2. Sobre la China…
Una vez constituida, la China conservó
durante decenas de siglos características
singularísimas, las cuales permiten
considerarla, al menos antes de sufrir las
contaminaciones de nuestro siglo, como
un mundo aparte.
3. Técnica,autoresy
escenografíadelteatro
chino.
En la China, como en el resto del
mundo, los orígenes del teatro son
religiosos. Y como en el resto del
mundo, no sólo religiosos.
La tragedia y la
comedia del
teatro se derivan
de las antiquísimas
danzas de los
“medium”
religiosos y las
bufonadas de los
juglares cortesanos.
4. Pero la influencia decisiva
en el nacimiento de la
representación dramática
parece haberla tenido un
tercer elemento, debido al
culto de los penantes.
Este culto consiste en
ofrecer al muerto lo que
amó en su vida. El difunto
estaba representado por
una persona disfrazada
que, además de imitar su
aspecto, reproducía su
voz, sus gestos y, más
tarde, las vicisitudes de su
vida.
T´ang Ming-Huang,
patrono de los actores
chinos.
5. El actor es quien
cuenta en el teatro
chino, que se
transformó de un
lugar de recogimiento
a uno de distracción.
Se trata de un histrión
que se lo procura con
una especie de
espectáculo de
variedades hecho de
mímica, danzas, canto
y recitación, en que el
texto literario o
musical, sólo tiene
una importancia
secundaria frente al
ejecutor.
6. El escenario, hecho para el triunfo del
actor, carece de todo esplendor: es una
plataforma cuadrangular abierta por tres
lados hacia la platea donde el público
come, bebe, fuma y charla.
El público no se sienta de frente al
escenario, sino de lado, ya que las mesas
y sus correspondientes bancos no están
dispuestos paralelamente la escena, sino
perpendicularmente: ofreciendo así la
posibilidad de prestar de vez en cuando
atención a lo que ocurre en el escenario.
7. El espectáculo dura, por lo generañ,
desde las cinco de la tarde hasta pasada
la medianoche y comprende diversas
comedias.
No hay telón ni
Bastidores. El fondo
del escenario en un
Tabique de tapices
con dos puertas; una para entrar y otra
para salir.
8. La orquesta (laúd,
flauta, clarinete y
varios tambores y
tímpanos muy
ruidosos) está
colocada sobre el
escenario muy a la
vista, entre la
primera y la segunda
puerta; su misión es
acompañar la acción
subrayando ciertas
escenas,
9. El esplendor de la escenografía china
consiste en la riqueza de la indumentaria
del actor, siempre deslumbrante. Cada
actor lleva el traje que corresponde a su
“papel”; se enumeran un centenar de
tipos diferentes, Pero el color de esos
trajes varía según los estados de ánimo.
11. En cuanto a las
máscaras, ya se habla
de ellas un milenio
antes de Cristo; las
hay hermosísimas y
horribles, pero con
tendencia a la
deformación
monstruosa.
12. Por lo general, todos los papeles,
inclusive los femeninos, están a
cargo de hombres; pero hubo largos
paréntesis en que también fueron
admitidas en las representaciones
mujeres educadas eb escuelas
creadas con ese fin y clausuradas
después por nuevos decretos
dictados en nombre de la tradición y
la moral.
13. En cuanto a la técnica del
espectáculo, debemos
reparar, ante todo, en el
método, pueril pero eficaz
de exponer los hechos
anteriores a los
representados en el drama,
mediante un sistema de
declaraciones iniciales.
Cada personaje, al entrar
en la escena, antes de
empezar la acción se dirige
al público y declara sin
ambages quién es, de
quién es hijo, de dónde
viene, qué ha hecho hasta
entonces, qué se propone
hacer.
14. Para ciertas convenciones hay un código.
Un abanico junto al rostro del actor
representa un paseo al sol. Si el actor
anda por el escenario con los brazos
extendidos, como a tientas, quiere decir
que la escena está a oscuras. El llanto se
finge pasándose lentamente las manos
sobre los ojos.
El público conoce todo este código y exige
que sea respetado puntualmente.
Gran parte del pueblo chino demostró
intransigencia contra el teatro.
Emperadores, literatos, entre otros.
15. El único medio de justificar el teatro es
concebirlo como instrumento de los fines
morales que, oficialmente constituyen la
preocupación fundamental de los literatos.
Código penal chino: “El drama debe
ofrecer en la escena pinturas verdaderas
o ficticias de hombre buenos y justos, de
mujeres castas, de hijos afectuosos y
obedientes que inducen a la práctica de la
virtud”.
16. LA REALIDAD ES BIEN DIFERENTE, En el
drama chino hay rasgos de tal crudeza
que escandalizan al espectador.
Los textos más antiguos del repertorio
dramático no tienen más de mil o mil
doscientos años.