueva Constitución
derechos están íntimamente vinculados a de Bolivia (2009), las referencias son al
las estrategias de desarrollo, y estas deben vivir bien y aparecen en la sección sobre
atender una planificación participativa en las bases fundamentales del Estado. Al
áreas como el trabajo y de las soberanías abordarse los principios, valores y fines
alimentaria, económica y energética. En del Estado (artículo 8), se presentan como
paralelo, el régimen del buen vivir inclu- “principios ético-morales de la sociedad
ye las cuestiones de inclusión y equidad plural: ama qhilla, ama llulla, ama suwa
(por ejemplo, educación, salud, vivienda, (no seas flojo, no seas mentiroso ni seas
cultura, etc.) y biodiversidad y recursos ladrón), suma qamaña (vivir bien),
naturales. ñandereko (vida armoniosa), teko kavi
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7. La erradicación de la pobreza es una de las metas centrales del buen vivir. Sin embargo, la pobreza no
es concebida únicamente en una dimensión monetaria y material, y por lo tanto requiere ser atendida
en todas sus dimensiones. La Paz, Bolivia, 2010 (Foto: CLAES)
(vida buena), ivi maraei (tierra sin mal) y económica del Estado, donde también se
qhapaj ñan (camino o vida noble)”. Aquí apuntan a algunos cambios en el camino
se observa una mayor amplitud cultural, del desarrollo. En efecto, se sostiene que
en la medida en que se postulan concep- el “modelo económico boliviano es plural
ciones del vivir bien de varias tradiciones y está orientado a mejorar la calidad de
indígenas además de la aimara, como la vida y el vivir bien” (artículo 306). Se pos-
quechua y la guaraní. tula un ordenamiento económico plural,
Estos principios aparecen en para- vinculado a principios como la solidari-
lelo y con la misma jerarquía que otros dad y la reciprocidad, donde el Estado se
principios clásicos, como los de unidad, compromete a la redistribución equitativa
igualdad, inclusión, dignidad, libertad, de los excedentes mediante políticas socia-
solidaridad, reciprocidad, respeto, equi- les de diverso tipo. Es más: se insiste en que
dad social y de género en la participa- para lograr el “vivir bien en sus múltiples
ción, bienestar común, responsabilidad, dimensiones”, la organización económica
justicia social, etc. (también incluidos en debe atender propósitos como la genera-
el artículo 8). ción del producto social, la redistribución
A su vez, todos ellos están directa- justa de la riqueza, la industrialización de
mente relacionados con la organización los recursos naturales, etc. (artículo 313).
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8. Este apretado repaso permite señalar En el caso ecuatoriano, en cambio, el
tanto similitudes como diferencias. En sumak kawsay es presentado a dos niveles:
ambos países, la idea del buen vivir está como el marco para un conjunto sustan-
directamente ligada a saberes y tradicio- tivo de derechos, y como expresión de
nes indígenas, visibilizando un acervo buena parte de la organización y ejecución
que ha sido ocultado y sojuzgado por de esos derechos no solo en el Estado sino
largo tiempo. También en ambos casos se en toda la sociedad. Es una formalización
apunta a otro desarrollo, con indicaciones de mayor amplitud pero al mismo tiempo
de un cambio profundo en las economías. más precisa, ya que el sumak kawsay es
El mercado por sí solo no es la solución, a la vez un conjunto de derechos y un
tampoco lo es el Estado. El subordinar el contrapeso que impone un nuevo régimen
Estado al mercado conduce a subordinar de desarrollo. Por el contrario, en el texto
la sociedad a las relaciones mercantiles constitucional boliviano ese vínculo entre
y a la egolatría individualista. Lejos de suma qamaña y los derechos no es explícito;
una economía sobredeterminada por las por ejemplo, no hay una referencia a este
relaciones mercantiles, el buen vivir se concepto en la sección de los derechos
orienta a vinculaciones dinámicas y cons- fundamentales. A su vez, en el texto
tructivas entre el mercado, la sociedad y boliviano, el suma qamaña es claramente
el Estado. Se busca construir una sociedad presentado como una de las finalidades
con diversidad de tipos de mercados, para del Estado. En cambio, en la Constitución
no tener una “sociedad de mercado”, es ecuatoriana el buen vivir aparece en un
decir, mercantilizada. No se quiere una alto nivel de la jerarquía, y desde este se
economía controlada por monopolistas y derivan muchos derechos.
