la revelacion de jesucristo, estudio del libro Apocalipsis
CONFESION_Y_BENDICION
1. CONFESION Y BENDICION.
Resumen Lección de Escuela Sabática
para el Sábado 29 de Agosto de 2009.
Por: Jose Magdiel Guerra
Sociedad Misionera Internacional
Iglesia Adventista del Séptimo Día, Movimiento de Reforma
CONCEPTOS
Analizando estos dos conceptos, podemos llegar a la siguiente conclusión, para que exista este
resultado de bendiciones sobre nosotros, debe existir una sincera declaración, esta declaración deberá ir
acompañada de un verdadero arrepentimiento por el acto cometido. Honestidad que será declara ante
un juez. en este caso Dios.
Quien demanda nuestra honestidad en los pecados cometidos y él derramara sobre su pueblo un manojo
de bendiciones.
Cabe anotar que las bendiciones es toda esa misericordia que Dios tiene para con su pueblo y es llevada
desde la parte espiritual, hasta la parte material; colocándonos como cabeza y no como cola.
CONFESION:
2. Declaración personal del litigante o del reo ante el juez en el juicio.
BENDICION:
Es la expresión de un deseo benigno dirigido hacia una persona o grupo de ellas, O EL RESULTADO
de una solicitud.
“Mi pecado te declare, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis
transgresiones a Jehová; y tú perdonaste la maldad de mi pecado”
(Salmo 32:5)
LA VOLUNTAD DE DIOS
LA CONFESION, es el deseo de cada persona de sincerarse ante Dios por sus delitos cometidos. El
arrepentimiento es el deseo de apartarse del mal y no volver a cometer el delito. Es decir, el pecador se
siente culpable por sus errores, desea cambiar su vida; Eso es arrepentirse. Entonces acude a Dios en
confesión, acto que se realiza por medio de la oración y utilizando la fe.
Ahora bien se tiene que pagar por el pecado para la realización de la expiación de nuestros pecados, en
la antigüedad se utilizaba un cordero hembra o cabra, pero en este caso el delito es pagado por la sangre
de Cristo, la cual es expuesta ante el padre como símbolo del arrepentimiento del reo. En ese momento
se manifiesta por parte del acusado y ante el universo que la gloria eterna pertenece solo a Dios.
3. Pues este realiza toda la labor por el perdón del pecador, ahora el pecador en declaración de su
arrepentimiento vive en obediencia y bajo la voluntad del cielo, ya que en el hombre no existe sino
pecados y multiplicación de los mismos por si solo, y la justicia del hombre sin Dios es testificación de
sus maldad.
Los ojos de Dios vigilan atentamente al hombre; su movimiento, su pensamiento, y sus maldades están
delante de él, el seol y el ángel de la muerte, recordándonos que este ha de ser juzgado,
CONFESION A DIOS Y A LOS HOMBRES.
El pecado es la trasgresión de la ley, ¿ cuál ley?.. la de Dios, por lo tanto se debe confesar y
arrepentirse de este acto ante Dios, debemos sentir vergüenza por el delito cometido, el hombre
arrepentido realmente inclina su rostro ante la luz del cielo mostrando respeto la gloria la honra ante el
dador de la vida, su perturbado ser lo lleva a mostrar su verdadero carácter ante el cielo para despojar
ese orgullo y rendirse a los pies de Cristo.
La ley de Dios manifestada en nosotros para vivirla y obedecerla nos muestra nuestras falencias, por lo
tanto sabemos que ofendemos a nuestro prójimo, por ende debemos confesar y solicitar el favor a
nuestro prójimo, si es privado en privado y si ha sido en público que sea de esta misma manera.
Aclaremos que si hemos ofendido a nuestro prójimo en pensamiento puede ser una confesión directa
con el cielo sin necesidad de ir a él, puesto que no le hemos ofendido directamente o le hemos ofendido
públicamente para manchar su buen nombre.
La confesión del pecado debe ser concreta, hablarle a Dios en que fallamos, donde nos falto fuerza,
donde nos dejamos guiar por el espíritu de Satanás y no por el Espíritu Santo, esta confesión debe ser
voluntaria y no impuesta, la confesión que es impuesta es pecado ante los ojos de Dios porque criticaría
a la actuación del acusado sin antes haberlo llevado a Cristo, después de que el penitente conoce a
Cristo debe solicitar la enmienda de este acto de una manera humilde y abnegada.
LO ANTES POSIBLE
La confesión mostrada en este capitulo, hace referencia a la ofensa trasmitida hacia el prójimo, es de
gran importancia mostrar al ofendido arrepentimiento sincero por nuestros actos, ya hayan sido mal
intencionados o no, a veces por nuestro comportamiento entregamos a nuestros hermanos a un
pensamiento inequívoco de la situación, cada vez que hacemos esto sin importarnos lo mal que él esté.
con la simple expresión ¡ de malas ¡ realizamos una labor que el mismo cielo se encargara de juzgar
4. bajo las mismas condiciones, de nada servirá ir a nuestro prójimo a confesar nuestro actos si no son de
corazón puro, el llenar un requisito no es muestra de arrepentimiento, y el enemigo cobrara su deuda.
Debemos confesar nuestros pecados inmediatamente, no despreciando las bendiciones brindadas por
Dios a quien se acoge inmediatamente a ellas, es lógico de humanos que una reacción ante una
confesión podrá ser muchas veces mal humorada, pero no hay que dejar este enojo se pose sobre
nuestro ojo, así como debemos realizar una confesión ante el prójimo, debemos aceptarla para vivir en
paz, cada acto de perdonar o recibir perdón debemos aceptarla en el nombre de Cristo, quien ha sido el
que ha pagado nuestros pecados y perdonado.
SER HUMILDES
Debemos despojarnos del yo, cada ser humano que no se ha convertido le pide a Dios el perdón de sus
pecados. Pero lo hace mas por conocimiento que por vergüenza al pecado, esto quiere decir que lo hace
mas por que sabe que Dios sabe que cometió el pecado, pero sin sentir un verdadero arrepentimiento, y
dice en su corazón, ¡ Dios no me escucha y tanto que le he pedido ¡, pero la verdad es que Dios sabe
que su oración es tan abominable como sus actos.