1. %ROHWtQ GH 7UDQVSDUHQFLD )LVFDO ,QIRUPH (VSHFLDO
,1)250(
/$ 5,6,6 $5*(17,1$ 686 352%$%/(6 ,03$726
(1 /$ (2120,$ 3(58$1$
5HVXPHQ (MHFXWLYR
Los principales determinantes de la crisis de Argentina en los últimos tres años son el elevado nivel de la deuda
pública y los altos riesgos de liquidez y de mercado que alcanzaron récords históricos. La deuda pública
representó el 55,3% del PBI en el 2001, y los vencimientos de su servicio desde el 2002 al 2008 superarían el
60% de las exportaciones de bienes y servicios. El aumento acelerado de esta deuda hasta 1998,
principalmente de la externa, el incremento de las tasas de interés internacional en el 2000 y el rápido
crecimiento del riesgo país en el 2001 originaron altos pagos por intereses, convirtiéndose estos en el principal
factor de los altos déficit fiscales en 1999-2001. El problema de la deuda y el déficit fiscal, entre otros factores,
alimentó el incremento del riesgo país, el cual indujo a aumentos de las tasas de interés internas y, por tanto,
ejercieron presión adicional sobre el déficit fiscal. El riesgo país fue retroalimentándose con la sostenida y
creciente pérdida de credibilidad ante los continuos errores de política económica, la crisis del sistema de
convertibilidad y la falta de confianza en la clase política gobernante y no gobernante.
Por el lado real de la economía, la pérdida de competitividad debido al sistema de convertibilidad y las crisis
internacionales determinaron la desaceleración de las exportaciones, la contracción de la inversión y la
recesión económica, todo lo cual agravó el problema de la deuda pública, debilitó aún más la situación fiscal y
tornó más sombría la perspectiva económica de Argentina. Todo estos factores convergieron hacia la
precipitación de la moratoria unilateral de la deuda más grande de la historia.
Ante esta experiencia tan preocupante, surgen las interrogantes: ¿Será la economía argentina similar a la
peruana? ¿Cuál sería el impacto de la devaluación del peso sobre la economía peruana? y ¿Cuáles son las
lecciones que se deben extraer de la crisis argentina? En síntesis, las respuestas dadas en el presente trabajo
son: la economía argentina y la peruana son diferentes; los efectos desfavorables estarían en las exportaciones
y en la inversión directa extranjera, pero, en esa eventualidad, serían pequeños y manejables; y en cuanto a las
lecciones extraídas destacan: a) es necesario una gestión seria de la deuda pública, b) las cuentas fiscales
deben estar ordenadas y c) el tipo de cambio debe ser flotante.
, 5DGLRJUDItD GH OD ULVLV $UJHQWLQD
En la actualidad, Argentina atraviesa una profunda crisis económica, la cual se ha manifestado violentamente
en este último periodo como una crisis financiera, a partir de la falta de capacidad de pago de la deuda pública.
Ello se dio en un contexto económico interno de recesión prolongada, desde fines de 1998 al 2001, y en un
entorno económico internacional adverso por la sucesión de cuatro crisis (asiática, rusa, brasileña y la recesión
mundial) durante los años 1997-2001, lo cual se agravó severamente por los persistentes errores de política
económica. Este conjunto de factores determinó una acelerada pérdida de credibilidad, reflejada en el
Documento elaborado por la Dirección de Estudios Macro Externos de la Dirección General de Asuntos Económicos y Sociales del Ministerio
1
de Economía y Finanzas - MEF. Las opiniones vertidas en el presente documento no representan necesariamente la opinión del MEF.
2. %ROHWtQ GH 7UDQVSDUHQFLD )LVFDO ,QIRUPH (VSHFLDO
vertiginoso aumento del riesgo país, que finalmente condujo a la declaratoria de moratoria unilateral de la
deuda pública.
El gobierno ha devaluado el peso y para atenuar la inflación derivada ha congelado algunos precios; ha
establecido un tipo de cambio dual, uno oficial para el comercio exterior y otro libre para el resto de
transacciones; ha desindexado y pesificado las tarifas públicas; ha prohibido los despedidos en los próximos 90
días e incrementado la indemnización por despido en los siguientes 180 días, entre otras. Al tiempo que,
mantiene la moratoria unilateral de la deuda pública y administra la corrida de depósitos bancarios, en un
intento por evitar el derrumbe del sistema financiero. En las calles, continua el descontento por la escasez de
alimentos, el alto desempleo, la restricción a los retiros de los depósitos y la incertidumbre sobre una salida de
la crisis.
