1. Año Mes Día
2012 06 Junio 07
JOSEFINA = BAJEZA; PEÑA = MEDIOCRIDAD; AMLO =
INCONGRUENCIA. TODOS=VERDADES A MEDIAS
Por Pedro Guadiana
Cuando Javier Sicilia dijo que votaría en blanco, evaluó así a los tres principales candidatos:
“Josefina, una buena mujer; Peña, el peor; AMLO, el menos malo”.
Pues bien, esta “buena mujer”, coordinadora de la campaña de Calderón en 2006, y Antonio Solá,
el español naturalizado mexicano por la vía fast track, autor de la campaña de odio “Andrés Manuel
López Obrador, un peligro para México”, han elaborado un spot que raya en vil bajeza, porque
edita groseramente un discurso de AMLO que niega la opción armada al exhibir sólo el fragmento
que dice “la vía armada, una posibilidad para lograr la transformación de los pueblos”, cuando en el
discurso original asegura que luchará por la vía pacífica para lograr su objetivo. Esto es una
infamia y una calumnia que derriba la autoridad moral de una “buena mujer” capaz de poner en
boca de su adversario palabras que no dijo, como recurso desesperado al verse superada por él.
Por su parte, Peña recula de sus dichos de inicio de campaña en el sentido de que sólo haría
propuestas, no caería en provocaciones y que no haría campañas negativas en contra de sus
adversarios, y también da luz verde a un spot donde vincula el Bejaranazo de triste memoria y el
pase de charola del cual AMLO no ha salido bien librado. Y todo como efecto de una caída
sostenida originada por su rampante ignorancia, su corrupción y su autoritarismo que tuvieron
como clímax ese viernes negro en la universidad Iberoamericana. Ha sido tan duro el golpe que ya
no asistirá a universidades, lo que demuestra su miedo, aversión y desprecio por la inteligencia. En
suma, un mediocre, el peor según Sicilia, el fallecido Carlos Fuentes y otros respetados
intelectuales, término que ha de causar terror en este perverso joven dinosaurio.
Ambos adversarios de AMLO se rodean de consultores especialistas en estrategia… y vaya que lo
son porque han evidenciado que saben reaccionar como ordenan los cánones de la estrategia,
aunque con ello evidencian también el crecimiento de AMLO, la sostenida caída de Peña y la
debacle de Josefina. Veamos por qué.
¿Qué dicen los cánones de la estrategia? Los paradigmas más conocidos hablan de estrategias de
defensa, ataque, guerrilla, flanqueo, por nombrar sólo cuatro. El consejo, en lo general, dice que el
líder debe aplicar la estrategia de defensa y el perdedor la de ataque.
Bien sabido es que AMLO es un mal alumno de los consultores (“La estrategia soy yo” tituló la
revista Proceso allá en 2006 a finales de la campaña presidencial) lo que le hizo (fraude aparte)
cometer en 2006 la pifia de atacar siendo el líder (“cállate chachalaca” y otras lindezas por el
estilo), pero sus adversarios de hoy, fieles al teleprompter y al consultor, sí se dejan guiar por los
gurús de la estrategia que los asesoran ¿Qué queremos decir con esto? Que, efectivamente,
AMLO ya los alcanzó o los rebasó según sus encuestas confidenciales (sabemos que unas son las
que se publican y otras son las que se analizan en los cuartos de guerra, war rooms, a la hora de
implantar una estrategia) ¿Por qué decimos esto?
Primero, porque al inicio de su campaña Josefina declaró que AMLO ni siquiera le preocupaba y
que la guerra era de dos: PRI y PAN.
Segundo, porque en el debate, la “buena mujer”, capaz de las peores bajezas, se lanzó contra
Peña e ignoró a AMLO y olvidó que no hay enemigo pequeño.
Tercero, porque Peña utilizó la estrategia de defensa porque llegó al debate como líder en las
encuestas, aunque muchas de sus acciones y sus resultados como gobernador y miembro del PRI
son de suyo indefendibles, como las estadísticas que de organismos no gubernamentales le
mencionó la buena mujer, y el golpe demoledor de AMLO: “mire lo que son las cosas: Ponce está
en la cárcel y usted está aquí de candidato”. Es decir, usó la estrategia correcta de defensa pero lo
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hizo ante lo indefendible, como lo es su trayectoria, su construcción mediática, su ignorancia, su
mediocridad.
Cuarto, porque después del debate Peña tuvo el viernes negro en la Ibero y su posición de líder
comenzó a tambalearse.
