Este documento describe la situación de pobreza rural en los Andes peruanos. Más de la mitad de la población peruana vive en condiciones de pobreza, y alrededor de 3 millones de personas pobres viven en zonas rurales de los Andes. La pobreza es más severa en las provincias de la sierra peruana, donde la mayoría de la población carece de servicios básicos como agua potable, electricidad y acceso a la educación. La reforma agraria de 1969 y la violencia política de grupos como Send
1. IV. Los olvidados
de los andes
P ocos ámbitos han sido más golpeados por la política
económica neoliberal que los del mundo agrario. Agre
siones, por lo demás, reveladoras de un profundo
desconocimiento de las objetivas condiciones de vida en el
medio rural y la cultura campesina e indígena. Estas
condiciones están asociadas históricamente a la pobreza y
la exclusión. La pobreza, desnudo símbolo de la exclusión,
se observa crudamente en las provincias de la sierra
peruana, en especial en el ámbito rural andino. Tres hechos
recientes en la historia han contribuido a subrayar la
importancia social del problema: la reforma agraria,
iniciada en 1969 e interrumpida a partir de 1977; la
violencia desatada, en 1980, desde el centro-sur del eje
cordillerano por Sendero Luminoso; y el indetenible
crecimiento del cultivo de la coca en los valles de la ladera
oriental de los Andes. Eventos que modificaron hasta las
raíces, el primero, las condiciones de tenencia y disposición
de la tierra y los medios de producción en el medio rural; el
segundo, la movilización campesina; y el tercero, las
relaciones entre el Estado y la sociedad en su conjunto. La
reforma agraria, tal vez la más radical en América Latina en
este siglo, desterró al latifundio. Pero dejó sin terminar de
resolver la cuestión de la producción y sin asentar un nuevo
modo de regulación o nuevas clases directrices de la
acumulación agraria, clases con vocación hegemónica en el
campo. y aprovechando el vacío de poder dejado por la
extirpación
2. 100 Gonzalo Garda Núñez
del gamonalismo y la interrupción del proceso de reformas,
la violencia política barrió al Estado tradicional del campo
serrano durante 15 años e irrumpió en sus ciudades, provo-
cando una nueva forma de movilización campesina y, por
allí, el cambio de sus tradicionales relaciones con la
sociedad urbana. En la selva, el narcotráfico instaló la
cadena primaria del circuito de la cocaína y provocó, en
escala regional, el conflicto más grave entre el Estado, la
sociedad local y los grandes actores internacionales de este
problema. Aunque estos hechos están siendo revertidos a
costa de la parcelación y la represión, la pobreza campesina
sigue instalada e inamovible en el medio rural andino. En
adición a esta situación, la exclusión y marginalización se
ha acentuado como consecuencia de la crisis económico-
financiera de fines de la década pasada y del programa
desinflacionario cuyos costos sociales revierten sobre los
campesinos más empobrecidos. La pobreza de los
excluidos, entonces, tiene una enorme significación en la
configuración del presente y futuro de la sociedad peruana.
Pobreza y violencia de los excluidos rurales expresan dos de
los grandes conflictos del siglo xx. En esta sección, el SRA
se identifica entre las áreas de mayor pobreza en el Perú,
especialmente las de pobreza extrema o crítica y algunos de
sus trazos característicos.20
LOS POBRES DE LOS ANDES
Más de la mitad de la población peruana, 12 millones,
vive el mundo de la pobreza. De ellos, 4'700,000 están
censados en el universo de la pobreza extrema. Y cerca de
3'000,000 se localizan en el medio rural andino. Dos de
cada tres,
20 Dos fuentes de información son hoy fundamentales: los censos 1981-1993 y las
encuestas nacionales sobre medición de los niveles de vida realizadas en 1986 y
1994.
3. 101
Los olvidados de los andes
extremadamente pobres entre los pobres son moradores de
los pisos altos y alejados de los Andes, del sector rural
andino del complicado mosaico de la sociedad peruana
actual.
Los principales rasgos de la pobreza considerada extre-
ma son: la morada sin agua ni desagüe, con suelo de tierra
apisonada, muros de adobe, paredes de estera o quincha,
techo de paja, estera o madera. El morador trae el agua de
un río, un curso o una pileta pública, usa leña y/o kerosene
para cocinar. La mitad de los pobres han ido al primer año
de primaria pero 15% nunca ha estudiado. Los más pobres,
los de la sierra, carecen de infraestructura educativa. Son
quechua hablantes o aymaras. A escala nacional, los
estudios recientes comprueban que la pobreza es
marcadamente rural. Si bien no todos los pobres rurales se
dedican a la agricultura (49% del total y 69% entre los
extremos) la naturaleza agraria de la pobreza extrema no
deja duda: 80% de los pobres rurales y 85% de los pobres
extremos consagra su tiempo a los campos. Les dammés de
la terre de Frantz Fanon siguen condenados a la yunta de la
ladera andina. En 1985, el 54% de los campesinos eran
pobres. La situación se ha agravado en 1994, cuando llegan
al 68 %. El programa desinflacionario de 1990-1995 no es
ajeno al agravamiento de la condición general de vida de
los peruanos del campo. Vale recordar que después del
shock de 1990, 54% de toda la población se hundió por
debajo de la línea de pobreza.
El crecimiento de la pobreza ha hecho renacer el
interés por el tema de los excluidos más pobres.21
21 El interés se acrecienta por la convocatoria a una cumbre mundial sobre políticas
sociales prevista para realizarse en Dinamarca en marzo de 1995. Hay numerosos
antecedentes nacionales e internacionales de estudios dirigidos al tema de la pobreza,
los más recientes del PNUD en su programa regional para superación de la pobreza,
que reúne monografías nacionales y estudios comparados. Hay trabajos del Banco
Mundial (1982), por ejemplo, que pronostican que 630 millones de personas en todo
el mundo, estarán en situación de pobreza en el año 2000 y en América Latina la
4. 102 Gonzalo Garda Núñez
Cuadro NI! 4.1
EVOLUCiÓN DE LA POBREZA EN EL PERÚ (%)
1986 1991 1994
Nacional
Pobres 41.6 53.6 49.6
Extremos 18.4 21.5 20.2
No extremos 23.2 32.1 29.4
Lima Metropolitana
Pobres 27.4 48.9 37.6
Extremos 3.4 10.1 4.7
No Extremos 24.0 38.9 32.9
Fuente: Cúanto, Diciembre 1994, p.12
Cuadro NI! 4.2 INCIDENCIA DE LA
POBREZA SEGUN ÁREAS
GEOGRÁFICAS, 1994 (% respecto a la
población de cada área)
POBRES NO
POBRES
TOTAL EXREMO NO EXTREMO
49.6 20.2 29.4 50.4
Lima Metropolitana 37.6 4.7 32.9 62.4
Costa urbana 48.9 15.2 33.7 51.1
Costa rural 66.2 31.5 34.8 33.8
SRA
Sierra urbana 41.6 12.7 28.8 58.4
Sierra rural 68.2 45.6 22.7 31.8
Selva urbana 38.8 14.4 24.5 61.2
Selva rural 69.7 45.6 24.1 30.3
Fuente: Cúanto, diciembre
1994
cuarta parte de ellas. La CEPAL, por otra parte, señala que el porcentaje de la
población en América Latina que vivirá en pobreza en el año 2000 será entre el 26%
y el 30%, dependiendo de la tasa de crecimiento económico esperada en la región.
5. Los olvidados de los andes 103
Los trabajos del Banco Central de Reserva del Perú y
FONCODES confirman que la población peruana más
deprimida habita en las regiones rurales de la Sierra, en
particular en el llamado trapecio andino. Y que el
crecimiento económico de estos dos últimos no
necesariamente ha significado una reducción relativa de la
población excluida que se debate en la mayor pobreza. Este
problema de la pobreza en el sector rural andino entonces
tiene varias aristas: ¿Qué significa ser pobre rural? ¿Dónde
están preferentemente localizados? ¿Cuáles son las áreas
geográficas de mayor pobreza? ¿Son quot;bolsonesquot; o es un
continuo de pobreza? ¿Cuál es la magnitud y grado de la
pobreza y qué proporción de la población del país vive con
necesidades básicas insatisfechas ?22. ¿ Cuáles son las
características, organización y modos de producción de la
población que sobrevive en condiciones de gran pobreza?
IDENTIFICAR LA POBREZA RURAL ANDINA
La situación de los pobres en el Perú se mantiene en
la misma condición que hace diez años. Para identificar a
los
excluidos basta, por lo tanto, seguir el rastro a la pobreza. A
lo largo de la historia republicana, y particularmente en lo
que va de este siglo, el desarrollo económico del Perú no
ha resuelto el problema de la exclusión de los pobres
rurales. En tal sentido, la pobreza es el resultado del
centralizado modelo de apropiación, uso y distribución de
los recursos naturales, el producto, los ingresos y el poder.