(OHYDGRV 1LYHOHV GH 'HXGD DOWRV 9HQFLPLHQWRV HQWUH HO HO
¿Cuál es la principal manifestación financiera de la crisis? La elevada deuda pública (externa, interna y de corto
plazo) de Argentina, la cual se tornó impagable cuando su servicio (vencimientos) sobrepasó los US$ 20000
millones y su nivel global los US$ 153000 millones en el 2001, equivalentes al 66% de las exportaciones de
bienes y servicios y al 55,3 % del PBI, respectivamente. Argentina tenía además el agravante de una elevada
concentración de los vencimientos de su deuda pública en los próximos siete años, la cual alcanzaba el 64% de
la deuda pública total. Con información a fines de junio del 2001, sólo los vencimientos de las amortizaciones
de la deuda pública en el segundo semestre del 2001 ascendían a US$ 9000 millones, en el presente año a
US$ 17000 y en los dos siguientes a US$ 31000 millones.
La deuda privada (externa e interna) también ha observado un aumento desmesurado, alcanzando un monto
de US$ 90 millones en el 2001. La deuda total de Argentina (pública y privada), por tanto, asciende a US$
243000 millones, lo que equivale al 87,6% del PBI. El componente externo de esta deuda es de US$ 142300
millones y el interno de US$ 100700 millones.
Q@SADGÃ9@ÃW@I8DHD@IUPÃ9@Ã86QDU6GÃ9@ÃG6Ã9@V96Ã9@GÃT@8UPSÃQV7GD8PÃ9@ÃÃ6SB@IUDI6
ÃVTÇÃHvyy‚r†Ã
Del 1-7
al 31-12 Del 2012
TIPO DE ACREEDOR
2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 al 2031 TOTAL
2 664 8 819 10 049 9 835 8 065 7 445 6 322 7 041 2 998 1 833 440 27 618 93 129
UDUVGPTÃQV7GD8PT
1 668 7 897 6 705 4 984 2 924 1 857 1 850 1 569 968 709 532 1 175 32 838
QS@TU6HPT
1 048 6 192 5 486 3 644 1 917 1 291 1 244 1 089 870 659 490 917 24 847
ORGANISMOS INTERNACIONALES
333 531 714 804 552 480 487 424 57 31 31 209 4 653
ORGANISMOS OFICIALES
245 1 087 417 455 373 6 81 28 22 12 11 49 2 786
BANCA COMERCIAL
42 87 88 81 82 80 38 28 19 7 552
OTROS ACREEDORES ( * )
4 332 16 716 16 754 14 819 10 989 9 302 8 172 8 610 3 966 2 542 972 28 793 125 967
TV7ÃUPU6GÃÃH@9D6IPÃ`ÃG6SBPÃQG6aP
4 766 507 5 273
G@US6TÃ9@GÃU@TPSP
9 098 17 223 16 754 14 819 10 989 9 302 8 172 8 610 3 966 2 542 972 28 793 131 240
UPU6GÃ9@V96ÃQV7GD86
( * ) No incluyen $ 327.6 millones transferidos por el PAMI al Tesoro Nacional al 31 / 12 / 1997 ( Dec. 197 / 97 ) a ser canjeados por Bonos de Consolidación 3ra Serie en $ ni $ 546.7 millones que se
consideran como deudas contraidas por el Tesoro Nacional hasta la finalización del ejercicio fiscal de 2000 ( Dec. 799 / 01) a ser liquidados con Bonos de Consolidación 3ra Serie, ni tampoco $
28.9 millones correspondientes a deudas reconocidas en virtud del Dec. 487 / 00
Fuente: Ministerio de Economía
¢'HVGH FXDQGR VH KD LGR JHQHUDGR HO DFHOHUDGR HQGHXGDPLHQWR H[WHUQRquot; Tras mantenerse estable la deuda
externa total entre 1989 y 1993, el gran aumento se inicia en los años 1994-1995, al pasar de US$ 65325
millones en 1993 a US$ 99364 millones en 1995. En este mismo periodo la deuda pública externa de largo
plazo se incrementó en US$ 9000 millones, la privada externa de largo plazo en US$ 9700 y la de corto plazo
en US$ 12700 millones. Hasta fines de 1998, la deuda externa total continuó creciendo, adicionándose casi
US$ 45000 millones. En los años siguientes, hasta el 2001, esta deuda se mantuvo estable, y se estima que en
este último año se habría alcanzado un monto de US$ 142300 millones. De esto se infiere que el aumento de la
3. %ROHWtQ GH 7UDQVSDUHQFLD )LVFDO ,QIRUPH (VSHFLDO
deuda total de Argentina entre 1999 y 2001 de US$ 243000 millones se ha debido, esencialmente, al
crecimiento de la deuda interna (pública y privada).
