La Princesa Listilla no quería casarse pero su madre, la Reina, insistía. Retó a varios príncipes a cumplir una serie de tareas imposibles para probarlos. Ninguno lo logró hasta que apareció el Príncipe Fanfarroni, quien completó todas las pruebas. Sin embargo, la Princesa Listilla lo transformó en un sapo gigante con verrugas como castigo. Desde entonces, ningún príncipe quiso casarse con ella y vivió feliz para siempre soltera.
14. Ordenó al Príncipe Canijo que acompañara a su madre la Reina, de compras
15. Pidió al Príncipe Flotapoco que recuperara el anillo mágico al estanque de los pececillos de colores.
16. Ningún príncipe pudo satisfacer los deseos de la princesa y todos se fueron muy tristes. ¡Se acabó!- dijo la Princesa Listilla más contenta que unas pascuas
30. Cuando los demás príncipes supieron lo que le había sucedió al Príncipe Fanfarroni, ninguno quiso casarse con la Princesa Listilla…. … . Que vivió feliz por siempre jamás.