El documento describe el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), incluyendo sus características, causas y síntomas. El TDAH es un trastorno neurobiológico crónico que afecta entre un 5-10% de los niños y puede persistir hasta la edad adulta. Se manifiesta a través de dificultades para prestar atención, controlar impulsos e hiperactividad. Tiene un componente genético y puede ser influenciado por factores ambientales durante el embarazo, a
2. El TDAH o Trastorno por Déficit de
Atención e Hiperactividad es un
trastorno neurobiológico de carácter
crónico, sintomáticamente evolutivo
y de probable transmisión genética
que afecta entre un 5 y un 10% de la
población infantil, llegando incluso a
la edad adulta en el 60% de los casos.
Está caracterizado por una dificultad
de mantener la atención voluntaria
frente a actividades, tanto
académicas como cotidianas y unido
a la falta de control de impulsos. La sintomatología puede manifestarse de forma
diferente según la edad del niño y se debe
desarrollar en dos ó más ambientes como en casa y
en el colegio. Se da con mayor frecuencia entre los
niños que entre las niñas en una proporción 4:1, y lo
padecen tanto niños como adolescentes y adultos
de todas las condiciones sociales, culturales y
raciales. se centra en un fallo en el desarrollo de los
circuitos cerebrales en que se apoyan la inhibición y
el autocontrol, funciones cruciales para la
realización de cualquier tarea.
.
3.
4. DÉFICIT DE ATENCIÓN
• A menudo no presta atención suficiente a los
detalles y comete errores por descuido tanto en las
tareas escolares como en otras actividades.
• A menudo tiene dificultad para mantener la
atención en las tares.
• A menudo tiene dificultad para organizar tareas o
actividades.
• A menudo evita tareas que le requieren esfuerzo
mental.
• A menudo no sigue las instrucciones que se le
indican.
• A menudo parece no escuchar cuando se le habla.
• A menudo pierde cosas necesarias para las tareas
(lápices, libros, ejercicios escolares, agenda,?.).
• A menudo es descuidado y olvidadizo en las
actividades diarias (lavarse los dientes, vestirse,
recoger sus cosas).
• A menudo se distrae fácilmente por estímulos
irrelevantes.
• A menudo tiene dificultad para prestar atención a
dos estímulos distintos ( por ejemplo, leer lo que
está en la pizarra y escribirlo en el cuaderno).
5.
6. HIPERACTIVIDAD
• A menudo mueve en exceso manos y pies y se retuerce en el asiento.
• A menudo le cuesta quedarse sentado cuando lo debe hacer.
• A menudo corre o trepa en situaciones inapropiadas. A menudo le es difícil
jugar o participar en actividades en forma tranquila.
• A menudo "está en marcha" y suele actuar cómo si tuviera un motor.
• A menudo habla en exceso.
• A menudo expresa las emociones con mayor intensidad.
• A menudo va de un lado a otro sin motivo aparente.
• A menudo le cuesta esperar su turno.
7. IMPULSIVIDAD
• A menudo actúa sin pensar.
• A menudo habla en momentos poco oportunos o responde precipitadamente a
preguntas que todavía no se han acabado de formular.
• A menudo interrumpe a los demás o se entromete en sus asuntos.
• A menudo interrumpe en juegos y explicaciones.
• A menudo es poco previsor y olvida planificar.
• A menudo se muestra impaciente y tiene dificultad para aplazar una
gratificación
• A menudo pierde con facilidad la paciencia.
• A menudo tiene mal humor o irritabilidad.
• A menudo no sabe perder y se pelea por cualquier cosa.
• A menudo destroza sus propias cosas y las de otros.
8. Los síntomas que evidencian un TDA-H pueden presentarse en su totalidad o en parte.
El Manual Diagnóstico Estadístico de Enfermedades Mentales DSM-IV, distingue tres
subtipos:
Predominantemente INATENTO . Si al menos 6
síntomas de atención, pero menos de 6 en el de
impulsividad- hiperactividad están presentes por un
mínimo de 6 meses.
Predominantemente HIPERACTIVO – IMPULSIVO
Si al menos 6 síntomas de hiperactividad-impulsividad
están presentes, pero menos de 6 del ámbito de atención
por un mínimo de 6 meses.
COMBINADO. Si al menos 6 de los
síntomas de atención y 6 de los síntomas
de hiperactividad- impulsividad están
presentes por un mínimo de 6 meses.
9. Comportamientos y manifestaciones mas
habituales
Su actividad motriz les lleva a levantarse
continuamente de su asiento, charlar con los
compañeros, hacer ruido... lo que provoca
una interrupción constante del profesor
Su dificultad de concentración les hace
distraerse fácilmente, llevándoles a dedicar
más tiempo de lo normal a la ejecución de las
tareas escolares y a obtener unos
rendimientos más bajos. Ese bajo
rendimiento escolar es consecuencia también
de una mala memoria secuencial,
produciéndoles dificultades de aprendizaje
tanto en operaciones aritméticas, como en
lecto-escritura.
10. Su impulsividad les suele llevar a un deseo de
terminar las tareas lo más rápido posible, lo
que provoca que cometan tantos errores,
como comerse sílabas o palabras cuando
escriben o leen, confundir unas palabras con
otras
A todas estas características hay que sumarles el alto grado
de frustración que les produce el no realizar las tareas con
la misma rapidez y diligencia de sus compañeros, las
continuas quejas de sus profesores, el rechazo de sus
compañeros, que en ocasiones les lleva a reaccionar con
rabietas o estallidos, mostrándose hacia los demás como
una persona con poca capacidad de autocontrol.