DEUDA PUBLICA POR TIPO DE ACREEDOR AL 30 / 06 / 01 DEUDA PUBLICA POR TIPO DE MONEDA AL 30 / 06 / 01
UPU6G)Ã
VTÇÃ quot;! #quot;ÃHvyÃHvyy‚r†
Dolares
EE.UU
72,04%
Bonos y Titulos
Publicos
71,6%
Libra Esterlina
Yen Japones
1,02%
4,74%
Otros
Letras del
Acreedores
Tesoro Euro
1,1%
2,8% Francos
Pesos 18,59%
Otras
Suizos
Multilaterales Argentinos
Banca Monedas
0,56%
18.8% 2,99%
Bilaterales
Comercial 0,06%
3,5%
2,1%
¿Cuál es la estructura de la deuda pública de Argentina? Al 30 de junio del 2001, el 71,6% de la deuda pública
estaba en bonos públicos en poder de extranjeros y nacionales, el 18,8% en prestamos de las multilaterales y
el resto en diversos acreedores. Los vencimientos del capital que se extienden hasta el año 2031 se
encontraban concentrados en los años 2002-2008, durante los cuales se debe cancelar US$ 85879 millones,
es decir, el 64%. De dicho monto, el 61,8% corresponden a vencimientos de títulos públicos. La deuda pública
contratada originalmente en dólares representaba el 72%, en euros el 18,6% y en otras monedas el resto.
El problema se complica por la generación de altos y crecientes pagos de intereses, por el aumento mismo de
la deuda, por el incremento de las tasas de interés internacional y por el fuerte aumento del riesgo país de
Argentina.
UHFLHQWHV 3HUVLVWHQWHV 'pILFLW )LVFDOHV
¿Qué originó esta deuda? Sin duda, la acumulación de deudas en el sector público nacional no financiero de
Argentina es consecuencia, principalmente, de los déficit fiscales persistentes. El déficit fiscal de este sector
entre los años 1994 y 2001 fue continuo y creciente, alcanzando un promedio anual de 1,7% del PBI. El déficit
acumulado del sector público en este periodo habría requerido de un financiamiento neto global de US$ 37816
millones, que es precisamente la principal contribución al aumento de la deuda pública.
El periodo de déficit fiscales crecientes en Argentina se inicia en el IV trimestre de 1998. Estos déficit son el
producto, básicamente, de los aumentos en valores nominales del gasto total (sin amortizaciones) y, al
evaluarlo en términos del PBI, por las caídas de este último. Los gastos se mantuvieron crecientes a pesar del
contexto económico recesivo, tanto el interno como el externo. Los ingresos corrientes descienden
moderadamente en valores nominales en el 1999 y 2000, y en el 2001 la caída es acentuada. A partir del III
trimestre de dicho año, cuando se aplica la política de déficit cero, se ajustó el gasto público con medidas
drásticas, como la disminución en 13% de las remuneraciones de los empleados públicos, y se logra reducir el
déficit significativamente.
4. %ROHWtQ GH 7UDQVSDUHQFLD )LVFDO ,QIRUPH (VSHFLDO
6SB@IUDI6)ÃDIBS@TPTÃ`ÃB6TUPTÃ9@GÃT@8UPSÃQV7GD8PÃI68DPI6GÃIPÃADI6I8D@SPÃ
8‚€‚Â…pr‡hwrÃqryÃ…‚qˆp‡‚Ãv‡r…‚Ãi…ˆ‡‚ÃhÃ…rpv‚†Ãp‚……vr‡r†
à (( Ãà ((! Ãà ((quot; à ((# à (($ ((% à (( à (('à ((( ! !
