El hombre le dice al crucificado que lo desclavará de la cruz, pero este le responde que permanecerá ahí hasta que todos los hombres, mujeres y niños se unan y lo desclaven juntos. Cuando le pregunta cómo soportará sus lamentos, el crucificado le pide que vaya por el mundo y les diga a todos que hay un hombre clavado en una cruz y que no tengan miedo.