Todo ello tiene como consecuencia que les provoque una baja AUTOESTIMA sobre si
mismo apareciendo entonces otros trastornos como la DEPRESIÓN y ANSIEDAD, trastorno
de conducta, TRASTORNO DE OPOSICIÓN DESAFIANTE, en definitiva, una detección no
temprana les puede conducir a cualquier tipo de conducta antisocial.
11. DIFERENCIAS ENTRE TDA Y TDAH
DÉFICIT DE ATENCIÓN HIPERACTIVIDAD
• Tienen una gran dispersión mental y se
distraen muy fácilmente
• Les cuesta entender las cosas de un modo
claro y rápido. Parece que no entienden
las órdenes al 100%
• Cualquier tarea que implique mucha
atención o concentración les supone un
esfuerzo titánico que no siempre son
capaces de mantener.
• Dificultad para organizarse.
• Son muy distraídos y se olvidan
rápidamente de las cosas
• Incapacidad para estarse quieto y
concentrarse en algo. Les suele costar
mantener todo su cuerpo relajado
• Siempre están moviendo los pies,
mordiéndose las uñas, etcétera.
• Normalmente es incapaz de acabar algo
que le suponga un esfuerzo (a no ser que
le motive especialmente)
• Cuando habla se expresa con excesiva
locuacidad.
• No puede esperar su turno e interrumpe
con facilidad a los demás.
• Es muy impaciente y le cuesta estar
sentado en forma relajada.
• Su impulsividad le lleva a precipitarse en
la mayoría de las acciones.
12. ¿Qué es la Inatención o Déficit de Atención?
En el DSM-IV, el MANUAL DE DIAGNÓSTICO DE LA ASOCIACIÓN ESTADOUNIDENSE DE
PSIQUIATRÍA hay una lista de nueve síntomas propios de los problemas de "falta de
atención“. Casi todo el mundo tiene cierta dificultad con algunos de ellos de vez en cuando
por eso es un requisito para el diagnóstico que se den de manera intensa y que como
resultado sufran un impedimento significativo. Las personas que califican para un
diagnóstico de TDA/H presentan al menos seis de estos nueve síntomas.
Con frecuencia no prestan atención a los detalles o cometen errores por descuido en
la tarea escolar, el trabajo u otras actividades.
A menudo tienen dificultad para mantener la atención en tareas o actividades de
juego.
Con frecuencia no parecen escuchar cuando se les habla directamente.
De manera frecuente no siguen instrucciones hasta el final y no finalizan las tareas
escolares, tareas, o deberes en el lugar de trabajo (que no es debido a conductas de
oposición o a falta de comprensión de las instrucciones).
13. ¿Qué es . . .
A menudo tienen dificultad para organizar
tareas y actividades.
De manera frecuente evitan, les disgusta o se
muestran reacios a hacer tareas que requieren un
esfuerzo mental sostenido (como tareas escolares
o para el hogar).
A menudo extravían cosas necesarias para las
tareas o actividades (por ej.: juguetes, tareas
escolares, lápices, libros o herramientas).
A menudo se distraen fácilmente con
estímulos externos.
A menudo se muestran olvidadizos para las
tareas diarias.
Debido a que los criterios de diagnóstico del DSM-IV fueron diseñados
originalmente para los niños, la Organización Mundial de la Salud ha
desarrollado las siguientes preguntas a partir de esos criterios con la finalidad
de preguntar a los adultos si sufren o no los síntomas de falta de atención del
TDA/H:
14. CUESTIONARIO DE SOPORTE
¿Comete a menudo errores por descuido cuando tiene que trabajar en un proyecto
aburrido o difícil?
¿Tiene con frecuencia dificultad para mantenerse atento cuando realiza un trabajo
repetitivo o aburrido?
¿Tiene a menudo dificultad para concentrarse en lo que otras personas le dicen,
incluso cuando le hablan directamente?.
¿Tiene a menudo dificultad para completar los detalles finales de un proyecto, una vez
que ha acabado las partes más desafiantes?
¿Tiene con frecuencia dificultad para hacer las cosas en cierto orden cuando tiene que
hacer una tarea que requiere organización?
Cuando tiene que hacer una tarea que requiere mucho razonamiento, ¿suele evitarla o
postergarla?
¿A menudo extravía o tiene dificultad para hallar cosas en su hogar o trabajo?
¿Se distrae frecuentemente con las actividades o ruidos que lo rodean?
¿Suele tener problemas para recordar compromisos u obligaciones?
15. CAUSAS DEL TDAH
El origen del TDAH con exactitud así como los factores específicos que contribuyen a
su aparición se desconocen a pesar de las múltiples investigaciones que se llevan a
cabo en este campo. Los estudios hasta la fecha sugieren que no existe una causa
única que provoque el TDAH y las características de su cuadro sintomático, sino que
éste se origina, más bien, en respuesta a la interacción de muchas factores durante
la etapa gestacionaria. En este sentido, podemos distinguir entre factores de
origen biológico y factores psicosociales-ambientales como posibles
desencadenantes, facilitadores y/o agravantes.