16,3 18,9 21,8 19,7 19,4 17,5 18,9 19,0 20,2 19,6 20,1
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15,0 17,4 21,5 19,3 18,9 17,2 18,6 18,8 19,2 19,5 20
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14,2 16,6 17,9 17,7 17,3 16,0 17,3 17,6 17,6 18,1 18,2
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1,2 1,4 0,3 0,3 0,5 0,3 0,2 0,2 1,0 0,1 0,1
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17,9 18,9 20,3 19,9 20,0 19,5 20,4 20,4 21,9 22 21,6
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16,2 16,8 18,7 18,4 18,8 18,2 19,1 19,1 20,8 21,0 20,7
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2,9 2,4 3,2 2,9 2,8 2,6 2,6 2,3 2,5 2,4 2,5
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1,5 1,7 1,2 1,2 1,6 1,7 1,9 2,2 2,9 3,4 3,6
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11,8 12,8 9,0 8,3 8,3 8,2 8,7 8,7 9,3 9,1 8,4
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5,0 5,3 5,3 5,9 6,0 5,7 5,9 5,9 6,1 6,1 6,2
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6,8 7,5 3,7 2,4 2,3 2,5 2,8 2,9 3,2 3,0 2,2
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1,7 2,1 1,6 1,5 1,2 1,3 1,3 1,3 1,1 1,0 1,1
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quot;ÃSr†ˆy‡hq‚ÃrÃpˆr‡h
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-1,6 -0,1 1,5 -0,3 -0,6 -1,9 -1,5 -1,4 -1,7 -2,4 -1,5
#ÃSr†ˆy‡hq‚Ãsvhpvr…‚à ÃÃ!
Fuente: CEPAL, sobre la base de cifras oficiales. * Información al tercer trimestre
a/ Comprende gobierno nacional (administración nacional más sistema nacional de seguridad social) más
empresas públicas. b/ Cifras preliminares. c/ Comprende administración nacional más sistema nacional de
seguridad social. d/ Se refiere al ahorro corriente de las empresas públicas.
El incremento del gasto se explica por: a) los mayores pagos de intereses que se incrementan en 1,2 puntos
porcentuales como consecuencia, principalmente, del alza en las tasas de interés internacional y del sistema
bancario interno (crecieron en tres puntos porcentuales) y b) el aumento de las transferencias en 0,4 puntos
porcentuales por los mayores recursos otorgados a las provincias. En los tres primeros trimestres del año 2001,
está situación varía ligeramente, el gasto desciende 0,4 puntos del PBI debido al recorte de las transferencias a
las provincias, contrarrestado por el aumento de los pagos de intereses a raíz del aumento del riesgo país.
/D )DOWD GH UHGLELOLGDG HO 5LHVJR 3DtV
El riesgo país de Argentina a comienzos del año 2001 era del orden de los 700 puntos básicos y al finalizar el
mismo 5000 puntos básicos. ¿Qué originó esta alza tan descomunal? La acelerada pérdida de credibilidad
consecuencia de una deuda pública impagable, de los errores en el manejo de la política económica durante el
año 2001, de la falta de confianza en el gobierno y en el sistema político y de la inviabilidad del sistema de
convertibilidad.
Veamos cuáles han sido los principales errores de política económica. Domingo Cavallo, el creador del Sistema
de Convertibilidad, quien había sido capaz de sortear la crisis de 1995, contrariamente a lo que se esperaba,
dio varios pasos en falso. Introdujo un régimen monetario híbrido en el cual los dólares de las exportaciones se
cambian a con un peso devaluado (1,08 pesos por dólar) y las demás operaciones al cambio de un dólar por un
peso. Luego, se promulgó una ley que cambia la divisa de referencia a una canasta por euros y dólares en
partes iguales, la que entraría en vigencia una vez que el euro alcance paridad con el dólar. Estas medidas
incrementaron la incertidumbre en el mercado, generando un pánico financiero y la elevación de las tasas de
interés en previsión del fin de la convertibilidad y de una posible devaluación.
En el campo fiscal, se introdujo una política de déficit fiscal cero. Ello significaba que los gastos se ajustaban a
los ingresos. Para hacer esto posible, se decretó la disminución de las remuneraciones y pensiones en 13% y
se redujeron las transferencias a las provincias. Si bien estas medidas se orientaban desde un punto de vista
técnico en la dirección correcta, no eran viables social y políticamente.