Quinto, porque Josefina ya había caído en un tobogán desde antes del debate con sus repentinos
4 puntos de distancia de Peña Nieto (repitiendo el súbito ascenso de Calderón en 2006, cuando el
Reforma de un día a otro lo empató con AMLO en más de 20 puntos, cuando un mes antes sólo
4% lo conocía) contrastados con un Estadio Azul vacío y las manifestaciones de su deteriorada
salud física (sus casi desmayos y sus incoherencias en la radio en el programa de Pablo Hiriart y
Ana Paula Ordorica, que le valieron injustas burlas en las redes sociales, donde muchos
aseveraron sin motivo que estaba ebria). Ella atribuyó estos hechos a lo extenuante de la gira y a
problemas de salud de familiares. El problema no es que no se pueda enfermar. La cuestión, de
acuerdo con el maestro Yuri Serbolov, radica en cuál sería su reacción ante una crisis de Estado,
donde la mayoría de los gobernantes no duermen, apenas comen ¿Podría atender una crisis
nacional con una salud precaria? ¿Se desmayaría con una mala noticia? Hay que estar en los
momentos importantes, tomando decisiones cruciales. Histórica es la fotografía del presidente de
Estados Unidos con su staff en los momentos en que Osama Bin Laden era atrapado y ajusticiado
o asesinado, violando el derecho internacional. Pero ese es otro punto. El hecho es que estaba
quien debía estar tomando decisiones críticas.
Sexto, porque Josefina, al hacer pequeño a su enemigo y atacar sólo al líder, le estaba haciendo el
trabajo sucio a AMLO, quien sólo veía cómo se hacían pedazos entre PRI y PAN, cómo
descendían en la preferencias y él sólo acumulaba ganancia.
Séptimo, porque Josefina siguió haciendo pequeño a AMLO y se lanzó contra Elba Esther, es
decir, contra su candidato Quadri. En otras palabras, se lanzó contra ¡el último lugar! Asegura,
como creemos es cierto, que Peña y Elba ya pactaron.
Octavo, porque las encuestas sí están manipuladas. Ninguna encuestadora ha desmentido la
declaración que en 2010 hizo María de las Heras, quien renunció a un acuerdo para mantener
arriba a Peña Nieto.
ENCUESTADORAS QUE HAN ACORDADO POSICIONAR A PEÑA NIETO POR
ENCIMA DEL 50% Extracto Contubernio 2010. Jenaro Villamil Proceso. 3Oct--2010
[...] GEA-ISA y el Grupo de Comunicación Estratégica (Liébano Sáenz) [...].
Reforma y Demotecnia, de María de las Heras, se salieron de ese “consenso”. [...]
(Ella) rompió [...] con Milenio diario, [...] le ordenaron compartir el espacio con la
encuestadora de Sáenz [...].
Ahora ¿Por qué confiar en María de las Heras? Porque ella, siendo esposa del priísta César
Augusto Santiago, pronosticó en 2006 que AMLO ganaría por 5 puntos, situación a la que, de
acuerdo con La Carpeta Púrpura del maestro Yuri Serbolov (el suscrito incluido), Los Pinos
respondieron con el fraude. También, esta encuestadora dijo a principios de Junio que AMLO está
a 8 puntos de Peña ¿No sería lógico que por estar casada con un distinguido priísta, quien tiene un
programa llamado “Hoja de Ruta” en TV Azteca, sesgara sus encuestas?
Noveno, porque el “puntero” ha cambiado su estrategia de defensa a ataque y, según los cánones
de la estrategia, se ataca cuando no se es ganador.
Décimo, porque Josefina ya enderezó sus baterías contra aquél al que hizo pequeño. Ahora dice
que la gente tiene que decidir entre lo peor del pasado (el PRI) y la confrontación (PRD).
Lo anterior fundamenta nuestra hipótesis de que AMLO está muy cerca, o empatado o empieza a
superar a Peña.
Pero, ojo, esto provocó una negativa reacción de AMLO quien, una vez más, demostró que el peor
enemigo de uno es uno mismo. Los ataques de sus adversarios han surtido los efectos deseados y
esperados por ellos. Es decir, AMLO les ha dado las armas que ellos esperaban ¿Cuáles?
- “Yo o el fraude”. Ya se montó en ese discurso otra vez, independientemente de si es o no
cierto. Ya dijo “como no les funcionarán los ataques, ya preparan el fraude”. Nuevamente
hará las delicias de los Ferriz de Con, Loret de Mola, Hirirat, Sánchez Susarrey,… etc.