FACTORES GENÉTICOS
Se han demostrado que los factores de origen hereditario explican en un 80% de los
casos la aparición del trastorno, siendo la probabilidad de presentar el trastorno
mayor si algún progenitor está afectado, esto es, que el padre o la madre
tengan TDAH multiplica por 8,2 el riesgo de padecer el trastorno. Los estudios de
genética molecular han relacionado el trastorno fundamentalmente con varios
genes en diferentes cromosomas y sus variaciones en el número de copias. Se trata,
por tanto, de un trastorno de herencia poligénica, es decir, múltiples genes
contribuyen al fenotipo del TDAH.
16. CAUSAS DEL TDAH
FACTORES PSICOSOCIALES
Más allá de los agentes ambientales que no parecen implicados en el origen del
trastorno (aditivos, determinados alimentos) algunos estudios si relacionan algunos
agentes externos como precipitantes o contribuyentes a la aparición del TDAH
durante la etapa gestacional (factores Prenatales) o cerca del nacimiento
(perinatales) como: el tabaquismo, el estrés y la ansiedad maternas durante el
embarazo. Pero no existen evidencias científicas concluyentes acerca de que exista
una relación directa de causa efecto sobre estas variables.
A pesar de que el estilo de
crianza y la educación recibida no
es origen del trastorno, si
contribuye a agravar los síntomas
y la evolución del trastornos en
niños que ya presentan el
trastorno, por lo que la elección
de intervenciones psicológicas,
educativas y familiares
adecuadas contribuyen a una
mejoría de los síntomas y a un
mejor pronóstico.
17. QUÉ NO CAUSA TDAH
Existen muchos mitos con respecto a las causas y origen
del trastorno por déficit de atención e hiperactividad,
alimentados desde el desconocimiento del trastorno y
la falta de información veraz hacia la Sociedad, que
perpetúa las creencias irracionales acerca de posibles
relaciones causa-efecto. Este tipo de falacias, genera en
las familias y en los educadores sentimientos de culpa y
en los niños genera problemas de etiquetaje e
incomprensión. Por tanto, es importante aclarar que
variables NO son causa del TDAH:
Mala crianza y educación de los padres. Los padres
no son culpables de que su hijo/a tenga TDAH.
Alergias alimenticias o exposición a tóxicos
ambientales (plomo, cinc, etc.)
No se produce ni por desacuerdos entre los padres,
ni por separaciones o divorcios, ni por estar viudo o
soltero.
por estar viudo o soltero.
No se produce por el nacimiento de un hermano,
celos o por falta de apego paterno.
No se produce porque el padre o la madre se ponga
a trabajar, esté en el paro, o trabajen mucho fuera de
casa.
18. No se produce por cambiar de colegio, por
tener niñera o porque el cuidado y educación
recaiga en los abuelos.
Tampoco influye de forma tajante el nivel
socioeconómico, el cociente intelectual, la edad
de la madre o el vivir en una población grande
o pequeña.
No es debido a la falta de normas de los padres
o la ausencia de límites dentro y fuera de la
casa
Tampoco está relacionado con la ingesta de
dietas ricas en azucares, grasas, aditivos,
proteínas, colorantes o vitaminas.
El consumo en grandes cantidades
de televisión, videojuegos, y una alta exposición
a estímulos visuales luminosos tampoco
provocan la aparición de los síntomas.
QUÉ NO CAUSA TDAH
19. Modelos cognitivos explicativos para el TDAH
Los modelos basados en la hipótesis cognitiva plantean que las alteraciones
neuroanatómicas y neurofuncionales de los pacientes con déficit atencional se traducirían
en la alteración en la regulación del control cognitivo del comportamiento, mecanismo
que mediaría y explicaría por completo la sintomatología del TDAH.
En términos concretos, esta desregulación de los
procesos de control cognitivo se expresaría como
déficit en una o varias funciones ejecutivas
superiores. Dichas funciones engloban procesos
cognitivos de orden superior que permiten la
persistencia del comportamiento orientado a la
consecución de un objetivo, y la regulación de éste
frente a eventuales cambios del medio interno o
externo.
Sin embargo, no ha sido posible hasta el presente
alcanzar un consenso en este campo. Los modelos
cognitivos que se debaten actualmente oscilan
entre modelos de déficit único y modelos duales
o de déficit múltiple.
20. MODELOS COGNITIVOS DE DÉFICIT ÚNICO
Según los modelos cognitivos de déficit único, la baja eficiencia de un mecanismo cognitivo
básico permite explicar, por sí solo, todas las manifestaciones clínicas del trastorno, es decir, el
funcionamiento deficitario o disfuncional de un área cognitiva daría como resultado las
alteraciones conductuales y cognitivas del Trastorno. Dentro de estas teorías explicativas de
modelo único tenemos:
§ El Modelo Motivacional; Aversión a la Demora
Este modelo indica que los afectados por TDAH
tienen preferencia por una gratificación
inmediata, aunque sea pequeña, por encima de
una gratificación mayor pero demorada, dificultad
para trabajar adecuadamente durante períodos
prolongados de tiempo y para posponer
recompensas.
§ Modelo de Inhibición Conductual
La capacidad para regular la propia conducta está guiada las Funciones ejecutivas, es decir, el conjunto
de habilidades cognitivas necesarias capaces de orientar nuestra conducta hacia un objetivo (lenguaje
interno, la memoria de trabajo no verbal, el control de las emociones y la motivación y la capacidad de
reestructuración y organización.) Según este modelo una baja capacidad de inhibición, es decir, que un
déficit en la función que evita dar una respuesta inmediata ante un estímulo sin antes haber analizado
las consecuencias, las alternativas y los riesgos y beneficios, repercute negativamente en las funciones
ejecutivas a distintos niveles, lo que daría como resultado una mala respuesta adaptativa del sujeto con
TDAH.