Este sistema pone de lado de manera recurrente a grandes
grupos humanos que carecen de oportunidades suficientes
para acceder a una canasta de
22 En adelante, NBI.
6. 104 Gonzalo García Núñez
consumo de bienes y servicios, socialmente aceptada como
un estándar mínimo para la existencia. Sus manifestaciones
concretas son un grado pertinaz de sub-consumo relativo y
el desfavorecido posicionamiento en un sistema social abis-
malmente inequitativo y excluyente. Richard Webb
recuerda la quot;pobreza es silenciosa, ...el hambre es asesino,
(..) uno de cada cinco peruanos sufre de hambre crónicaquot;
(Cúanto, N° 68, diciembre de 1994). Entonces, la pobreza
es la situación objetiva en que las familias o los grupos
humanos no llegan a satisfacer regularmente sus
necesidades básicas. Absoluta, si ellos no se cubren los
requerimientos mínimos, y relativa, cuando el grado de
insatisfacción de las necesidades de este grupo se establece
en comparación a otros. Operativamente se mide a través de
indicadores vinculados a la satisfacción de necesidades
materiales como alimentación, salud, educación y vivienda;
la posibilidad de acceder a un empleo y el ingreso.
Involucra factores culturales y psicológicos, qué duda cabe,
las cicatrices de la pobreza a las que alude uno de los más
penetrantes escritos del psicoanalista, César Rodríguez
Rabanal. Para medir la pobreza habitualmente se usan dos
instrumentos: uno de ellos cuantifica los ingresos totales de
las familias, los compara al costo mínimo para satisfacer el
conjunto de las necesidades básicas y fija la barra de la
quot;línea de pobrezaquot;. Cuando los compara con el costo
mínimo de una dieta nutricional de subsistencia, determina
el rasero de la quot;línea de pobreza extremaquot;. El otro utiliza el
índice de NBI. Se trata de un indicador referido a una
necesidad específica, alguna dimensión o aspecto concreto
de la pobreza. Primero, por lo tanto, ¿cuáles son las
necesidades calificadas de básicas? ¿Cuándo son éstas
atendidas en niveles adecuados, esto es por encima de las
líneas de pobreza? El trazo de la línea de la pobreza,
reiteramos, es, habitualmente, el grado de satisfacción de las
necesidades de alimentación y de los requerimientos
nutricionales según atributos de las personas
7. 105
Los olvidados de los andes
(edad, sexo, peso, etc.). Estas necesidades son atendidas por
bienes que forman una canasta básica. El precio de esta
canasta representa el gasto mínimo de alimentación. El
ingreso para cubrir este presupuesto mínimo es el de la
quot;línea de pobreza extremaquot; o indigencia. Debajo de esta
línea están los indigentes en situación de extrema pobreza.
Aquellas familias cuyo ingreso personal disponible se
encuentra sobre la línea de indigencia y debajo de la línea
de pobreza son objetivamente pobres. Cuando los ingresos
son superiores a los de la quot;línea de pobrezaquot;, las familias no
son catalogadas como pobres.23
Aquí se presenta más adelante un arreglo de las provin-
cias del Perú jerarquizado por siete indicadores, resultado
de un difundido estudio sobre el mapa de la pobreza. Se
agruparon las provincias según el porcentaje obtenido por la
suma de cada arreglo y se incluyeron cuatro estratos
diferenciadores de la calidad de vida.24
Los indicadores seleccionados para diferenciar a los
pobres de los que no lo son fueron: el ingreso laboral
promedio anual, la tasa de analfabetismo, la tasa de
escolaridad, la disponibilidad de agua, desagüe, servicios...
Como es fácil comprobar, el núcleo duro de la pobreza en el
Perú son los olvidados de los andes, los millares de
peruanos moradores seculares de las provincias altoandinas.
¿Por qué
23 Veáse los trabajos de A. Sen, Rubén Katzmann, Thais, Carlos Franco, RLA-PNUD.
24 Como fuentes básicas de información se utilizaron el VIII Censo de Población y III
de Vivienda de 1981 y el Censo Nacional Agropecuario de 1972, la encuesta de
hogares rurales. Se consideraron cinco variables: Ingreso, Educación, Vivienda,
Salud y Ocupación, y siete indicadores: 1) Ingresos: Ingreso laboral promedio anual
cápita; 2) Educación: Tasa de analfabetismo y Tasa de escolaridad; 3) Vivienda,
porcentaje de viviendas que no cuentan con agua potable y Porcentaje de viviendas
que no cuentan con desagüe; 4) Salud: tasa de mortalidad infantil y 5) Ocupación:
Porcentaje de la Población Económicamente Activa en el sector agricultura, caza y
silvicultura. El test de correlación del grado de asociación no presentó relaciones
monótonas ni asociación líneal muy baja entre sí.
8. 106 Gonzalo García Núñez
está concentrada en el sector rural andino? ¿Cómo funciona
la economía de las comunidades y parcialidades, incapaces
de generar los ingresos suficientes para atender las
necesidades más apremiantes pero capaces de resistir la
mas cruel adversidad?
LA ECONOMIA RURAL ANDINA
Un examen somero de la economía rural andina pasa
por revisar los principales recursos productivos como son la
tierra, los hatos, los cultivos y la obra de mano.
LA TIERRA
El Perú tiene escasa disponibilidad de tierra agrícola. De los
128.5 millones de hectáreas del territorio nacional, 7.6
Cuadro N2 1
MATRIZ DE CORRELACIONES
2 3 4 5 6 7
1. 1.00000 -0.64734 -0.50216 -0.45929 -0.70621 -0.56989 -0.76152
2. -0.64734 1.00000 0.64963 0.54104 0.70862 0.74569 0.73369
0.65461 0.44676 0.65077
3. -0.50216 0.64963 1.00000 0.60531
4. -0.45929 0.54104 0.60531 1.00000 0.74600 0.46477 0.66516
5. -0.70621 0.70862 0.65421 0.74600 1.00000 0.62513 0.86190
6. -0.56989 0.74569 0.44676 0.46477 0.62513 1.00000 0.57427
7. -0.76152 0.73369 0.65077 0.66516 0.86190 0.57427 1.00000
1. Ingreso laboral promedio per-cápita
2. Tasa de analfabetismo
3. Tasa de escolaridad
4. Porcentaje de viviendas sin agua
5. Porcentaje de viviendas sin desagüe
6. Tasa de mortalidad infantil
7. Porcentaje PEA en agricultura, caza y silvicultura respecto PEA Total.
9. Los olvidados de los andes 107
millones son aptas para el desarrollo agrícola y 15.1
millones, tierras de pastos naturales. Del área apta para
desarrollo agrícola se utilizan efectivamente 3'691,415
hectáreas. El conjunto de tierras de cultivo efectivamente
utilizadas y de pastos naturales es equivalente a 1 '534,595
hectáreas de tierra agrícola estandarizada (tierra de cultivo
bajo riego en Costa). Suponiendo que estas magnitudes no
se han modificado significativamente en el período 1972-
1981-1994, en este último año la relación tierra agrícola
estandarizada por trabajador en la agricultura habría sido de
0.82 hectáreas como promedio nacional, comparable al de
los países más densamente poblados del mundo como los de
Europa Occidental, China, India y el Sudeste Asiático, sin
duda el menor índice en América. El área apta para
agricultura no utilizada (4 millones de hectáreas) se
encuentra preferentemente en la Selva Alta y está
relacionada con el cultivo de la coca.
En este contexto la unidad agropecuaria familiar debe
generar un ingreso que satisfaga las necesidades básicas.
Este debe igualar, por lo menos, al valor agregado generado
en una hectárea de tierra agrícola estandarizada (TAE),
trabajada con tecnología apropiada.
El coeficiente TAE/PEAA debería ser, por lo tanto, no
menor de 1.0. Si se revisa este ratio en los Estratos I y ll, los
más pobres, el índice es inferior a la unidad en
explotaciones constituidas básicamente por minifundistas.
Asimismo se comprueba que el 76% de los trabajadores
agrícolas disponen de menos de una hectárea de tierra
agrícola estandarizada. El minifundismo, consecuencia de la
real escasez de tierras, es el trazo común a todas las
provincias del Estrato I con excepción de Raymondi y
Parinacochas; 38 de las 59 provincias del Estrato ll, 13 de
las 29 provincias de Estrato III y sólo 5 de las 15 provincias
del Estrato IV.
10. 108 Gonzalo García Núñez
CUADRO No. 4.3 TIERRA AGRICOlA ESTANDARIZADA{TAE),
UNIDADES GANADERAS ESTANDARIZADAS{UGE),
POBLACION ECONOMICAMENTE ACTIVA EN AGRICULTURA,
CAZA Y SilVICULTURA (PEAA) Y POBlACION
ECONOMICAMENTE ACTIVA TOTAl{PEA), SEGUN ESTRATOS
DE CALIDAD DE VIDA
ESTRATOS
I 11 IV PAIS
111
1. TAE (hectáreas) 1/ 345,113 574,995 376,622 264,975 1,543,654
2. UGE 21 3,672,206 3,950,590 1,285,417 505,036 9,348,149
3. PEAA 668,791 745,480 334,593 144,763 1,893,627
4. Has. TAElPEAA 0.52 0.77 1.13 1.83 0.82
5. UGEI PEAA 5.49 5.30 3.84 3.49 4.96
6. UGElTAE 10.64 6.87 3.41 1.91 6.06
7. PEA TOTAL 869,676 1,153,327 945,906 2,344,745 5,313,654
8. %PEAAlPEA 76.90. 64.64 35.37 6.17 35
Fuente: Cuadros 09.03 al 09.06 y 10.01 al 10.04
Elaboración: Proyecto RLAl86/004/INP-PNUD
11 Para homogenizar las tierras de diferentes calidades de suelos y disponibilidad de riego, se han
efectuado las siguientes equivalencias:
- Tierras de Cultivo bajo riego en la Costa = 1.00 -
Tierras de Cultivo bajo riego en la Sierra = 2.00
- Tierras de Cultivo en Secano en la Sierra = 4.00
- Tierras de Cultivo bajo riego en la Selva = 2.00
- Pastos Naturales (en todo el país) = 100.00
2/ Conforme a convención aceptada por la FAO. se han estandarizado las existencias pecuarias
según las siguientes ponderaciones:
Vacuno 1.0 Ovino-
Caprino 0.2
Auquénido 0.3
Porcino 0.5 Equinos
0.5
NOTA: las cifras deTAEY UGE corresponden a 1971-1972. las cifras de PEAA y PEA TOTAL
corresponden a 1981.
