TRIPTICO QUE TRATA SOBRE LA OCASIÓN CUANDO APARECE EN ESCENA EL CENTURION ROMANO CORNELIO Y SU ENCUENTRO CON PEDRO. SE ENCUENTRA EN LOS HECHOS DE LOS APÓSTOLES 10:1-27. ADEMAS HAY UN CRUCIGRAMA BÍBLICO, UNA ILUSTRACION CRISTIANA, ALGUNOS PENSAMIENTOS SABIOS Y UN VERSÍCULO POR MEMORIZAR
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ESCRITO ESTA EN ACCIÓN. LA VIDA DE CORNELIO Y PEDRO. HECHOS 10:1-27. (HCH. No. 10A).
1. Escrito
Está En
Acción
Para la Gloria de Dios y el bien
del ser humano
Editorial Cristiana “El Maestro Silencioso” Coordinador:
Dr. Luis A. Silva Cisneros. Tel. 0241 8233566.
Email: luissilvamd@hotmail.com Dominio en Internet:
www.elmensajerosilencioso.blogspot.com
AÑO IV. NUMERO HCH. 10A
HECHOS DE LOS APOSTOLES
Contenido
1. Crucigrama (Hch. No. 10A).
2. Lectura en Hechos 10:1-27.
Pedro y Cornelio
3. El Elefante.
4. Citas y Pensamientos sabios.
5. Versículos para Memorizar.
Lectura en Hechos 10:1-27.
Pedro y Cornelio
1 Había en Cesarea un hombre llamado Cornelio,
centurión de la compañía llamada la Italiana,
2 piadoso y temeroso de Dios con toda su casa, y que
hacía muchas limosnas al pueblo, y oraba a Dios
siempre.
3 Este vio claramente en una visión, como a la hora
novena del día, que un ángel de Dios entraba donde él
estaba, y le decía: Cornelio.
4 El, mirándole fijamente, y atemorizado, dijo: ¿Qué
23 Entonces, haciéndoles entrar, los hospedó. Y al día
siguiente, levantándose, se fue con ellos; y le acompaña-
ron algunos de los hermanos de Jope.
24 Al otro día entraron en Cesarea. Y Cornelio los esta-
ba esperando, habiendo convocado a sus parientes y
amigos más íntimos.
25 Cuando Pedro entró, salió Cornelio a recibirle, y pos-
trándose a sus pies, adoró.
26 Mas Pedro le levantó, diciendo: Levántate, pues yo
mismo también soy hombre.
27 Y hablando con él, entró, y halló a muchos que se
habían reunido.
El Elefante
Cuando yo era chico, me encantaban los circos, y lo que
mas me gustaba de los circos eran los animales. Tam-
bién a mí como a otros, después me enteré, me llamaba
la atención el elefante. Durante la función, la enorme
bestia hacía despliegue de peso, tamaño y fuerza desco-
munal, pero después de su actuación y hasta un rato an-
tes de volver al escenario, el elefante quedaba sujeto
solamente por una cadena que aprisionaba una de sus
patas a una pequeña estaca clavada en el suelo. Sin em-
bargo, la estaca era sólo un minúsculo pedazo de madera
apenas enterrado unos centímetros en la tierra. Y aunque
la cadena era gruesa y poderosa me parecía obvio que
este animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su
propia fuerza, podría con facilidad, arrancar la estaca y
huir.
El misterio es evidente: Qué lo mantiene entonces? Por
qué no huye? Cuando tenía cinco o seis años, yo todavía
confiaba en la sabiduría de los grandes. Pregunté enton-
ces a algún maestro, a algún padre o a algún tío por el
misterio del elefante. Alguno de ellos me explicó que el
elefante no se escapaba
porque estaba amaestra-
do. Hice entonces la pre-
gunta obvia: Si está
amaestrado… Por que lo
encadenan? No recuerdo
haber recibido ninguna
respuesta coherente. Con
el tiempo me olvidé del
misterio del elefante y la
estaca … y sólo lo recor-
daba cuando me encon-
traba con otros que tam-
bién se habían hecho la
misma pregunta.
Hace algunos años descubrí que por suerte para mí alguien
había sido lo bastante sabio como para encontrar la respuesta:
“El elefante del circo no escapa porque ha estado atado a una
estaca parecida desde que era muy pequeño”. Cerré los ojos y
me imaginé al pequeño recién nacido sujeto a la estaca. Estoy
seguro de que aquel momento el elefante empujó, tiró y sudó
tratando de soltarse, y a pesar de todo su esfuerzo no pudo.
La estaca era ciertamente muy fuerte para él. Juraría que se
durmió agotado y que el día siguiente volvió a probar, y tam-
bién al otro día y el que siguió.
Hasta que un día, un terrible día para su historia, el animal
aceptó su impotencia y se resignó a su destino. Este elefante
enorme y poderoso no escapa porque CREE QUE NO PUE-
DE. El tiene registro y recuerdo de su impotencia, de aquella
impotencia que se siente poco después de nacer. Y lo peor es
que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese registro.
Jamás, jamás… intentó poner a prueba su fuerza otra vez.
Cada uno de nosotros somos un poco como ese elefante: va-
mos por el mundo atados a cientos de estacas que nos restan
libertad. Vivimos creyendo que un montón de cosas “no po-
demos” simplemente porque alguna vez probamos y no pudi-
mos. Grabamos en nuestro recuerdo: No puedo … y nunca
podré. Crecimos portando ese mensaje que nos impusimos a
nosotros mismos y nunca más lo volvimos a intentar.
