Las palabras tienen poder y pueden herir o lastimar, especialmente si son dichas repetidamente por padres o profesores. El maltrato verbal por parte de adultos puede causar daños profundos a la autoestima de los niños. Aunque los gritos y explosiones pueden lograr disciplina, también pueden causar heridas internas.
2. Hay palabras que
hieren, que
lastiman, especialmente si
son dichas muchas veces
por los padres o profesores.
Los gritos y las explosiones
pueden conseguir
disciplina, pero también
pueden causar heridas
profundas en la autoestima
de los niños.
4. Estamos
acostumbrados a pensar que
violencia es algo que se refiere
únicamente a los golpes, a las agresiones
físicas. Sin embargo, dejamos de lado
una forma mucho más directa y
cotidiana que tiene que ver con nuestra
manera de hablar.