Este documento discute el uso de animales en experimentación, incluyendo una breve historia, los puntos a favor y en contra, y las normas que rigen la práctica. Explica que aunque la experimentación animal ha contribuido a muchos avances médicos, también causa sufrimiento a los animales y algunos argumentan que existen métodos alternativos. Las normas intentan minimizar el dolor de los animales y asegurar que los experimentos sean necesarios y conduzcan a resultados claros.

1. BENEMÉRITA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE PUEBLA
FACULTAD DE CIENCAS QUÍMICAS
QÚÍMICO FARMACOBIÓLOGO.
DHTIC
Profesora: Rosa Elena Arroyo Carmona
Patricia Lizette Fuentes González
Correo: kisarablue_18@hotmail.com
Matrícula: 2011-133-03
Taller 5 – Actividad 1:
Do not let them die.
“Normas y uso controlado de animales
De laboratorio.”

2. INTRODUCCIÓN:
El uso de animales para la experimentación ha estado presente en la
comunidad científica durante mucho tiempo. En nuestra sociedad actual
algunas personas consideran innecesaria esta práctica, debido a la vasta
información que hemos recopilado a lo largo de los siglos gracias a estos
experimentos.
Actualmente el uso de animales de laboratorio se encuentra controlado.
Hay varias normas a nivel nacional, continental e institucional que deben
seguirse fielmente para poder realizar estas prácticas las cuales en las
instituciones educativas SI son necesarias para poder enseñar y formar
adecuadamente a los estudiantes sobre temas diversos. Las normas y
reglas que se deben seguir al realizar diferentes actividades con los
animales son variadas e insorpresivamente no exactas en el mundo. Las
organizaciones que las regulas exponen sus puntos de vista, pero debido
a la diversidad y principalmente a la necesidad que hay actualmente de
realizar estudios con estos animales no se lleva a cabo el mismo registro
ni el mismo trato hacia las criaturas, dependiendo del país y de la
institución que realiza los experimentos.
Con todo lo anterior dicho, espero poder informar al lector sobre este
tema y que usted pueda crear su propia opinión al finalizar la lectura
después de haber leído sobre los diferentes aspectos de este dilema.

3. Un poco de historia; Aristóteles mataba cerditos:
La experimentación animal no es nueva y los problemas han existido desde
hace muchos años. Ya en la antigüedad los conocimientos se basaban en
buena parte en la observación y la disección anatómica. En el Corpus
Hipocrático (en el 350 a.C. escrito por Aristóteles) aparecen experimentos
con cerdos y en el siglo VI se habla de inmunoprofilaxis en China. También
es conocido como Anaxágoras, Aristóteles, Hipócrates, Galeno y muchos
otros disecaron animales para conocer su cuerpo.
Sin embargo, la "vivisección" es relativamente
poco practicada en Occidente hasta el
Renacimiento; a partir de entonces se aplica de
manera esporádica tanto en el animal como en el
hombre, y se desarrolla, sobre todo, en el siglo
XVII, principalmente, con W. Harvey (1578-1657),
quien puso de manifiesto la circulación de la
sangre en 1628. Así, Descartes comparaba a los
animales con autómatas incapaces de pensamiento
y de conciencia, carentes de alma y, por tanto, sin
sensibilidad posible al dolor.

4. Aportaciones modernas:
Desde el siglo pasado los experimentos con animales han desempeñado un
papel crucial en el desarrollo de la medicina moderna, más aún, no se
conoce ninguna área de la medicina que no deba muchos de sus principales
avances a la experimentación animal. Pasteur investigó las enfermedades
infecciosas en animales domésticos y descubrió también que la
inmunización podía proteger contra esas patologías. Lister declaró ante la
Comisión Real en 1875 que los experimentos con animales habían sido
fundamentales en sus propios trabajos sobre la asepsia.
En este siglo son también numerosos los
avances científicos que han dependido de una
previa experimentación con animales, como
ocurrió con las sulfamidas que disminuyeron
notablemente las cifras de sepsis puerperal,
neumonía lobular e infecciones en heridas
superficiales.

5. Puntos a Favor:
Como ya se ha mencionado anteriormente la experimentación animal a
contribuido con la mayoría de los avances científicos y médicos que han
mejorado la calidad de vida humana.
Además de pruebas de seguridad (llevadas a cabo para saber los riesgos
de un nuevo producto al ser lanzado al mercado) también se realizan para
la educación y adiestramiento de futuros médicos, veterinarios, científicos,
etc. En las instituciones educativas estas pruebas son indispensables
para el correcto conocimiento de los sistemas y órganos del cuerpo.