Aprende a ser libre, vive sin ataduras… No te rindas…!!
Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Filipenses 4:13
Citas y Pensamientos Sabios
Todo lo que Dios hace, lo hace bien,
aunque al momento no lo entendamos.
(LASC-REMS)
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Los cristianos sin luz, son como los pozos sin agua y las
nubes sin lluvia
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Ante la tristeza personal y el enojo contra Dios: Ora.
(Jonás 4:1-2)
Favor Memorizar: Jesús dijo:
Venid a mí todos los que estáis trabajados y
cargados, y yo os haré descansar. (Mateo 11:28).
2. es, Señor? Y le dijo: Tus oraciones y tus limosnas han
subido para memoria delante de Dios.
5 Envía, pues, ahora hombres a Jope, y haz venir a Si-
món, el que tiene por sobrenombre Pedro.
6 Este posa en casa de cierto Simón curtidor, que tiene
su casa junto al mar; él te dirá lo que es necesario que
hagas.
7 Ido el ángel que hablaba con Cornelio, éste llamó a
dos de sus criados, y a un devoto soldado de los que le
asistían;
8 a los cuales envió a Jope, después de haberles contado
todo.
9 Al día siguiente, mientras ellos iban por el camino y se
acercaban a la ciudad, Pedro subió a la azotea para orar,
cerca de la hora sexta.
10 Y tuvo gran hambre, y quiso comer; pero mientras le
preparaban algo, le sobrevino un éxtasis
11 y vio el cielo abierto, y que descendía algo semejante
a un gran lienzo, que atado de las cuatro puntas era baja-
do a la tierra;
12 en el cual había de todos los cuadrúpedos terrestres y
reptiles y aves del cielo.
13 Y le vino una voz: Levántate, Pedro, mata y come.
14 Entonces Pedro dijo: Señor, no; porque ninguna cosa
común o inmunda he comido jamás.
15 Volvió la voz a él la segunda vez: Lo que Dios lim-
pió, no lo llames tú común.
16 Esto se hizo tres veces; y aquel lienzo volvió a ser
recogido en el cielo.
17 Y mientras Pedro estaba perplejo dentro de sí sobre
lo que significaría la visión que había visto, he aquí los
hombres que habían sido enviados por Cornelio, los
cuales, preguntando por la casa de Simón, llegaron a la
puerta.
18 Y llamando, preguntaron si moraba allí un Simón
que tenía por sobrenombre Pedro.
19 Y mientras Pedro pensaba en la visión, le dijo el Es-
píritu: He aquí, tres hombres te buscan.
20 Levántate, pues, y desciende y no dudes de ir con
ellos, porque yo los he enviado.
21 Entonces Pedro, descendiendo a donde estaban los
hombres que fueron enviados por Cornelio, les dijo: He
aquí, yo soy el que buscáis; ¿cuál es la causa por la que
habéis venido?
22 Ellos dijeron: Cornelio el centurión, varón justo y
temeroso de Dios, y que tiene buen testimonio en toda la
nación de los judíos, ha recibido instrucciones de un
santo ángel, de hacerte venir a su casa para oír tus pala-
bras
VERTICALES. 1. ¿Cómo se llamaba el centurión?
2. ¿A dónde tenía que enviar Cornelio a buscar a
Pedro? 3. ¿Qué vio Cornelio claramente como a la
hora novena del día? 5. ¿Cuál era una cualidad de
Cornelio? 6. ¿Qué le vino del cielo a Pedro que lo
animaba a comer lo que había en el lienzo?
8. ¿Quiénes fueron invitados por Cornelio a oír la
palabra de Dios dada por Pedro? 10. ¿Quiénes
acompañaron a Pedro de Jope a predicar el evange-
lio en la casa de Cornelio? 13. ¿Qué cosa Pedro no
había comido nunca? 15. ¿Qué le vino a Pedro
mientras ayunaba y oraba? 16. ¿Cómo estaba Pedro
cuando oraba en la azotea como a la hora sexta?
Colocar las dos primeras letras. 18. ¿A quién oraban
Cornelio y Pedro? 19. ¿Cuál era una cualidad de
uno de los soldados que asistían a Cornelio?
22. Dos vocales del abecedario.
HORIZONTALES. 4. ¿Qué hizo Pedro con las pala-
bras dadas por el Espíritu de Dios? 7. ¿Qué hacía Pedro
con la visión que había recibido? 9. ¿A dónde subió
Pedro para orar? 11. ¿Qué vio Pedro descendiendo del
cielo cuando oraba y tuvo el éxtasis? 12. ¿Quién le
señaló a Pedro “tres hombres te buscan y no dudes de ir
con ellos” 14. ¿Cuál era una cualidad de Cornelio,
relacionada con Dios? 17. ¿Cuál era otra cualidad de
Cornelio? 20. ¿Qué cosas importantes de Cornelio
fueron tomadas en cuenta delante de Dios? 21. ¿Cuál
fue una de las cosas que hizo Cornelio al encontrarse
con Pedro y que va en contra de la palabra de Dios?
22. ¿Cuál es el presente de era? 23. ¿Cuál era otra
cualidad de Cornelio manifestada con el pueblo?
24. ¿De quiénes Cornelio tenía buen testimonio?
CRUCIGRAMA (HCH. No. 10A). (HECHOS 10:1-27).
PEDRO Y CORNELIO.