21. § Modelo de Regulación del estado
Este modelo acepta la disfunción ejecutiva como aspecto nuclear pero sustituye la alteración en el
control inhibitorio, por un déficit en la capacidad de regulación del esfuerzo y la motivación. Es decir,
requiere de la activación (motivación) y movilización de "energía mental" (esfuerzo) con el fin de
adecuar las energías cognitivas a las demandas y los objetivos. En este caso las recompensas positivas y
negativas, modularían esos niveles de esfuerzo y motivación en los afectados de TDAH, incrementando
la motivación y el esfuerzo cuando se plantean gratificaciones y recompensas positivas y disminuyendo
las respuesta y comportamientos cuando se castigas con recompensan negativas.
MODELOS COGNITIVOS DUALES O DE DÉFICIT MÚLTIPLE
La presencia de déficit en el control ejecutivo objetivado en algunos casos de TDAH, pero
ausente en otros, ha conducido a algunos investigadores a proponer que el TDAH es un
trastorno psicopatológico basado en un déficit cognitivo heterogéneo, en lugar de un
trastorno con un déficit único. Esto representa un cambio radical en la interpretación del
TDAH, por ello, se han desarrollado distintos modelos de déficit múltiple. Estos modelos
describirían que las dificultades y las manifestaciones del TDAH implicarían la
interacción de varios aspectos cognitivos sin un origen único. Dentro de estas teorías
tenemos:
22. § Modelo Cognitivo- Energético
Este modelo explicativo indica que el
funcionamiento cognitivo en los TDAH viene
determinado por un fallo en los tres nieves:
1. Nivel computacional de los mecanismos
atencionales, el cual implica codificación,
búsqueda/decisión y organización motora;
2. Nivel del estado, el cual, comprende
mecanismos de energía agrupados en
nivel de alerta, esfuerzo y activación;
3. Nivel de alerta es el estado de
excitabilidad o pasividad para actuar y dar
respuesta, el cual, está influido por la
intensidad del estímulo y por el carácter
novedoso. El esfuerzo es la energía
necesaria para afrontar las demandas
derivadas de las tareas. La activación es la
disponibilidad para actuar; y por último, el
Nivel de gestión/funcionamiento
ejecutivo, es decir, la capacidad para
planificar, monitorizar, detectar errores y
corrección de los errores.
23. § Modelo Dual
Este modelo, amplia la idea del Modelo
explicativo de aversión a la demora y la
búsqueda de la gratificación inmediata,
lo que provocaría la respuesta impulsiva
búsqueda de la recompensa inmediata y
el mismo tiempo un fallo en el control
inhibitorio de los circuitos de la
autorregulación dando como resultado
la conducta impulsiva en función de la
satisfacción de la necesidad frente al
estímulo.
§ Modelo dual de comorbilidad con la dislexia
Los modelos de déficit múltiple, además de
aportar una comprensión a la estructura cognitiva
del TDAH, facilitan la comprensión de
algunas comorbilidades, como ocurre con la
dislexia. Existe un índice muy alto de similitud
entre TDAH y dislexia. En ambos se aprecian
dificultades y habilidades deficitarias en la
velocidad de procesamiento, la memoria de
trabajo verbal, y la flexibilidad cognitiva y
especialmente en la velocidad de denominación
automática rápida. La concordancia tan elevada en
este factor, muestra un funcionamiento cognitivo
compartido por ambos trastornos, lo que
evidencia una causalidad u origen similar.
24. § Modelo dual de comorbilidad con el autismo
Los déficits ejecutivos son muy evidentes en los autistas de alto nivel, o en los individuos con
trastorno de Asperger (rigidez cognitiva, dificultad en la elaboración de respuestas complejas,
dificultad de interacción y dar respuesta al medio, dificultad en la autorregulación emocional
y comportamental, etcétera) Algunos estudios y autores han encontrado déficit comunes en
ambos trastornos. Geurts (2004), encontró semejanzas especialmente en el funcionamiento
ejecutivo entre el TDAH y autismo de alto nivel, a pesar de que este último tenía menos
dificultades en el control inhibitorio.
Puesto que, por ahora, no existe un marcador
biológico o neuropsicológico y los manuales
diagnósticos (DSM-V y CIE-10) no han
alcanzado a ir más allá del intento de precisar
un patrón exacto de funcionamiento
conductual, este patrón viene determinado
por el funcionamiento cognitivo de cada
sujeto determinado por las alteraciones y los
déficit de las áreas distintas áreas y funciones
cerebrales. Los distintos modelos explicativos
de funcionamiento cognitivo en el TDAH
descritos no son en modo
alguno contradictorios o excluyentes.
25. DIAGNÓSTICO DEL TDAH
La edad para acudir al profesional dependerá
de las características de cada caso, aunque
cada se dan más sospechas de diagnóstico en
la etapa preescolar, a día de hoy, la mayoría
de los casos la edad de comienzo del
tratamiento es la etapa escolar (escuela
primaria) ya que nos encontramos con una
gran cambio cualitativo y cuantitativo las
exigencias del entorno del niño/a, aumentan la
demandas sociales y académicas y se requiere
de una mayor atención y control sobre sí
mismos, lo que produce mayores dificultades y
una sintomatología más clara.