Toda mercadotecnia, y más la política, es percepción y manipulación. Luego entonces, los
ciudadanos comprarán todo aquello que digan líderes de opinión que no son
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necesariamente los más respetables y confiables. Hay desde intelectuales orgánicos hasta
los Chapoy, los Bisogno, o la “nueva” mexicana (ignoramos si ya concluyó su trámite)
Laura Bozzo. Quizá lo del futuro fraude es cierto, pero que lo digan otros, que lo
monitoreen y lo comprueben los ciudadanos o los miembros del movimiento #yosoy132 y
#somosmasde131 quienes ya presentaron solicitud en el IFE para ser supervisores del
proceso electoral. Si en 2006 acusó de vendidos hasta a los suyos ¿Hará lo mismo con los
estudiantes a quienes hasta hoy sólo ha dispensado elogios? ¿Han notado que ahora no
ha hablado de los de la Ibero que también recibieron con gritos de “presidenta” a la “buena
mujer” (aunque también hubo abucheos)?
- Manipulación de estadísticas de forma grosera. Por ejemplo, en Tercer Grado le muestran
cifras duras de antes y después de su gestión como Jefe de Gobierno del DF y responde
haciendo comparativos entre el DF y el Estado de México que si bien son ciertos no
responden a la pregunta planteada sobre el resultado de su gestión. Dice que hay más de
un millón de mexiquenses en extrema pobreza y en el DF hay ciento ochenta mil. Pero la
pregunta giraba en torno a que al inicio de su gestión había menos de ciento ochenta mil.
- Dice que no es incongruente pero lo es. Aunque tenga años que no lo ve, es un hecho que
Bejarano y Padierna operan para él ¿No acaba de solazarse ella diciendo que ahora él es
el puntero? ¿Qué podemos decir de Bartlett o de Ana Guevara? En Tercer Grado
(programa que no es de nuestra devoción, pero que planteó algunas buenas preguntas)
esto fue parte de un diálogo entre sordos: “¿Qué tienes que decir acerca del pase de
charola de 6 millones de dólares?”, “Yo no mando pedir dinero”. “Si lo hicieron en tu
nombre, sin tu autorización ¿por qué no aplicas un correctivo? ¿Lo aplicaste? ¿Por qué no
entablas una demanda como Mancera dice que lo va a hacer?”, “Yo lucho por ideales, no
busco el poder”, bla, bla, bla. ¿Y la pregunta?... quedo sin respuesta ¿No es cierto que,
inclusive, la “buena mujer” dijo que pidió a Molinar Horcasitas, uno de los responsables de
la muerte de 49 niños de la guardería sonorense ABC, que no interviniera más en su
campaña? ¿No debería hacer él lo propio con el primo de Creel y con Mandoki para ser
congruente? Otro caso: “El ejemplo lo debe poner el de hasta arriba, yo lo voy a hacer”, “O
sea, crees que con el ejemplo tuyo basta”, “sí”. “Oye, pero si como Jefe de Gobierno del
DF no pudiste controlar a Bejarano y Ponce, donde tu ejemplo no bastó ¿Cómo le harás
como presidente? ¿Te das cuenta que el sólo ejemplo no basta?”. Respuesta: “yo lucho
por principios, yo no soy…”, bla, bla, bla. Otro más: “tu honestidad personal no la ponemos
en duda, pero ¿qué nos tienes que decir de quienes te rodean?” La respuesta fue el mismo
monólogo sobre las virtudes de sí mismo.
- Es soberbio y mesiánico aunque lo niegue. Es intolerante aunque no tolere que se lo digan
¿No le dijo a Sicilia que a él no lo meta en el mismo costal que a los otros? Mueve a la risa
el comentario que le hizo a Carmen Aristegui (“yo ya no me pertenezco”) en la entrevista
pos-encontronazo con Sicilia. Ella inclusive exclamó “¡Ah caray!”.
Él parece cooperar con sus adversarios en poner clavos en su ataúd electoral 2012. Así lo dicen
sus últimas expresiones: el fraude anticipado (cierto o no pero ya cantado), el pase de charola, la
pérdida de la compostura ante Sicilia, quien mencionó que AMLO no mostró la más mínima
compasión por las víctimas e inclusive emuló su despectivo lenguaje corporal… entre otras cosas.
En resumen, todos representan verdades a medias, mismas que serán evidentes una vez más en
el segundo debate, mismo que cada candidato y sus fans darán por ganado. Allá ellos, los
candidatos y sus partidarios. Faltarían el pos debate y nuevas manifestaciones de la “buena
mujer”, el “peor” y el “menos malo”. Peña puede perder. Por eso su cambio de estrategia.
Por cierto ¿Quién es Quadri? Mil disculpas por no ocuparnos de él en este artículo.
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