6. Puntos en contra de la experimentación animal.
Las críticas a la experimentación animal son abundantes. Así se critica,
sin justificación, que los animales utilizados sirvan de modelos de
enfermedades, porque no reflejarían con exactitud las condiciones
humanas, olvidando que lo que estos modelos proporcionan es la
forma de estudiar un procedimiento concreto que luego se aplicará a
humanos. Se aduce también, que si estas prácticas hubiesen sido
ilegales, los investigadores habrían desarrollado su imaginación y
habrían inventado las técnicas adecuadas para sustituir a los animales.
Esto último puede ser utópico. El uso de animales no siempre es lo
más fácil, pero a veces es imprescindible. En la actualidad todavía es
necesario su uso para resolver algunos de los problemas médicos
existentes, por ejemplo: el estudio de las funciones de las proteínas o
la puesta en marcha de tratamientos para lesiones traumáticas, etc.
Un animal de laboratorio es un ser sano al que se le provoca
una enfermedad para ser posteriormente sometido a diversas y
muy diferentes pruebas para determinar en este los efectos
secundarios que nos podrán o podrían dañar o perjudicar.

7. Animales más comunes para la experimentación.
Los animales principalmente “material quirúrgico de laboratorio
utilizado experimentación” comúnmente son los que tienen sobre
población o son naturalmente un alimento para nosotros los humanos:
•Conejos
•Ratas
•Cerdos
•Bovinos
•Ovejas
•Aves
•Cobayas
•Hurones

8. Normas y reglas a seguir en los experimentos controlados.
Marshall Hall, en 1831, propuso 5 principios que debían gobernar la
experimentación animal:
1. La experimentación no debe realizarse si la observación puede
sustituirla.
2. Ningún experimento debe ser realizado sin un objetivo claro.
3. Los científicos deben estar bien informados acerca de los
experimentos de sus colegas, para evitar repeticiones innecesarias.
4. Los experimentos justificados deben llevarse a cabo con el menor
dolor posible.
5. Cada experimento debe realizarse bajo circunstancias que den lugar
a los resultados más claros y eviten la repetición de los mismos.

9. Conclusión:
Resumiendo todo lo dicho podemos afirmar que la justificación ética del uso de
animales de laboratorio estriba en el valor del objetivo principal del experimento y en
la probabilidad de que tal experimento contribuya al objetivo final. Este criterio esta
limitado por la disponibilidad de métodos alternativos que consigan el mismo objetivo
y por el dolor impuesto a los animales de estudio. Es decir, en términos éticos el fin
de la acción investigadora debe ser beneficioso para el hombre o los propios
animales y además la acción debe cumplir una serie de requisitos o circunstancias
que aseguren un racional uso de los animales y una adecuada metodología de trabajo
Los sentimientos y valores morales de cada individuo siempre estarán presentes en la
mesa de discusión de este caso, sin embargo, como miembros de la comunidad
científica es nuestro deber dar a conocer la escases de alternativas con las que
contamos y darle al público la mayor información posible sobre la razón por la que se
llevan a cabo dichos experimentos.
Las personas que están en contra de la experimentación con animales tienen que
entender que se lleva a cabo no por gusto o por diversión, sino por necesidad.
Actualmente muchas de las actividades realizadas con animales son irrealizables sin
los mismos presentes: Lo único que parece podemos ofrecer es que si en algún
momento encontramos un método diferente para hacer las investigaciones, los
aplicaremos de inmediato. Es sólo una pequeña garantía, pero al menos existe.

10. Referencias:
Contrepois, A. La experimentación animal. De la diferencia al derecho.
Mundo científico. 1998; (vol.13):pp. 1078-1086.
Sánchez González, M.A. Experimentación y derechos de los animales: su
historia y fundamentos éticos. Med Clin (Barc). 1990;(vol. 95): pp. 217-220.
Aranda García A., Pastor García L. M. Ética de la experimentación con
animales. (2009). (vol. 3 N 4).
De la Fuente, E., García L., Reyes O., Padrón R., Rivas G., Vargas G. (2010
enero). Manual Para El Manejo De Animales Con Fines De Experimentación Y
Enseñanza. UJAT.
Cereijido, M. El uso de animales en experimentación científica. Elementos.
2000; (vol. 6): pp. 5.