No existe una prueba única que por sí sola permita hacer un diagnóstico exclusivo y
confiable. Para establecer el juicio diagnóstico final es necesario recabar información de
las diferentes fuentes que rodean e intervienen en el niño y realizar observaciones
sistemáticas de sus conductas y la valoración retrospectiva de su comportamiento desde
las edades más tempranas.
26. El diagnóstico de este trastorno ha de basarse en una valoración minuciosa para excluir otras
posibles causas de las dificultades del niño, lo que incluye información de su familia, de sus
profesores y una evaluación por parte de profesionales sanitarios de las diferentes áreas:
psiquiatras infantiles, psicólogos infantiles, pediatras, neuropsiquiatras, neuropsicólogos,
etc.
La evaluación de este complejo trastorno debe realizarse desde una perspectiva
multiprofesional que aborde tanto la evaluación psicológica, la educativa y médica.
La evaluación del TDAH debe incluir:
Un examen médico completo para evaluar la
salud general del niño y descartas problemas
de tipo visual, auditivo, anemias o la falta de
componentes vitales para su salud.
Una evaluación psicológica profesional para
tener una idea clara de la condición emocional
del niño, incluyendo pruebas de capacidad
intelectual y de desarrollo cognitivo.
Una evaluación familiar para la cual se
utilizan las escalas de comportamiento.
Una evaluación escolar que incluya la
historia académica y de comportamiento del
niño en el aula.
27. CRITERIOS DIAGNÓSTICOS para el Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad:
A-1) Presenta seis o más de los siguientes síntomas de falta de atención durante al menos
6 meses con una intensidad superior a la que normalmente manifiestan las personas de su
misma edad:
Desatención
• No suele prestar atención a los detalles. Comete errores frecuentemente en el colegio, el
trabajo u otras actividades.
• Le cuesta mantener la atención en tareas o actividades de tipo lúdico.
• Parece que no escucha cuando se le habla.
•- No suele finalizar las tareas o encargos que empieza y sigue las instrucciones que se le
mandan, sin ser por un comportamiento negativista o por una incapacidad para comprender
las instrucciones.
• Le resulta complicado organizar tareas y actividades.
• Intenta evitar realizar tareas que le suponen un esfuerzo mental sostenido.
• Pierde objetos frecuentemente.
• Se distrae con cualquier estímulo irrelevante.
• Es descuidado en las actividades de la vida diaria.
28. A-2) Presenta seis o más de los siguientes
síntomas de hiperactividad-impulsividad
durante un período mínimo de 6 meses con
una intensidad superior a la que normalmente
manifiestan las personas de esa edad:
Hiperactividad
• Suele mover en exceso las manos y los pies o
no se está quieto en el asiento.
• No suele permanecer sentado en las
situaciones en las que se espera que lo esté.
• Suele correr o saltar en exceso en situaciones
en las que no es apropiado hacerlo.
• Tiene dificultades para realizar actividades o
juegos tranquilos.
• Suele estar en movimiento y actuar como si
tuviese un motor en marcha continuamente.
• Suele hablar en exceso.
29. A-2) Presenta seis o más de los siguientes síntomas de hiperactividad-impulsividad
durante un período mínimo de 6 meses con una intensidad superior a la que normalmente
manifiestan las personas de esa edad:
Impulsividad
• Suele dar respuestas precipitadas antes de que se hayan terminado de formular las
preguntas.
• Le cuesta esperar su turno y respetar las colas.
• Suele correr o saltar en exceso en situaciones en las que no es apropiado hacerlo.
• Suele interrumpir a los demás y entrometerse en las actividades de otros.
B) Algunos de estos síntomas que causaban alteraciones estaban presentes antes de los 7
años
C) Algunas alteraciones provocadas por los síntomas se presentan en dos o más ambientes
(escuela, casa, trabajo, etcétera)
D) Deben existir pruebas de que hay un problema clínicamente significativo del
funcionamiento social y académico o laboral.
E) Los síntomas no están presentes exclusivamente en el transcurso de un trastorno
generalizado del desarrollo, esquizofrenia o cualquier otro trastorno psicótico, y no se
explican mejor por otro trastorno.
30. TRATAMIENTO del TDAH
Debe plantearse desde un enfoque multidisciplinar y multimodal. Debido al impacto que
tiene el trastorno sobre las diferentes áreas de la vida del afectado, es necesario atender e
intervenir sobre los aspectos cognitivos, conductuales, educativos, afectivos, familiares y
sociales con el objetivo de mejorar los síntomas nucleares del trastorno (hiperactividad,
impulsividad y déficit de atención),reducir la aparición de problemas asociados al TDAH,
reducir el impacto del trastorno en el entorno del afectado (familia, escuela, entorno
social, plano personal) y adquirir las competencias básicas para un funcionamiento global
óptimo, mejorando la calidad de vida de la persona con TDAH y su familia.
Dentro del ámbito educativo, los niños con
TDAH no están abocados necesariamente al
fracaso escolar, aunque lo cierto es que a
medida que se acercan a la Educación
Secundaria aumenta el riesgo de que muestren
un rendimiento insatisfactorio (que consigan
aprobar, pero con un rendimiento por debajo de
lo esperado para su capacidad intelectual o para
las horas de dedicación y esfuerzo) o un
rendimiento insuficiente (que provoque incluso
que suspendan asignaturas).
31. El bajo rendimiento académico
que presentan los niños con
TDAH es debido, en parte, a las
propias dificultades
organizativas, de planificación,
priorización, atención y
precipitación de la respuesta
que obedecen a las alteraciones
de las funciones ejecutivas,
aunque también pueden influir
otros aspectos conductuales,
afectivos, familiares y sociales.
