2. Previo a la escritura: seguir estos pasos que servirán para organizar y desarrollar de mejor manera el texto posterior. Elegir un tema y luego determinar la postura que se va tomar con respecto al tema. Elaborar una tesis que representa de forma precisa la postura tomada. Es importante hacer un punteo con las ideas generales que se quieren desarrollar. Entre estas ideas, escoger 2 argumentos que defiendan nuestra postura y un contraargumento que habrá que refutar.
3. Estructura del texto El texto debe contener cinco párrafos que contengan: 1. Introducción: Presentación y contextualización del tema que se va a presentar. Idealmente, elaborar la tesis. Esta tiene que ser clara y subrayable. 2. Argumentos: Exponer de forma clara las ideas que defiendan la tesis. No más de una idea por párrafo pues sino se hace confusa la lectura. Mejor una idea bien desarrollada, que muchas por desarrollar. 3. Contraargumento + refutación: Mencionar un posible argumento que pueda contradecir la tesis elegida. Luego refutarlo, pero sin caer en ataques. 4. Conclusión: Cerrar el tema propuesto. Proponer posibles soluciones. La tesis también puede ir acá, pero los argumentos tienen que ser lo suficientemente claros para saber de antemano la postura tomada.
4. Finalmente: Al concluir la escritura hay que releer el texto como si uno fuera lector y poner especial atención en: Puntuación. Ortografía. No repetir de forma constante palabras en un mismo párrafo. Utilizar sinónimos como posible solución. Usar conectores para darle continuidad a las ideas. No elaborar oraciones muy extendidas.