especuladores. Pero tampoco se reduce La dimensión plurinacional del buen
todo al Estado ni se promueve una visión vivir es más fuerte en el caso boliviano,
estatista a ultranza de la economía. llegándose a reconocer 36 lenguas indíge-
Hay diferencias importantes entre las nas además del castellano; un punto que
propuestas boliviana y ecuatoriana. En no se logró en el Ecuador. La dimensión
el caso de Bolivia, el suma qamaña y los ambiental es, por el contrario, más intensa
demás conceptos asociados son princi- en el Ecuador, donde se reconocieron por
pios ético-morales y no aparecen como primera vez los derechos de la naturaleza
derechos. Están enfocados en delimitar (artículos 71 a 74). Esto consolida la dimen-
los marcos para una sociedad que se sión ambiental del buen vivir ecuatoriano,
define como plurinacional. Incluso se mientras que el texto boliviano es más
puede argumentar que estos principios ambiguo si consideramos que algunos
ético-morales serían una de las funda- artículos defienden el mandato del Estado
mentaciones de esa plurinacionalidad, y de industrializar los recursos naturales.
el buen vivir es, entonces, una condición Los derechos de la naturaleza implican
que puede expresarse de diferente manera reconocerle valores propios, independien-
en cada una de ellas. tes del posible uso o utilidad humana.
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9. La naturaleza deja de ser un objeto para de las organizaciones indígenas, en los
convertirse en sujeto de derechos. No es espacios académicos y en las acciones de
un cambio menor: se trata de una ruptura movimientos sociales. Se están sumando
con la ética convencional, pasándose a una iniciativas para avanzar en estas con-
postura biocéntrica donde se debe asegu- cepciones, diseñar indicadores de buen
rar la sobrevida de especies y ecosistemas. vivir y discutir las relaciones con otras
De todos modos, esto no implica una aproximaciones cercanas, como las de
naturaleza intocada, sino que es posible la economía social y solidaria, aquellas
seguir aprovechando los recursos natura- enfocadas en el bienestar y la felicidad
les para satisfacer las necesidades vitales o la justicia.
humanas y asegurando la preservación Simultáneamente aparecen los pri-
de la biodiversidad. meros intentos de aplicación a escala
Como la nueva Constitución boliviana nacional. Un caso destacado es el “Plan
no reconoce los derechos de la naturale- Nacional para el Buen Vivir 2009-2013”
za, se generan tensiones, en particular del Ecuador, elaborado por la Secretaría
frente a algunos artículos que postulan Nacional de Planificación y Desarrollo
que uno de los mandatos del Estado es la (SENPLADES). Su propio título establece
industrialización de los recursos naturales que se aparta de los clásicos programas
(artículo 9, numeral 6). Estos artículos se de “desarrollo” nacional. El Plan parte
acercan a las ideas clásicas del progreso de reconocer que el buen vivir es una
que ven la naturaleza como una canasta reacción frente a los estilos de desarrollo
de recursos a ser aprovechados. neoliberales anteriores, y sostiene que se
Finalmente, deseamos señalar la construye continuamente desde reivindi-
importancia de la dimensión territorial caciones que buscan una visión que supere
tanto en sus aspectos biofísicos como en los estrechos márgenes cuantitativos del
las conceptualizaciones culturales que los economicismo y permita la aplicación
delimitan y describen. Esto aparece de de un nuevo paradigma cuyo fin no sea
distinta manera en las dos constituciones, los procesos de acumulación material,
pero con más intensidad en el caso boli- mecanicista e interminable de bienes, sino
que promueva una estrategia económica
viano en temas como el reconocimiento de
incluyente, sostenible y democrática.
los espacios comunitarios, los intentos de
Suma a esos pilares el propósito de salir
descentralización y autonomía, el manejo
del antropocentrismo occidental para
regional de recursos naturales, etc.
generar otras relaciones con la naturaleza,
y la búsqueda de igualdad, justicia social
difusión y prácticas deL buen vivir
y valorización de otros saberes.
