Desafíos para la práctica de la normatividad del trabajo en alturas
Panel prioridades de la investigación en salud y seguridad en el trabajo visión desde la académia
1. Facultad de Enfermería
Maestría de Salud y Seguridad en el Trabajo
I Seminario Internacional en Salud y Seguridad en el Trabajo
PRIORIDADES DE INVESTIGACIÓN EN SALUD Y SEGURIDAD EN EL
TRABAJO
María Amparo Lozada M. (*)
El propósito del evento que nos convoca y el de este panel es hacer un análisis
acerca de las prioridades de investigación en la salud y seguridad en el trabajo.
Sin embargo es prioritario reflexionar antes sobre la necesidad inaplazable de
trascender los abordajes epistémicos y metodológicos sobre los cuales se ha
venido desarrollando en el país no solo la formación y la investigación sino la
formulación de políticas y planes en el campo de la salud en el trabajo y sobre los
cuales conviene emprender un análisis crítico y constructivo por parte de los
agentes comprometidos con la salud, el bienestar y la calidad de vida en el
trabajo.
Todos los que estamos aquí compartimos que el trabajo representa una dimensión
fundamental de la vida y por ello atraviesa toda la problemática de la salud. Pero
cuál es la concepción de trabajo que subyace en las formulaciones de todo
orden?. En este sentido se debe citar a Dejours(2001) quien manifiesta: “el trabajo
es un determinante de la salud en cuanto exige la utilización del cuerpo, la
movilización de la inteligencia, la capacidad de enfrentar, interpretar y reaccionar
ante diferentes situaciones. Implica sentir, pensar e inventar”. El trabajo significa el
involucramiento total de la personalidad para responder a una tarea delimitada por
exigencias de orden material y social y nunca es neutro en relación con la salud
actuando o como factor de promoción de la misma o como factor de daño.
(*) Enf. MsSc, Salud Ocupacional. Esp. Salud Ocupacional. Profesora Asociada. Universidad
Nacional de Colombia
2. El trabajo es entonces un espacio de la vida determinante en la construcción y
deconstrucción de la salud.
A partir de estas premisas es necesario crear o apropiar nuevos abordajes que
abran el camino a formulaciones más complejas que trasciendan una formación y
una investigación centrada en la descomposición del trabajo en fases, estudiando
los peligros y los riesgos de cada una de ellas e integrando en cada fase las
medidas de prevención y control adecuadas. En este sentido, Rodríguez, CA,
(2007) señala que es “la mejor expresión del criterio taylorista de la parcelación de
las tareas”.
Además de las limitaciones derivadas del anterior abordaje, los cambios que han
traído consigo la información, la comunicación, la flexibilización y la polivalencia
asociados todos a la transformación del trabajo exigen una aproximación diferente
al esquema tradicional lo cual no significa desechar algunos aspectos
metodológicos de los abordajes tradicionales pero que no son suficientes para dar
cuenta de las nuevas formas de organización del trabajo y de la flexibilidad de los
trabajadores.
Es también procedente repensar y modificar la formulación de políticas y
estrategias centradas en la promoción del autocuidado. El autocuidado es un
aspecto que debe ser incorporado en la formación básica de todos los ciudadanos
en cuanto comprende aspectos como la solidaridad, la adquisición de hábitos de
vida saludables, la preservación del ambiente, los comportamientos seguros y el
respeto por sí mismo y por los demás. Se podría asumir que el énfasis en el
autocuidado como estrategia prioritaria en el campo de la salud en el trabajo
expresa más bien una postura ideológica en relación con la causalidad de los
riesgos profesionales en la cual la carga de la prevención se traslada a los
trabajadores. Si bien es importante incorporar la promoción de los valores del
autocuidado no es menos importante desarrollar en los trabajadores la capacidad
de colaborar en la transformación positiva de su mundo laboral desde la premisa
que el trabajo sirve a la salud y que esta es la mayor y más significativa reserva de
los trabajadores en la relación salud-trabajo.
3. Una nueva perspectiva para la investigación
A nivel global, de América Latina y de Colombia en particular la realidad actual del
mundo del trabajo exige a los investigadores mayores esfuerzos para comprender
los cambios, pues el modo como los trabajadores están utilizando sus
capacidades físicas, cognitivas y afectivas se está transformando profundamente.
Los ya conocidos cambios en la organización del trabajo modifican la forma de
enfrentar las nuevas exigencias, los riesgos y la instauración de efectos en la
salud aun no bien conocidos ni dimensionados. Es de todos conocido en nuestro
medio la creciente precarización del trabajo que conlleva cambios en las
relaciones de trabajo, en las condiciones de realización y en las condiciones de
empleo determinando una mayor inestabilidad e inseguridad para los trabajadores.
Es tan evidente este fenómeno que una mirada desprevenida a las cifras de
crecimiento económico muestran que este aumenta en mayor o menor medida sin
que se acompañe de la generación de empleo.
La precarización se acompaña de la fragmentación de la oferta de empleo y de los
escenarios de trabajo donde se aprecian lugares de trabajo con estructuras de alta
tecnología y otros donde las situaciones de trabajo revisten características
rudimentarias.