11. Los olvidados de los andes 109
Cuadro NI! 4.4 PROVINCIAS RANKEADAS POR
RESULTADOS DEL ANALISIS FACTORIAL
según componente principal
1 Cotabambas Apurímac 4.12147 100.000 I Si
2 Paruro Cuzco 3.63017 94.964 I Si
3 Chumbivilcas Cuzco 3.52851 93.922 I Si
4 Paurcatambo Cuzco 3.38547 92.455 I Si
5 Acomayo Cuzco 3.29733 91.552 I Si
6 Acobamba Huancavelica 3.07097 89.231 I Si
7 Mariscal Luzuriaga Ancash 2.89164 87.393 I Si
8 Quispicanchis Cuzco 2.7681 86.126 I Si
9 La Mar Ayacucho 2.75626 86.005 I Si
10 Canas Cuzco 2.7471 85.911 I Si
11 Marañón Huánuco 2.68353 85.259 I Si
12 Anta Cuzco 2.62226 84.631 I Si
13 Andahuaylas Apurímac 2.52573 83.642 I Si
14 Víctor Fajardo Ayacucho 2.51566 83.539 I Si
15 Ayabaca Piura 2.48261 83.2 I Si
16 Huancabamba Piura 2.478 83.553 I Si
17 Yungay Ancash 2.46123 83.981 I Si
18 Pachitea Huánuco 2.45688 82.936 I Si
19 Cangallo Ayacucho 2.4409 82.772 I Si
20 Angaraes Huancavelica 2.43472 82.709 I Si
21 Tayacaja Huancavelica 2.41166 82.473 I Si
22 Hualgayoc Cajamarca 2.29621 81.289 I Si
23 Huanta Ayacucho 2.2642 80.961 I Si
24 Huari Ancash 2.15435 79.835 I Si
25 Sánchez Carrión La Libertad 2.05459 78.812 I Si
26 La Unión Arequipa 2.05031 78.768 I Si
27 Carhuaz Ancash 2.0416 78.679 I Si
28 Pomabamba Ancash 1.93687 77.605 I Si
29 Calca Cuzco 1.92936 77.528 I Si
30 Raymondi Ancash 1.87522 76.973 I Si
31 Pataz La Libertad 1.85465 76.763 I Si
32 Grau Apurímac 1.85183 76.734 I Si
33 Ambo Huánuco 1.85098 76.725 I
34 Antabamba Apurímac 1.8087 76.291 I Si
12. 0 Gonzalo Garda Núñez
35 Huancavelica Huancavelica 1.80786 76.283 I Si
36 Aymaraes Apurímac 1.80189 76.222 I Si
37 Dos de Mayo Huánuco 1.79553 76.157 I
38 Huamalies Huánuco 1.76755 75.87 I
39 Cutervo Cajamarca 1.69322 75.108 I Si
40 Carabaya Puno 1.66238 74.792 I Si
41 Otuzco La Libertad 1.60753 74.229 I Si
42 Lamas San Martín 1.56076 73.75 I
43 Santa Cruz Cajamarca 1.51225 73.253 I Si
44 Urubamba Cuzco 1.4291 72.4 I Si
45 Chota Cajamarca 1.39699 72.071 I Si
46 San Ignacio Cajamarca 1.38583 71.957 I Si
47 Parinacochas Ayacucho 1.37966 71.893 I Si
63 Huancané Puno 0.9394 67.38 Si
11
64 Morropón Piura 0.82066 66.163 Si
11
65 Sánchez Cerro Moquegua 0.81909 66.147 Si
11
66 Alto Amazonas Loreto 0.79076 65.856 11
67 Sandia Puno 0.76275 65.569 Si
11
68 Santiago de Chuco La Libertad 0.71752 65.105 Si
11
69 Loreto Loreto 0.68378 64.76 11
70 Huaylas Ancash 0.68309 64.753 Si
11
71 Jaén Cajamarca 0.67001 64.619 Si
11
72 Azángaro Puno 0.66381 64.555 Si
11
73 Corongo Ancash 0.60585 63.961 Si
11
74 Luya Amazonas 0.57714 63.667 Si
11
75 Abancay Apurímac 0.51189 62.998 Si
11
76 Chucuito Puno 0.42032 62.059 Si
11
77 Requena Loreto 0.34637 61.301 11
78 Oxapampa Paseo 0.33839 61.219 Si
11
79 Caylloma Arequipa 0.3222 61.053 Si
11
80 Bagua Amazonas 0.28559 60.678 11
81 Cajamarca Cajamarca 0.28491 60.671 Si
11
82 Concepción Junín 0.19196 59.718 Si
11
83 Rioja San Martín 0.12819 59.064 11
84 Manú Madre de Dios 0.11941 58.974 11
85 Lampa Puno 0.10067 58.782 Si
11
86 Pallasca Ancash 0.0962 58.736 Si
11
87 Cajatambo Lima 0.0619 58.384 Si
11
88 Condesuyos Arequipa 0.03748 58.134 Si
11
89 Aija Ancash 0.03717 58.131 11 Si
13. Los olvidados de los andes 111
90 Huamanga Ayaeueho -0.06519 57.082 Si
11
91 Moyobamba San Martín -0.09359 56.791 11
92 Bongará Amazonas -0.09773 56.748 11
93 Mariscal Cáeeres San Martín -0.10255 56.799 11
94 Leoneio Prado Huánueo -0.13287 56.388 Si
11
95 Melgar Puno -0.16772 56.031 Si
11
96 Junín Junín -0.246 55.228 Si
11
97 Reeuay Aneash -0.29774 54.699 Si
11
98 Contumazá Cajamarea -0.30229 54.651 Si
11
99 Huánueo Huánueo -0.31897 54.48 Si
11
100 Ferreñafe Lambayeque -0.33559 54.31 11
101 Chanehamayo Junín -0.37504 53.905 11
102 Rodríguez de
Mendoza Amazonas -0.3949 53.702 11
103 Tarata Taena -0.39713 53.679 11
104 Yauyos Lima -0.4475 53.163 Si
11
105 Castilla Arequipa -0.6274 51 .318 Si
11
106 Bolognesi Aneash -0.6274 51.318 Si
11
107 Canta Lima -0.7882 49.67 Si
11
108 Lambayeque Lambayeque -0.859 48.944 11
109 Tarma Junín -0.8604 48.93 Si
11
110 Jauja Junín -1.0936 46.539 111
111 Contralmirante Villar Tumbes -1.3704 43.702 111
112 Huaroehiri Lima -1 .4058 43.34 Si
111
113 Puno Puno -1 .4834 42.544 Si
111
114 San Martín San Martín -1.5539 41.821 111
115 Caravelí Arequipa -1.5773 41.582 Si
111
116 Huaraz Aneash -1.5788 41.565 Si-
111
117 Tahuamanu Madre de Dios -1.6042 41.305 111
118 Coronel Portillo Ueayali -1.6126 41.22 111
119 Zarumilla Tumbes -1.6203 41.14 111
120 Chaehapoyas Amazonas -1.6596 40.738 111
121 Paita Piura -1.6626 40.706 111
122 Paseo Paseo -1.7751 39.554 Si
111
123 Huaneayo Junín -1.8085 39.211 Si
111
124 Sullana Piura -1.827 39.022 111
125 Piura Piura -1.9611 37.647 111
126 Huaral Lima -2.3142 34.027 111
127 Tumbes Tumbes -2.32 33.967 111
128 Cañete Lima -2.3324 33.841 111
14. 112 Gonzalo García Núñez
129 Palpa lea -2.3398 33.764 111
130 Casma Aneash -2.463 32.499 111
131 Tambopata Madre de Dios -2.5161 31.957 111
132 Maynas Lo reto -2.6291 30.798 111
Puno
133 San Román -2.658 30.503 Si
111
134 Chaneay Lima -2.8041 29.005 111
135 Paeasmayo La Libertad -2.9129 27.889 111
136 Mariscal Nieto Moquegua -3.0356 26.632 111
137 Pisco lea -3.043 26.556 111
138 Camaná Arequipa -3.1943 25.005 111
139 Chineha lea -3.3505 23.403 IV
140 Yauli Junín -3.6243 20.597 IV
141 Chielayo Lambayeque -3.8499 18.284 IV
142 lea lea -3.8758 18.018 IV
143 Cuzco Cuzco -4.0151 16.591 IV Si
144 Islay Arequipa -4.1707 14.995 IV
145 Nazca lea -4.2045 14.649 IV
146 Trujillo La Libertad -4.2216 14.474 IV
147 Santa Aneash -4.4954 11.667 IV
148 Arequipa Arequipa -4.6985 9.585 IV
149 Taena Taena -5.0528 5.954 IV
150 110 Moquegua -5.1914 4.533 IV
151 Talara Piura -5.3309 3.102 IV
152 Lima Lima -5.6155 0.185 IV
153 Callao Callao -5.6335 O IV
HATOS
Las existencias totales, en 1992, fueron estimadas en
11,911.000 Y de 9'348, 149 unidades ganaderas
estandarizadas (UGE), casi igual a la cifra de 1972. Si se
divide el número de UGE entre la población
económicamente activa en la agricultura (PEAA), el
promedio nacional era 4.96 UGE/ PEAA, el menor de
América, con una fuerte dispersión que
15. Los olvidados de los andes ] ]3
CUADRO N2 4.5 NIVELES DE TECNOLOGIA
AGRICOLA POR ESTRATOS DE CALIDAD
DE VIDA - 1972
% DE UAN1/ QUE EN 1972 UTILIZARON:
ESTRATOS ENERGIA FERTILI.o SEMILLA CREDIT04/
MECANICA2I GUAN031 COMPRADA
I 1.12 11.37 15.39 2.64
4.22 15.67 21.74 7.54
11
20.51 35.66 38.60 13.35
111
IV 45.57 51.73 57.62 20.49
Promedio Nacional 7.17 18.44 23.21 6.97
1/ la unidades agropecuarias normales (UAN) son las que al momento del Censo tenían como
mínimo 0.5 hectáreas o bien tenían menos extensión pero superaban un cierto número de
animales. Cubren aproximadamente el 99.68% de la superficie de todas la unidades
agropecuarias censadas. El censo agropecuario de Octubre 94 presentará cifras revisadas en
febrero 1995.