El debate sobre el buen vivir en Bolivia y En el caso boliviano, el Plan Nacional
el Ecuador se ha difundido en América de Desarrollo “Bolivia Digna, Soberana,
Latina. Ha generado una renovación Productiva y Democrática para Vivir Bien”
desde las miradas alternativas que parten presenta a cada uno de los componentes
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10. En busca del futuro perdido. “El buen vivir no es un simple regreso a las ideas de un pasado lejano, sino
la construcción de otro futuro.”
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11. Suma qamaña o vivir bien: evocando el pasado. Algunas sociedades como la boliviana, asocian el buen
vivir con la revalorización de tradiciones culturales indígenas. (Foto: seminariouno.org)
de su título como pilares que llevarían al Bolivia, de todas maneras debe subrayarse
vivir bien. Se plantean objetivos valiosos la relevancia de iniciar la discusión de
como el ataque a la pobreza, pero se un futuro posextractivista, que sin duda
mantiene al extractivismo como motor sería un ingrediente indispensable del
de la economía, e incluso se postula buen vivir.
convertir a la naturaleza en proveedora Nuestro propósito en este artículo
de excedentes. no es analizar en detalle la viabilidad
Mientras que el camino boliviano o rigurosidad en las vías de transición
persiste en el extractivismo, el plan hacia las alternativas de desarrollo, sino
ecuatoriano postula remontarlo. Aunque puntualizar que el buen vivir implica una
en la práctica las medidas concretas en ruptura sustancial con la apropiación de
el Ecuador son muy similares a las de la naturaleza para alimentar un desarrollo
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12. entendido como crecimiento económico conquistar la igualdad, junto a otros nue-
y un progreso concebido como evolución vos, como la pérdida de biodiversidad o
lineal. Por lo tanto, el buen vivir no es el cambio climático global.
solo una cuestión de políticas económicas Bajo el concepto de buen vivir hay
redistributivas o de nacionalizar tal o cual aspectos compartidos, aunque también
sector estratégico, sino que apunta a un divergencias en algunos énfasis. Pero
debate más profundo sobre las raíces esto es perfectamente entendible, pues el
conceptuales del desarrollo. Al menos concepto responde a diferentes contextos
conceptualmente, el buen vivir supera la culturales, históricos y ambientales. Por lo
búsqueda de desarrollos “alternativos” tanto, no es una propuesta esencialista; no
e intenta ser una “alternativa al desarro- se lo puede expresar en una receta como
llo”; en síntesis, una opción radicalmente ocurre con los planes de agencias y bancos
distinta a todas las ideas de desarrollo internacionales. A su vez, hay muchas
contemporáneo. coincidencias en los aspectos negativos
Como esta construcción pasa a jugarse a solucionar; hay claridad en el mal vivir
en el plano de ideologías profundamente que se desea erradicar.
arraigadas, surgirán muchas tensiones y También es cierto que el buen vivir
contradicciones. Eso explica las dificulta- tiene su cuota de romanticismo, pero a la
des, avances y retrocesos en las prácticas, vez ofrece una vigorosa dosis de realismo.
donde en muchos casos se vuelve a caer, Recuérdese que los estilos de vida que
por ejemplo, en las conocidas estrategias propugnan la relación armónica entre los
extractivistas asentadas en el petróleo y seres humanos y de estos con la natura-
los minerales. leza, con todas las limitaciones que se les
pueda encontrar, fueron la base para que
las culturas indígenas pudieran resistir
eL regreso a un concepto
más de quinientos años de colonización
en construcción
y explotación.
En resumen, el buen vivir, como se anota El buen vivir ofrece una orientación
a lo largo de estas líneas, es un concepto para construir colectivamente estilos
en construcción. Se trata de una idea que distintos y alternos al progreso material.
emerge desde el mundo andino e incluso En ese sendero es clave la ruptura con la
amazónico, pero que recoge los valiosos ideología del desarrollo como progreso.
aportes elaborados en otros rincones El buen vivir apuntar a “desacoplar” la
del mundo. De esta manera, ofrece un calidad de vida del crecimiento económico
anclaje histórico en el mundo indígena, y de la destrucción del ambiente. Por estas
pero también en principios que han sido razones, es un concepto que se cimienta en
defendidos por otras corrientes occiden- un entramado de relacionalidades, tanto
tales que permanecieron subordinadas entre humanos como con el ambiente, en vez
durante mucho tiempo. Responde a viejos de una dualidad que separa a la sociedad
problemas como remontar la pobreza o de su entorno y a las personas entre sí. n
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