5. %ROHWtQ GH 7UDQVSDUHQFLD )LVFDO ,QIRUPH (VSHFLDO
A estas medidas se sumaron las restricciones en los retiros en efectivo de los depósitos bancarios. La finalidad
de esta medida era frenar la fuga de depósitos que llevaría a la quiebra del sistema bancario. Sin embargo, un
gran sector interpretó la medida como una ruptura del sistema de convertibilidad, ya que bajo este sistema era
necesario tener un flujo de capitales sin ningún tipo de restricciones. Dicho de otro modo, se generaron
expectativas de una futura devaluación del peso. Estas medidas terminaron por acentuar la incertidumbre de
los inversionistas y, por consiguiente, el riesgo país se elevó 46%, desde 951 puntos básicos en promedio en
junio a 1386 en promedio en julio.
Con Rodriguez Saá la incertidumbre aumenta, particularmente, por sus antecedentes políticos y por la decisión
de crear una tercera moneda. Esta última constituía una nueva violación al sistema de convertibilidad, ya que se
iba a emitir inorgánicamente para financiar el pago de remuneraciones y pensiones. Las pocas medidas
decretadas se orientaron a atender la crisis social. No tuvo tiempo para formular un programa económico. El
riesgo país en los últimos días de Rodriguez Saá llegó a los 5000 puntos básicos.
Eduardo Duhalde decreta la eliminación de la convertibilidad, estableciendo un sistema cambiario dual con un
dólar fijo en 1,40 pesos y otro flotante. En una segunda etapa dejaría flotar el tipo de cambio. Se continúo con la
restricción de los retiros de los depósitos bancarios flexibilizándolos gradualmente. Se autorizó hasta
determinados topes la conversión a pesos de depósitos en dólares, se desindexó y pesificó las tarifas públicas y
se autorizó al Ejecutivo regular transitoriamente sobre precios de bienes y servicios críticos para los
consumidores. Con estas medidas, según el Presidente Duhalde, se orienta a abandonar el injusto y fracasado
modelo neoliberal.
6LVWHPD GH RQYHUWLELOLGDG RPSHWLWLYLGDG
Tres de los determinantes del aumento exponencial del riesgo país están relacionados con el sistema de
convertibilidad. Primero, las modificaciones directas del sistema, al establecer un tipo de cambio dual y la
introducción de nueva moneda (el argentino). Segundo, los cambios en las condiciones internas para el normal
funcionamiento del sistema, como la fijación de restricciones a la libre circulación de dólares, que se observa en
los límites al retiro de los depósitos en dólares, la fuga de capitales argentinos al exterior y la generación de un
alto servicio de la deuda externa. Y tercero, los cambios en las condiciones externas para el normal
funcionamiento del sistema, como la reorientación de las corrientes internacionales de capitales privados hacia
países desarrollados en perjuicio de las economías emergentes. Todo lo anterior ilustra la profunda y abierta
crisis del sistema de convertibilidad.
El sistema de convertibilidad también fue un determinante en el mediano plazo de la actual crisis económica y
financiera en Argentina. El mantenimiento de la paridad (1 dólar = 1 peso) fue minando la competitividad a largo
de los 11 años de su vigencia. El tipo de cambio real disminuyó entre 1992 y el 2001 en 25,2%. Casi la mitad
de dicha pérdida se produjo entre los años 1997 y 2001, donde ciertamente influyó la crisis internacional al
provocar ajustes cambiarios que ocasionaron disminuciones en los precios internacionales de las
manufacturas.
Las consecuencias de la pérdida de competitividad han sido desalentar la actividad exportadora, incentivar las
importaciones, aumentar el déficit en cuenta corriente de la balanza de pagos, originar una menor ganancia o
mayor pérdida de RIN y generar una disminución en la credibilidad del gobierno y de sus políticas económicas.
Todo ello ejercía una presión al alza en el riesgo país. En efecto, las exportaciones de bienes y servicios, desde
1992 hasta 1998 (año en se inicia la etapa más dura de la crisis financiera internacional), crecieron 116,1%, y
las importaciones de bienes y servicios 234,3%; la balanza en cuenta corriente pasó de un saldo superavitario
de US$ 2820 millones (1,2% del PBI) a un déficit de US$ 14708 millones (-4,9% del PBI); las reservas
internacionales siguieron creciendo hasta 1999, pero en 2000 y 2001 caen en US$ 440 millones y US$ 10400
millones, respectivamente.