21 Incluye tracción mecánica en forma exclusiva o combinada con tracción animal. 3/
Incluye fertilizantes químicos y guano de isla. No considera guano de corral. 4/
Porcentaje de UAN con crMito respecto a las UAN totales.
Fuente: Proyecto RlAl86/004/INP-PNUD
varía de 0.34 en Rioja a 45.65 en YaulF5. La actividad
pecuaria es tanto más importante cuánto más pobre es el
estrato. En efecto si se comparan los indicadores de UGE/
PEAA y UGEfTAE, habría una sobreacumulación pecuaria
relativa en los más pobres. (10.6 UGEfTAE en el Estrato 1,
en tanto que el Estrato IV sólo tiene 1.9)
Este fenómeno es explicable en parte, puesto que los
animales tienen múltiples funciones en las familias de
parcelarios. Por lo demás indica un límite técnico. Es indis-
pensable mejorar enormemente la productividad forrajera de
la tierra (pastos), y de los rebaños (genética, manejo y
25 A] respecto veáse]a infonnación de]a OSP-Ministerio de Agricultura. En la práctica,
el tamaño del cheptel vacuno, porcino, ovino y caprino es estacionario desde 1965.
16. 114 Gonzalo Garda Núñez
sanidad animal) para otorgarle la sostenibilidad pecuaria a
una práctica extensiva. Discriminando el stock pecuario por
especies cerca de14l % eran vacunos, proporción
homogénea en todos los estratos; ovino s y caprinos (32% a
nivel nacional) y el resto está constituido por camélidos
sudamericanos, porcinos y equinos.26
TECNOLOGÍA Y PRODUCCIÓN AGRÍCOLAS
Los insumos de la economía rural andina son: la
energía, los fertilizantes, las semillas y, monetariamente, el
acceso y el uso del crédito. ¿Cómo se distribuyen estos
recursos entre los diversos estratos? La tecnología
empleada en la agricultura es comparativamente poco
evolucionada en los Estratos I y 11 (con una cierta mejora
en el Estrato 11), aumenta significativamente en el Estrato
ID y el Estrato IV exhibe indicadores que revelan los
indicios de una agricultura moderna. Al interior de cada
Estrato se observa una gran dispersión: En el Estrato I las
provincias de Anta, Urubamba, Cutervo, San Ignacio y
Cajabamba presentan niveles tecnológicos propios a los del
Estrato 11.
Los cultivos de los Estratos I y 11 son principalmente
productores de granos (trigo, cebada, maíz) y papa; en ceja
de selva, café y té. El Estrato ID es el mayor productor de
arroz, maíz, algodón y papa, mientras que en el Estrato IV
predomina la producción comercial y de exportación en de
maíz, algodón y azúcar. La mezcla autoconsumo-comercial
se desplaza hacia arriba a medida que disminuye la
pobreza.
La estrategia de ingreso campesino contempla también
la prestación de servicios personales fuera del ámbito
comunal. Por diversos factores que dificultan la obtención
26 El 10% del stock pecuario nacional son camelidos sudamericanos (alpacas y llamas)
del
concentrado en las provincias altoandinas.
17. Los olvidados de los andes 115
CUADRO NI! 4.6 SUPERFICIE COSECHADA TOTAL,
PRINCIPALES CULTIVOS POR ESTRATOS DE CALIDAD DE VIDA
- 1972 (en hectáreas)
ESTRATOS
CULTIVOS TOTAL
PAIS
I IV
11 111
Total 755,694 790,904 401,865 192,927 2'141,390
Arroz 8,094 49,868 46,470 9,412 113,844
Cebada 94,311 92,872 23,306 2,262 212,751
Maíz 205,099 131,348 64,356 38,208 439,011
Trigo 98,554 48,070 12,255 1,627 160,506
Menestras 47,520 41,247 21,689 9,308 119,764
Papa 124,680 98,019 39,771 4,337 266,807.
Algodón 1,224 10,437 74,097 35,301 121,059
Azúcar 8 3,230 6,181 39,469 48,888
Café+ T é 52,386 108,362 1,700 12 162,460
Frutas 18,687 46,063 27,559 8,298 100,608
12,538 62 234 19,332
Coca 6,499
Otros 98,633 149,627 84,419 44,459 377,138
Fuente: Proyecto RLAl86/004/INP-PNUD
ingreso familiar es habitual la venta temporal de la fuerza
de trabajo, principalmente del jefe de familia: A menor
tamaño de las tierras de la quot;empresaquot; agropecuaria (EA)
mayor es el porcentaje de ingresos obtenidos fuera de ella
(salarios, etc.).
CONSUMO
Las unidades económicas se encuentran generalmente
organizadas en comunidades rurales cuyas relaciones socia-
les forman parte de la estrategia de supervivencia
campesina. De las características arriba descritas se deduce
que si bien la pobreza está determinada por el infra nivel de
ingreso de las familias, a su vez el ingreso está
condicionado, en primer
18. 116 Gonzalo Garda Núñez
CUADRO Ne 4.7 SUPERFICIE COSECHADA TOTAL Y
DE PRINCIPALES CULTIVOS POR ESTRATOS -1972
(en porcentaje)
ESTRATOS
CULTIVOS
PAIS
I IV
11 111
TOTAL 100 100 100 100 100
Arroz 1.07 6.31 11.56 4.88 5.34
Cebada 12.48 11.74 5.80 1.17 9.93
Maíz 27.14 16.61 16.01 19.80 20.48
Trigo 13.04 6.08 3.05 0.84 7.49
Menestra 6.29 5.20 5.40 4.82 5.71
Papa 16.50 12.38 9.90 2.25 12.54
Algodón 0.16 1.30 18.44 18.30 5.65
Azúcar 0.00 0.40 1.54 20.46 2.28
Café+ T é 6.93 13.70 0.42 0.01 7.58
Frutas 2.47 5.80 6.86 4.30 4.69
Coca 0.86 1.59 0.02 0.10 0.90
Otros 13.05 18.90 23.04 17.41
21.01
Fuente: Proyecto RLAl86/004/INP-
PNUD
CUADRO Ne 4.8 DESTINO DE LA PRODUCCION AGRICOLA EN
LA SIERRA POR PRINCIPALES PRODUCTOS CULTIVADOS -
1984 (en miles constantes a julio 1984)
PRODUCTO AUTOCONSUMO VENTA OTROS
% % %
Papa 35 38 27
Maíz Amiláceo 62 21 17
Cebada Grano 54 21 25
Trigo 59 23 18
Haba 70 5 25
Oca 74 2 24
Fuente: ENAHR 1986, Cuadro No. 45, Pag. 134.
Elaboración: Proyecto RLAl861004/INP-PNUD.
19. 117
Los olvidados de los andes
CUADRO N2 4.9 INGRESO NETO ANUAL-PROMEDIO POR
FAMILIA OBTENIDO DENTRO Y FUERA DE LA EXPLOTACION
AGRO PECUARIA - 1984 (en intis constantes a julio 1984)
FUERA EXPO-
DENTRO EXPLO-
TACION AGRO-
TACION AGRO-
PECUARIA %
PECUARIA %
39
61 56
SIERRA E.A.sin
44
62 42
tierras E.A.con
38
58 62
tierras Menos de 1
58
71 74
Ha.
42
71 88
1-1.99 Has.
38
2-4.99 Has.
29
5-9.99 Has.
26
10-19.99 Has.
29
20.49.99 Has.
12
50- Has.
Fuente: ENAHR,1986, Cuadro No. 133. p.411
Elaboración: Proyecto RLAl86/004/INP-PNUD
lugar, por la escasa dotación de recursos, en particular,
tierra, ganado, instrumentos, conocimientos y mano de obra.
Y por los precios de intercambio con los mercados urbanos.
En ambos casos la propiedad y disponibilidad de los
recursos, los circuitos comerciales y financieros heredados
modelos del liberalismo económico hacendario de la
república aristocrática y hoy, neo-liberal, apenas fueron
modificados y rotos por la reforma agraria de los años 70 en
el ámbito rural andino.