La adaptación de estos niños al entorno depende de la estimulación y la educación
que cada individuo recibe. En este sentido, la familia y la escuela son responsables de
que los niños tengan estrategias cada vez más reflexivas para afrontar y resolver
problemas cognitivos, académicos pero también sociales, y que aprendan a inhibir sus
impulsos en situaciones de conflicto, así como a demorar las gratificaciones y a tolerar
frustraciones.
Los niños con TDAH requieren una formación más sistemática e intensiva en estos
aspectos que sus compañeros y su evolución estará en función de la exigencia del
entorno, la estimulación recibida y la educación.
32. Dentro de este enfoque multimodal, la intervención psicopedagógica tiene como
objetivo favorecer la adaptación académica y comportamental del afectado de TDAH a
través de un programa individual diseñado por un especialista o grupo de especialistas
en función de las características sintomatológicas y las circunstancias que rodeen al
caso.
El programa deberá de implicar, además de a la familia, a la mayor parte del cuadro
docente (en especial al profesorado que están en contacto con el alumno) para facilitar
su eficacia. Así mismo, es recomendable que los docentes reciban formación que les
capacite para la detección de señales de alerta del TDAH, y para el manejo del TDAH en
niños y adolescentes en la escuela. La formación del profesorado permite que éstos
reciban psicoeducación sobre el trastorno, modifiquen pensamientos y opiniones en
cuanto al alumnado con TDAH, se entrenen en pautas de conducta y se capaciten para la
detección de señales de alerta del TDAH, favoreciendo así la detección precoz. Una
buena intervención psicopedagógica por parte del centro escolar y las familias permitirá
llevar a cabo cambios positivos en los siguientes ámbitos:
Mejora de síntomas nucleares de TDAH
Aspectos Conductuales
Aspectos Educativos
Aspectos afectivos
Aspectos familiares
Aspectos sociales
33. Dentro del enfoque multimodal, la INTERVENCION PSICOPEDAGOGICA tiene como objetivo
favorecer la adaptación académica y comportamental del afectado de TDAH a través de un
programa individual diseñado por un especialista o grupo de especialistas en función de las
características sintomatológicas y las circunstancias que rodeen al caso. El desarrollo de una
formación eficaz y una intervención temprana reducirán considerablemente el riesgo de
padecer algún otro trastorno comórbido que habitualmente acompaña al TDAH.
Una buena intervención psicopedagógica ya sea por parte de un equipo de especialistas o
del equipo del centro escolar permitirá llevar a cabo cambios positivos en las siguientes
áreas:
34. Mejora de síntomas nucleares de TDAH: Mejora y control de los síntomas asociados
al TDAH. Pautas y estrategias en el aula en función de los síntomas.
Atención y concentración.
Impulsividad.
Hiperactividad.
Capacidad Cognitiva: Entrenamiento y uso de técnicas que
favorezcan el desarrollo de diferentes áreas cognitivas.
Pensamiento.
Atención.
Lenguaje.
Memoria.
Percepción.
Flexibilidad cognitiva.
Razonamiento.
Aspectos Conductuales: Conocimiento y uso de
técnicas que favorezcan la adaptación conductual del
alumnado.
Técnicas de modificación de conducta en el aula.
Técnicas cognitivo-conductuales.
Manejo del Autocontrol.
Uso de Autointrucciones.
35. Aspectos Educativos: Mejora de las competencias
y aptitudes académicas.
Pautas y estrategias en el aula.
Medidas a nivel de centro y adaptaciones
curriculares
Dificultades de aprendizaje: lectura, comprensión
oral y escrita, escritura y cálculo.
Formación y entrenamiento docente.
Técnicas de estudio.
Orientación escolar y expectativas educativas.
Aspectos afectivos: Seguimiento y cuidado
de aspectos emocionales del alumno.
Autoestima.
Motivación.
Clima educativo.
Expresión emocional
Gestión emocional de los conflictos
Manejo de la frustración
36. Aspectos familiares: Establecimiento y
seguimiento de las relaciones familia-centro
El papel coterapeuta de las familias.
Intervención familiar.
Comunicación familia-centro.
Modificación de pautas en la dinámica familiar.
Pisocoeducación a las familias.
Aspectos sociales: La adquisición y
mantenimiento de las habilidades sociales como
factor de adaptación social y escolar.
Socialización y competencia social.
Inclusión social.
Habilidades sociales básicas e
instrumentales.
Resolución de conflictos.
Asertividad.
Cognición Social y Teoría de la Mente.
37. Para evidenciar un posible caso de los síntomas deben presentarse en dos o más
ambientes en los que se desenvuelve el niño, por ejemplo en casa y en el colegio. Además,
deben interferir en el funcionamiento normal del niño al menos durante seis meses y
deben presentarse con una intensidad mayor que lo que lo hacen en niños de su grupo de
referencia y siempre antes de los 7 años. Podemos encontrar tres tipos diferenciados de
posibles casos de TDAH en el aula, dependiendo de las características que presenten:
Por un lado encontramos los alumnos que
manifiestan una conducta predominantemente
inatenta, que es cuando nos referimos al
trastorno con predominio de INATENCIÓN. Serán
síntomas de estos niños:
• Haber mostrado déficit de atención pero nunca
han mostrado hiperactividad ni impulsividad.
• Se caracterizan por su lentitud e hipoactividad.
