Los servicios web permiten la interoperabilidad entre aplicaciones a través de Internet mediante el uso de estándares como XML, SOAP, UDDI y WSDL. XML define los datos, SOAP define el protocolo de comunicación, UDDI permite localizar servicios web y WSDL describe cómo acceder a ellos. Juntos, estos protocolos permiten a las aplicaciones y sistemas compartir funcionalidad independientemente de su plataforma tecnológica subyacente.