La característica del consumo es consistente con los
bajos niveles de ingresos de las familias campesinas.
Indican una alta concentración de los gastos en alimento y
vestuario. Nótese la baja proporción que las familias rurales
dedican al
gasto en los servicios. Ni agua, ni desagü~, ni electricidad
ni servicios comunales o ediles. Prácticamente la única
mediación con el Estado es el registro civil.
20. 118 Gonzalo Garda Nú¡iez
La estructura del consumo de las familias campesinas
no ha sido estudiado recientemente pero existen algunos
elementos básicos cuya permanencia advierten diversos
estudios parciales que se comprobarán con las nuevas
encuestas nacionales y el propio censo agropecuario. Más
del 50 % del ingreso se consagra a la alimentación. Lo que
lo hace especialmente sensible a las políticas de
estabilización, por lo general, contractivas del ingreso real.
CUADRO N2 4.10 ESTRUCTURA DEL GASTO BRUTO
MONETARIO DE LA FAMILIA CAMPESINA DE LA SIERRA
SUR 1979 (en porcentaje)
RUBROS %
Alimentos 45.4
Vestuario 14.4
No Durables 12.8
Otros 12.2
Enseñanza y otros servicios 5.9
Insumos 4.7
Inversión 4.6
Total 100.0
Fuente: Figueroa, A. La Economía Campesina de la Sierra del
Perú, PUC, Lima, 1983.
En suma, el modo de producción y consumo de los
comuneros rurales y parcelarios andinos es, en sí mismo,
una estrategia defensiva contra la exclusión. Privilegia la
reproducción simple y la cobertura de las necesidades mas
instintivas de los pobres rurales andinos. Entonces, ¿ Qué
condiciones de vida resultan de estas estrategias de los
olvidados del ande? En primer lugar para sobrevivir las
familias necesitan más brazos, más hijos. La tasa global de
fecundidad para 1981 alcanzó su nivel más alto en la
provincia serrana de San
21. 119
Los olvidados de los andes
Miguel (Cajamarca), 8.9. Es más del doble de la tasa obser-
vada en las provincias de Lima y Callao con 3.5 hijos por
mujer. En 1994, esta diferencia subsiste. Además el análisis
de la fecundidad para cada uno de los estratos muestra la alta
correlación existente entre pobreza y fecundidad: A mayor
pobreza, hay mayor fecundidad. La racionalidad no está
ausente. Si la unidad productiva es la familia, cómo no
comprender que tener hijos son la forma de crear capacidades
productivas. Nuevamente esta conducta se vincula a las
estrategias defensivas del modo campesino de producir y
consumir, puesto que la reproducción simple no basta en un
contexto de alto riesgo.
Al no poder acceder a los servicios de salud, las familias
pobres han tenido una tasa alta de fecundidad acompañada de
una tasa elevada de mortalidad perinatal y de la primera edad.
En la medida que los servicios de salud han extendido sus
alcances a las comunidades rurales este último indicador ha
comenzado a decrecer verticalmente. Y se ha producido un
sobrepoblarniento relativo resuelto por la migración. Hasta
1940, la fecundidad en el Perú, medida con la tasa global de
fecundidad (TGF), alcanzaba cifras ligeramente inferiores a
6.0 hijos por mujer. En los veinte años siguientes, inicia un
lento pero persistente descenso que alcanzaa4.1 hijos por mujer
(ENDES - 1986) Y 3.7 en 1994. Globalmente, la población
peruana ha comenzado a envejecer a partir de este año.
Las provincias de los pobres entre los pobres (estrato 1
Estadístico), entre las que figuran Dos de Mayo,
Chumbivilcas, Canas, Huancavelica, Huancabamba y Víctor
Fajardo, tienen una TGF de 8.5 o más. En todas ellas, la
debilidad de la economía rural las convierte en una fábrica de
pobres y desesperados. No es casual que en ellas rigiera el
estado de emergencia durante la década anterior y fueran
escenario principal de la guerra interna.
22. 120 Gonzalo García Núñez
CUADRO N2 4.11 TASA GLOBAL DE
FECUNDIDAD POR ESTRATOS DE
CALIDAD DE VIDA - 1981
ESTRATOS
PERU
IV
11 111
1. Población Total 2'907,570 3'665,853 3'184,606 7'273,192 17'031,221
2. Población
2'322,579 2'397,332 924,555 300,863 5'945,329
Rural
3. Población
Rural
(%, porcentaje) 79.88 65.40 29.03 4.14 100.0
4. Tasa Global
de
Fecundidad 7.4 7.0 5.8 3.8 5.5
Elaboración: Proyecto RLAl86/004/INp.PNUD
Si bien en las provincias del Estrato n existen mejores
condiciones de vida, las tasas de fecundidad continúan sien-
do altas, e inclusive hay casos particulares como San
Miguel y Ramón Castilla, cuyas TGF llegaron a 8.9 y 8.8,
respectivamente, valores superiores a los observados en el
Estrato 1. Otra condición generada por la pobreza es la
muerte temprana. Entre 1968-1981, la disminución de los
niveles de mortalidad infantil para el conjunto del país es
significativo. El declive de la mortalidad infantil sigue un
patrón similar al del resto de los países de América Latina,
consecuencia de las mejoras en la salud pública. Según la
encuestaENDES 91-92 la tasa sería de 64 por mil, unas
treinta veces superior a la de un país adelantado. Sin
embargo, estas cifras promediales
esconden notables diferencias, debido a la persistencia de la
pobreza rural que explica el lento descenso de la mortalidad
infantil. En 1968 la tasa de mortalidad infantil oscilaba
entre 301 y 136 por mil en Acomayo y Santa Cruz,
respectivamente, en tanto que, en 1981, era de 184 y 79 por
mil en Acomayo y Cajabamba. En 1992, el mapa de
inversión social de FONCODES-CUANTO confirma esta
tendencia a la dismi
23. Los olvidados de los andes 121
nución de la tasa de mortalidad. De igual manera, UNICEF
en su informe sobre la situación de la infancia 1994. Otras
provincias con tasas de mortalidad infantil muy elevadas
son Quispicanchis y Canas de Cusca'. En 1981, se le agregó
la provincia de Paruro.
Además el estudio sobre talla de la infancia revela un
severo retraso en el crecimiento, tanto absoluto como relati-
vo. El ingreso per cápita y la tasa de analfabetismo están
por debajo del promedio del estrato en estas provincias. La
muy baja cobertura de servicios de agua y desagüe no
muestra un comportamiento definido en relación a elevada
tasa de mortalidad infantil.
Si bien las tasas de mortalidad infantil son un tanto
menores que las del grupo anterior en las provincias del
Estrato n, varían entre 262 y 96 por mil en 1968 a 148 y 57
por mil para 1981. Una situación muy particular se vive en
el valle del Huallaga, zona del narcotráfico. Entre 1968-
1981, la tasa pasa de 126 a 136 por mil, uno de los casos de
excepción. Huallaga, ubicada en Selva Alta, ha recibido una
fuerte inmigración de origen andino. Es posible aventurar
que el incremento de la mortalidad infantil obedezca al
comportamiento demográfico de los inmigrantes.
Las tasas de mortalidad infantil disminuyen en el
período 1968-1981 a niveles que van desde 194 y 160 por
mil hasta 122 y 96 por mil, respectivamente en los Estratos
In y IV. Como se ha observado, en resumen, los
indicadores de altos ratios de mortalidad infantil se
encuentran mayormente en las provincias andinas del SRA
y los más bajos en las de la Costa. Y la mortalidad
temprana se encuentra fuertemente asociada al
analfabetismo, vivienda sin servicios de agua y desagüe y al
grado de ruralidad.
La gente del SRA, al migrar, ha votado con los pies
ante la endémica persistencia de la miseria. Las provincias
de
24. 122 Gonzalo García Núñez
CUADRO N2 4.12 TASA DE MORTALIDAD INFANTIL
POR ESTRATOS DE CALIDAD DE VIDA (Años 1968 y
1981)
ESTRATOS
PAIS
IV
11 111
1 Población Total 2'907,570 3'665,853 3'184,606 7'273,192 17031,221
2 Población Rural 2'322,579 2'397,332 924,555 300,863 5'945,329
3 Población Rural
(en pocentaje) 79.88 65.39 29.03 4.13 34.90
4 Tasa de Mortalidad
Infantil 1968 204 174 143 86 140
(por mil)
5 Tasa de Mortalidad
Infantil 1981 127 110 93 57 88
(por mil)
Elaboración: Proyecto RLAl861004/INP-
PNUD
Sierra, con muy pocas excepciones, son expulsoras de
población. Ella emigra a las ciudades de la Costa y a la
Selva Alta. Cuanto más pobre mayor es la tasa de migración
y sólo el Estrato IV tiene tasa positiva de migración neta
(4.96 por mil) en el período 1976-1981.