La importancia de los ingresos de capitales externos, con incidencia en el sector real, se puede ver a través de
la inversión extranjera directa (IED). En Argentina el flujo de IED adquiere más importancia desde 1996 al
6. %ROHWtQ GH 7UDQVSDUHQFLD )LVFDO ,QIRUPH (VSHFLDO
aproximarse a los US$ 5000 millones, que se elevan en 1999 y 2000 hasta US$ 22600 millones y US$ 10553
millones, respectivamente. La IED de 1999 se debe, fundamentalmente, a la privatización de Yacimientos
Proliferas Fiscales (YFP) adquirida por Repsol, operación que representó aproximadamente US$ 13000
millones; mientras que las del 2000 se asocian con el aumento de la participación de Telefónica de España en
el sector de telecomunicaciones con US$ 3700 millones y del Banco Santander Central Hispano en los bancos
Río de la Plata y el Banco Galicia.
Si bien la pérdida de competitividad ha incidido adversamente en el sector real y en la balanza de pagos, los
efectos no se evidenciaron debido a que el ingreso de capitales externos, que constituyó una importante
inyección a la inversión, las exportaciones, y por tanto, al crecimiento económico, contrarrestó el efecto
negativo del sistema de convertibilidad.
,, 'LIHUHQFLDV 6XEVWDQFLDOHV HQWUH OD (FRQRPtD $UJHQWLQD OD 3HUXDQD
$UJHQWLQD HV PiV YXOQHUDEOH D ORV VKRFNV H[WHUQRV TXH HO 3HU~. La crisis asiática originó una caída en los
precios internacionales de los productos básicos; mientras que, la crisis rusa que se suma a la anterior, provocó
la interrupción del financiamiento externo, una disminución en el nivel de actividad económica, depreciación de
las monedas y caídas de las reservas internacionales. Desde entonces, IV trimestre de 1998, la economía
argentina se encuentra en recesión, mientras que la peruana está creciendo desde mediados del 2001.
$UJHQWLQD HV PHQRV FRPSHWLWLYD TXH HO 3HU~. El sistema de convertibilidad adoptado por Argentina desde
1991 no sólo implicó renunciar a la política monetaria, sino también a la mejora de la competitividad. En
cambio, el sistema de flotación cambiaria le permitió a Perú evitar el desalineamiento del tipo de cambio. Con la
crisis rusa, Chile tuvo una devaluación del 10%, Colombia de 25%, México de 15,3% y Perú de 15,4%,
mientras que Argentina mantuvo la paridad de un peso un dólar. El tipo de cambio real de Argentina es menor
en 13% respecto al del año 1995, mientras que el de Perú es 2,8% mayor.
$UJHQWLQD SLHUGH UHVHUYDV HO 3HU~ JDQD. El nivel de reservas internacionales no sólo facilita el financiamiento
de los déficit de cuenta corriente, sino que además contribuye a la estabilidad del tipo de cambio. Durante los
últimos meses, en Argentina las reservas internacionales netas presentan una caída continua hasta alcanzar
los US$ 14747 millones, lo cual representa una disminución de un 44,1% con respecto al año anterior, mientras
que el Perú ha visto incrementar sus reservas en un 5,3%.
(Q $UJHQWLQD HO GpILFLW ILVFDO DXPHQWD PLHQWUDV TXH HQ HO 3HU~ GLVPLQXH. En los últimos tres años, el
déficit fiscal en Argentina registra un continuo incremento, principalmente por el aumento de los gastos
nominales. El financiamiento de los déficit fiscales se ha realizado con bonos que pagan altas tasas de interés
para compensar el descomunal nivel del riesgo país. Estos intereses se han convertido en factores adicionales
del déficit. Argentina alcanzó en estos tres últimos años (1999-2001) déficit de 1,7%, 2,4% y 3,5%, al tiempo
que Perú obtenía 3,1%, 3,2% y 2,4%.
(O UDWLR GH OD GHXGD H[WHUQD WRWDO GH $UJHQWLQD HV PiV DOWD TXH OD GHO 3HU~. La deuda externa total de
Argentina, como porcentaje de las exportaciones de bienes y servicios, se ha elevado desde 1997, llegando
alcanzar en el mes de septiembre del 2001 un ratio de 4,5 veces el monto de dichas exportaciones. En Perú el
ratio es de 3,2 veces las exportaciones de bienes y servicios.