Este panorama radicalmente diferente a las condiciones en las cuales se
desarrollaron disciplinas como la medicina del trabajo y luego la salud ocupacional
pone en evidencia las limitaciones de las prácticas y modelos teóricos de las
disciplinas tradicionales para entender la relación trabajador-peligro y entenderla a
la luz de las técnicas de análisis que se han utilizado.
Situaciones que afectan a los trabajadores como el disconfort en el puesto de
trabajo, la sensación de agotamiento o las alteraciones en la vida familiar
presentan en muchas ocasiones a los profesionales del campo escollos para su
comprensión e intervención en la medida en que al igual que en otros problemas
de salud relacionados con el trabajo no hay especificidad ni asociación clara a los
4. peligros en el caso de quejas provenientes de utilización excesiva de las
capacidades de trabajo.
La investigación debe estudiar las situaciones desde un nuevo ángulo si se
considera que en una situación de trabajo, la peligrosidad aumenta cuando la
organización del mismo disminuye las posibilidades del trabajador de evitar la
exposición a peligros, por ejemplo, en la realidad actual donde la extensión del
tiempo de trabajo o esquemas rígidos de organización temporal imponen la
realización de tareas en horas irregulares o impidiendo los espacios de tiempo
libre necesarios para la recuperación de la capacidad laboral.
Los investigadores deben reconocer que las categorías salud y trabajo son
fenómenos de naturaleza dinámica y por lo tanto cambiante. La utilización del
cuerpo en el trabajo se asocia a fenómenos de salud para los cuales existe aun
poca evidencia y obviamente mecanismos para su transformación.
Los estudios de salud-trabajo no pueden seguir basados exclusivamente en
registros médicos o en perfiles de morbilidad o tasas de ausentismo los que si bien
proporcionan alguna luz sobre la situación del problema dejan de lado el
planteamiento de Dejours (1994) de que “no siempre las situaciones de salud de
los trabajadores son visibles u objetivas. El efecto del trabajo sobre la salud es
muchas veces silencioso y no es entendido desde el saber estrictamente médico”.
Las condiciones de trabajo deben ser entendidas como las circunstancias en las
cuales el trabajador moviliza sus capacidades para obtener unos resultados
deseados. Se requiere analizar la evolución del sistema productivo y con él las
condiciones de trabajo y la lógica que ha introducido la precarización del trabajo y
sus implicaciones.
En la investigación debe siempre tenerse en cuenta la variabilidad de la exposición
y la diferencia entre el trabajo real y el prescrito que se refiere a una actividad
laboral que se realiza siempre en contextos específicos. Aun cuando los
parámetros de la producción no cambien es indiscutible que el trabajador cambia,
5. por lo tanto, entender el trabajo humano exige observar y analizar el desarrollo de
la actividad laboral en situaciones reales, en su contexto.
Las condiciones de trabajo constituyen una unidad de análisis y ellas son el
producto de la sociedad de la cual hacen parte o sea son la expresión de una
sociedad determinada, por lo tanto, la manera como se organiza el trabajo es un
factor socialmente determinado y expresan la relación de fuerzas y de valores de
la sociedad en que se generan.
Un aspecto final y no menos importante es la superación del aislacionismo de las
disciplinas. La comprensión de fenómenos complejos requiere de abordajes
construidos a la luz de la intersección teórica entre las áreas del conocimiento que
se relacionan con la salud y la seguridad en el trabajo para responder de manera
apropiada a las exigencias de la nueva realidad. La respuesta es entonces el
trabajo interdisciplinario siempre presente en la tradición de la ciencia occidental
que permite entender fenómenos complejos como la relación salud-trabajo. La
confluencia de las diferentes disciplinas es clave y vital para el mejoramiento de
las condiciones de trabajo y de la calidad de vida.
El rápido desarrollo del conocimiento, las transformaciones en el mundo del
trabajo exigirán la formulación de un saber y una estrategia colectiva que posibilite
transformar la percepción de los riesgos y las acciones preventivas en las que es
indispensable la participación activa y real de los trabajadores.
Toda la investigación futura debe darse desde abordajes interdisciplinares y
quizás transdisciplinarios. Mientras se construye el terreno común de conceptos
fundamentales compartidos entre las disciplinas les invito a que tengamos la
perspectiva de salir de los abordajes tradicionales e incursionar en nuevos marcos
epistémicos que den cuenta con mayor certeza de la realidad del mundo del
trabajo como condición fundamental para la construcción de adecuadas
condiciones de trabajo que contribuyan a hacer realidad el trabajo decente del cual
la salud y la seguridad son sus principales componentes.
6. BIBLIOGRAFÍA
Assuncao, Ada Avila. 2003. Una contribución al debate sobre la relación entre
trabajo y salud. Rio de Janeiro.Ciencia&Saude Colectiva, 8(4):1005-1018.
Déjours,C. 1994. Paris. Pour comprende la résistance au changement. Documents de
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Rodriguez, CA. 2008. Salud y Seguridad en el Trabajo: desafíos para la formación
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Van der Kerckhove,J. Towards a New Philosophy in the Prevention Strategy on Health
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