Los saldos migratorios negativos provienen de las pro-
vincias de pobreza extrema. Salvo San Ignacio, La Mar,
Pachitea y Huamalíes que ganaron población, así como
Marañón, Paucartambo, Carabaya y Tayacaja que lograron
retenerla, las demás provincias pierden en su intercambio
demográfico con Lima y las capitales provinciales. San
Ignacio es un caso ilustrativo: Gran proporción de su
territorio es Selva Alta y aunque registra una baja relación
TAEI PEAA (0.68) dispone de suficientes recursos de tierra
apta inexplotada que los migrantes van incorporando a la
producción transable. Similar situación se presentó en las
provincias
25. Los olvidados de los andes 123
CUADRO N!! 4.13 VOLUMEN E INTENSIDAD MIGRATORIA
POR ESTRATOS DE CALIDAD DE VIDA 1976-1981
ESTRATOS
PAIS
IV
11 111
1 Población Total
1981 2'907,570 3'665,853 3'184,606 7'273,19217'031,221
2 Población Rural
1981 2'322,579 2'397,332 924,555 300,863 5'945,329
3 Población Rural
(%, porcentaje) 79.88 65.39 29.03 4.13 34.90
4 Inmigrantes 125,134 330,641 294,243 674,201 1'424,219
5 Emigrantes 246,652 364,637 314,335 498,587 1'424,219
6 Migración Neta -121,518 -33,996 -20,092 175,614 O
7 Tasa de Inmigra- 8.48 12.94 19.05 20.48
ción (por mil)
8 Tasa de Emigra- 16.71 14.26 20.35 15.52
ción (por mil)
9 Tasa de Migra- -8.23 -1.32 -1.30 4.96
ción Neta (por mil)
Elaboración: Proyecto RLAl86/004/INP-PNUD
de La Mar, Pachitea, Marañón, Huamalíes, Paucartambo y
Carabaya. Así se tiene que San Ignacio y La Mar no
solamente cuentan con la mayor cantidad de hectáreas
cosechadas en cultivos como plátano, café, té, frutales y
coca, sino que también poseen una significativa superficie
cosechada total en relación a las demás provincias de su
estrato. Dada la importante proporción de población que
reside en el ámbito rural, éste podría ser uno de los primeros
indicios que señale porqué, a pesar de contar con indicadores
sociales que las catalogan como áreas del estrato más pobre
del país, San Ignacio fue la única provincia cajamarquina
que atrajo pobla
-
26. 124 Gonzalo Garda Núñez
ción y la provincia de La Mar se constituye como una de las
pocas provincias situadas en el Trapecio Andino que tienen
migración neta positiva. Esto sin embargo cambió radical-
mente con el imperio de la violencia desde 1980 hasta 1994:
La migración se nutrió de los desplazadosquot; internosquot;, unos
trescientos mil peruanos según diversas estimaciones.
Otros hechos configuran esta relocalización de los
asentamiento s humanos. Tayacaja se beneficia del
funcionamiento de la Central Hidroeléctrica del Mantaro.
Toquepala y Cuajone, los grandes enclaves minero-
metalúrgicos del sur peruano, la coca que explica la
atracción hacia la selva alta. Se observa, asimismo, que las
provincias con saldos positivos, con raras excepciones,
captan predominantemente población masculina, fuerza de
trabajo operaria. El predominio de los factores de atracción
sobre los de expulsión no es explícito. Por lo menos en
1972, cuando los niveles de tecnología agrícola de una
provincia eran superiores al promedio de su estrato,
utilizando fertilizantes, crédito, y un portafolio diversificado
de cultivos, esta podía retener su población pese a una baja
institucionalización de los principales servicios sociales, que
se traducen en una alta mortalidad infantil, analfabetismo y
baja esperanza de vida al nacer.
Hay un claro efecto de atracción de los grandes centros
poblados mayores. Por ejemplo, cerca de la tercera parte de
las provincias del Estrato 11 tuvieron saldos migratorio s
positivos y las restantes expulsan población. Las tasas de
emigración superaron 20 por mil en Canta, Yauyos, Aija y
Huancané, superiores a las alcanzadas en el Estrato l. La
migración es familiar puesto que las tasas de migración neta
eran ligeramente superiores en hombres que mujeres.
¿Cuáles son los principales destinos de los migrantes?
La selva alta: Rioja (147.77 por mil), Manú (124.06 por mil)
Moyobamba (68.82 por mil), Mariscal Cáceres (32.75 por
mil), Satipo (37.34 por mil), Chanchamayo (32.43 por mil),
27. Los olvidados de los andes 125
Sandia (24.02 por mil), Oxapampa (15.05 por mil), La
Convención (12.02 por mil) y Huallaga (10.78 por mil).
Casi todas asociadas al circuito de cultivos de la coca.
Queda claro que el comportamiento demográfico y
migratorio de los pobres rurales es perfectamente racional.
Cuando las condiciones de reproducción simple se ven
amenazadas, la unidad productiva = familia se mueve
hasta encontrar nuevas y potencialmente superiores
condiciones de operación.
Hay un mayor equilibrio entre los emigrantes e inmi-
grantes en las provincias menos pobres del Estrato ID: De
29 provincias, 16 eran receptoras. En este grupo se
encuentran provincias que han logrado valores altos de
migración neta, superiores inclusive a los alcanzados por
las provincias que se encuentran en el Estrato IV. Así por
ejemplo, Zarumilla (petróleo) y Tambopata (oro) tienen
una tasa de migración neta de 31.16 y 41.42 por mil,
respectivamente. San Román de Puno (19.39 por mil) es
una de las escasas provincias de la región de la Sierra que
atrae importantes flujos migratorios. Juliaca es la capital
aymara del altiplano peruano. La PEA Agropecuaria es
reducida y por eso, el coeficiente de tierra agrícola
estandarizada respecto a la PEA es mucho mayor que el
promedio del Estrato nI. Lo que sucede, en verdad, es un
interesante proceso de urbanización basado en la condición
fronteriza, una fuerte absorción del sector comercial,
industrial o de servicios, contrabando y/o narcotráfico.
Particularmente importantes son también los casos
de Huaral y Camaná, al norte de Lima y de Arequipa, que han.
logrado un crecimiento urbano significativo y también poseen
una PEA agropecuaria que bordea el 45 por ciento de su PEA
Total.
Esta combinación de disponibilidad de tierras dedicadas a
la agrícultura comercial y mercados urbanos cercanos facilita
el adecuado e intensivo uso de tecnología que las
28. 126 Gonzalo Garda Núñez
convierte en áreas de gran potencial económico y de atrac-
ción demográfica.
El único conjunto receptor es el Estrato relativamente
afluente puesto que tiene migración neta positiva. Cinco de
las 15 provincias cuentan con saldos migratorio s negativos.
El departamento ilustrativo es lea. Prácticamente todas sus
provincias sueltan población en beneficio de su capital,
Chincha o Pisco. Hay algunas capitales departamentales
que pierden población o que la ganan en proporciones muy
reducidas como son los casos de Chiclayo, lea, Trujillo e
inclusive, desde un punto de vista relativo, Cusco y
Arequipa.
Los que reciben pertenecen a las provincias de Tacna,
Talara e Ho, sedes del comercio fronterizo y de la
explotación de recursos naturales -petróleo, gas, cobre- han
generado actividades complementarias que ejercen una gran
atracción demográfica. Por último, hay predominancia de la
población masculina en la migración. La excepción es
Lima-Callao, Arequipa y Trujillo, que basan su crecimiento
poblacional en su mayor atracción por la población de sexo
femenino dirigida hacia la servidumbre urbana.
El volumen migratorio muestra la magnitud tanto de
las corrientes como de la población que se desplaza en un
determinado territorio. Las provincias del Estrato IV son las
únicas que en conjunto no pierden población, pues contaban
un saldo migratorio neto positivo de 175,614 habitantes.
Entre 1976 y 1981, las provincias del Estrato mas
pobre (1) perdieron 121,518 habitantes, siendo las más
afectadas Chota, Cutervo, Huancavelica, Ayabaca,
Huancabamba, Otuzco,Andahuaylas, Cangallo y Huari.
Estas nueve provincias perdieron en el período cerca de
70,000 habitantes.
Las provincias del Estrato 11 de la encuesta perdieron
cerca de 34,000 habitantes. Las más perjudicadas fueron
Lucanas, Celendín, San Miguel, Cajamarca, Huancané,
29. Los olvidados de los andes 127
Azángaro, Chucuito y Morropón; que, en bloque, restaron
alrededor de 60,000 habitantes. Saldos positivos hubieron
en Satipo, Chanchamayo, Bagua, La Convención, Leoncio
Prado, Rioja, Moyobamba, Mariscal Cáceres y Sandia,
todas estas con gran parte de su territorio en Selva Alta y
que en conjunto ganan aproximadamente 81,000 personas.
En el Estrato ID, las provincias que captan un mayor
número de inmigrante s están ubicadas en la Costa (Piura y
Huaral), Selva Baja (Coronel Portillo y Tambopata) y Sierra
(San Román), aproximadamente 24,000 habitantes. En el
Estrato IV, el de mayor nivel de calidad de vida, las
provincias de Lima y Callao poseen el mayor volumen tanto
de inmigrante s como de emigrantes, y el saldo migratorio
neto positivo es de 153,519 habitantes. Asimismo, las
demás provincias, particularmente aquellas cuyas capitales
han alcanzado un alto grado de urbanización, así como
reciben población, también la expulsan y sus saldos
migratorio s son sensiblemente inferiores al logrado por la
capital del país, la que si bien no tiene la intensidad
migratoria más alta en términos relativos, continua
captando los volúmenes más importantes del territorio
nacional.
LOS EFECTOS SOCIALES DE LA POBREZA
Los efectos de la pobreza en la población del SRA han
sido la desnutrición, la enfermedad y la carencia de
servicios sociales. Nadie puede negar que la exclusión de
millones de peruanos desde hace muchos años crearon las
terribles condiciones de la extrema pobreza. Y que los
esfuerzos desarrollados para abatir, vencer y dominar la
pobreza fueron insuficientes.
