El relieve se ve influenciado por factores litológicos, climáticos, geológicos y antrópicos. Los factores litológicos dependen del tipo de roca y su resistencia a la erosión, afectando la morfología. Los factores climáticos determinan qué agentes de erosión son más importantes en cada zona, dando lugar a formas de relieve características. Los factores geológicos estructurales incluyen la disposición de los estratos y su inclinación, mientras que los dinámicos involucran procesos

1. Factores condicionantes del modelado del relieve
El paisaje es moldeado bajo la influencia de factores litológicos, climáticos,
geológicos y antrópicos.
Factores litológicos
Canchal
¿Qué es lo que determina que, en un determinado lugar, se forme un canchal y no en
una zona próxima, obviamente con el mismo clima? Se trata de los factores litológicos.
Los factores litológicos son los relacionados con el tipo de rocas de un lugar concreto y
que condicionan el modelado, ya que la resistencia que ofrecen a los agentes geológicos
las distintas rocas es diferente. De este modo, existen unas morfologías asociadas a
determinados materiales. Por ejemplo, la presencia de calizas o rocas evaporíticas será
una condición imprescindible para el modelado cárstico.
La resistencia de un material a la erosión depende, a su vez, de su cohesión,
permeabilidad y alterabilidad.
La cohesión es la resistencia a desmenuzarse en fragmentos.
La permeabilidad es la tolerancia al paso del agua a su través.
La alterabilidad es la sensibilidad a la meteorización química.
La combinación de estos tres aspectos puede dar origen a una gran variedad de
modelados.

2. Factores climáticos
Valle fluvial
Los factores climáticos son los relacionados con las características climáticas de cada
zona.
Según el tipo de clima, actúan con más intensidad unos agentes externos que otros.
Por ejemplo, el viento actúa con más intensidad en climas secos, mientras que la erosión
fluvial es insignificante, excepto durante los episodios de fuertes inundaciones.
En las zonas templadas y húmedas, en cambio, la erosión fluvial es decisiva.
Las diferencias climáticas hacen que cada zona tenga unas formas del relieve
características, las propias de los procesos externos dominantes.
En las zonas tropicales, por ejemplo, la abundancia de precipitaciones y la elevada
temperatura facilitan las reacciones de carstificación.

3. Factores geológicos: estructurales y dinámicos
Estratos verticales en la Peña Falcón, Monfragüe
(Cáceres).
Los factores estructurales dependen de la disposición, geometría y fragmentación que
presentan las rocas en la superficie terrestre. Así, los procesos internos determinaran los
contrastes de relieve, la existencia de cordilleras, depresiones o cuencas oceánicas. Así,
por ejemplo, uno de estos factores es la altura de la costa: en una costa alta se forman
acantilados; sin embargo, en una costa baja aparecen playas y barras de arena.
En cuanto a la disposición de los estratos, las laderas de las montañas se erosionan más
fácilmente si los estratos están inclinados en el mismo sentido de la pendiente que si lo
están en sentido contrario. También la sucesión de estratos influye en el relieve: la
alternancia de estratos horizontales duros y blandos, así como la inclinación que
presenten, condiciona el paisaje resultante por erosión diferencial. Sobresalen los
estratos formados por rocas más resistentes y se forman entrantes en los estratos con
rocas que son menos resistentes a la erosión.
También influirán en la efectividad de los procesos externos el cuarteamiento de los
conjuntos rocosos debido a la presencia de fallas o diaclasas, puesto que generan zonas
de debilidad en las rocas.
Los factores dinámicos resultan de la combinación de varios procesos externos (eólicos,
marinos, fluviotorrenciales) junto con otros debidos a la dinámica interna de la Tierra,
como terremotos y volcanes.

4. Factores antrópicos
Son los que provoca el ser humano y tienen consecuencias en la naturaleza. Es el factor
más deformador de la naturaleza, suelen ser negativos causando un gran impacto
ambiental. Algunos de ellos son los túneles, las carreteras, la construcción de obras
hidráulicas etc.