(O GHVHPSOHR HV PiV DOWR HQ $UJHQWLQD. El cierre de tres mil empresas en los últimos tres años en Argentina,
junto con la adopción de medidas impopulares, tal como el recorte de 13% en los salarios y pensiones públicas,
ha originado el incremento del descontento popular. El desempleo urbano alcanza el 17,4%, la cifra más alta en
los últimos 5 años. En lo que respecta al Perú, en Lima Metropolitana, el desempleo bordea el 9,5%.
7. %ROHWtQ GH 7UDQVSDUHQFLD )LVFDO ,QIRUPH (VSHFLDO
(O ULHVJR 3DtV GH $UJHQWLQD KD VLGR FDVL YHFHV HO GHO 3HU~. El riesgo país de Argentina, elaborado por J.
P. Morgan (EMBI+) sobrepasó la barrera de los 5000 puntos a fines de diciembre, consecuencia de la
incapacidad de pago de la deuda pública, el clima de violencia y la crisis política, reflejada en la sucesión de
cinco presidentes (De la Rúa, De la Puerta, Rodríguez Saa, Camaño y Duhalde) en menos de dos semanas.
Mientras que el riesgo país del Perú se encuentra desde hace varios meses en niveles por debajo de los 600
puntos básicos.
/RV ERQRV %UDG GH 3HU~ VRQ PiV DWUDFWLYRV. Ante la crisis argentina los inversionistas extranjeros están
buscando remplazar en sus portafolios los instrumentos de dicho país. En este contexto, los bonos Brady
peruanos se muestran como una buena alternativa debido al menor riesgo implícito (menor riesgo país).
Mientras los bonos Brady argentinos siguen tocando piso, los peruanos, hasta el 15-ene-02, habían alcanzado
máximos históricos: en el PDI 79,6% y en el FLIRB 73,8%.
,,, (IHFWRV 3UREDEOHV GH OD 'HYDOXDFLyQ $UJHQWLQD HQ OD (FRQRPtD 3HUXDQD
La devaluación del peso argentino está aún en proceso, pero no es difícil prever que inevitablemente la tasa de
cambio de mercado se ubicara por encima de 1,4 pesos por dólar y probablemente por debajo de 2 pesos por
dólar. En esta sección se presentan los probables efectos de dicho evento en la economía peruana. Los
canales de transmisión considerados son el cambiario, el comercial, los precios internacionales, la inversión
extranjera y el financiero.
El efecto de la devaluación del peso argentino en la depreciación del nuevo sol es o será escasamente
significativo. Este efecto, de haberse dado, se hubiera visto incluso desde mucho antes de la fijación del tipo de
cambio oficial en 1,4 pesos por dólar el 09-ene-02. Por tanto, si no hay efecto apreciable en el presente, es
improbable que en un futuro cercano se produzca. La depreciación en el Perú la determina el mercado
cambiario, es decir, libremente, más allá de las intervenciones episódicas del BCRP. En tal sentido, su nivel es
de equilibrio de corto plazo y está, por tanto, en concordancia con los fundamentos económicos. Otro factor que
garantiza que no haya depreciación notoria es el nivel de RIN, el cual al cierre del año 2001 ascendió a US$
8613millones.
El efecto de la devaluación argentina en el volumen del comercio exterior peruano será marginal, ya que los
volúmenes de exportaciones a dicho país y los de las importaciones desde ese país alcanzan únicamente 0,4%
y 4% de los totales correspondientes, respectivamente. El volumen de exportaciones de Perú hacia Argentina,
cuyos principales productos son el zinc, la plata, las aceitunas y los palmitos preparados, disminuiría en el
2002, mientras persista la recesión. El efecto indirecto a través de Mercosur que podría tener alguna incidencia
tampoco es significativo gracias al bajo volumen de las exportaciones peruanas a este mercado, del orden del
3,5% en el 2000. Las importaciones, constituidas principalmente de maíz duro, trigo duro, soya (aceite, tortas y
demás residuos sólidos) y petróleo, mantendrían, en términos generales, los mismos niveles, debido a que no
hay efecto neto significativo sobre la actividad económica de Perú.