Del mismo modo que la política económica
desinflacionaria aplicó su recetario neoliberal sin respetar
30. 128 Gonzalo García Núñez
estos heredados contextos de extrema fragilidad social y
demográfica. A diferencia de otras experiencias de shock
ejercido con un piso de necesidades básicas satisfechas, el
ajuste de la demanda y los ingresos en situaciones sociales
límites crean nuevos pobres y afectan directamente el dere-
cho a la vida.
Veremos que también compromete a las generaciones
futuras.
01. El estado nutricional, en términos absolutos, es
deficitario. De acuerdo a los resultados de la Encuesta N
acional de Nutrición y Salud y el análisis de la Comisión
Especial de Seguridad Alimentaria:
a) La oferta global de alimentos por habitante disminu-
ye, en forma sostenida, desde 1970:
REQUERIMIENTOS REFERENCIALES:
2410 KcalY 65.1 gramos de proteínalpersJdía
(%)
Año Energía Proteína Proteina
(%) Total Animal
1970 94 85.2 37.1
1976 93 82.0 41.9
1981 89 81.9 31.9
1984 78 76.8 N.O.
Fuentes:Min. de Agricultura, OSEI, Hojas de Balance de alimentos 1970-84. Oficina Nacional de Apoyo
Alimentario. D.S.A., Hoja de Balance de Alimentos. 1981. Hay información de ENSSA en 1991.
La producción de alimentos crece a menor ritmo que la
demografía. Está afectada por las limitantes introducidas a
la capacidad productiva del agro por las políticas de precios,
agravadas severamente por la irrestricta apertura externa
31. Los olvidados de los andes 129
(42 % del abastecimiento es importado) y la liberalización
de los circuitos comerciales y financieros.
Esta brecha no se resuelve mediante la promoción de
la debilitada agricultura interna. Se han preferido crecientes
importaciones de alimentos y mayores donaciones. Las pri-
meras han sido facilitadas por el atraso cambiario y el
abatimiento de los aranceles, la desregulación de los proce-
dimientos administrativos, control de calidad y garantías
fitosanitarias. Estas importaciones, a menudo subsidiadas
por los países de origen, deprimen aún mas los precios
internos y desaniman la iniciativa de los agricultores perua-
nos. No es irracional, en consecuencia, el cambio de cartera
de cultivos locales. La expansión de los cocales en zonas
antes agrícola-alimentarios, en tal contexto, no es solamente
un problema represivo sino económico. Hay fenómenos que
son concomitantes. La reducción de la oferta y el consumo
de productos alimenticios de tipo nutricionalmente
energético restringe el mayor consumo de proteínas. Hay
restricciones metabólicas para su óptimo aprovechamiento.
Pero no todos los peruanos sufren estas carencias. La
distribución del consumo de alimentos en los diferentes
estratos socio-económicos de la población peruana es des-
igual, aunque en conjunto la situación nutricional no ha
podido mejorar y tiende, al contrario, empeorar:
a) Las grandes carencias observadas en el consumo de
alimentos no guardan proporción con las moderadas varia-
ciones de la situación nutricional de la población. Los estra-
tos de menores ingresos en las áreas urbanas se protegieron,
inicialmente, con estrategias originales y eficientes en los
recurrentes períodos de crisis. Ante la inflación: Olla
común, los comedores populares, la red de comités del vaso
de leche. Luego de un éxito inicial, entre 1983-1988, la
estrategia solidaria sufre serias dificultades debidas al brutal
ascenso de los precios de los alimentos. Las economías de
escala y las
32. 130 Gonzalo Garda Núñez
PREVALENCIA DE MALNUTRICION (DEFICIT PESO/EDAD)
EN NIÑOS MENORES DE 6 AÑOS, 1972-1984 (en
porcentajes)
Area Malnutridos Malnutridos Diferencia
1972 1984 1992
Lima Metropolitana 19.0 21.4 2.4
Costa Centro 28.0 30.3 +2.3
Selva Alta 56.0 60.4 +4.4
Costa Norte 46.0 45.5 -0.5
Costa Sur 29.0 16.6 -12.4
Sierra Norte 65.0 58.2 -6.8
Sierra Centro 57.0 59.2 +2.2
Sierra Surquot; 56.0 49.7 -6.3
Selva Baja 68.0 62.0 -6.0
Nota:La encuesta no incluyó Apurímac, Ayacucho y Huancavelica en emergencia política.
Fuente:INEI, 1986. ENNSA-Informe General., p. 342.
experiencias organizativas ganadas las estrategias solidarias
del medio urbano se derrumban frente al shock de 1990. En
el área rural, prácticamente solo han existido donaciones de
alimentos como alternativas episódicas.
b) La situación nutricional de los niños menores de seis
años es peor en las áreas rurales que las urbanas. Más grave
en sierra y selva que en la costa. Esta diferenciación se
observa en la relación talla/edad como peso/edad. Estudios
recientes de seguridad alimentaria tratan de probar, me-
diante ejercicios econométricos, que la situación actual es el
resultado de una tendencia que viene desde varios años y
que no hay responsabilidad de la política económica en esta
circunstancia. Otros estudios, sin embargo, opinan en
sentido contrari027.
27 NCOS, COINCIDE, Seguridad alimentaria en el Perú, Cusco, Enero 1995.
33. 131
Los olvidados de los andes
CUADRO N2 4.14 PREVALENCIA DE MAL NUTRICION
CRONICA (TALLA BAJA PARA LA EDAD) EN NIÑOS
MENORES DE SEIS AÑOS POR REGIONES GEOGRAFICAS-
1984 (%)
TOTA URBANA RURAL
L
23.7 56.7
PAIS 37.8
26.4 39.9
Costa
27.7 45.6
Norte 1/25.7 34.2
Centro
14.8 15.2
Sur
36.6 62.6
Sierra
41.0 67.1
Norte 41.6 63.5
Centro
31.6 55.8
Sur
35.2 52.7
Selva
Alta 50.4
Baja 44.5
3/ 19.2
2/ 12.9
Lima Metropolitana 15.0
32.3
26.3
28.2
Grandes Ciudades41
Resto Urbano 33.3
1/ No incluye Lima Metropolitana
2/ Sin asentamientos humanos urbanos marginales (AHUM) o pueblos jovenes.
3/ Solo AAHH
4/ Comprenden: Arequipa, Trujillo, Chiclayo, Chimbote, Piura, Cusco, Iquitos,Huancayo, lea,
Tacna, Pucallpa, Puno y Cajamarca.
Fuente:INE/M. de Salud, Enero-1986, Encuesta Nacional de Nutrición y Salud-1984.
El número total de niños malnutridos en el Perú era de
1 '037,325 (1984 ), de los cuales la mayoría se localizaba en
las áreas rurales de la Sierra (44% del total):
Un estudio muestral (1994) revela que la talla ha
devenido en otro factor de exclusión. Los más pobres
crecen menos. En algunos lugares no crecen. En otros, se
achican.
c) Los más altos porcentajes de malnutrición crónica se
encuentran en las áreas rurales de la Sierra (63%) Y Selva
34. 132 Gonzalo García Núñez
CUADRO NI! 4.15 NUMERO ABSOLUTO DE NIÑOS MENORES DE 6
AÑOS DE EDAD MALNUTRIDOS SEGUN EL INDICADOR TALLA X
EDAD POR AREAS DE RESIDENCIA 1984
Regiones y Población % Población
Areas Total Malnutric. Malnutrid.
2'743,328 37.8 1'037,325
Nacional
Urbana 1'575,610 23.8 374,645
Rural 1'167,741 56.7 662,680
1'367,882 22.3 305,095
Costa
Urbana (*) 454,314 26.4 119,939
Rural 193,257 39.9 77,109
Lima Metropol. 720,311 15.0 108,047
Sierra 995,265 55.6 553,396
Urbana 267,844 36.6 98,031
Rural 727,421 62.6 455,365
Selva 385,219 46.4 178,834
Urbana 138,148 35.2 48,628
Rural 247,071 52.7 130,206
(*) No incluye Lima
Metropolitana.
FUENTE: NEJ, ENNSA - Informe General, 1986.
(56%). Es menos severa (40%) en la costa rural 111 con
excepción de las provincias de Lambayeque y Ferreñafe
(Estrato II), que explican la mayor concentración de
desnutrición crónica en la Costa Norte, en tanto que las
características socioeconómicas que denotan mejores nive-
les de calidad de vida en las provincias de la Costa Sur.
d) En Lima Metropolitana y las grandes ciudades, la
desnutrición crónica es menos severa. Hay diferencias
significativas entre los residentes en las áreas urbanas
consolidadas y las urbano-marginales. En estas últimas la
prevalencia de desnutrición crónica alcanza al 19% de los
niños menores de seis años en Lima Metropolitana y al 32%
en las otras ciudades. Sin embargo, estos niveles de
desnutrición son
35. Los olvidados de los andes 133
mucho menos graves que los observados en las áreas rurales
de la Sierra y Selva. La malnutrición alimenta a la
enfermedad. De allí la contradictoria disponibilidad de
recursos para la atención de la salud de la población y la
propia calidad de vida.