• Muestran déficit de atención significativo y
también rasgos de hiperactividad e impulsividad
leves, bien porque no hayamos observado estos
síntomas de forma acusada o porque esta
sintomatología ha disminuido con la maduración,
como suele ocurrir con muchos adolescentes.
38. Por otro lado encontramos a los alumnos que presentan
una conducta predominantemente HIPERACTIVA e
IMPULSIVA
• Niños que nunca han mostrado déficit de atención.
• Niños que pudiendo tener déficit de atención, pasan
desapercibidos porque compensan las dificultades que esto
podría acarrearles con su capacidad intelectual.
• Niños que se encuentran en los primeros cursos de la
escolarización y su déficit de atención no acusa dificultades
debido al bajo nivel de exigencia académica.
• Niños que realizan un gran esfuerzo para adaptarse al
entorno ya que temen al fracaso y luchan para no
defraudar a los que le rodean.
Por último, podemos encontrar niños que
presentan los dos grupos de síntomas, lo
que llamamos SUBTIPO COMBINADO.
Una de las mayores dificultades del TDAH
es que en una proporción muy elevada,
este trastorno presenta comorbilidad con
otros trastornos, por lo que además de los
síntomas anteriormente explicados, pueden
aparecer también:
39. Comorbilidad con TOD (trastorno negativista desafiante)
Comorbilidad con conductas agresivas, ya sean proactivas (planificadas, deliberadas y
dirigidas a obtener un beneficio) o reactivas ( son conductas agresivas defensivas, de
carácter más impulsivo que se producen en respuesta, casi siempre desmedida, a lo que el
niño ha interpretado como una provocación o ataque hacia él)
Comorbilidad con trastornos del estado de ánimo, como depresión o ansiedad.
Comorbilidad con trastornos del aprendizaje (cálculo, escritura y lectura).
¿Qué errores nos pueden hacer sospechar? Además de encontrarnos con una producción
verbal espontánea excesiva, alta producción y ejecución de tareas que requieran de
organización y planificación, dificultad para cambiar de tema y problemas de expresión
verbal y escrita, podemos observar determinados errores bien diferenciados por áreas,
como veremos a continuación.
1. Errores en lectura.
2. Omisiones.
3. Adiciones.
4. Sustituciones.
5. Dificultades ante grupos consonánticos.
6. Comprensión lectora deficiente.
7. Desmotivación y rechazo a la lectura.
8. Errores en escritura.
9. Uniones de letras.
10. Fragmentaciones.
40. 11. Adición de letras, sílabas y palabras.
12. Omisión de letras, sílabas y palabras.
13. Sustitución de letras, sílabas y palabras.
14. Caligrafía pobre y desorganizada.
15. Mayor presencia de faltas de ortografía.
16. Letra bastante irregular.
17. No guardan orden al escribir como falta de
márgenes.
18. Los renglones suben o bajan, no son rectos.
19. Errores de cálculo. Pobre o nula comprensión de los enunciados.
20. Errores en las operaciones debido, principalmente, a la impulsividad.
21. En la suma no automatizan el proceso, no suman mentalmente,
colocan mal las cantidades, no terminar de comprender el concepto
de llevar y en ocasiones ponen en cada columna el resultado
completo.
22. En la resta tiene dificultad para el posicionamiento de las cifras
(mayor arriba), suelen empezar con la izquierda y problemas con las
llevadas por no saber donde hay que colocarlas.
23. En la multiplicación presentan dificultad para memorizar las tablas y
para el cálculo mental y en la división los mayores problemas son con
la disposición espacial y los conceptos claves de esta operación.
41.
42. Al comienzo del curso anual, es
fundamental poner un acento en todos
aquellos profesionales de la educación
que en este momento van a encontrarse
con algún alumno con TDAH en sus
aulas.
Evidentemente, hay aspectos que son
recomendables que el profesor conozca
respecto a los alumnos con TDAH, para
que la respuesta educativa que les
brinden sea la más ajustada a las
necesidades que presentan y, en la
medida de lo posible, la que menos se
aleje del currículum ordinario.
El TDAH o Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad es un trastorno
neurobiológico de carácter crónico, sintomáticamente evolutivo y de probable
transmisión genética que afecta entre un 5 y un 10% de la población infantil, llegando
incluso a la edad adulta en el 60% de los casos. Está caracterizado por una dificultad de
mantener la atención voluntaria frente a actividades, tanto académicas como cotidianas
y unido a la falta de control de impulsos.
43. Un niño con TDAH puede presentar errores en las tareas escolares debido a su impulsividad,
aunque su capacidad intelectual sea adecuada. Esto es debido, en cierta medida, a la
inmadurez que presentan, ya que les afecta en la intensidad y duración de su concentración
y en la habilidad para mantener la atención en la tarea que esté realizando.
Con frecuencia estos niños y de manera
generalizada, tienden a concentrar su
atención en una porción de la tarea a
realizar, por lo que no prestan la misma
atención al conjunto de toda la tarea
dejando partes de esta obviadas.
Las áreas principales en las que
pueden encontrar dificultades
los alumnos con TDAH son:
44. Comprensión y fluidez lectora.
Comprensión lectora deficiente,
dificultades en la comprensión de textos
largos. Por la impulsividad y los
problemas atencionales suelen omitir
palabras o letras, interpretando mal el
contenido de lo que han leído.
Cálculo y matemáticas.
