El documento describe el desempleo en España, incluyendo sus definiciones, tipos (estructural, friccional, estacional y cíclico), efectos, medición y tasas actuales. Explica que España tiene la tasa de temporalidad laboral más alta de la UE, especialmente entre los inmigrantes. También detalla que el gobierno español gasta mucho más en subsidios de desempleo que en políticas activas para crear empleo.

1. EL PARO LABORAL EN ESPAÑA

7. Madrid, 14 ene (EFE).- Expertos en economía prevén que la reforma laboral que propone el Gobierno sea " descafeinada " y advierten de que, si no va acompañada de un cambio en el modelo productivo, la tasa de paro puede tardar más de una década en reducirse por debajo del 10%. Así lo reflejan en una propuesta para la reactivación laboral en España elaborada por algunos de los firmantes del Manifiesto de los 100, que propugna la implantación de un contrato único con una indemnización creciente, de 12 días por año trabajado hasta 36 días con una antigüedad de 12 años, frente a los 45 días actuales. El nuevo informe, publicado por la Federación de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA) critica que las dos propuestas del Ejecutivo para acometer una reforma laboral, la implantación del denominado "contrato alemán" y la contratación a tiempo parcial sean "escasamente efectivas para hacer frente a la dramática situación actual". Aseguran que una reforma laboral debe ir acompañada de un cambio en la estructura productiva para que la tasa de paro descienda por debajo del 10% en seis años y medio e insisten en que con el contrato único más de la mitad de los trabajadores mejorarían su prestaciones por desempleo. En la nueva propuesta advierten de que el modelo del "contrato alemán" es de difícil implementación en el mercado laboral español y tiene un elevado coste ya que argumentan que "no tiene sentido" subvencionar a empresas para mantener la actividad en sectores que deben reestructurarse. No obstante, puntualizan que de llevarse a efecto su implantación debe ser "temporal" y las empresas que los suscriban deberían "devolver el subsidio" otorgado por el Gobierno. Así lo explicó a los medios de comunicación uno de los coordinadores del informe Juan José Dolado, profesor en la Universidad Carlos III de Madrid, quien dijo que las bonificaciones y subvenciones "no son el camino idóneo" para acabar con la contratación temporal. "La tasa de despido de trabajadores indefinidos con bonificaciones es un 25% superior para mujeres mayores de 45 años y un 45% superior para los hombres de igual edad", puntualizó Florentino Felgueroso, autor de uno de los artículos publicados. Además, estos expertos advierten de que la propuesta del Ejecutivo de fomentar el contrato a tiempo parcial "debe controlarse" para evitar crear una subclase de trabajadores con salarios bajos, baja formación y menos posibilidades de promoción. Al respecto, ponen como ejemplo que una mujer con contrato indefinido y a tiempo parcial gana un 9% menos de media que otra con contrato a tiempo completo, mientras que si el contrato es temporal la penalización se eleva al 23%. Por todo ello, insisten en que el contrato único beneficiaría especialmente la contratación de jóvenes de entre 16 y 35 años y perjudicaría "sólo a un minoría" calculada en un 10%, al tiempo que el sobrecoste para los empresarios supondría un 0,60% en diez años. Dolado recordó que esta propuesta "no tiene nada que ver" con la realizada por la CEOE, que promueve un contrato con una indemnización por despido de 20 días por año trabajado, ni con la del PP, que -en su opinión- "no están concretadas".EFE

9. LD (Europa Press) La deuda pública aumentará más de 20 puntos y supera el 62% en 2010, mientras que el déficit por cuenta corriente se moderará hasta -6,9% del PIB en 2009 y el -6,3% este año. Y la inflación se situó en el -0,1% de media en 2009 debido a la caída del precio del petróleo y de los alimentos y remontará ligeramente el año siguiente hasta situarse en el 1,4%. Pese a que ello reduce el diferencial de inflación con la eurozona, el Ejecutivo comunitario resalta que "la competitividad de la economía española seguirá siendo débil". Los pronósticos de Bruselas son sustancialmente peores que los del Gobierno (que prevé una contracción del 1,6% el Año pasado pero una recuperación del 1,2% en éste) e incluso que los del Banco de España (-3% y -1%, respectivamente) o del FMI (-3% y -0,7%). El Ejecutivo comunitario aclara que las previsiones sobre España se cerraron sin conocer la "sorprendentemente fuerte reducción" del empleo durante el primer trimestre registrada por la Encuesta de Población Activa (EPA) De hecho, la previsión de paro de Bruselas para el conjunto de 2009 (17,3% de la población activa), ya se vió superada en el primer trimestre (17,4%) del 2009, según los datos de Eurostat. El Ejecutivo comunitario también se queda corto en su pronóstico de la caída del PIB durante el primer trimestre de 2009, ya que preveía un retroceso del 1,4%, pero la cifra real fue según el Banco de España del 1,8%. España cuenta con grandes "desequilibrios" El Ejecutivo comunitario alerta además que los "desequilibrios" de la economía española, como la baja competitividad, el elevado déficit por cuenta corriente o el hundimiento de la construcción, "dificultan" la recuperación . De hecho, mientras que la mayoría de países de la UE iniciarán una tímida recuperación a principios de 2010, España será el único Estado miembro con tasas de crecimiento negativo incluso en el último trimestre de este año. En este sentido, Bruselas prevé que la inversión en construcción y bienes de equipo siga cayendo el año que viene porque el ajuste en estos sectores todavía no se habrá completado. Además, caerá la inversión pública debido a que se habrá completado el plan del Gobierno de inversiones en los ayuntamientos. En un contexto de restricción del crédito, la inversión privada podría caer todavía más, afectando negativamente al empleo y al consumo. Además, la financiación de la creciente deuda de España podría pesar todavía más en la actividad doméstica. En el lado positivo , un aumento de la población superior al esperado podría tener un impacto negativo sobre la actividad económica, sosteniendo el consumo y la construcción e introduciendo más flexibilidad salarial en el mercado laboral. También podrían incrementarse las exportaciones más de lo vaticinado y los hogares se beneficiarán de una reducción del coste del crédito por la caída de tipos.