02. Hay alrededor de 36,1230 profesionales de la salud,
unos 16,443 médicos en 1992, equivalente a una tasa
aproximada de un médico por cada 1,000 habitantes,
adecuada (OMS/OPS) para países como el nuestro. Sin
embargo, los médicos, al igual que otras categorías
profesionales de la salud, se concentran en las grandes áreas
urbanas. Quedan escasos recursos para la atención en
ciudades menores y la población rural dispersa. En Lima-
Callao residen más de
12,000 médicos (un médico por cada 469 habitantes) y el
resto se distribuyen en otras cuatro o cinco grandes
ciudades. En el departamento del Cusco casi la totalidad de
los médicos están concentrados en la capital. Una situación
similar existe en camas hospitalarias.
En abril de 1987, los promedios nacionales eran de 327
habitantes por trabajador y 4,021 hab. por médico del
Ministerio de Salud. Nuevamente reaparece la desigualdad
puesto que en el Estrato I de 1,095 habitantes/trabajador y
23,826 habitantes/médico mientras que en el Estrato IV
había 240 habitantes/trabajador y 2,650 hab/médico. Las
diferencias entre estratos son mayores si se consideran los
recursos del Instituto Peruano de Seguridad Social (IPSS),
los servicios de salud de las Fuerzas Armadas y Policiales y
los recursos del sector privado que están prácticamente
ausentes en los Estratos I y 11, tendiendo a concentrarse en
las capitales de los
departamentos pertenecientes a los Estratos nI y IV,
.
particu
larmente en este último.
Los indicadores por provincias comprueban la alta
concentración del personal de salud en las áreas
predominantemente urbanas en claro perjuicio de las
rurales, revelándose así que la presencia del Estado es casi
inexistente.
36. 134 Gonzalo Garda Núñez
CUADRO NI! 4.16
HABITANTES X MEDICO y X CAMA HOSPITALARIA
SEGUN DEPARTAMENTOS -1985
DEPARTAMENTO HABITANTES HABITANTES
POR MEDICO POR CAMA
TOTAL DEL PAIS 1,088 647
TRAPECIO ANDINO
Huaneaveliea 24,552 1,829
Cuseo 5,887 1,036
Apurímae 25,574 1,918
Ayaeueho 17 ,170 1,662
Puno 12,271 1,783
SIERRA NORTE Y CENTRAL
Huánueo 5,623 1 ,425
Paseo 2,879 488
Cajamarea 15,907 4,272
Aneash 4,198 1,005
Junín 4,035 1,318
AMAZONIA
Amazonas 24,230 2,967
Lo reto 3,950 810
San Martín 10,287 1,302
Ueayali 5,385 939
Madre de Dios 3,991 830
COSTA NORTE
Piura 3,822 1,123
Lambayeque 1,967 713
Tumbes 6,237 763
La Libertad 989 O
COSTA SUR
Taena 1,839 491
Moquegua 1,081 342
lea 971 452
Arequipa 830 433
LIMA METROPOLITANA 469 392
Lima n.d. n.d.
Callao n.d. n.d.
Fuente: Ministerio de Salud, Dirección Técnica de Logística e Informática y Documentación,
MS. - 1987
n.d: No disponible
37. 135
Los olvidados de los andes
CUADRO NI! 4.17 RELACION DE HABITANTES POR
TRABAJADORES Y POR MEDICOS AL SERVICIO DEL
MINISTERIO DE SALUD, SEGUN ESTRATOS DE CALIDAD
-
DE VIDA 1987
ESTRATOS
PAIS
IV
11 111
1 . Población 3'194,551 4'301,328 3'931,387 9'299,834 20'727,100
2. No. de Trabaja-
dores 2,911 7,982 11,071 41 ,438 63,402
3. No. de Médicos 137 460 773 3,807 5,177
4. Habit/Trabajador 1,097 539 355 224 327
5. Habit/Médico 23,318 9,351 5,086 2,443 4,021
6. % Población
Nacional 15.41 20.75 18.97 44.87 100.00
Fuente:MINISTERIO DE SALUD, Dirección Técnica de
Personal. 1987
Elaboración:Proyecto RLA/86/004/1NP-
PNUD
03. Cúanto más pobre es la familia, menor es la
asistencia escolar. De allí que del 18 % de la población
nacional en edad escolar, los hijos de los más pobres, sólo
54 % estaban matriculados. La diferencia es significativa
con la escolaridad en el Estrato TI que llega al 61 %.
(porcentaje población de 5 a 19 años de edad que asiste a
algún centro de educación sobre la población total de esta
edad), 72% y 81 %. en los estratos ID y IV ( 41 % de la
población nacional en edad escolar).
Cúanto más pobre es la población menor es el apoyo
administrativo al trabajo de los docentes. Si bien la
situación no es igual a la de la salud, puesto que el
Ministerio tiene mejor distribuido a su personal y los
servicios de educación básica en el país, en un 85%, son
proporcionados por el Estado a nivel nacional hay un
promedio de 43 personas en edad escolar por docente,
siendo la desigualdad entre los estratos poco significativa.
La diferencia real radica en el
38. 136 Gonzalo García Núñez
CUADRO N2 4.18 TASA DE
ESCOLARIDAD POR ESTRATOS DE
CALIDAD DE VIDA -1981
ESTRATOS
PAIS
IV
11 111
1. Población de
5 a 19años 1'132,005 1'426,134 1'223,053 2'661,786 6'442,978
2. % Población de
5 a 19 años. 17.57 22.13 18.98 41.31 100.00
3. Población
de
5 a 19años que
asiste a escuela 606,421 871,655 885,330 2'167,618 4'531,024
4. % Población de
5 a 19 años que
asiste a escuela. 13.38 19.24 19.54 47.84 100.00
5. Tasa de
53.57 61.12 72.39 81.43 70.32
escolaridad
(en porcentaje)
Elaboración: Proyecto RLA/86/004/INP-PNUD
financiamiento de la educación pública, siempre precaria, y
la privada. Los centros educativos privados están
concentrados en los estratos III y IV. En ellos, la relación
población en edad escolar por docente es profundamente
desigual y los medios educativos abisalmente distintos.
Visto desde la perspectiva de la exclusión provocada
por el ajuste, el habitante del ámbito rural andino,
identificado y ubicado en el territorio de la extrema pobreza
en el Perú, es la víctima propiciatoria del fundamentalismo
neoliberal. Aquí los noveles funcionarios de los organismos
nacionales y multilaterales hacen sus primeros ejercicios de
economía política. Y mientras que la pobreza, en áreas
urbano-marginales, salta a la vista para todos y sobretodo
para los nopobres, la del SRA, en los pisos altos de los
andes, siempre estuvo escondida y olvidada. Los pobres del
campo andino, al
39. 137
Los olvidados de los andes
CUADRO NI! 4.19 RELACION DE HABITANTES X DOCENTES Y
ADMINISTRATIVOS AL SERVICIO DEL MINISTERIO DE EDUCACION
- 1986
POR ESTRATOS DE CALIDAD DE VIDA
ESTRATOS
PAIS
IV
11 111
1 Población
Provincial 3'166,586 4'216,584 3'813,640 9'010,29020'207,100
2 Población de
5 a 19 años 1 '234,194 1 '645,073 1 '465,505 3'297,911 7'642,683
3 Personal Docente 27,297 40,911 36,628 73,047 177,883
4 Personal
Administrativo 1,174 2,658 3,129 8,909 15,870
5 Población de
5 a 19 años/
Personal Docente 45 40 40 45 43
6 Personal Docente/
Personal Admi-
nistrativo 23 15 12 8 11
FUENTE: INEi,Perú: Proyecciones de Población por años calendarios según
departamentos, y
distritos. Boletín Especial N.9, 1985/Ministerio de Educación, OPlan,
1987.
carecer de alternativas, migraron o se resignaron a
sobrevivir en condiciones de extrema pobreza. O generaron
estrategias violentas de respuesta a las carencias motivadas
por la inacción de los que juegan el tablero electoral del
sistema político. Mientras que los pobres de la ciudad
acceden, por lo menos a los deteriorados servicios
colectivos (salud, educación, agua potable, etc.), y, en
situaciones de escasez de empleo, pueden sobrevivir en el
abigarrado mosaico del trabajo informal, el comercio y
otros servicios personales, los pobres rurales viven un
apartheid económico al que se le agregan componentes de
discriminación étnica, lingüística, política y cultural.
La pobreza no es, en consecuencia, una
circunstancia fortuita. En el Perú es un fenómeno
estructural derivado de
40. 138 Gonzalo Garda Núñez
las formas históricas que ha asumido la organización de su
sistema económico. Atacar los efectos sin alterar las causas
se asemeja a las inútiles tareas de Sísifo. Hay que admitir,
empero, que en el inmediato corto plazo es indispensable
una respuesta asistencia! a la condición de los hogares que
no alcanzan a satisfacer regularmente las necesidades
básicas de sus miembros. Cuando esta respuesta es la única
y permanente en el tiempo, el asistencialismo se toma en
paliativo impotente para atender las carencias multiplicadas
por la demografía y la tensión de expectativas. Sin duda no
atacarla ni resolverlas es el peor escenario posible.
La percepción de la pobreza varía de acuerdo a las
condiciones socio-económicas y culturales de la sociedad.
En este sentido, si bien las metodologías existentes para
medir su magnitud adolecen de algunas limitaciones, resulta
necesario efectuar una estimación de los niveles que alcanza
y así poder establecer prioridades sobre las áreas y grupos
sociales que requieren urgente atención. Ninguna como
encontrar la compatibilidad entre la política económica que
actuando sobre la expansión de la actividad, el empleo, el
ingreso y la inversión reproductiva logre vencer a la
pobreza.