La mayor dificultad radica en el paso del
pensamiento concreto al abstracto, ya
que son capaces de realizar cálculos
mentales básicos pero, cuando estos se
basan en la memoria o en la
automatización de los conceptos,
cometen fallos debido a la falta de
atención y concentración. Presentan
mayor facilidad cuando se les enseña a
representar gráficamente, ya que con ello
mejoran la comprensión y se reduce el
nivel de abstracción.
45. Escritura.
Por la falta de atención en la
regulación de sus movimientos,
los alumnos con TDAH suelen
presentar dificultades en la
psicomotricidad fina y cuya
consecuencia puede ser que su
letra sea desorganizada,
demasiado grande o pequeña,
que no puedan “mantener” el
renglón, etcétera.
Para dar una respuesta educativa lo mas adaptada a sus necesidades debemos
tener claros cuales son los principios de intervención en los que debemos
basarnos:
• Darles las instrucciones de forma clara, breve y concisa.
• División de tareas en pequeños pasos.
• Proporcionar, inmediatamente después del comportamiento, tanto las
consecuencias negativas como positivas, para que el alumno relacione el
comportamiento que ha tenido con la consecuencia que ha recibido por él.
46. • Evitar que los refuerzos negativos sean
encadenados, de forma que una mala
conducta se produzca durante un castigo.
• Diseñar los refuerzos lo más adaptado
posible a los gustos del niño, e intentar
modificarlos con frecuencia para mantener
el interés.
• Intentar, en la medida de lo posible,
anticiparnos a los comportamientos de los
niños, intentando recordar
periódicamente las normas, sobre todo
ante situaciones en las que sepamos que
al niño le va a costar llevar a cabo la
norma establecida.
Estrategias de intervención
Todo comportamiento que presente el alumno con TDAH, ya sea positivo o
negativo, debe tener una consecuencia inmediata, consistente, breve y frecuente.
Es indispensable que la consecuencia sea administrada justo después del
comportamiento, para que el niño relacione la acción que ha llevado a cabo con la
consecuencia.
47. Los PREMIOS serán las consecuencias positivas, y estos dependen en gran medida del
niño, de sus motivaciones, sus gustos, etcétera. Podremos otorgar juegos, comentarios de
ánimo, recompensas tangibles, reconocimiento explícito ante los compañeros, etcétera.
Por su parte, los CASTIGOS serán las consecuencias negativas e implican quitar al niño
algo que le agrade o forzarle a hacer algo que no le guste.
Está demostrado que los castigos prolongados en el tiempo pierden su eficacia, por ello se
deben emplear temporalmente. Si el comportamiento que se desea eliminar perdura en el
tiempo, debemos saber que el mejor remedio y consecuencia negativa es el
desconocerlos sistemáticamente. Si por ejemplo el alumno comete comportamientos
disruptivos en el aula como medio para llamar la atención del profesor o de los
compañeros y estos comportamientos no se ven correspondidos, poco a poco irán
desapareciendo puesto que no obtiene ningún reforzador, ni positivo ni negativo de ellos.
48. El costo de respuesta, que también es una
consecuencia negativa, suele emplearse en los
programas de economía de fichas y supone la
retirada de algún privilegio en el niño.
Sacar al niño de la situación en la que está
llevando a cabo el comportamiento
disruptivo. Pero en este caso es necesario
conocer muy bien previamente al niño,
puesto que es posible que lo que pretenda
con dicho comportamiento sea salir del aula
para evitar una situación determinada
(como la realización de una tarea) y si lo
sacamos, lo que estaremos haciendo es
reforzarle puesto que ha conseguido lo que
pretendía.
49. Como forma para recompensar positiva
y negativamente al niño. Consiste en
estar pendiente de él, en prestarle
atención cuando lleve a cabo
comportamientos que deben ser
valorados y que irán acompañados de
refuerzos verbales, palabras de ánimo,
etc. Por su parte, cuando los
comportamientos no sean los
esperados, se debe producir una
retirada total de atención, y centrarla en
alumnos que estén realizando bien la
tarea o que tengan el comportamiento
que queremos potenciar en el alumno
con TDAH.
50. Cuando se trata de niños un poco mayores, 10 o más
años, hay otro tipo de estrategias que podemos
emplear, como el Contrato de Contingencias. Consiste
en realizar un contrato escrito en el que el niño se
compromete a realizar determinadas cosas, a evitar
ciertos comportamientos, etc. Para su elaboración ha
debido existir una comunicación y un diálogo entre el
adulto y el niño, por lo que él está implicado
activamente en el proceso de controlar su conducta.
51. Por último, no debemos olvidar el papel
fundamental que desempeñan los compañeros
muchas veces en la modificación conductual
dentro del aula. En ocasiones los compañeros
pueden ser muy útiles para administrar las
recompensas positivas. Un sistema que se ha
comprobado que obtiene muy buenos resultados
el la figura del `compañero-tutor`. En él, un
alumno ejerce el papel de tutor de otro
compañero que presenta más dificultades
académicas.
Evidentemente, el tutor debe poseer ciertas
características que le hagan posible desempeñar
este papel. El hecho de que un igual sea el que
corrige, explica y rectifica los errores, pone al
alumno con dificultades en una posición de
empatía mayor y por lo tanto, de mejores
resultados.
52. Y para terminar se debe
recordar . . .
Haciendo la consideración que en el paso del Jardín a Transición habría que
implementar el DERECHO a una valoración profesional que determine las
Competencias de cada niño para los aprendizajes formales e institucionales