El riesgo país de Argentina alcanzó niveles inimaginables al sobrepasar en sus momentos más críticos los
5000 puntos básicos. En la actualidad dicho indicador se encuentra alrededor de 4500 puntos básicos. Si
prevaleciera el contagio ciego en la región, como era hasta antes de noviembre del 2001, el riesgo país de Perú
estaría bastante por encima del que observa el día 17 de enero, 473 puntos básicos, ahuyentando al capital
extranjero y encareciendo las tasas de interés de los créditos y de los bonos soberanos a colocar. Eso no está
ocurriendo, y se espera que no haya tal contagió debido a que los inversionistas extranjeros están
diferenciando los riesgos de cada país. No podría esperarse un aumento del riesgo país porque la economía
peruana es diferente a la economía Argentina. Las agencias de clasificación de riesgo Standard Poor’s y
Moody’s mejoraron su percepción respecto al horizonte de largo plazo para el Perú, gracias a que la economía
peruana cuenta con un nivel de liquidez bastante holgado, a diferencia de otros países que tienen el mismo
rating crediticio. Así, para la primera de estas agencias, el Perú pasó de perspectivas de largo plazo HVWDEOH a
SRVLWLYD mientras que para la otra, de QHJDWLYD a HVWDEOH.
8. %ROHWtQ GH 7UDQVSDUHQFLD )LVFDO ,QIRUPH (VSHFLDO
El efecto en la balanza financiera podría tener cierto grado de importancia, ya que existen compromisos e
interés de Argentina en ampliar las inversiones en Perú en los sectores telecomunicaciones, agropecuario y
carreteras, que se sumarían a las existentes en los sectores petróleo, comercio, transportes e industria.
Recordemos que las inversiones argentinas están en YPF (hoy Repsol), Pérez Compac, Pluspetrol, Petrolera
San Jorge, Cerámicas San Lorenzo, Camisea, entre otros. De modo que el conjunto de inversiones ya
realizadas, las comprometidas y las proyectadas ascenderían en los próximos años, según la embajada
argentina en Perú, a US$ 3000 millones.
Dicho todo lo anterior, queda claro que el efecto sobre el crecimiento económico prácticamente sería
inexistente. Las exportaciones a Argentina y a Mercosur, que de hecho podrían disminuir, representan un
escaso porcentaje de nuestras exportaciones totales, y las eventuales menores inversiones argentinas son
bajas y, probablemente, sustituibles por otros inversionistas. Efectos a través de los canales cambiario, de
precios internacionales y financiero sobre la actividad económica, no habrían.
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Las lecciones de la crisis Argentina son varias.
3ULPHUR.- El endeudamiento público externo no puede ser alto indefinidamente, éste debe concertarse en el
marco de una política general de endeudamiento público que contemple limites al endeudamiento, stock y al
servicio de la deuda, que evite altas concentraciones de los vencimientos del principal y que busque reducir y/o
diversificar los riesgos de liquidez y de mercado del servicio de la deuda, todo lo cual se hace más perentorio
en el actual contexto de la globalización de la economía mundial.
6HJXQGR.- Los problemas de la deuda se complican ante la falta de políticas coherentes, creíbles y oportunas,
y de autoridades que generen confianza entre los inversionistas extranjeros, ya que la ausencia de confianza y
credibilidad aumenta el riesgo país, las tasas de interés, la fuga de capitales, la especulación contra la moneda
nacional, la evasión tributaria, entre otros hechos. Ello podría originar una situación de insolvencia, con el
consecuente cese del pago del servicio de la deuda pública.
7HUFHUR.- Es necesario mantener una política fiscal disciplinada. El objetivo debe ser fortalecer las finanzas
públicas racionalizando su gestión y consolidando las bases tributarias internas.
XDUWR.- Fijar una moneda con respecto a otra como el dólar es muy arriesgado en un mundo con tipos de
cambio predominantemente flexibles. Cuando se opta por un régimen de este tipo con libre movilidad de
capitales es necesario contar con precios flexibles en los mercados de bienes y de factores para poder
absorber los shocks exógenos a la economía nacional.
4XLQWR.- No considerar el desempleo o el crecimiento en el diseño de la política económica es muy arriesgado,
porque se podría agravar el problema social y generar inestabilidad política.
10. %ROHWtQ GH 7UDQVSDUHQFLD )LVFDO ,QIRUPH (VSHFLDO
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