La energía eólica se obtiene del movimiento de las masas de aire que se desplazan de áreas de alta a baja presión atmosférica. Los vientos se generan por el calentamiento desigual de la superficie terrestre por la radiación solar, convirtiendo entre el 1 y 2% de la energía del sol en viento. Los continentes absorben menos luz solar que los océanos, por lo que el aire sobre la tierra se expande y eleva, mientras que el aire más frío y pesado sobre los mares se mueve